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El agreste valle

Aventura | 6. A la caza de la bestia

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04/04/2015, 20:08
Morgan, alias Shea

Cuando encontraron un buen sitio para pasar la noche la guerrera no perdió el tiempo, dejó sus pertenencias a un lado del petate extendido, se quitó la coraza dejándola al alcance de su mano y se sentó quitándose las botas. Mientras se llevaba a la boca lo que le quedaba de la ración para ese día, sus gruesos dedos acariciaron de forma distraida el símbolo que había grabado en el centro del pecho de la pieza de metal. Su mirada perdida en la oscuridad de la noche, aunque como para ella no era tal a lo mejor estaba viendo algo en la distancia o a lo mejor sus ojos estaban vueltos hacia algún recuerdo del pasado.

Al acabar dió las buenas noches a sus compañeros, que todavía estaban ultimando algunos detalles del plan, mientras los miraba y guardaba la información de dónde se había posicionado cada uno, era de vital importancia saberlo por si se tenían que levantar apresuradamente. A Morgan no le pareció que pasase mucho tiempo cuando una mano suave y pequeña en su hombro la despertó, la diestra de la mestiza se dirigió en un acto reflejo hacia su arma antes de recordar quién la despertaba. Después de darle las gracias al elfo se puso la armadura y distribuyó sus armas como le pareció mejor, no quería verse sorprendida y sin ninguna cerca, cuando hubo acabado se acercó a donde Lirian estaba y le hizo un gesto de saludo antes de dirigirse hacia el lugar que había seleccionado para hacer la guardia, un lugar desde donde ver el máximo de zona circundante posible.

Al cabo de muchos latidos durante los cuales su vista hacía el mismo recorrido una y otra vez, de cada uno de sus compañeros dormidos hasta el humano y luego un barrido general, Lirian se movió de donde estaba y avanzó despacio, cercionándose de cada paso antes de darlo, hasta donde dormía el enano para despertarlo. Dorn siguió su propio ritual y al cabo se acercó y le hizo una pregunta.

-En mi tierra había bastantes enanos, -se encogió de hombros casi imperceptiblemente -por mi 'trabajo' era mejor saber lo que decían los que me rodeaban.

No añadió nada mas ni dió mas información, el resto de la guardia pasó con relativa tranquilidad y al rato Morgan aprovechó que su ahora compañero también veía perfectamente en la oscuridad y alivió su vejiga detrás del árbol donde se apoyaba. Luego recogió sus armas poniéndolas en sus fundas y se acercó a Códice sacudiéndolo un poco para despertarlo y que hiciese su turno. Una vez se hubo asegurado que el clérigo comenzaba a vestirse ella se dirigió hacia su petate para hacer lo contrario, clavó la lanza en el suelo al lado de la cabecera y se sumió en el sueño, no podía permitirse el lujo de desperdiciar ni un momento de descanso.

Morgan despertó con los rayos de sol en su rostro, parecía que la noche había pasado sin problemas, y rápidamente se pertrechó con todo su equipo antes de comer algo.

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07/04/2015, 17:09
Lirian Ventormenta

Lirian siempre había preferido hacer las primeras guardias; cuando trabajó como guardián de caravanas siempre lo había hecho así más por su falta de visión en la oscuridad que por otra cosa, aunque al final las había acabado cogiendo el gusto. Podía dormir de un tirón hasta el día siguiente y aquello era algo que la cabeza del norteño agradecía sobremanera. El único inconveniente que tenía es que tenías que fiarte mucho de tus compañeros y más aún de sus facultades a la hora de poder detectar cualquier peligro pero, según su forma de pensar, uno podía morir incluso al caerse de una silla mientras comía. El primer turno pasó rápido, había luz aún y la zona en la que se había establecido el campamento no era difícilmente defendible por lo que aprovechó para asegurarse de que todas sus pertenencias estaban en orden y comer algo de sus raciones secas. Cuando la noche comenzó a caer  se vio obligado a echarse una manta sobre los hombros, a fin de combatir el frío de la montaña, y a darse alguna que otra bofetada para mantenerse despierto. Con gusto dio el relevo a Dorn y se acomodó en el hueco que había dejado el enano en la tienda. Gracias a ese calor residual, Lirian, no tardó en conciliar el sueño mientras le daba vueltas a la forma de aproximarse a aquella mina de la forma más segura posible.

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09/04/2015, 02:23
Vizko Kraum

El medioorco se sentía incómodo cuando hablaban de el puma, al principio a Rivoel le costó un poco que soltara la lengua, pero logró que soltara un poco la lengua.

Lo que decía Rivoel tenía sentido, sus ojos no ocultaron la duda que empezaba a florecer en Vizko, si el bardo cuidaba bien lo que decía, al final la chispa de la duda se convertiría en una gran llama de desconcierto. Plantear pensamientos en contra de su líder era la estrategia de Docanto, era una tarea que requería paciencia, pero menos arriesgada que proponerle algo directamente.

-Yo he sido enviado como castigo por un error mío -Dijo sin disimular que mentía, al menos en parte... Quizá haya sido verdad el castigo, pero eso no significaba que a Kraum le gustara, de hecho lo consideraba injusto después de haber servido bien durante los últimos años. Rivoel comprendió por donde meterse y seguir la charla.

Envenenarle la cabeza en contra de su líder era la forma de entrarle y así lo hizo durante el resto de guardia...

Notas de juego

Precisamente es lo que yo quería!! Aún no lo convences, pero vas por buen camino ;)

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09/04/2015, 02:59

La noche pasó con relativa calma, la fría brisa de montaña era mitigada por el calor expedido dentro de la tienda de campaña levantada. Hubiera hecho falta un fuego y un buen trozo de carne rostizada para coger fuerza para lo que estaba por venir, pero las raciones de viaje era lo único que podían comer sin llamar la atención de carroñeros o cosas peores.

A códice le llamó la atención unos susurros que venían desde lejos, aullidos en el idioma gutural de los orcos. El sacerdote no era reconocido por su valentía precisamente, pero en contra de todo pronostico se ajustó el cinturón y aunque le costó un poco levantarse de un solo movimiento, siguió el rastro de los inquietantes sonidos.

Avanzó con cautela, con demasiada cautela, sin arriesgar nada en absoluto hasta que su visión logró captar 4 cuerpos musculosos arrastrando un cadáver de algún animal que no reconoció, era una partida de caza que volvía a su cuartel con un buen botín. Aunque códice haya visto 4 cuerpos, era posible que hubieran más rondando en las cercanías.

Decidió no arriesgar más su presencia y volvió al campamento, la hazaña le había puesto el corazón a mil y sus sentidos se agudizaron durante el tiempo que duró el resto de su guardia.

El sol volvió a salir, ya habían acampado lo suficiente y era hora de actuar, se habían discutido algunas posibilidades e ideas, pero nada se concretó. Era hora de tomar decisiones!

Notas de juego

50 px a todos por postear

Próximo turno: Domingo.

Chic@s, el domingo posteo ya la acción de los orcos, no me quedó claro del todo como los atrerían y al fin que harían con las trampas que tampoco me han especificado mucho. Eso lo deberían dejar plasmado en un post y no solo como una discusión en el off.

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10/04/2015, 02:41
Códice [PNJ]

Kraum tuvo que esperar un rato a que Códice volviera de aquella improvisada “expedición” nocturna, pero como los lejanos sonidos de los orcos no variaron en absoluto, no vio motivos para preocuparse. Cuando Códice volvió, estaba muy alterado. Según explicó al alguacil de Qart cuando se calmó, y al bardo en el momento del relevo, había visto a cuatro robustos orcos arrastrando el cadáver de algún gran animal, probablemente hacia las minas. Por temor a acercarse demasiado, no había podido escuchar nada más que gritos aislados, risotadas, broncas y demás exabruptos propios de este tipo de individuos salvajes, y como no sabía si había otros por los alrededores, había permanecido en su escondite hasta estar seguro de estar solo. Sólo entonces había vuelto al campamento: de ahí la tardanza. Lamentablemente, eso significaba que no sabía hacia dónde habían ido. Informados Kraum y Rivoel, el chaunteano se acostó, dispuesto a dormir hasta el amanecer. Sus dos compañeros ya no iban a dormir más, así que podrían informar a los demás cuando despertaran.

A la mañana siguiente, Códice se despertó pronto y fue él mismo quien puso a Lirian, Morgan y Dorn al corriente de lo ocurrido. Mientras roía un trozo de queso curado, compartió algo que había pensado antes de quedarse dormido:

—Creo que podríamos investigar el rastro: un animal así no flota sobre el suelo y quizás lo hayan introducido en los túneles por alguna entrada secundaria que desconocemos...

Al margen de esa posibilidad, la noche anterior habían estado discutiendo acerca del día siguiente. Códice había propuesto repetir cierto plan que a él y a sus anteriores compañeros les había funcionado en las Colinas: uno de ellos haría salir de las minas a los pocos orcos que hubiera de guardia y, una vez fuera, los demás les emboscarían. Dorn había expresado sus objecciones y había sugerido atraer a los orcos con una fogata para hacerlos caer en ciertas trampas que sabía montar con lo que llevaban encima. Con las aportaciones de Morgan, Lirian y Rivoel (que sostenía que debían evitar las muertes para no cerrarse opciones), al final se había hablado de una opción mixta: atraer a orcos con una fogata, emboscarles y, si eran demasiados, usar las trampas. El objetivo final: capturar a un orco e interrogarle acerca de la fortaleza.

Mientras amanecía, Códice insistió en investigar el rastro, apoyó el plan mixto, opinó que debían empezar buscando el lugar para el “falso campamento” y se ofreció para ayudar a Dorn a preparar las trampas, si es que su gruesa naturaleza se lo permitía.

Notas de juego

1º párrafo: lo que pasó anoche. 2º y 3º párrafos: proponer lo del rastro. 4º párrafo: las opciones. 5º párrafo: mi opinión.

¡No problemo con lo de la rosa, Durgeoble! A mí me ha gustado que lo hayas hecho y Códice por supuesto te lo cuenta con todo lujo de detalles y con lágrimas en los ojos por el recuerdo de su pequeña amiga mediana.

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10/04/2015, 16:56
Lirian Ventormenta

Es..espero que hayan cenado bi...bien y les haya entra...entrado el ssssueño po...po..propio de después de la la cena... - Comentó cuando el sacerdote terminó de exponer sus descubrimientos. La verdad es que si los orcos no tenían nada que temer al ser prácticamente los señores de los alrededores tampoco deberían haber sido demasiado cuidadosos a la hora de esconder su rastro, no al menos hasta aproximarse a la entrada secreta si es que ésta existía, como bien barajaba Códice. 

Debe...debe estar fre...fresco el rastro aún. - Añadió Lirian incorporándose para sacudirse las migas de pan que habían caído sobre sus muslos al desayunar en cuclillas sobre un esbozo de la zona garabateado en el suelo. El norteño parecía dispuesto a acompañar a quien estuviese dispuesto a acercarse a la mina, no tenía miedo de los orcos a la luz del sol, siempre y cuando no fuesen superados por una cantidad de más de tres a uno. 

Va...vayan haciendo los prepa...preparativos pa...pa...para el recibimiento. Veamos si si si es po...posible el atraerrrlos y si si si no, volveremos a ver qué po...po...podemos hacer.  - Indicó a sus compañeros mientras abrochaba las correas de la armadura sin poder ocultar el temblor producto nerviosismo en sus manos. 

- Tiradas (2)

Notas de juego

Editado: dejo mis tiradas de percepción sigilo y voy 15' por detrás de Rivoel.

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10/04/2015, 19:32
Rivoel Docanto

La noche pasó y todos pensaron el lo que Códice había visto. Tenían que descubrir si las sospechas sobre una posible entrada oculta eran ciertas. Rivoel entendió que era el más indicado para ir a averiguarlo y empezó a prepararse. Cogió lo necesario y se dispuso para buscar el rastro. Lirian se ofreció a acompañarlo y el bardo asintió, pero le sugirió que permaneciera uno metros por detrás cuando se acercaran para que fuera más difícil ser descubiertos.

Los 2 humanos empezaron con la búsqueda del rastro, mientras el resto empezó a preparar el terreno para hacer una emboscada... 

- Tiradas (2)

Notas de juego

Dejo las raciones, la manta de invierno y 8 balas de honda por si son útiles para la trampa.

Dejo unas tiradas hechas para buscar el rastro y seguirlo, aunque lo que intento primero es hacerlo con un "sacar 10", que sumando los bonos que yo tenga más los que de la situación de arrastrar a un animal muerto ( supongo que sangrando) entre varios orcos, espero sea suficiente.

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11/04/2015, 00:35
Dorn Palabrasagrada

Dorn dedico sus oraciones, mas cortas de lo habitual, junto con una disculpa a los dioses que sin duda entenderían la necesidad de apresurarse.

-Eso nos limita un poco a la hora de emboscarlos, tiene sus ventajas y sus desventajas- Dorn dirigió su mirada a la montaña donde se encontraba la fortaleza ¿que haría él en su lugar?, la fortaleza era enana, daba a unas minas, eso es obvio pero ¿una entrada secreta en la ladera? demasiado cerca para su gusto y excesivamente grande si podían entrar cuatro orcos con una pieza grande de caza, no, ningún enano haría una entrada secreta tan grande - hay que borrar cualquier huella del campamento

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11/04/2015, 00:59
Dorn Palabrasagrada
Sólo para el director
- Tiradas (1)

Notas de juego

Para ver si por su experiencia en asedio Dorn sabe la mas probable disposición interna de la fortaleza y como puede ser esa entrada secreta, facilidad de acceso, ect

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11/04/2015, 19:19
Morgan, alias Shea

La impresión de Morgan resultó no ser acertada, mientras almorzaban algo Códice les contó que durante su turno había oído a unos orcos pasar cerca con algún animal cazado. La guerrera asintió a su propuesta de investigar ese rastro pero decidió que su fuerza estaría mejor empleada en la construcción de las trampas, así pues comentó las pertenencias que tenía que supuso podían ser de utilidad para hacerlas.

-Mejor si no los alertais hasta que tengamos las trampas y el lugar preparado -contestó a las palabras de Lirian. Escuchó al enano, que era el experto en trampas, y añadió mientras se ponía en pie -Vayamos adelantando trabajo, cuando volvais con la información -miró a los dos que marcharían -eligis un buen sitio para el falso campamento y llevamos lo que hayamos construido hasta allí.

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13/04/2015, 00:06

Rápidamente Rivoel seguido de Lirian desaparecieron de la vista de todos, con la intención de seguir un rastro que a priori, sería fácil de seguir.

El resto de la comitiva se quedó esperando instrucciones de Dorn en cuanto a las trampas. Tras ponerse las armaduras, rezar las oraciones matutinas y desayunar una insípida ración, empezaron a extender todo el equipo y arsenal del que disponían, era una misión arriesgada y debían hacer uso eficiente de todas las cosas que tuvieran a mano, desde cuerdas hasta balas de honda y demás. Nadie sabía como hacerlo, excepto Dorn, un paladín con cierto conocimiento de trampas, era extraño ciertamente, pero todos creyeron cuando afirmó a que había aprendido para sacar de combate a enemigos sin necesidad de matarlos.

Un par de horas pasaron, quizá un poco menos, cuando Lirian y Rivoel volvieron decepcionados de la pesquisa. El reastro pudieron encontrarlo, y pudieron seguirlo con facilidad. Después de todo un animal a rastras dejaba huellas imborrables y fáciles de seguir incluso para alguien que no estuviera facultado.
Su decepción se debía a que el rastro conducía al camino que ascendía el pico hasta la entrada principal, no se trataba de una ofrenda a otra criatura ni eran orcos misteriosos que utilizaban entradas secretas, simples orcos cazadores, quizá media docena o más, que volvían con una presa para alimentar a sus gentes del interior de la fortaleza.

Sin embargo, no volvieron completamente con las manos vacías. Habían tardado un poco más de lo que debían porque se quedaron buscando un lugar propicio para la emboscada y lo habían logrado. A varios metros del inicio del sendero ascendente había un bosquecillo de árboles suficientemente tupidos como para cubrir la visión desde arriba, al adentrarse unos metros por un sendero natural, se llegaba a un pequeño claro desde el cual se podría encender un fuego y desde donde seguramente sería visto desde arriba por los vigías de la entrada principal. Al bosque se podía adentrar más mediante pequeños pasajes naturales que podrían servir como psadizos en los cuales instalar las trampas.

Así que, un orco tendría que bajar desde la entrada principal, recorrer varios metros y luego adentrarse en el bosquecillo a través de un sendero natural antes de alcanzar el claro. Si la cosa se ponía fea, habían varias rutas de escape donde se podrían instalar trampas que detuvieran a orcos que decidieran perseguir a los héroes si decidían huir!

¿Instalarán trampas en el sendero antes del claro?¿instalarán trampas en los senderos de escape?¿qué trampas harán?.... Su turno.

Notas de juego

50 px a todos por postear.

Próximo turno: Miércoles.

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13/04/2015, 00:42

Nada importante que reseñar, algunas fortalezas enanas tenían entradas secretas, pero una tan (aparentemente) pequeña como aquella parecía que no tendría una entrada secreta.

Carecía de murallas, como la gran mayoría de fortalezas Enanas, eran casi inexpugnables...

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13/04/2015, 15:11
Códice [PNJ]

Códice se había quedado con Morgan, Kraum y Dorn mientras Lirian y Rivoel investigaban el probable rastro. Primero, ayudó a Dorn a borrar las huellas del grupo en el lugar donde habían pasado la noche. También charló con el paladín sobre su opinión sobre todo aquello: ¿creía Dorn que podría haber una entrada secundaria a la mina? Códice razonaba que, de haberla, sería secreta y poco protegida. Luego se pusieron con las trampas: predicador y granjero, el medioorco no sabía nada del tema y no era especialmente habilidoso con las manos, pero hizo lo que pudo. A Códice le sorprendió que Dorn supiera de trampas, pero lo comprendió: en el Valle de la Sombra, del que procedía, los elfos oscuros habían sido durante años un mal endémico y los valumbrinos habían aprendido a combatir el fuego con fuego. Sea como sea, los tres mestizos y el enano tampoco pudieron avanzar mucho, pues todo dependía del lugar del campamento-cebo, que dependía de lo que descubrieran sus amigos.

Por suerte, éstos no tardaron mucho en volver y, aunque descubrieron que los cuatro orcos no habían usado un segundo acceso para volver a las minas, sino el principal que el grupo ya conocía, habían encontrado un lugar perfecto -a ojos de Códice- para la emboscada. A esas alturas Kraum ya debía de estar perfectamente informado del verdadero oficio de nuestro clérigo, así que Códice no reprimió unas palabras de inmensa gratitud a la Diosa que había hecho crecer un bosquecillo en aquel lugar.

—¡Rápido, compañeros! ¡Vayamos a ese lugar y preparémoslo todo!

Su idea era poner trampas en los senderos que salían del claro. Quién sabe: puede que la idea de Dorn de conducir a los orcos a las trampas no fuera tan mala, después de todo.

Notas de juego

Vigía: Rivoel. Cebo: Dorn (¿sólo Dorn?).

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14/04/2015, 14:07
Morgan, alias Shea

Así lo hicieron, los mas sigilosos partieron y el resto se quedó preparando las trampas, siguieron las instrucciones del enano y prepararon telas y cuerdas, para cuando llegaron Rivoel y Lirian ellos tenían algunas cosas preparadas en espera de saber el lugar e idear la mejor forma de colocarlas. Trajeron malas y buenas noticias, la mala que no había 'puerta trasera', la buena que habían encontrado un buen sitio para la emboscada -Ahora solo queda esperar que algunos caigan en ella... y que encontremos un modo de entrar, y volver con la cabeza del dragón. Pan comido- una medio sonrisa irónica apareció en su rostro.

-Sí, vayamos a prepararlo todo. Debemos actuar durante el día.

Notas de juego

Vigía: Rivoel. Cebo: Dorn (¿sólo Dorn?).

Trampas: en los caminos de salida (no vaya a ser que no entren todos al claro)  n_n

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15/04/2015, 00:07
Rivoel Docanto

Rivoel y Lirian volvieron de su expedición sin mucho que aportar. Si había entrada secreta los orcos no la habían utilizado. Todo pasaba por el plan de las trampas. El bosquecillo del camino era el lugar perfecto y hacia allí se dirigieron todos para preparar la emboscada. Rivoel aportó su munición de la honda y su manta. Solo se le ocurría que pudieran resbalar con las balas y una vez en el suelo cubrirlos con las mantas para que no pudieran defenderse y molerlos a palos hasta que se rindieran o cayeran inconscientes. Luego vendría el interrogatorio... Tras su aportación, el bardo se dedicó a buscar un buen lugar desde el que pudiera observar el camino por el que Codice atraería al orco o los orcos y también parte del bosquecillo. Todo pasaría por subirse a alguno de los árboles más altos de la zona.

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15/04/2015, 01:41
Lirian Ventormenta

Asintiendo para corroborar las palabras del semielfo, Lirian, observaba el pequeño bosquecillo en la lejanía. Si todo salía como planeaban no sería difícil deshacerse de un numero no muy superior de orcos; las trampas equilibrarían la balanza. Como el norteño no tenía mucha idea de cómo preparar trampas que no fuesen para atrapar peces, se limitó a la vigilancia y a tensar repetidamente el nuevo arco a fin de que éste respondiese como se esperaba de él en caso de combate. Necesitaban prisioneros, pero eso no quería decir que los necesitasen a todos vivos. No había nada más traicionero que un orco. - No estaba dispuesto a dejar a su espalda a una gran cantidad de ellos aunque estuviesen encadenados al suelo. 

Cu...cu... cuanto antes lleguemos más tiem...tiempo tendremos pa...pa...paaara ocultarnos. - Comentó mientras ayudaba a empacar las tiendas de campañas y todo lo necesario para preparar un campamento de mentira en la nueva ubicación. Una vez allí pensaba aprovechar los arbustos para colocarse no muy lejos de Dorn, en uno de los laterales de la senda donde el enano se situaría como cebo. Desde allí esperaba poder apoyar al paladín lo antes posible en caso de complicaciones.

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15/04/2015, 16:22
Dorn Palabrasagrada

Dorn observó el lugar detenidamente así como los enseres de sus compañeros, necesitaremos piedras, explico como colocar las cuerdas de modo que al caer las piedras el peso de las mismas actuara de resorte -pillará como mucho a cuatro de ellos-  El mecanismo levantaba la cuerda a la altura de los brazos y cerraba el lazo con fuerza, esa, sería la trampa principal, en los senderos las física también haría estragos, enseño que tipo de madera buscaba, la forma adecuada, la primera persona que pasará activa la trampa, la segunda, cae en ella, un simple tropiezo, a veces, suficiente -recordar correr a un lado de quien vaya delante, no justo detrás o sereís vosotros quienes tropecéis-  aprovechando las dos mantas improviso una especie de red, una piedra en cada esquina quien quedara debajo quedaría un par de minutos ciego y desorientado y con la segunda cuerda un tronco haría de ariete - sacar el pasador y pum, en toda la cara, el que vaya detrás que lo saque -Dorn trabajaba concienzudamente en las trampas  explicando a sus compañeros como cubrirlas con tierra y hojas para disimularlas, al cabo de un rato se dio cuenta que actuaba exactamente igual que su padre cuando le enseño a hacer trampas de niño, sonrió y continuó con el trabajo solo que esta vez, tarareando una antigua canción enana

Notas de juego

Trampa principal, trampa de lazo, 1-4 orcos atrapados

Trampas secundarias 

Zancadillas- Palos en el suelo puestos para pisarse, quien los pisa primero los levanta activando la trampa quien va detrás tropieza con el palo y cae

Mantas- enmarañan y ciegan al objetivo (al menos hasta que saca la cabeza)

Palo ariete- se activa manualmente, al soltar el seguro el ariete cae golpeando a quien pille en su camino

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18/04/2015, 00:16
Códice [PNJ]

Mientras montaban las trampas, Códice atendía con esmero a las explicaciones de Dorn, no fuera a caer él mismo en las artimañas del grupo. De vez en cuando, el clérigo lanzaba miradas pensativas a Kraum, como si tratara de adivinar en qué pensaba aquel individuo que en el pueblo había sido tan bocazas. "Debe de ser muy deprimente meterse en un asunto como este con un grupo de personas que probablemente te odian o te desprecian y a las que odias o desprecias... ¿Se habrá despedido de sus compañeros? ¿Tendrá amigos que le echarán de menos? Todo el mundo tiene a alguien." Estos momentos de reflexión solían acabar con el paladín pidiéndole que sujetara mejor tal cuerda o avisándole de que cubriera mejor aquel palo. Ciertamente, aquel enano sabía de trampas tanto o más de lo que les había asegurado. "Los caminos de la Diosa son a veces sorprendentes..."

¿Qué debo hacer exactamente? —preguntó a Morgan. Como los demás estaban cerca, Códice se giró para incluirlos en la charla—. Es decir: nos escondemos, Docanto se coloca en su posición, el señor Dorn enciende el fuego y cuando los orcos irrumpan en el claro... ¿Salto sobre ellos? —preguntó el fraile humildemente—. Por lo demás, sé que si Docanto nos avisa de que son demasiados tengo que atraer la atención de esos villanos y huir por los senderos, pero... ¿Qué debo hacer si deciden acercarse sigilosamente y disparar a Dorn desde la maleza?

Sus dudas puede que fueran de fácil respuesta, pero su inseguridad era de esperar, dada su falta de experiencia en estas lides: salvo por las tres o cuatro veces que había esgrimido su maza codo con codo con sus viejos compañeros de expedición, Códice nunca había estado en un combate real.

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19/04/2015, 22:03

Todo estaba dispuesto para atraer a esos orcos y sacarlos de esas cavernas oscuras. Cuando las trampas estuvieron listas, Dorn empezó a preparar la fogata mientras sus compañeros se ponían en sus posiciones.

El fuego no tardó en llamar la atención y luego de unos segundos se vieron algunas sombras bajando por el sendero de la montaña. Eran 6 orcos los que bajaban a toda prisa, a pesar de las molestias que causaba el sol en sus retinas y la migraña que eso ocasionaba. Pero tenían ordenes que cumplir y temían más al castigo si no lo hacían que a un dolor de cabeza que no duraría mucho.

Rivoel se ocultaba detrás de la primera trampa, para vigilar a los orcos que quedaran amarrados con la cuerda. Los seis orcos pasaron, pero la trampa no se activó. Quizá hubiera quedado mal o simplemente los orcos tenían la bendita suerte de no haber pisado en los lugares que la activaban. Fuera como fuera, el fracaso de la trampa principal empezó a preocupar a Rivoel.

Lirian se ocultaba en unos arbustos detrás de la segunda trampa, donde sería el encargado de rematar a quienes cayeran tropezados, siempre y cuando no fueran muchos. Tres orcos quedaron atrás cuando tropezaron y cayeron de bruces contra el piso. En un acto valiente, Lirian decidió que tres era un número manejable y se abalanzó contra ellos. Su cimitarra atravezó el gaznate del primero y mientras lidiaba con el segundo, el tercer orco se levantó dispuesto a atacar al norteño que le daba la espalda. Era un golpe imposible de fallar y que seguro cobraría la vida del tartamudo. El orco alcanzó a saborear la sangre de Lirian cuando una espada atravesó su pecho. Rivoel había salido a correr detrás de los orcos y había salvado la vida de Lirian que se percató cuando había matado al segundo orco (los tres orcos que tropezaron ya habían muerto).

Las mantas atraparon a otros dos orcos y Shae estaba dispuesta detrás de un árbol. Comoun rayo salió de la nada y con su enorme espada mandó al reino de Gruumsh al par de sirvientes.

Solo uno de los orcos llegó al claro, donde se encontraba el Enano apoyado en su martillo de guerra. Amenazó al Enano y esbozó una especie de sonrisa al ver que comería carne de Enano para la cena. Pero Dorn, manteniendo la calma, señaló a las espaldas de su contrincante.

El orco volteó la mirada para percatarse de que se encontraba solo. Rivoel llegaba junto a Lirian al claro por el bosquecillo mientras Morgan lo hacía por el claro. Códice aparecía de la nada detrás del Enano. Escapar no era una opción para el orco y él mejor que nadie lo sabía. La sonrisa se borró de su rostro y su semblante cambió, aún no estaba listo para recibir a la muerte y arrojó su arma a manera de rendición...

Notas de juego

50 px a todos por postear.
30 px a Dorn por su idea de las trampas!

Próximo turno: Miércoles.

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21/04/2015, 00:49
Rivoel Docanto

Rivoel esperaba nervioso la llegada de los orcos y ésta no se hizo esperar. El miedo iba creciendo en su interior con forme la media docena de robustos humanoides se iba  acercando hacia la trampa que él vigilaba. las palpitaciones del bardo eran máximas pero Justo cuando pasaron sobre la cuerda que debía atraparlos algo falló. Uno tras otro los orcos fueron atravesando el lugar sin que ninguno quedara atrapado. Instintivamente el bardo estuvo a punto de gritar para alertar a sus compañeros, pero  eso habría arruinado el plan. Entonces pensó en enviarles un mensaje telepático con su magia, pero necesitaba verlos y ahora estaban ya todos escondidos.

El joven semielfo se armó de valor y salió tras los orcos instintivamente sin saber muy bien por qué ni para qué. A los pocos pasos llegó frente a un cruento combate en el que Lirian había degollado a un enemigo y estaba a punto de abatir a otro. Pero el norteño no se percató que un tercer orco se acercaba por su  totalmente desprotegida espalda. La muerte de Lirian a manos de ese orco parecía inevitable. Por un instante Rivoel se quedó atenazado por la tensión hasta que  un instinto asesino se apoderó de él. Desenvainó su hasta ahora impoluta espada y sin pensar se abalanzó sobre  la mole orca que atacaba a Lirian. Tan solo un grito de furia salido de lo más profundo de las entrañas del Semielfo alentó a Rivoel a clavar su acero en el orco, que atravesó por completo al sorprendido humanoide de espalda a pecho, cayendo de rodillas  sobre un charco de su propia sangre.

El bardo quedó helado por la escena, con la mirada perdida y sorprendido por lo que había hecho. Nunca antes había herido ni mucho menos matado a nadie. Con la inercia del orco cayendo Rivoel soltó su espada y quedó petrificado ante él. Tuvo que ser Lirian quién la arrancara de la espalda de la víctima y la lanzara a los pies del bardo antes de salir corriendo tras el resto de orcos. El ruido del metal contra el suelo hizo volver en sí a Rivoel que al verse solo y rodeado de sangre, apenas tuvo tiempo de coger la espada y salir corriendo también para no quedarse solo.

El bardo corría con la mirada perdida y no pudo evitar tropezar con un bulto que encontró en el camino. Carne inerte  envuelta entre mantas ensangrentadas es lo poco que vio Rivoel antes de alejarse trastabillando del lugar. Invadido por el terror siguió corriendo hasta que jadeante llegó al claro donde vio a un orco rindiéndose ante el resto de sus compañeros. Fue en ese momento cuando exhausto cayó de rodillas apoyándose en la ensangrentada espada.

Por un momento pensó en interrogar al orco, pero en esos momentos no se sentía capaz de intimidar a nadie...   

Notas de juego

Me he tomado la libertad de rolear más en detalle cómo Rivoel habría afrontado la situación, ya que él no es un buen combatiente....