Partida Rol por web

Siento los golpes a mi puerta y la abro. Al ver que es Tánathil pidiendo el dinero de vuelta, lo busco y se lo devuelvo.

-Algo mas?

- No, nada. Espero que descanses bien. Cuando lleguemos al pais de los enanos quizá debas ser nuestro rostro. Nunca he hecho diplomacia en sus fortalezas - digo al enano y saludo mientras comienzo a darme la vuelta.

Al ver que todos empiezan a marcharse me levanto y voy a buscar mi habitación.

Saludo con la manita al enano.

-Buenas noches, grandote.

Me doy la vuelta y me alejo dando saltitos.

Al pasar por la habitación del hamor me fijo si tiene cerradura por la que poner el ojo.

- darepse ratseL, somelbah - le sigo hasta su habitación.

-Mm, supongo, aunque no soy de esas tierras. Bueno, descansen, mañana sera un dia largo

-Parece que sólo quedamos tu y yo, Vel... Lo mejor será retirarnos también... ¿Tienes sueño? No creo que durmamos mucho esta noche vigilando esa cosa. - digo en Gaet'za. - ​​​​​​¿No es curioso que a todo el mundo le de igual algo tan peligrosso? Razasss inferiores... 

Voy a mi habitación, abro la puerta y cedo la entrada al elfo.

-Hablemos pues.

(Hablo en élfico y bajito todo el tiempo)

- Querría preguntarte de forma más privada algunas cosas, somos un grupo extraño y no todos los seres que nos acompañan podrían estar inclinados a la colaboración recíproca en esta extraña aventura que vete a saber como acabará. Deberíamos apoyarnos ¿Tengo tu sinceridad? - me siento en un taburete que hay en la habitación.

Tiraré descubrir a cualquier declaración relevante.

-Siempre. No mentiría a un compañero. Además, se me da fatal mentir -contesto también bajo y en élfico.

- ¿La historia de tu hermano con ese libro te era desconocida de verdad?

-De verdad. En cuanto le vi con el libro fue cuanto intentó matarnos a mi madre y a mí y le tuve que matar yo. No hubo tiempo para explicaciones.

- Que acontecimiento tan desgraciado. Te compadezco. ¿Cuál era tu intención llevándolo encima y abriéndolo?

-Mi hermano me contó que hizo lo que hizo porque el libro le daba poder a cambio. Pensé que si me ayudaba a obtener poder, por poco que fuera, me ayudaría a llevar a cabo mi misión. Opino que el poder no tiene por qué corromper. Me equivocaba, ese poder es maligno.

- Si. Las entidades suelen hacer "intercambios" que no acaban resultando fáciles o convenientes, libros mágicos más corrientes resultarían más apropiados para tu profesión y para los riesgos que suponen - digo tranquilizado.

- ¿Estás seguro de querer entregarlo a nuestro patrón?

-Seré totalmente sincero contigo -invoco una capa de podredumbre sobre mí con el hechizo escudo de muerte-. Como puedes ver ese libro me ha dado poder. Sin embargo, aún tengo el miedo metido en el cuerpo. Miedo no es la palabra... es pánico. Además, ¿recuerdas cuando sugerí ir a explorar el pueblo en busca de supervivientes? Antes de leer el libro hubiera ido sin pensarlo, pero después de leerlo... como que la vida de los demás me importaba menos. Priorizaba la mía. Es como si me hubiera vuelto más insensible. Tuve que hacer un esfuerzo para preocuparme por los demás y sentirme... sentirme yo mismo. Por lo que no sé si deberíamos entregarlo, la verdad. Puede ser útil, pero también puede ser nuestra perdición. 

- Cuando usas esa magia... ¿sientes que procede necesariamente de él? ¿o ese poder ya se ha vuelto independiente del libro? - reflexiono sobre lo que me cuenta Lestar. Poder recibido: del libro mismo, o quien habla a través de él... ¿permanecerá esa ventaja entre las capacidades de Lestar cuando el libro fuera destruido?

-Esas son buenas preguntas. Creo que solo me dio el conocimiento, pero no sé qué pasará cuando sea destruido...