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[El Anillo Único] No abandonéis el sendero

V ~ El ermitaño del bosque Negro

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14/12/2023, 18:58
Maestro del Saber

"Pero el Bosque Verde ya no era lo que fue en un pasado distante; ahora se había convertido en el Bosque Negro, un lugar lleno de riesgos potenciales"

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14/12/2023, 19:20
Maestro del Saber

La compañía avanza por el sendero Elfo cuando una tormenta se abate repentinamente sobre el bosque Negro, haciendo que la oscuridad sea tan completa como a medianoche. Fuertes vientos azotan las copas de los árboles haciendo caer hojas y ramas sobre todos vosotros como si de granizo se tratara. Las ramas mayores crujen ominosamente y las ramas podridas se rompen y caen.

Las nubes se abren como si una mano enorme hubiera recogido el contenido completo del lago Largo y lo dejara caer sobre el bosque. El trueno y el relámpago crujen en las alturas, increíblemente fuerte y peligrosamente cerca, y el agua empieza a filtrarse cada vez más copiosamente a través de los árboles hasta que docenas de arroyos y riachuelos empiezan a abrirse por el suelo del bosque. Os resulta prácticamente imposible seguir viajando bajo estas condiciones y quizá lo único que pueda salvaros sería encontrar un lugar seco a la vista del sendero, a menos que decidierais abandonarlo.

La suerte parece acompañar a Trotter, que encuentra algo muy inusual a alguna distancia del camino: hay un enorme árbol muerto más adelante, y una fina pluma de humo se alza de lo más alto.

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16/12/2023, 12:13
Beran de las montañas

A medida que la furia de la tormenta azotaba el bosque Negro, Beran apretaba con más firmeza el mango de su hacha, mientras avanzaba junto a sus compañeros y les dedicaba una dura mirada para mantenerse alerta. Las ráfagas de viento y las ramas que caen no parecen amedrentarle, acostumbrado a la rudeza de las tierras altas. Sin embargo, su mirada se vuelve más atenta al notar la tensión entre Baldor y su hijo, consciente de que la oscuridad del bosque afecta a la compañía de manera distinta.

—La tormenta es feroz, pero no hay montaña ni bosque que no haya desafiado. Mantened vuestros ojos alerta y busquemos refugio —dijo con su voz profunda, pero precavida.

El árbol muerto y el humo que encontró Trotter señalaba un posible resguardo en la tormenta. Beran lo observó con desconfianza, pues en un bosque tan oscuro y abandonado, lleno de peligros y con una tormenta férrea, sería inusual. Entonces miró a Caranthir, esperando que el elfo supiera con más conocimiento qué es lo que tenían en frente.

- Tiradas (1)
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16/12/2023, 16:50
Caranthir

Que en medio del Bosque Negro, y con una tormenta como la que había estallado, alguien osara encender un fuego dejaba lugar a pocas dudas sobre su identidad. Tenía que ser alguien poderoso, a quien no importase atraer la atención de oscuras criaturas. Eso descartaba la posibilidad de que fuera algún Hombre de los pueblos que se habían asentado en los margenes sudoccidentales del Bosque. Pudiera ser una patrulla de elfos silvanos, alejada de los límites del reino por algún motivo y guarecida de la tempestad. Incluso había una mínima probabilidad de que fuera el mago de Rhosgobel, pues a menudo se había aventurado en las tierras del Bosque Negro por motivos desconocidos; pero eran los motivos de un Mago y los elfos habían aprendido a no cuestionarlos ni a entrometerse en ellos.

Pero lo que más preocupaba a Caranthir era que se tratase con toda seguridad de un esbirro de la Sombra que se había cobijado de la lluvia. Alguien con esa afiliación no temería dar a conocer su posición con un fuego que atrajese a criaturas como las arañas gigantes. Pero no podían seguir en el camino con el viento que amenazaba con desarraigar árboles y arrojarlos sobre sus cabezas o la cortina de lluvia que, a pesar del dosel de hojas bajo el que estaban, les calaba hasta los huesos. O la oscuridad como de noche que se había abatido sobre la tierra y que, con toda probabilidad, afectaba a los sentidos de la mayoría de la compañía.

- Acerquémonos al árbol muerto con cuidado. - Con los aullidos del viento, era difícil que el ocupante pudiera escuchar su aproximación. - Podría ser un amigo, mas no alberguéis mucha esperanza. Es mucho más fácil y probable que sea un agente del Enemigo quien se haya resguardado ahí del mal tiempo.

El elfo hizo un gesto con la mano para que la comitiva le siguiera, aunque él mismo avanzaba con lentitud, ocupado como estaba en colocar ramas y astillas para marcar la ruta hacia el camino, como hiciera durante los campamentos. Pero esta vez era más complicado; debía buscar lugares a cubierto del viento para que las ráfagas no las derribasen y con raíces gruesas que las protegieran del agua que corría por el suelo del bosque.

- Tiradas (1)
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17/12/2023, 22:14
Trotter

El camino por el bosque negro estaba resultando curiosamente tranquilo, sobre todo comparándolo con su anterior y accidentada incursión la estación previa. Al pequeño hobbit esa calma le hacía ir un poquito más relajado, descargándole de la pesadumbre que la arboleda transmitía. Sin embargo era consciente de que esto no era así para todos sus compañeros.
No le preocupaba Caranthir, cuyo laconismo era bien conocido por toda la compañía, y no signo de oscuridad sino rasgo de su cuidadosa y atenta personalidad.
Quien le generaba un poco más de inquietud era Belgo. Previamente se había comportado de forma alegre, como correspondía con su edad, ayudando a todos con los preparativos y emocionándose con los animales.
Pero en el último tramo, su ánimo estaba decayendo por momentos y se mostraba poco hablador incluso con su padre, con quien antes reía a carcajadas a la mínima oportunidad. A sus compañeros no les pasaba inadvertido ese cambio tampoco, era fácil de ver esa preocupación en la mirada de Beran. Dedicó gran parte del viaje a contarle historias sobre la comarca para tratar de subirle el ánimo.

- ... Y entonces la abuela Boffin salió a la calle y al ver moverse el saco llamó a su marido, gritándole - ¡¡Mongo, Mongo!! ¡¡Sal a la calle, creo que el mago ese que se llevó al Bolsón ha vuelto y le ha hecho algo a nuestras manzanas!!. 
Entonces apareció el abuelo Boffin y dijo - A mi ese buscaproblemas no me va a robar las manzanas, no señor. Aunque sea hechas puré se quedan aquí.

Y se acercó con la pala dispuesto a darle una buena paliza al saco. Entonces mi primo Hugo, que no tiene una pizca de sangre Tuk, salió corriendo. Y claro, yo salí corriendo hacia el otro lado, porque no me iba a quedar allí sólo recibiendo palazos dentro del saco. A mi me persiguió la abuela Boffin, y no veas como corría la señora, no conseguí perderla de vista hasta después de cruzar el Brandivino por el puente grande...

Uno de esos días se levantó nublado. La oscuridad acompañaba siempre en el bosque pero aquel día era particularmente densa. Conforme avanzó el día, lejos de despejarse, iba cerrándose más. Las primeras gotas no llegaron a tocarles por la densa maleza que les recubría, pero en unos minutos el viento y la lluvia eran tan fuertes que impregnaban el interior de la foresta, y comenzaron a correr cuidando de que los ponis no se desbocaran. De suerte que en un claro a la izquierda Trotter vislumbró un árbol muerto con rastro de humo saliendo de su parte superior.
Caranthir indicó que debían avanzar con precaución por lo que Trotter trató de apaciguar a los animales y se acercó al lugar con cuidado, pero con muchas ganas de poder resguardarse en un lugar seco.

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19/12/2023, 20:41
Beli

Ni siquiera actitud funesta de Caranthir lograba hacer mella en el ánimo del enano, hasta el momento el viaje transcurría para él como un paseo de placer y su recia constitución, habituada a los pesados trabajos en la mina, apenas había sentido el paso de los días de caminata. Consciente de que no todos sus compañeros se encontraban en las mismas condiciones y con el mismo ánimo, Beli se encargaba de hacer el fuego y montar el campamento cuando se detenían a descansar, casi siempre ayudado por Trotter, y también era el primero el levantarse y empezar a preparar el primer desayuno del día.

Cuando se levantaron aquella mañana, densos nubarrones grises cubrían el cielo presagiando la fuerte tormenta que se desataría horas más tarde. Beli había intentado forzar la marcha para que la tormenta no les agarrase en una zona demasiado densa de arboleda, temeroso de que los espigados árboles pudieran atraer algún rayo sobre sus cabezas, pero el cansancio de los ponis y de sus compañeros habían retrasado la marcha irremisiblemente.

La lluvia era ahora tan fuerte que costaba vislumbrar el sendero y aquello no era bueno, si hacían caso del consejo de los orejas puntiagudas. Trotter vislumbró entonces una fina columna de humo que parecía salir de un árbol muerto y enseguida Caranthir lanzó su habitual jarro de agua fría.

- No nos queda más remedio que arriesgarnos, gritó el enano bajo la lluvia, necesitamos encontrar un refugio para este temporal. Sea quién sea, si tiene un techo seco sobre su cabeza y está sentado al lado de un fuego, puede llamarme su amigo.

- Tiradas (1)

Notas de juego

Tremenda tirada de Alerta, si hay una trampa la piso con los dos pies...

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20/12/2023, 15:33
Frida, hija de Finnulf

Frida caminaba con la cabeza agachada, intentando protegerse lo mejor que podía de la incesante lluvia, mientras trataba de no resbalarse o de no golpearse con algunas de las ramas que, debido a la violenta forma con las éstas se movían por culpa del fuerte viento, se habían convertido en el peor enemigo de la compañía.

A medida que habían ido transcurriendo los días, la oscuridad reinante en el Bosque Negro había ido haciendo mella en el ánimo de todos, especialmente en el de Belgo, el cual ahora se mostraba mucho más distante, sobre todo con su padre, que cuando les conocieron a ambos.

- Sólo espero que vuelva a ser como antes cuando por fin abandonemos este ominoso lugar - pensó la mujer del Lago al tiempo que esquivaba uno de los múltiples riachuelos que se habían ido formando a lo largo de las últimas horas.

- Entiendo que debemos ser precavidos, Caranthir, pero también debemos encontrar un lugar donde poder resguardarnos - dijo ante la advertencia del elfo sobre el lugar encontrado por el hobbit - Aún así, estaré preparada, por si nos encontramos a alguien, o a algo, no demasiado amigable - continuó diciendo, mientras sacaba la espada de su vaina, y se dirigía con paso precavido hacia el árbol.

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20/12/2023, 18:32
Maestro del Saber

La compañía, a sabiendas de que quizá el árbol es el único refugio del que dispone, se acerca con Baldor y Belgo avanzando a vuestras espaldas con cautela hacia el árbol. Buscando por la base del mismo podéis hallar un túnel que corre por entre las raíces hasta el interior del propio árbol. No hay señal de ocupante alguno por los alrededores y, cuando os atrevéis a internaros, tampoco parece haberla dentro, aunque, si vuestras sospechas son ciertas, lo que sea que habite aquí no puede andar muy lejos si ha dejado un fuego sin atender.

El árbol está hueco por dentro. El túnel de entrada se abre a una sola habitación redonda, las paredes de la cual son la madera muerta del árbol y el tejado es una mezcla de corteza y paja que la mantiene a salvo de la mayor parte del viento y de la lluvia. Sin duda no es como el  cómodo agujero de un hobbit, pero es mucho mejor que estar al descubierto en el bosque Negro en mitad de aquella tormenta.

Hay un círculo de piedras en el centro, donde crepita un pequeño fuego de cocina con algunos trozos de carne, que bien esperáis que sean de ardilla o de conejo, ensartados en un espetón. Otros trozos de carne inidentificables cuelgan del techo en largas tiras negras. Cerca del fuego encontráis también una sola cama de hojas y pieles. Jarras de agua y cestas de fruta ocupan un hueco cenagoso en la parte posterior de la habitación.

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21/12/2023, 11:42
Caranthir

La presencia del fuego, el camastro o las reservas de comida bien dispuestas sugerían que el ocupante del árbol muerto era inteligente, pero no decía mucho sobre las lealtades de dicho sujeto. Caranthir observó con cierto reparo las muestras de carne, tanto las que estaban al fuego como las que colgaban del techo; compadecía a quien tuviera que buscarse el sustento de ese modo en el Bosque Negro... al mismo tiempo que dudaba que semejante dieta hiciera bien alguno a quien subsistiera con ella. Pero lo que más le preocupó fue ver jarras de agua en un rincón. Por algún motivo, el elfo no creía que contuvieran agua de lluvia. Y si procedía de alguna fuente del bosque, quien viviera allí bien podía tener su mente alterada de algún modo por ingerir ese agua.

- Nadie. Pero el ocupante no puede estar muy lejos, a juzgar por la carne en el fuego. Esperemos a que amaine la tormenta antes de seguir la marcha. Y si aparece antes nuestro anfitrión, y resulta ser amistoso, no deberíamos comprometer sus provisiones, aunque parezca descortés.

El ocupante de aquel lugar bien podía seguir vivo con aquella dieta que el bosque le proveía, pero no implicaba que conservase la plenitud de sus facultades mentales. Y aunque ellos sólo se alimentasen una vez y, por tanto, no sufrieran efectos continuados a largo plazo, sólo necesitaban algo tan nimio como perder la memoria, o parte de ésta, de lo acaecido en los últimos meses para tener problemas.

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21/12/2023, 12:46
Beli

Los ojos del enano se adaptaron rápidamente a la oscuridad tenuemente iluminada por las llamas del interior del refugio. A priori los indicios parecían apuntar que el ocupante era un ser inteligente y que se preocupaba por tener una dieta variada, algo por lo que los trolls o trasgos no se preocuparían lo más mínimo, así que si Beli hubiera tenido que apostar diría que se trataba de un humano, probablemente alguno de los que se llamaban a sí mismos, Hombres de los Bosques.

- No anticipemos acontecimientos, maese elfo, tal vez nuestro anfitrión se encuentra ahora mismo observándonos, comentó Beli mientras comenzaba a recorrer la estancia buscando cavidades o pasadizos ocultos, con cuidado para no remover nada de su lugar.

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- Tiradas (1)

Notas de juego

Invoco la habilidad de Recorrer subterráneos para ayudarme en lo que pretendo descubrir, cualquier tipo de cavidad oculta, túnel escondido y, más en general, algún indicio que nos permita conocer información del ocupante del improvisado refugio. 

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21/12/2023, 17:22
Beran de las montañas

Beran observa con deseo los trozos de carne que crepitan sobre el fuego, pero su honor y respeto por el refugio evitan que perturbe el lugar sin antes saber quién lo habita. Aunque su estómago gruía de hambre, la prudencia guía sus actos. Dirige su mirada hacia los demás y, apoyando las palabras de Caranthir, accede a esperar al anfitrión dentro del refugio hasta que la tormenta ceda.

—Hay una sola cama, pero alimento para más de una persona. Parece como si otro comerciante de frutas o alimentos quedó extraviado —dice y se acerca a la cesta de frutas comprobando algún sello identificativo—. Baldor, ¿por casualidad te suenan estas cestas? Por su forma o materiales puede que encontremos la procedencia de nuestro amigo.

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22/12/2023, 10:04
Trotter

El mediano miró a su alrededor al entrar. No se le habría ocurrido atacar la comida sin preguntarle al dueño que, como decía Caranthir, no debía encontrarse muy lejos. Sin embargo la carrera bajo la lluvia le había dejado cansado y empapado por lo que se quitó la capa superior de ropa poniéndola a secar cerca del fuego del hogar y se recostó en una silla cerca del mismo con vistas a la puerta, mientras observaba la sala en busca de alguna señal que le permitiera reconocer la alineación o la persona de su involuntario hospedador.

Notas de juego

Invoco el rasgo "saber popular"

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22/12/2023, 15:34
Frida, hija de Finnulf

Frida agradeció enormemente el que hubieran encontrado un lugar en el que poder resguardarse de la incesante lluvia que azotaba el exterior y, nada más entrar, al igual que había hecho Trotter, se desprendió de todas aquellas ropas que estaban empapadas y las situó junto al fuego, al lado de ella, para que se secaran.

- Pierde cuidado, Caranthir - dijo mientras sentía como el calor iba poco a poco penetrando en su cuerpo y le devolvía la vitalidad a sus entumecidos músculos  - Sería de mala educación el tocar nada de lo que hay en un lugar mientras la persona que se hospeda en él no está presente y no te ha dado permiso para ello, así que, por mi parte, tanto la comida como la bebida permanecerán en el sitio en el que están -

- Belgo, ven, ponte junto al fuego, para que puedas calentarte - dijo a continuación, pensando en lo mal que lo debería estar pasando el muchacho por culpa de las inclemencias del tiempo, y en lo valiente que éste era por estar realizando un viaje tan largo.

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22/12/2023, 16:19
Maestro del Saber

Paseáis por la estancia mientras vuestros cuerpos empiezan a recuperar algo de calor, observando las escasas pertenencias que encontráis bajo vuestra mirada, preguntándoos qué clase de ser habita aquel árbol. Baldor niega ante la pregunta de Beran, incapaz tampoco de discernir nada sobre la identidad de vuestro involuntario anfitrión.

Es Beli quien, mirando más allá de esos enseres, se fija en un perturbador detalle: las paredes estás cubiertas de tallas en madera representando rostros horribles y monstruos de todo tipo. Baldor y, sobre todo, Belgo parecen ser los que más temor le provoca la situación, tanto por la torrencial lluvia como por el habitáculo. Trotter aventura que quienquiera que viva aquí, o es un perturbado o debe hacerlo atormentado por pesadillas; no se atrevería a descartar ninguna de ambas opciones. 

Al cabo de un rato, escucháis un ruido afuera, como si alguien llegara al túnel de entrada y se abriera paso por entre las raíces del árbol hueco. A todos os comienza a llegar un increíble olor a rancio...

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23/12/2023, 00:04
Beran de las montañas

Beran observa las tallas en madera con una ceja fruncida, sus ojos profundos reflejaban su preocupación mientras recorría la estancia. Con su fornida mano, acaricia la empuñadura de su hacha, asegurándose de tenerla preparada.

—Estas tallas... son perturbadoras —murmura, dirigiendo su mirada a sus compañeros.

La llegada del olor rancio indicaba que algo no está bien. No muchas veces había olido algo similar. Sin embargo, mantiene la calma y se acerca a la entrada del túnel, al frente de un posible enfrentamiento. La tensión se palpa en el aire mientras el beórnida aguarda, listo para actuar en defensa de sus compañeros.

—Preparaos, hermanos. Alguien viene, y no me gusta el olor que trae consigo —anuncia, instando a sus compañeros a ponerse en guardia—. Debemos evitar que dé la alarma —si era un orco, no muy lejos debían estar los demás.

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23/12/2023, 17:14
Caranthir

El descubrimiento de las tallas no hizo si no confirmar las sospechas de Caranthir. La mente del ocupante de aquel refugio posiblemente se había perdido hacía ya un tiempo, presa de la soledad del lugar y fruto de la falta de luz, el aire enrarecido, comer lo que el Bosque Negro proveía y ser acechado por oscuros depredadores. Comenzaba a dudar que fuera un agente del Enemigo pero, incluso aunque fuera un miembro de los Pueblos Libres, su mente perturbada sin duda lo haría peligroso por lo imprevisible de sus reacciones. Y el olor que provenía del túnel entre las raíces posiblemente indicaba una alarmante falta de higiene. El elfo trató de ignorar el punzante hedor al concentrarse en los sonidos de sus pasos, pero también en otros que pudieran acompañarle o delatar la presencia de más gente.

- Bajad las armas, aunque tenedlas a mano.

Caranthir habló en un susurro mientras, con la mano libre, gesticulaba para enfatizar lo que había dicho.

Notas de juego

Vamos a ver si Buen oído da alguna pista más.

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23/12/2023, 23:26
Beli

Beli no pudo si no concordar con la hipótesis del mediano, realmente la mente de la que habían salido aquellas monstruosas creaciones debía encontrarse atribulada por terribles pesadillas o, peor todavía, una horrible realidad. El enano miró de soslayo los rostros aterrorizados de Belgo y Baldor.

- Tranquilo muchacho, estamos aquí para protegeros, murmuró el enano intentando infundir Balor al pequeño humano.

Pronto llegó la advertencia de Beran y el perturbador hedor hizo que hasta Beli torciera el gesto con desagrado, el manog de su piqueta al alcance de su mano por si era requerida.

- Recordad que estamos en su casa, las leyes de la hospitalidad exigen que mantengamos un mínimo de cortesía, al menos de entrada..., bien sabía Beli que esas leyes no escritas eran interpretadas de manera distinta por cada uno de los Pueblos Libres en función de sus costumbres y ni siquiera por especímenes de una misma raza las interpretaban igual.

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31/12/2023, 16:59
Frida, hija de Finnulf

Frida se tapó la nariz y la boca con la mano izquierda, para intentar protegerse del desagradable olor, mientras se preguntaba qué, o quién, sería el responsable de él y de las perturbadoras tallas descubiertas por Beli.

Después, para intentar no llamar la atención de lo que fuese con lo que estaban a punto de encontrarse, se situó sigilosamente delante de Belgo, y colocó su mano derecha sobre la empuñadura de la espada, para poder desenvainarla lo más rápido posible en caso de ser necesario. Por último, le hizo una señal con la cabeza a sus compañeros, para que éstos supieran que estaba preparada.

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08/01/2024, 16:14
Maestro del Saber

Esperáis pacientemente armas en mano, algunos temerosos (en especial Baldor y Belgo) y otros tantos precavidos ante lo que sea que esté a punto de cruzar el umbral hasta la estancia, con ese olor a rancio invadiendo vuestras fosas nasales. Pero lo que os encontráis no es ni orco ni trasgo, sino un hombre con el cuerpo plagado de cicatrices, incluso en muñecas y tobillos, y delgado como una vara vistiendo tan solo con unos sucios harapos, de tal forma que os es imposible discernir si aquel tufo proviene de ellos o es todo el hombre en conjunto el que lo emana. 

Cargando editor
08/01/2024, 16:25
El ermitaño

El hombre grita, alarmado al veros en el interior por lo que deducís rápidamente que para nada esperaba encontrar gente ahí dentro, y acto seguido os apunta con una maltrecha lanza sin dejar de gritar. Y así permanece, sin atacaros... al menos de momento.