Día 2: Gerald y Shannon

Tras el encuentro en el comedor en el que muchos aprovechan para socializar y distenderse con una cerveza en la mano, cada uno de los participantes se retira para pensar o para dedicar tiempo a su trabajo.

Es entonces cuando Shannon busca un momento apartado con el que poder hablar con Gerald para sorpresa del segundo, esta vez sí, sin cámaras u otros invitados presentes.

Gerald estaba de pie mirando a Shannon. Algo intranquilo por el excesivo silencio.

-Bueno, tu dirás. O... ¿Sera que te has equivocado de cita? -Comento jocoso.

Me acerque a Gerald cuando este estaba un momento a solas.

No me gustaba invadir el espacio de una persona pero algo me recorcomía por dentro. Lentamente me acerqué a él pero a medio camino me paré, presa de mi timidez. Creí que era una tontería y estuve a punto de volverme cuando Gerald se giró y me habló. Ya no tenia vuelta atrás o me tomaría por una tonta.

- Oh, d-disculpe señor Gerald.- Dije avanzando un paso en su dirección.- S-solo quería expresarle mis disculpas por el negativo que le puse. Realmente... Quiero decir... no le considero un... pirata. Por lo de, copiar y cosas así, solo era una forma de hablar...

Alzó las cejas y esbozo una ligera sonrisa, no pudo evitarlo. -Jeh. Creo que deseas algo mas de mi o al menos en un principio, porque para decirme esto podrías decírmelo delante de los demás. No Hacia falta vernos a solas. Pero se agradece y descuida, mientras uno mismo no se considere un pirata, no sabrá que otros se lo llaman. -Le guiño un ojo y se metió las manos en los bolsillos.

-¿Alzo mas? Tal vez, ¿Quiera contarme sobre el tablón o alguna sospecha sobre alguien? ¿No le parece raro que John siempre lo haga todo a la primera? Es casi perfecto, da miedo. -Comento con un ligero tono de broma.

- No me sentiría... demasiado cómoda delante de todos.- Admití son reparos. - No se me da bien la gente, en general. A veces soy demasiado correcta y otras... me callo.- Dije sonriendo levemente.

Me crucé de brazos y cambie el peso de mis caderas para apoyarme sobre una pierna.

- ¿El tablón?- Pregunté distraída. Miré hacia arriba como intentando pensar en ello.- Realmente no se que pasa en ese tablón. Veo, aunque no sea algo que me afecte demasiado...de momento... que la gente quiere este puesto y esta dispuesta a hacer de todo por conseguirlo. Incluso jugar sucio. - Agité una mano al aire y después miré a Gerald.- Y eso me da miedo. Vine aquí por un puesto superior, pero no a costa del resto. Viendo a los demás no se si soy la jefa que todos esperan, pero no me sentiría cómoda teniendo a unos compañeros que me odien después.

- Solo se que la gente está empezando a hacerse "socios". ¿ Cual es el suyo, señor Gerald?- Pregunté directamente.- Espero que no sea Jesus. No le haría ningún bien, me temo.

-¿Socios? Vaya, ¿Entiendo que entonces ya tiene uno y lo que busca es sonsacarme información? Jeh Lo siento pero parece que yo soy el mas ausente de todos ustedes y aun no he sido tan espabilado para hacer socios. Pensaba que cada uno iba por libre, pero veo que estaba equivocado. Aunque eso me hace preguntarme quien de cada socio pensara que es el líder en esa alianza. -Se paso la mano por el pelo, para peinarlo hacia atrás.

-Y no dude que hay juego sucio de por medio esto es una empresa llena de tiburones y pocos delfines.-Se acerco a ella para decir estas ultimas palabras. -Pero dígame que le hace pensar que estoy con Jesus. Personalmente creo que aliarse con ese hombre es suicidarse, empresarialmente hablando. ¿Acaso lo piensan porque soy el único que no me meto con su forma de ser?

- Mal interpreta mis palabras, señor Gerald.- respondí con una mirada algo ofendida.- Yo no tengo socios. Ni aliados, ni... lo que sea que este pensando. Siempre he estado sola y... creo que siempre lo estaré- Las palabras eran tristes y decían mas de lo que aparentaban.

- Pero permítame que dude. Antes parecía usted tan... normal.- No era esa exactamente la palabra pero...- Y en estos días estoy viendo a una persona algo mas hosca. - Mi mirada se dulcificó lo justo.- No se a que se debe ese cambio pero... me parecía buena persona. Ahora veo que el camino que lleva es el de un adolescente cabreado con el mundo. Espero que no tenga delirios de grandeza...

Rei un poco ante la pregunta de Jesus.

- Si es por eso yo tampoco lo he criticado lo suficiente. Pero...si, hable con él. Me propuso ser "socios". - me encogí de hombros negando con la cabeza.- No me gustan los dobles juegos, ni las mentiras, ni poner zancadillas, ni... La gente como Jesus, me temo.- me acerque a Gerald lo justo que mi propia intimidad me permitía, al igual que mi verguenza.- Me gusta la gente legal. Creo que usted lo es. Por eso me he disculpado por mi negativo y ...- rei abiertamente aunque tape mi boca con la mano.- Supongo que ya de paso saber quien hace las trampas.

- No quería ofenderle, Señor Gerald. Discúlpeme si lo he hecho. Solo..- suspiré profundamente.- ... quiero que me vea como una igual. Nada mas. Compañeros a ser posible. Si me merezco un positivo bien. Si es un negativo perfecto. Supongo que un buen jefe debe valorar las cosas buenas al igual que las malas y, aceptarlas.

-Vaya, ¿Cabreado con el mundo? Cuando. Dígame a ver si puedo subsanar esas rabietas de las que hago gala. -No entendía esa comparación pero estaba dispuesto a escuchar, siempre lo estaba. Y siguió escuchando hasta que hablo sobre conocer a quien hace trampas. -¿Ya sabe quien es? Puede ver por mi tablón que yo no tengo esa astucia. ¿O insinúa que es Jesús? -Nunca se le dio bien entender a las mujeres, ni las razones ocultas en palabras sesgadas.

-Tiene que saber. Tienes que saber Shannon que nadie puede ofender a quien no quiere ser ofendido. Esto es un juego. Si, llanamente un juego de la empresa para quedarse con quien mas escale. Enfadarnos entre nosotros es parte de este juego. Pero si te preocupa mi opinion hacia ti. Despreocúpate, no me sentí molesto por nadie de los presentes hasta el momento. Ni siquiera del psiquiatra sin nombre, pero a veces hay que forzar las cosas para ver hasta donde llegan. Ser algo osco con la gente te muestra mas de ella lo que ella misma querría. ¿Somos colegas? Claro desde luego, después de todos somos hijos de la misma familia. Y competir sanamente es lo que me gustaría. -Devolvió las manos a los bolsillos pues hasta el momento se ayudaba con gestos. -Sinceramente espero que pronto nos toque un trabajo en grupo y ver hasta donde podemos llegar como unión. -Hizo una breve pausa. -Sí hasta con Jesus, si esta aquí sera por algo.

Saqué un cigarrillo de la pitillera y me lo llevé a la boca.- ¿Quiere?- ofrecí uno mientras me lo encendía y soltaba el humo al lado contrario a Gerald para no molestar.

- Puede que solo sea una sensación mía. No me haga caso. He sido educada en un internado ingles, y cada vez que alguien replicaba... bueno, el castigo era duro. - Guardé la pitillera y me crucé de nuevo de brazos mientras me apoyaba en algún sitio ara estar mas cómoda.- Quizá ver a alguien replicar sea lo que me choque.

- No se si será Jesus, pero... no me extrañaría. Aun así, no creo que sea el único.- Me encogí de hombros preguntándome realmente quien mas sería.- ¿Manuel? ¿John? ¿Erik? Cualquiera podría ser. Viktor es calculador, pero no le veo intentando perjudicar a nadie. Y no creo que Nadine se quiera perjudicar a si misma. Hablaré con Ximena e Itziar.

Di una calada y al expulsar el humo mire de reojo a Gerald. Sabía que nuestra conversación terminaría lo que durara el cigarrillo. Tampoco es que yo fuera muy habladora y, salvo temas  laborales, pronto se me acababa la conversación.

- Siento que no adivinara la descripción. Me pareció ...tierno... hacerla como un cuento. Justo lo que usted me inspira.- Admití sonrojándome.- Me refiero a lo de tierno... disculpe el atrevimiento.

Finalmente, se hace demasiado tarde para continuar.