Partida Rol por web

De nuevo la mañana se alza en Austrión y de nuevo un dragón cae victima de la noche. Todos los reconocéis pues hace poco ya lo hizo. Ojos destruidos como la anterior ocasión: Rojo había caído.

Al despertarme y ver a Enywas muerto no puedo evitar llorar por el, pero rápidamente mi tristeza se convierte en ira y me acerco a Kaerie a la que de un empujón tiro al suelo

Esta es la prueba de que Enywas no mentía.

Kaerie, te aseguro que pagarás cara la muerte de Enywas.

Disfruta de tu último día de vida estúpida zorra escamosa, cuando hayas muerto por mi amazona arrancaré tu piel y con ella haré una alfombra en la que dormiré en mi cueva regozijándome cada día de mi vida con tu muerte.

Después me acerco a Murmur y le hablo a el.

No malgastes tu don con esa puta, no llegará a esta noche

Algo no me huele bien...

Sentencio mientras salto desde una columna al suelo. Entonces me interpongo entre el dragón Púrpura y su objetivo y clavo mis ojos en ella.

Cálmate, estás en Austrión y serán las amazonas quienes hagan la justicia pertinente.

Observo de reojo a Rojo y niego con la cabeza.

Mi don y mi objetivo ya ha sido fijado... Y ejecutado. ¿Que es lo que ves? Nada. De eso se trata... No ves la luz como yo lo hago. Y al parecer la luz es incapaz de ver las sombras... Más le vale esforzarse por ver las sombras hoy, o caeremos todos en unas tinieblas eternas.

Dicho esto mis ojos brillan peligrosos.

Falta aún nuestro líder por hablar.

Miro con cara de enfado a Murmur durante unos segundos, después finalmente me decido a contestarle.

Murmur, yo confío en ti, se que no eres un traidor, pero te odio cuando te pones a hablar de esa manera tan mística, ¿tanto te cuesta hablar sin rodeos y decir las cosas claras?. ¿Has malgastado tu don con Kaerie?

He hablado claro, he encontrado a un hermano, pero él no parece haberme encontrado a mí. Ninguno de mis dos hermanos. Dije que no usaría mi don con quien quiere morir, es ridículo.

Sentencio con firmeza. Luego sonrío divertido y su belleza mística me hace entornar la mirada.

No pierdes tu misticismo ni enojada.

Murmur, has vuelto a hablar sin decir nada, recuerdo lo que dijo Devhalos antes, acaso lo has usado con Kurtakis??? es por eso por lo que Devhalos dijo que renacería con más poder.

Por favor, contesta con si o no, no me hables de luces y sombras, solo contesta a la pregunta.

Odio repetirme.

Digo mientras avanzo hacia ella con un paso firme y seguro y dirijo mi mano para ponerla en su mentón y obligarla a mirarme a los ojos durante dos latidos completos sin dejar de enfrentar mi mirada a la suya, con media sonrisa que no quiere decir nada en absoluto, cuando luego hablo despacio.

Dije que no usaría... Mi don... Con quien desea... Morir... Es ridículo...

Tras terminar mis palabras no retiro mi mano y aguardo.

Con un gran rugido que se escucha por todo Asturión el Dragon de Bronce se alza imponentemente, se lanza sin pensarlo sobre el Dragon Purpura, al tomarla por sorpresa queda sobre ella, sin dañarle pero si mirarla a los ojos y mostrandole los dientes...

-NO TOLERARE QUE ME TRATES ASI, YA TE HE AGUANTADO LO SUFICIENTE, HE ACEPTADO TODAS SUS PALABRAS, PERO JAMAS HE DENIGRADO A NADIE CON LAS MIAS, CONTROLATE!!!...SON SOY UNA PUTA, NI TOQUE POR LA NOCHE AL DRAGON ROJO, SI VUELVES A REFERIRTE ASI DE ESA MANERA, OLVIDARE CUAL ES EL MOTIVO DE MI PRESENCIA AQUI Y ME ENFRENTARE A TI, NO ERES SUPERIOR A NADIE....-

Kaerie estaba furiosa, su paciencia se habia acabado...habia bajado la cabeza ante su destino ya decidido por los demas dragones, pero jamas bajaria su orgullo de ser dragona...

Rápidamente me separo del dragón Púrpura al sentir el ataque y me planto, acto segudo, en mi forma humana aún, ante el dragón de Bronce, altivo y orgulloso, justo frente a su hocico y depié ante la dragona Púrpura.

¡CALLA!

La voz resuena casi igual que su rugido.

No estamos aquí para batallar. Al igual que le he dicho a ella: las amazonas harán justicia. Compórtate y no te denigres con tu comportamiento.

- Dile a ella que se calme, he mantenido la compostura y un buen comportamiento y eso no lo puedes negar Murmur, pero no tolerare que ella me trate asi, llora por Enywas, que falsa, me dice puta, y es ella la que anda de dragon en dragon, es ella la que empezo, no yo!...y eso sabes que tengo la razon, yo ya acepte mi destino, pues que me deje tranquila de una vez...- Kaerie estaba enojada...

Sin ningún miedo extiendo mi mano hacia el cuello de la dragona mientras mis ojos continúan clavados en ella.

No retrocedo, me mantego firme mirando a Murmur...sigo enojada, al sentir la mano del Dragon de Sombras me calmo...respiro aliviada... - Ya no le temo a nadie, Murmur...ni a la muerte...asi que dejen de jugar conmigo y de llenarse la boca con mi nombre...- Giro y me alejo del dragon a un sitio mas apartado, ahi me hecho al suelo, mirando a cualquier lugar de Asturión

Inclino la cabeza y miro al dragón Púrpura con dureza.

Pobre Enywas... digo amargamente y pobres todos los dragones caidos por esos malditos traidores.

Me dirijo a Púrpura y a Bronce con tono duro. No estamos aqui para batallar, asi que si teneis acusaciones entonces argumentadlas pacíficamente y dejaos de enzarzaros en dispustas cuando el cuerpo de un dragón venerable se encuentra yaciendo a escasos metros de vosotras. Esto es Austrión y no un corral de gallinas. Creo que tenéis el tesón suficiente para no dejaros provocar por otros y mantener la compostura.

Me acerco a Kaerie y le hablo:

- Eres demasiado estupida, te delataste a ti misma protegiendo a Bicefalo. Ahora pagaras las consecuencias, como él. Y la muerte de Rojo te acusa aun mas.

Rekka se despierta por culpa del alboroto que se habia organizado, al despertar, contempla el cuerpo del dragon rojo en el suelo, inerte. -No... NO NO, NO, NO!!! Enywas NO!!! -corre hacia el cadaver, sabiendo que era ya demasiado tarde. Rekka empieza a llorar desconsoladamente. -Te expusiste demasiado, idiota....

Las miradas acusadoras hacia Kaerie tras la muerte de Enywas se hicieron más incisivas y las discusiones aumentaron de tono.

- Deberíais calmaros- dije mirando a las implicadas- las amazonas harán su cometido, por ello usad la palabra para manifestaros y no os tentéis con la violencia entre vosotras. Mostrad respeto hacia los que han caído injustamente y mostrad voluntad y entrega para encontrar a los traidores, no os dejéis llevad por impulsos.

Seguidamente miré a la dragona Púrpura y dije:

- Todo llega Crisophylax , tranquila, en esta vida nadie se va sin pagar la cuenta - dije -, y en este cónclave, impera ese cometido.

-Murmur, suéltala. Tenemos otras formas de hacerlo, pero no vamos a empezar a atacarnos entre nosotros diréctamente. ¿O vas a acabar con ella aquí y ahora porque no le gusta que la llamen puta cuando el dragón al que ha reconocido amar acaba de morir?

Sólo he llamado a la calma. He posado mi mano en su cuello, y ella se ha marchado... ¿Dónde ves el ataque?

Pregunto mirando al dragón Azul.