Partida Rol por web

El grupo baja a la primera planta y se dirige al bar, allí son recibidos con una sonrisa por el tabernero gnoll y pronto se le unen el grupo de comerciantes humanos. La conversación enseguida gira hacia las mercancías que tienen para vender: equipo variados, armas, drogas de todas las formas y colores, sustancias alquímicas... se ofrecen a mostraros la exposición que cada uno tiene en los puestos que rodean el ring.

Tanto el tabernero como los comerciantes se muestran habladores, dispuestos a hablar de trivialidades o de negocios, sin embargo los bugbears se mantienen en su mesa, callados.

De vez en cuando un grupo de dos a cuatro gnolls de permiso se unen al grupo, bebiendo y comiendo como animales. Mientras están presentes tanto los humanos como el tabernero se muestran más comedidos y respetuosos, como temiendo decir algo que pueda molestar a los recién llegados.

Diegen se mantiene junto a Bethel, alerta a cualquier peligro en las cercanías (lo cual pega bien con su papel de guardaespaldas de todas formas).

El grupo continua en la taberna integrándose en la conversación general, a veces parece que quieren decir algo importante, pero nadie habla...

Bajo la jarra de cerveza y me dirijo al mercader que se sienta cerca - todo eso está muy bien, y quizás me plantee comprarte esa carne de cabra que te sobra, pero antes me interesaría saber como están las cosas por aquí, ya sabes, mejor información, mejores negocios.

- Al llegar sacrificaron a una especie de aventurero en el foso de gladiadores, ¿merodean mucho por aquí? ¿Venía acompañado? Ya se sabe que de aventurero a bandido hay poca diferencia, saquean todo a su paso. ¿Les cazaron por aquí cerca? ¿He de preocuparme de alguna ruta en concreto?

- ¿Quienes son los personajes importantes de por aquí? Ya sabes aquellos a evitar o con quienes hablar para conseguir que se hagan las cosas. Kardswann por supuesto y ¿Quizás ese hombre cabra que vimos al llegar? ¿Tal vez la arpía? ¿Por cierto, que diablos hace una arpía aquí?

- Y ¿Qué hay por el pueblo de interesante? Nos han dicho que evitemos los campos de pesh ¿Sabes por qué?

Los mercaderes parecen cómodos con Bethel.

- No tengo muy claro lo que ocurrió, pero creo que trajeron a tres prisioneros.

- Si, pero el problema por aquí son los gnolls no los aventureros - contesta otro entre risas.

- El hombre cabra es una especie de demonio invocado, es poco más que un esclavo, y no muy listo

- ¿Te gusta la arpía eh? - el que habla da un codazo a Bethel - Olvídala. Es el rollete de Kardswann.

- El pueblo es una ruina, no hay nada que ver. Sobre los campos de pesh... pues hay http://pathfinder.wikia.com/wiki/Peshpesh. Supongo que Kardswann pretende basar la economía de este pueblo en su venta.(*)

¿Y los combates? - preguntó Dorwas - ¿Quiénes combaten? ¿Y cómo funcionan, con apuestas?

- Ahora mismo hay dos combatientes, un ogro que es el jefe de los bugbears de allí - disimuladamente hace un gesto hacia los humanoides que comparten el bar con vosotros - La otra una joven bastante hábil. Solo he visto un combate, pero gano la joven.

- Creo que se odian desde ese combate. - añade otro.

- En cualquier caso se admiten apuestas y la casa se queda con un 10%. Kardswann siempre gana. - dice el tercero sarcastivo.

- La verdad es que la arpía tenía su puntito, pero claro si está con Kardswann - pone cara de resignación - Y esa joven... además de habil ¿es guapa? - las palabras salen de su boca antes casi de pensarlas - podriamos hablar con ella, o con los prisioneros, quizás nos los puedan vender baratos como esclavos - comenta con un tono ligero que no siente, aunque es la única forma que ve de liberarlos y salir vivos.

- Creo que llevo demasiado tiempo en el camino con esta gente, en fin, aunque no haya mujeres por lo menos no es la peor cerveza que he probado - vuelve a llevar la jarra a sus labios.

Entonces, ¿los combates no son a muerte? - pregunta Dorwas extrañado dándole un buen trago a la jarra de cerveza de Diegen. - ¿Con armas romas, entonces?

- ¿Halleen? - pregunta una de los mercaderes mientras da un codazo a otro - Como un tren.

- Quen ma dera morta de sete días e fodida polos cans de sete aldeas - añade otro mercader en la extraña lenguas de los goblins gallaeciens.

- Y esa pequita en la mejilla... - dice el otro suspirando.

- Pero no es una esclava - sigue el primero con tristeza - Es una mujer libre, armada y peligrosa. Los combate no son a muerte, pero son con armas reales. A veces suceden accidentes, y generalmente hay sangre y heridas, pero no se suele rematar a los vencidos.

Y si no es una esclava... Por que lucha en el ring? Lleva mucho tiempo en Kelmarane? Cual es su historia? - Dice Jaali fingiendo inocencia

- Por dinero, claro. Kardswann le paga algo, además de darle comida y alojamiento, pero creo que nada comparado con lo que saca de las apuestas. - contesta uno de los mercaderes.

- Por cierto, vive en el segundo piso, rara vez sale de su celda - dice otro de los mercaderes guiñando un ojo a Bethel.

- Parece una apuesta segura ¿A como se pagan sus victorias? Creo que debería hacerle una visita, además de provechoso parece que las vistas serán buenas - dice guiñando el ojo tras su último comentario.

Dorwas apuró su jarra e hizo un gesto con la cabeza a los mercaderas a modo de agradecimiento mientras se levantaba y se dirigía hacia fuera del recinto que hacía de taberna.

Al de cuatro pasos, se acordó del paripé que estaban haciendo y se quedó quieto, con los brazos cruzados, esperando a Bethel.

Preguntando a algún gnoll no os es difícil alcanzar los aposentos de Halleen en el segundo piso del mercado. La joven espadachina, vive en una sencilla celda, con apenas una cama y una mesa por todo mobiliario. Cuando os ve llegar no parece muy sorprendida y os sonríe.

- Buenos días, he oído que hay gente nueva en el mercado. - dice - ¿Gladiadores?