Partida Rol por web

Aclaro sólo esto que puso Seba.

Cita:

Ustedes no están más alto, está ahí donde dice el tablero de combate, también está el lugar donde está cada uno de los Anaxim, además de las otras criaturas que están en combate.

Dominic observaba como sus ataques no surtieron el efecto deseado.

Esto no funciona. Tenemos que lograr que el dragón baje hasta nosotros o llevar la lucha hasta él.

¿Alguno puede lanzar un volar?, hay que eliminar ese dragón, está desmoralizando a las tropas y no van a ser efectivas. Además de que si lo hacemos las que se desmoralizaran serán las del ejercito orco.

A pesar de todo, volvió a alzar su arco y disparó nuevamente. Era un mosquito golpeando a un rinoceronte, pero si lo molestaba lo suficiente quizás lograse enfurecerlo. Lo cual tampoco tenía que ser algo bueno.

Observo a las máquinas metálicas,que intentan destruis la entrada de la fortaleza,con el único objetivo de abrir,forzósamente,la entrada a la fortaleza..

Está claro que el dragon es la prioridad,pero en cuanto estas máquinas destrocen la entrada,toda la tropa de orcos,van invadirnos,y la situación será peligrosa e incómoda...

Rápidamente,evoco un relámpago zigzagueante,que sale de la palma de mi mano y dirigo al anaxim,más cercano.EL rayo infligue daño por electricidad y,además el mismo rayo principal,describe un arco en dirección a la otra máquina,dañándola,igualmente...

Akin volvió a moverse, buscando de nuevo el ángulo desde el que atacar aquel poderoso constructo. Sus flechas fueron bien orientadas casi todas ellas, aunque aquel enemigo era muy duro... quizás demasiado.

Ahora es tiempo de que los mortales conozcan el poder de los así llamados dioses, criaturas de otros planos con gran poder pero tan mortales como cualquiera, ahora es tiempo que se enfrenten a la furia de quien sin ser un dios es capas de controlar a seres dos veces mas poderosos que él mismo!!!

Súbitamente comienza a formarse un extraño circulo de energía a unos 60 pies delante del clérigo, poco a poco el circulo comienza a crecer hasta alcanzar los 20 pies de diámetro, de pronto de él comienza a surgir un colosal dragón dorado...

La pequeña figura levanto sus delgados brazos hasta el cielo al tiempo que empezaba a entonar una salmonia. Cuando empezó a entonar sus ojos se volvieron negros como el ébano y de una profundidad que ni el mismo Eol donde yacen eternamente las almas que serán castigadas eternamente.

Oh Hécate señora del alfa y el omega
Conocedora de los nombres secretos
Aquella a la cual todas las criaturas sirven y respetan
En tu nombre yo invoco os invoco
que mis palabras crucen los océanos de tiempo
y los espacios infinitos
Para llegar hasta vosotros
!Oh Dioses venid a mi!
Que  los mismos pilares de la creacion se ciernan sobre mis enemigos

Durante un instante se hizo triple silencio. Un primer silencio al dejar el viento de cantar su canción, que parecía que había acompañado cada una de las palabras de Ryo, un segundo silencio al producirse un repentino cese del ruido de la batalla, y por último y mas aterrador un tercer silencio, el mismo mar de fuego que su compañero había lanzado, al igual que la respiración de todo ser viviente alli presente contuvieron el aliento. El resultado fue algo espeluznante e incomodo que Ryo supo que érale aviso de que todo había salido bien.

 Decir que el ser que allí estaba tomando forma, invocado por las poderosas palabras y vínculos a los que la joven Ryo había acudido a invocar en nombre de su diosa, era formado por tierra y roca del tamaño de una torre. A su lado todo parecía pequeño

La figura que se alzaba como un titan sobre un nido de hormigas, parecía formado por a misma montaña.

 Cuando Ryo extendió una mano y señalo los Anaxim  y le dijo acaba con mis enemigos

El poderoso ser pareció entenderla , y se dispuso a hacer lo que Ryo le había pedido

El monolito de fuego, conjurado a partir de una descomunal energia elemental atraída a éste plano por la joven sacerdotisa de Hecate, se arroja con brutalidad sobre uno de los constructos del gñomo.
Los golpes se intercambian y el momento es aprovechado por Fendoriel, el cual arroja un poderoso conjuro eléctrico. Sin embargo, ésta vez la magia de los elementos parece no afectar a la maquina, la cual ni siquiera reacciona a pesar de que sus numerosos sensores parecen haber percibido el rayo.

La descarga, es absorbida por las placas de mithril y de otros extraños metales y materiales, sin afectar al Anaxim.
El otro constructo, descarga sus sierras y cuchillas sobre el monolito de fuego, y a pesar del etereo elemento, algo de su forma material parece ser alcanzado por los poderosos aceros giratorios creados por el gñomo.

El combate prosigue, y las flechas de Dominic alcanzan algunas zonas vulnerables del enorme wyrm. El dragon negro, termina de dar su rodeo, preparándose para lanzar una nueva rociada acida, pero ésta vez sobre las tropas de Ginea, algo más atras de vuestro grupo.

En ese momento, lejos a vuestra derecha, en una zona aun infectada de orcos, comienza a brillar dos luces verdes, alto, varios cientos de metros por encima del ejercito del general Unglar.

Las dos fuentes de luz verde, resplandecieron por un momento hasta que de ambos lugares dos aces de luz se proyectaron hasta pocos metros por debajo, hacia las tropas orcas.
Parecieron chocar contra una barrera invisible antes de tocar el suelo, como si hubiera una pared, al chocar contra esta todo aquel plano se fue iluminando de a poco con un color verde similar al que emanaba del aire, a lo alto. El plano era enorme.
Fue transparente mientras parecía estarse llenando de la luz que lo iba recubriendo, cuando esto terminó se pudo ver una imagen...

Parecia tratarse de un paraiso, digno de los más famosos bardos de la Nueva Tierra. Un mar, limpido y reflejando la luz de un segundo sol, el sol de ésas lejanas tierras, dejaba ver al fondo una playa tan perfecta que casi parecía uno de los cielos de Celestia.
Sobre la playa, podían ver un dragón dorado jóven volando en direccion al portal. La otra, de tamaños agigantados, la lich Nekrhatag con sus guantes chorreando sangre y su aura helada. Aquellos con gran visión pudieron ver que el arquero elfo se daba la vuelta sorprendido al verla.

A espaldas de los dos, podia verse sobre la playa a un elfo. Este ultimo, corria ahora a sumergirse en la espesura, y gritaba y daba ordenes.

En un costado un portal se abrió, por supuesto no era similar a aquella especie de pantalla que se había formado dando lugar a aquellos dos nuevos guerreros.
De ese nuevo portal un gran dragón dorado apareció, algo extrañísimo ya que los dragones no aparecían en la nueva tierra hace muchísimo tiempo. Sólo aquellos dragones negros pertenecientes a los jinetes orcos existían en el plano primario.
La bestia dorada miró al lugar sin entender mucho que sucedía y mirando con odio a su conjurador sin embargo también observó al dragón negro que sobrevolaba la escena.
Allí miró a Akden y gritó.

Malditos mortales metiéndose en nuestro mundo llamándonos sin la autoridad suficiente para hacerlo.

Sin embargo la criatura dio un salto y abrió la alas dirigiéndose al enfrento del gran wyrm negro montura de Kalima.

Yo me ocupo de los Anaxim. -Dijo con esfuerzo, mientras mantenía la concentracion para mantener en este plano al aliado que su diosa le había proporcionado, para derrotar a sus enemigos

Dominic se quedó asombrado muy a su pesar al ver dos dragones dorados. Sí, los elementales eran increibles, pero se suponía que los únicos dragones que quedaban eran los negros.
Cuando observó que uno de ellos se lanzaba contra la bestia voladora que estaba atacando sus filas se dio cuenta de que lo único que haría él sería molestar. Así que se decidió por otro blanco.

¿Alguién puede teletransportarme a aquel edificio? Si además del dragón eliminamos a su jinete les daremos un buen motivo a esos orcos para que se lo piensen dos veces.

Bueno,dejemos que los gigantes se batan,entre ellos...

Pienso al observar las tremendas invocaciones que se han llevado a cabo.Tras escuchar a Dominic,me dirigo hacia él.

Tienes razón,deberíamos encargarnos de Kalima,me preocuoe que se esconda.Como sabrás,puedo utilizar el poder de la magia arcana,para abrir un porta y teleportar,tanto a mi,y a las criaturas que me toquen,hasta un lugar más o menos cercano o conocido.

Digo a Dominic.

SI estás dispuesto,podemos teleportarnos,ya...!...por cierto,a dónde quieres ir,exactamente...

Obervo el edificio que menciona Dominic.

Cuando Fendoriel se le acerca Dominic asiente con la cabeza y sonrie.

Estoy listo. Por lo visto entró en aquel edificio, no sé que andará tramando, pero seguro que no es nada bueno. Me alegro que vengas conmigo, dos lo tendremos más facil para acabar con él.

Dicho esto señala a la edificación que está por detrás del ejercito y tocando al maestro de las espadas deja que le teleporte.

muy bién,si estás preparado vayamos...!

Toco a mi compañero y exclamo:

Dimensio Portal

Inmediatemente,tantyo yo como Dominic,nos trasladamos hasta el edificio*