Partida Rol por web

El Caso de la Granja de Herbs

Capítulo 10. Siguiendo el Hilo.

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09/03/2021, 12:14
Harry Marvin

No tardó demasiado en llegar a la casa de los Marvin a los mandos de aquel flamante y retro descapotable rojo, "el pequeño capricho rojo" de Daeric. Jones, miró la hora, eran las 20:13 horas. Se había pasado de 13 minutos. Llegaba tarde y no le gustaba, pues ante todo, era una mujer metódica y bastante obsesionada con el orden o eso era la menos antes de lo que sucedió con su... hijo.

Fuera como fuera, salió del coche y se aproximó a la entrada y mientras lo hacía se colocó la ropa planchándola con las palmas de la mano. Una vez frente a la puerta, tocó al timbre y se peinó con las manos mirándose en el reflejo del cristal de la puerta de entrada. Momentos después fue Harry Marvin en persona quien le abrió. 

¡Pase, pase, agente Jones, bienvenida! - Le dijo invitándole a pasar y eso hizo ella. ¡Qué remedio! - ¿No ha venido con usted el agente Daeric? - Miró hacia la calle. - No importa, retiraremos un plato. - Concluyó sonriente.

Una vez en el interior de su morada, una casa de familia bien, con el típico mueble lleno de fotografías familiares en la entrada, todo limpio y blanco y bien iluminado, Harry acompañó a Chadrelle al comedor. Allí se encontraba la familia de éste. En el comedor se encontraban dos mujeres, una más joven que Jones identificó como la hija de Harry y otra más veterana, su mujer. La mesa estaba preparada ya y todo listo para empezar a cenar. La cubertería relucía en consonancia con la vajilla de primerísima calidad. Una ensalada muy apetecible presidía la mesa junto a un centro de flores y unas velas, aún apagadas. Un exquisito aroma a carne salía de lo que se presumía como la cocina y una melodía desenfadada sonaba por toda la sala amenizando la velada, que de ser en otras circunstancias, sin duda resultaría muy agradable.

Ellas son mi mujer, Samantha y mi pequela flor, mi hija Elisabeth. - Le presentó a su familia.

      

 

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09/03/2021, 12:20
Samantha Marvin

Encantada, agente Jones. - Le dijo la esposa de Marvin. - Espero que le guste nuestra casa y se sienta cómoda. Y espero que le guste la cena. Hemos preparado cordero al horno. ¿Le gusta? - Sonrió. - Marvin no suele tener invitados, pero nos ha contado que es usted una colega suya de la OFI y que trabaja en el caso de la pobre hija de los Penwtaer. ¡Que tragedia! Usted estará acostumbrada a ese tipo de sucesos, pero por aquí... - Negó con la cabeza. - No suelen suceder este tipo de escabrosos asuntos. ¡No señor! - Saltó como un resorte pero sin moverse del sitio. - ¡Ooooh, pero que descortés! - Exclamó aquella mujer. - ¡Pase, pase y tome asiento! - Entonces miró a su hija, le hizo un gesto con la cabeza señalando a Jones. - Eli, saluda...

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09/03/2021, 12:25
Elisabeth Marvin

Buenas noches... - Dijo secamente. Su madre le devolvió una mirada reprobatoria. - Espero que esté todo a su gusto agente Jones. ¡Sería una tragedia que no lo estuviera! - Miró a su madre con una sonrisa más falsa que una moneda con la cara del payaso Rolando del McBurger en su dorso. - ¿Verdad, madre? - Y acto seguido se sentó en una de la sillas que rodeaban la mesa, más bien preparada para una cena navideña que para una informal, como era el caso.

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09/03/2021, 13:34
Chandrelle Jones

Por mucho que hubiera pensado en aquella cena, no resultaba más sencillo. Sabía que de alguna manera, había sido algo impuesto y que la joven con la cual quería hablar era la hija de un colega, a la vez que parte más que implicada. Debía recordarme a mí misma que estaba de servicio, aunque no lo pareciera.

Nada más abrir la puerta, procuré sonreír relajada. No lo estaba, y no solo porque no me sintiese tranquila, sino porque todavía arrastraba demasiadas secuencias de asociabilidad como para estar cómoda en una cena con otras personas.

-Muchas gracias. No, no ha venido. Tenía... otras cosas que hacer -dije, sin dar más explicaciones. Daba la sensación de que el agente Marvin me trataba como una conocida, y eso me hacía sentir todavía más incómoda.

Caminé detrás de él y observé lo que sin duda era un hogar para aquel hombre, y por consiguiente, suponía, para su esposa y su hija. Marvin había quedado afectado por la muerte de Marie pero aún no sabía cómo lo estarían llevando ellas.

-Mucho gusto, señora. Encantada. Gracias por haberme invitado -respondí, igualando tanto el formalismo del saludo -. Es una casa encantadora. Claro. Seguro que además lo ha preparado estupendamente.

Lo cierto es que no me apetecía para nada tomar una comida tan copiosa, pero no iba a mostrarme apesadumbrada ni tampoco reacia a cenar, sobre todo después de todas las molestias que se habían tomado. Tendría que hacerle sitio a todo aquello como pudiera.

-En efecto. Estamos investigando el caso de Marie, pero yo no... -la mujer hablaba mucho y muy deprisa y no me dejó terminar de hablar, así que simplemente, decidí callarme y esperar.

Cuando estaba a punto de sentarme, insistió a su hija para que me saludase. La joven no parecía estar demasiado a gusto con aquella representación, que era lo que sin duda parecía la cena. Intenté mostrarme tranquila y solo asentí con la cabeza, antes de terminar de tomar asiento.

-No hacía falta que se tomasen tantas molestias. Estoy acostumbrada a comidas más... sencillas, mientras estoy trabajando -les dije, haciendo hincapié en que estaba trabajando. Había ido para hablar con la joven Elisabeth, y no para crear lazos. Me quedé un instante mirando a la madre y la hija, intentando distinguir algo en ellas, aparte de la incomodidad de que yo estuviese allí.

Alguien se había tomado demasiadas molestias para hacerme sentir cómoda, la madre, y alguien estaba incómoda con aquello, la hija, mientras el marido parecía mostrarse ausente a todo ello y simplemente era como si aquello fuese la mejor muestra de atender a una colega.

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10/03/2021, 01:59
Harry Marvin

- Molestia ninguna, Chandrelle... - Intervino entonces Harry. - ¿Puedo tutearla? - Sonrió. - ¿Estamos entre amigos, verdad?

Pronto se sentaron a cenar. Además de la ensalada, había algunos aperitivos preparados sobre una bandeja. Unos pequeños panecillitos con queso de untar, así como otros con salmón y otros con ensalada de cangrejo. Samantha le ofreció a Chandrelle y luego se sirvió ella misma. Fue así como empezaron a comer, aunque Elisabeth estaba más pendiente de su teléfono móvil que de la comida o de la conversación que tenía lugar entre los más mayores, que de momento era sobre temas banales y no sobre el motivo que les había reunido allí esa noche.

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10/03/2021, 02:06
Samantha Marvin

Y dígame agente Jones, ¿suele dedicarse siempre a este tipo de casos? - Preguntó Samantha con un falso interés por el trabajo de su invitada. - Me refiero a que si siempre está detrás de casos tan escabrosos como éste. ¡Debe ser un trabajo horrible! - Se tapó la boca, pues estaba hablando mientras masticaba y casi se le escapó un trozo de pan con ensalada de cangrejo. - Perdón... - Dijo entonces.

Chandrelle observó como Harry miraba a su mujer con cierta reprobación, aunque no sabía muy bien si en realidad era por la pregunta inadecuada que acababa de formular o por haberla hecho con la boca llena. Fuera como fuera y aunque sus anfitriones trataban de que la velada se desarrollara con normalidad, estaba siendo todo un poco extraño e incómodo.

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10/03/2021, 13:30
Chandrelle Jones

La confianza que estaba mostrando conmigo no era en absoluto la que había esperado. En nuestra entrevista con el agente Marvin, me había parecido angustiado con el caso y la situación, y para nada dispuesto a mostrarse tan tranquilo. Ahora, en cambio, mostraba una familiaridad inesperada.

No me molestaba que me tuteara, pero no era esa la cuestión, sino el cambio de actitud. No dije nada y fiel a mi habitual estilo, asentí en silencio y me senté para comer.

Permití que me trataran como si fuese una invitada de lujo, aunque yo no lo fuese, y mientras observaba tanto el exceso de sus atenciones como la actitud de su hija, que era con quien me interesaba hablar, más que otra cosa, o al menos así fue hasta que su esposa reanudó la conversación en relación al caso.

-No ha sido la primera vez, pero todos los casos que envuelven asesinatos lo son. Nadie espera que su vida se termine antes de tiempo y son muchos los que se ven afectados por ello. No se trata de que sea escabroso o no, sino de una familia rota a causa de la muerte de una hija, y de otra familia que se verá afectada si finalmente, el asesino forma parte de ella.

Entonces, miré a Elisabeth.

-Su hija debe entender de lo que estoy hablando, puesto que era amiga suya. A ella también ha debido afectarle.

Sabía que con eso, podía ocasionar un pequeño terremoto en la cena, pero era justo lo que necesitaba, salir de aquella mesa y disponer de un momento a solas con la hija. 

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10/03/2021, 16:04
Elisabeth Marvin

- Si... - Respondió secamente la muchacha. - ¿Sabe? No me siento cómoda hablando así de Marie... - Negó con la cabeza y miró todo lo que había preparado sobre la mesa. Luego miró con desaprobación a su padre y a su madre. A punto estuvo de decir algo, pero finalmente guardó silencio. - ¡Qué mierda! - Masculló para si misma.

Era evidente desde que había entrado por la puerta la agente Jones, que a aquella joven no le parecía bien aquella cena. Realmente, una conversación amena entre una adolescente que acababa de perder a una amiga al haber sido asesinada, delante de sus padres y frente a una cena de gala, con una agente de la OFI, no parecía ser el plan que alguien quería para pasar una agradable velada. 

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10/03/2021, 16:10
Samantha Marvin

- ¡Oye! - Exclamó Samantha al escuchar los inapropiados cuchicheos de su hija. - ¿Qué te has creído? ¡Eres una niñata engreída! ¿Me oyes? 

Saltó la chispa. Samantha miró a Jones pidiéndole disculpas con la mirada, luego miró a Harry, su marido, pidiendo que tomara cartas en el asunto, se evidenciaba que aquella mujer era una adicta del control y que en esos momentos, al espera perdiéndolo, se sentía superada, incómoda y traicionada por su propia hija.

Disculpe, yo... - Le dijo a la agente Jones. - ¡Harry! - Exclamó. - ¡Dile algo a la niña!

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10/03/2021, 16:14
Harry Marvin

Pero Harry no parecía estar para reprimendas de ningún tipo. Permanecía sentado en su silla, sereno, con la mirada en la mesa. Se estaba limpiando los labios con una servilleta de tela y no dijo nada ante la desmesurada reacción de su hija y menos aún tras la reprimenda que le había lanzado su madre. Sólo reaccionó cuando Samantha le interpeló. Entonces alzó la mirada y la clavó sobre Elisabeth.

Eli, cariño... - Dijo con tono calmo. - ¿Porqué no te sirves un poco de ensalada? - Sorprendió a todos con aquella reacción. Más cuando se puso en pie, agarró la fuente de ensalada y las pinzas y le sirvió un poco de ensalada a su hija.

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10/03/2021, 16:17
Elisabeth Marvin

- ¡No quiero puta ensalada, papá! - Exclamó con el rostro congestionado y enrojecido. - ¿Por qué cojones no reaccionas, papá? ¿Es que no tienes sangre en las malditas venas? - Elisabeth se puso en pie. - ¡Siempre el mismo paripé! ¿Somos una familia feliz, verdad? - Alzó la voz con aquella pregunta, pero no esperó respuesta alguna, pues ella misma tenía la clave y la iba a dar. - ¡Quizás por eso mamá se va cada puto sábado a su club de lectura y se tira a ese John! - Aquello hizo que la madre de Elisabeth rompiera una copa. Estaba furiosa, muy furiosa y apretaba los dientes y los puños y pese a que se había cortado y salía sangre de su mano, ni se había dado cuenta. - ¡Y tú papá! ¡Te quiero, pero estoy hasta las narices de ver que te están faltando al respeto y no haces nada! ¿Sabes que no siempre borras el maldito historial del ordenador? ¡En vez de cascártela como un mono, podrías coger a mamá y darle un buen viaje a ver si se olvida de ese niñato! - Miró entonces a la agente de la OFI y resopló. - Siento que haya tenido que presenciar este espectáculo. - Y tras decir aquello se marchó corriendo camino de su cuarto.

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10/03/2021, 16:23
Samantha Marvin

¡Maldita niñata desagradecida! - Gritó Samantha. - ¿Pero quién te has creído que eres? ¿Quién te ha metido toda esa mierda en la boca? - Señaló a Elisabeth en un par de ocasiones. Tenía algo que decir, pero no le salían las palabras y cuando su hija le dio la espalda y se marchó, Samantha estaba tan roja como un tomate y llena de ira asesina. - ¡Aaaaaaah! - Gritó de desesperación, estaba fuera de si. Incluso su peinado perfecto hasta ese preciso momento, había enloquecido. - ¡Harry! ¿Qué piensas hacer? ¿Vas a quedarte ahí sentado? ¿Has visto lo que ha dicho la zorra de tu hija?

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10/03/2021, 16:26
Harry Marvin

Pero Harry tan solo sonreía divertido con la ensaladera en la mano. Sirvió una buena cantidad en el plato de su mujer y luego tiró el resto sobre la mesa. Estalló entonces en una carcajada sin precedentes. Miró a su mujer y se encogió de hombros.

¿Y qué quieres que haga, esposa mía? - Le preguntó a Samantha. - ¿Censurar a mi hija por decir la jodida realidad de lo que pasa? - Negó con la cabeza. - Creo que no, cariño. - Se sentó, se puso la servilleta al cuello y agarró cuchillo y tenedor. - ¿Por qué no traes el cordero, cariño? No me gustaría que se pasara. Tenemos invitados. - Y entonces le guiñó un ojo a Chandrelle.

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10/03/2021, 19:26
Chandrelle Jones

Ahora entendía la situación, y también aquella cena. Deseaban aparentar una situación idílica que no existía, como en muchas otras familias, y aquella niña no solo lo sabía, sino que se había dado cuenta, sobre todo después de la muerte de su amiga, que la vida no era como la pintaban.

Pero por otro lado, había logrado lo que quería, ni más ni menos que romper aquella situación anómala y totalmente fútil para mí. La marcha de Elisabeth me iba a permitir hacer mi trabajo, además de alejarme de aquella pobre gente que ya tenía suficientes problemas.

Así que me limpié educadamente los labios, separé un poco mi asiento y me puse en pie.

-Debo pedirles disculpas. Ignoraba que mi presencia iba a resultar una molesta para ustedes, teniendo en cuenta todo el trabajo que se han tomado para preparar la cena. En cualquier caso, yo no soy quien para juzgar a nadie, porque todos tenemos nuestros problemas y las vidas que llevamos no son lo que quisiéramos. Si me lo permiten, me gustaría hablar con su hija. Es obvio que necesita a alguien con quien hablar y quizás pueda hacerlo conmigo. Yo también he sido adolescente.

Miré a Samantha, después a Marvin, y esperé a que me lo permitieran para ir en su busca. Quizás no sacase nada en claro de ella, pero mucho menos iba a conseguir quedándome allí sentada a la mesa.

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11/03/2021, 01:56
Narrador

Harry asintió con la cabeza, dando implícitamente permiso a Jones para que fuera hasta la habitación de su hija a hablar con ella. Samantha, se puede decir que ni tan siquiera escuchó a la agente, centrada como estaba en las feas palabras, por muy verdad que fueran, que había soltado su hija. Lo que menos le importaba en esos momentos era la agente Jones. Tan solo se ocupaba en que aquella fachada en la cual se había refugiada, siguiera estando allí sin fisuras y aunque ya estaba completamente destruida por la bola de demolición que había sido su hija, ella se empeñaba en volver a levantarla y aunque todos supieran la verdad, trataría de ignorarla para seguir guardando las malditas apariencias. Básicamente lo que llevaban haciendo los últimos años.

Tan absorta en conservar su propia mentira estaba la madre de aquella familia, que ni tan siquiera se giró cuando Chandrelle abandonó la habitación. Harry tampoco le hacía demasiado caso a su mujer, la cual no siguió su consejo y no fue a por el cordero a la cocina. Entonces fue él quien se levantó y fue en busca del plato principal de la cena. Realmente tenía hambre y aunque Samantha comenzó a gritar improperios sin sentido, pues se sentía del todo ignorada, Harry no cesó en su empeño por evitar que la carne acabara carbonizada. 

Las voces de ambos se perdieron en el interior de la cocina. La de ella soltando improperios, la de él hablando de la carne. Y es que ya le importaba más bien poco su matrimonio. Su hija le había abierto los ojos y aunque quería a su mujer, ya no la amaba como antes. Que se la estuviera pegando con el tal John tenía mucho que ver, aunque Harry en el fondo sabía que lo suyo había muerto mucho antes de que su mujer se liara con un hombre bastante más joven que él y con el vigor a flor de piel. Vería que haría mañana, pero por lo que respectaba a esa noche, iba a comer un plato de ese jodido cordero y  no iba a escuchar a la histérica de su mujer por mucho que gritase...

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11/03/2021, 02:05
Elisabeth Marvin

El cuarto de Elisabeth era el típico cuarto de una adolescente salvo porque estaba muy ordenado. Se notaba que Elisabeth era una chica bastante centrada pese a la locura de familia en la que le había tocado vivir. Ya no había posters de cantantes y chicos guapos en la pared. Esa etapa había pasado hacía tiempo, ya no era una niña y de hecho, ya era mayor de edad, como también lo era Marie en el momento en que fue asesinada. Aunque todavía vivía bajo el techo de sus padres y no había acabado de madurar, lo mismo que le había pasado a su amiga Maríe.

Siento el espectáculo. - Dijo con media sonrisa en el rostro. - Es que... - Chasqueó la lengua. - ...llevaba tiempo queriendo decirles eso y hoy, con toda la tontería de la cena... - Resopló. - He acabado por explotar. - Miró fijamente a la agente por unos momentos. - Y bien, supongo que no ha venido aquí a probar el cordero. Aunque le recomiendo que lo pruebe antes de marcharse. Si algo hace bien mi madre es cocinar. ¿Qué es lo que quiere saber exactamente?

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11/03/2021, 12:47
Chandrelle Jones

Dejé a la familia Marvin arreglando, o más bien ignorando, sus propios problemas, y subí al dormitorio de Elisabeth. No me costó demasiado localizarlo por el cartel que tenía en la puerta, con su nombre coloreado y decorado de manera infantil, sin duda el recuerdo de otra épica, así que me acerqué y llamé con suavidad antes de abrir la puerta.

La pobre chica se disculpó nada más entrar.

-No te preocupes. Es comprensible. La verdad es que el único motivo para venir esta noche ha sido poder hablar contigo. Así se lo dije a tu padre. Quería que me hablaras sobre Marie; qué hacía, con quién iba, y cualquier cosa que sepas. Ya hay bastantes cosas que sabemos, pero no las suficientes, y no voy... no vamos a permitir que su muerte se quede en el olvido.

Para mí, aquel caso se estaba convirtiendo en una oportunidad para al menos, hacer pagar al culpable de acabar, no solo con Marie, sino con su familia. Quizás la mía estuviese rota, pero si podía llevar la paz a otras, me sentiría más tranquila y podría aceptar que al menos, gracias a mi trabajo, conseguía algo que sirvisie.

-Cualquier cosa que recuerdes puede ser importante, como por dónde salía y a qué horas, gente extraña que vieses, comentarios... lo que sea.

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11/03/2021, 16:05
Elisabeth Marvin

Si quiere que le diga la verdad, no nos veíamos mucho últimamente. - Comentó Elisabeth. - Fuimos muy amigas hace unos años, uña y carne como se dice, pero a raíz de que empezó a cambiar la cosa fue a peor. - Chasqueó la lengua. - Ella empezó a salir con chicos, ¿sabe? Por alguna razón ella les gustaba a todos. - Tragó saliva y bajó la mirada. - Yo en parte le tenía envidia. Ahora lo sé. - Resopló. - Empecé a hablar un poco mal de ella... - Su voz empezó a entrecortare en ese punto. - Ahora me arrepiento. Muchos de los rumores sobre que era ligera... - Una lágrima recorrió su mejilla. - ...fueron cosecha mía. Creo que nunca lo supo, pero lo peor era que cuanto más se decían cosas malas de ella, más se iba con chicos. Creo que eso la mató, ¿sabe? Si no... ¿Por qué iba a estar sola por la carretera? - Ahora si empezó a llorar. - ¡Joder, ahora la echo un montón de menos! ¡No puede estar con ella por los putos celos! - Abrió un cajón y sacó una foto en la que salían ella y Marie y se la enseñó a Jones. Ya tenía algunos años, pero aunque eran casi niñas, se las reconocía fácilmente y parecían estar muy bien juntas. - Yo estaba enamorada de Johnny desde pequeños y ella me lo quitó. - Desveló finalmente. - Ese fue el verdadero motivo de mis celos. Eso y que ya no tenía tiempo para mi. Había perdido al chico de mis sueños y a mi mejor amiga. - Chasqueó la lengua. - Aunque eso no justifica que cuando Johnny quiso dejarla ella se lo impidiera. Le amenazó con denunciarle por malos tratos y creo que hasta fue a hablar con la policía de eso. Johnny estaba muy asustado. Me pidió consejo y cuando además apareció muerta, se quedó blanco. Aún sentía algo por ella y claro que le supo mal, pero enseguida empezó a creer que todas las sospechas irían contra él. Y estoy segurísima de que no le haría daño a nadie. Johnny es un buen chico... - Sollozó. - Se lo aseguro.

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11/03/2021, 19:14
Chandrelle Jones

La situación que estaba viviendo Elisabeth no era muy distinta a la que yo tenía. Lo que en verdad estaba destruyéndola por dentro no era la pérdida de su amiga, al menos, no todavía, sino el dolor a causa de la culpa. Por mucho que yo me repitiese a mí misma que la pérdida de mi hijo no era responsabilidad mía, no podía evitar pensar que me había descuidado y que de haber estado más encima, todavía estaría a mi lado.

En el caso de Elisabeth, debido a sus comentarios, a causa de los celos, tal y como me había explicado, había roto una fuerte amistad y debido a como había terminado todo, era inevitable o casi inevitable que se sintiese culpable. Podía haber estado a su lado en lugar de dejarla sola; podía haber salido con ella, haberla apoyado, o haber intentado que cambiase sus costumbres, pero había escogido hacerle daño y eso ahora le estaba pasando factura.

Era la culpa lo que la corroía.

-Elisabeth, tú no has hecho nada que miles de chicas no hicieran antes. Muchas chicas se pelean por sus novios o amigas, discuten, se hacen daño, hablan mal delante de otras personas... y nada de eso importa cuando llega la hora de la verdad, porque tengo muy claro que vuestra amistad era mucho más profunda que la de la mayoría. Estoy bastante segura de que tarde o temprano, tú la habrías llamado a ella, o ella a ti, para preguntar algo, pedirle ayuda con cualquier cosa, desahogarse o lo que fuera, que habríais quedado y hablado de los viejos tiempos, y os habríais dado cuenta de lo mucho que os queríais. También esto segura de que ella te quería y sabía que tú la querías a ella, y de ahí todo lo que hacíais a causa de la otra. Nadie habla mal de alguien que no te importa, Elisabeth. O la odias porque ha hecho algo que de verdad no puedes soportar, o la quieres, y me parece que en vuestro caso, no era lo segundo sino lo primero. Pero hay un asesino ahí fuera que no os ha permitido daros cuenta de todo esto, que os ha quitado la oportunidad de hablar y recuperar lo que habíais perdido y que ha hecho que otras personas, como sus padres, el mismo Jonathan, o tú misma, estén muy mal. Sé que Jonathan es inocente. Solo estuvo en el momento inadecuado en el lugar menos oportuno, pero con lo que sabe, y con lo que todos podáis decirnos, podremos atrapar a ese asesino. Porque voy a cogerle, ¿me oyes? No me marcharé de aquí sin saber quién es y acabar con él, para que no haga daño a nadie más.

Sin darme cuenta, la abracé para intentar que terminara de desahogarse. Quizás no sacar nada en claro de aquella visita, salvo la seguridad de que Marie era una chica como cualquier otra, que se había cruzado en el camino de un asesino al que ojalá no tardásemos en atrapar.

-Escucha. Hablamos con Peter y dentro de poco también lo haremos con Jonathan. En estos momentos está en la comisaría. Estoy segura de que solo fueron testigos y poco a poco vamos obteniendo más información.  ¿Te suena el nombre de Chester Barns?

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12/03/2021, 02:35
Elisabeth Marvin

¿Chestar Barns? - Se mantuvo pensativa unos instantes. - ¿Debería sonarme? - Negó con la cabeza. - No, creo que no le conozco. Igual mi padre sabe quien es. Él conoce a todo el mundo por su trabajo. - Sonrió. - Cuando vamos al centro comercial a hacer la compra, cada pocos metros se tiene que parar a saludar a alguien. Si me pasara lo mismo a mi, acabaría agobiada, estoy segura, pero él... - Meneó la cabeza de lado a lado con expresión divertida. - Él lo lleva con mucha naturalidad. A veces mi madre se enfada, porque para ir a comprar cuatro cosas, se pasan dos horas en el supermercado. Es lo que tiene trabajar en un pueblo como Sanrs, que después de tantos años de servicio, acaba conociendo a todo el mundo... - Chasqueó la lengua y bajó la mirada unos instantes. - Siento no serle de mucha ayuda agente... - Le dijo muy sinceramente. - Me gustaría poder ayudarle más, pero... - Se encogió de hombros. - Como dice mi padre: es lo quen hay.