Partida Rol por web

Grrrrrr- Me acerco a la niña decapitada y me refriego en su falda, muevo la colita y me siento un momento - WAY! - Oh no, ganas de saltar.... - SAlto lejos y me guelgo del techo mientras grito - WWWWWWWAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA

Henry Beardman Jones se atusa un poco la melena y aclara la voz para hablar.

- A mi lo que me parece es que los vivos son esos que no paran de acusarse unos a otros... Eso crea confusión y nos impide organizarnos para la invocación. Y en cualquier caso, creo que lo que habría que hacer es dejarse de tanta historia y trabajar más en la invocación y descubrir por nuestra cuenta quien puede estar detrás de esto. Acusándonos solo crearemos desconfianza, y nos acabaremos linchando incluso cuando no toque hacerlo, lo cual dificultará la labor que estamos llevando a cabo... Personalmente, creo que es mejor lavar los trapos sucios en privado y votar cuando toque. Además, y aunque suene cruel, a costa de nuestros compañeros o incluso de nosotros mismos, acabarán cayendo por su propio peso, pues no se van a matar entre ellos, y al final de todo iremos viendo quienes van quedando y podremos deducir quienes son por su forma de proceder en los votos... ¿No lo creeis? Tengamos la fiesta en paz por el momento, calmémonos, y sigamos con nuestro trabajo y comiendo cerebros.

Contestó a la pregunta de su amiga Heidi.

-Alguien ha matado a la enfermera. Le han hecho bailar o algo así. De veras se han ensañado con ella. Con lo maja que parecía.

La chiquilla tuvo que dejar de hablar cuando Hunter se refriega en ella y hace cosas raras.

-¿Que hacés, loco? No tengo comida ni nada para darte.

Pero Hunter saltó y se fue, igual que vino. Después de eso un señor con sombrero decía que lo mejor era esperar para atrapar a los malos.

-Pero señor, no creo que esperar a que muera gente para que sea más fácil detenerlos como vos dices sea lo correcto. Y menos aún para los que mueran (otra vez) por no haber hecho nosotros nada. Dialogar puede confundir a la vez que ayudar. Pero esperar a que se arreglen solo las cosas es peligroso.

Caminando por la calle dando tumbos, sin ir a ninguna parte, por que no sabia a donde ir, sin pensar en nada por que los zombies no piensan. Llego a una plaza donde un tio con un sombrero de copa. le gritaba al poblazombicion.

Se quedo atento, recordando que si ese zombie era capaz de hablar, era por que otros eran capaces de oir.

- Que duro es esto de estar muerto -

No muy lejos, una joven mocosa sin cabeza, le rebatia los argumentos, pero ese "hombre" parecia convencido de sus palabras.

- A ver que dice...  -

a mi...los vivos...organizarnos... creo.. estar detras de...

le costaba pero poco a poco comprendio sus palabras. Era el vivo que estaba detras de todo el asunto!!

Ya-aagh deja de vigilar a Elizabeth Bennet un momento por las palabras de Henry Beardman Jones, incluso para su dañado cerebro lo que acaba de decir es una tonteria de proporciones cósmicas, ¿entonces dejan que los maten a todos y los que sobrevivan seran los vivos?¿eso es un plan?

Del pecho como un barril del zombie empieza a salir un gruñido bajo mientras mira al zombie del sombrero, lo que dice es lo que dirian los vivos infiltrados, que no investigasen ni hagan nada mientras les matan

-hambre-

El talante pausado y reflexivo de Vincent se desestabiliza un poco con los últimos acontecimientos. Ya estamos como la otra vez ... piensa, resignado. Han matado ("¿matado?") a la enfermera; una pena porque era de las que estaba por la labor de la invocación repartiendo estimulantes para hacer más llevadera la faena. Ya ha comenzado el desorden y el toma y daca de acusaciones y Vincent se vé perdido en medio de ese barullo. Se acerca al zombi gigantón, visiblemente afectado por la desaparición de Celeste y le dice:

- Vamos grandullón, acompáñame. Un paseo te irá bien.

Vincent va señalando las lápidas de los que se han levantando y Ya-aagh las va recogiendo con sus manotas. Cuando las han recopilado todas, Vincent pasa lista y le entrega a cada zombi la suya.

Ahora ya estamos identificados, piensa, más tranquilo al haber puesto un poco de orden.

Y ahora, ¿a quién elijo? Los mira a todos y reflexiona sobre los comentarios que ha estado escuchando: Sí, estoy de acuerdo; alguien que esté intentando pasar desapercibido, que no haya mostrado mucho interés ni en el ritual ni en la comilona del guarda ...

Entonces el veterano cultista vé asomar unos pies de alguien que está oculto bajo la gran tela de un paracaídas. Sonríe malévolamente. La venganza es un plato que se come frío.

- Yo no digo que nos quedemos de brazos cruzados y no investiguemos, si no que no hagamos acusaciones prematuras que no consiguen otra cosa que volvernos los unos contra los otros y crear confusión, que es justamente lo que quieren los infiltrados... ¿No veis que nos acabaremos linchando entre nosotros mismos fuera de momento y lugar y ellos acabarán alzandose con la victoria? Lo más lógico es que cada quien investigue por su cuenta, y que no creemos cizaña entre nosotros, pues es justamente lo que estos vivos desean.

Hablo prudentemente para que no se malinterpreten mis palabras, pues lo último que deseo es que se vuelvan todos contra mí, aun quiero conservar mi no-vida.

La joven Elizabeth Bennet, educada en etiqueta zombi, había permanecido callada todo el tiempo, debido a que hasta que no le dieran permiso, no podría hablar. Pero en cuanto algunos de aquellos muertos empezaron a acusarla, se asustó y tuvo que hablar... al menos para defenderse.

- Ay, pero si yo no he hecho nada... nadie me había dado permiso para hablar... ¿si no he abierto la boca en todo el tiempo como voy a ser yo una infiltrada? He estado aquí a todas horas, lo que pasa es que mi buena educación hace que pase desapercibida...

Ya-aagh sopesa su lápida, los signos sobre ella son bastante incomprensibles y hace diversas caras raras mientras intenta en vano descifrarlos, al cabo de un rato se aburre de ella y la deja caer al suelo con estrépito, la tal Elizabeth se ha decidido a hablar, seguramente sintiendo peligrar su existencia, y Ya-aagh se inclina hacia ella de nuevo, aunque esta vez ya no esta tan seguro como antes, la olfatea, gruñe con duda y finalmente dice de forma mas o menos amable

-hambre-

El zombitubie no entendía por qué el señor de galera lo señalaba a él. Y por qué los demás se acusaban de ser unos vivos bailarines o bailarines vivos, algo que no captó tampoco. Después del atracón de cerebro del vigilante del cementerio, había vuelto a ser un simple zombie aniñado que poco entendía de las acciones de los mayores.

Después de observar un rato y ver que las acusaciones seguían, comprendió como venía la mano. Esto era parte de un juego, sí, un juego que tenía que ver con el círculo que había cavado el doctor vegetariano y con una actuación horrorosa que interpretaría el tío de las gafas y el otro muñeco.

-YO TAMBIÉN QUIEDO JUGAR... ESE, ESE... ¡ESE SEGUDO QUE ES EL BAILADIN!- aplaudiendo y dando saltitos señaló a José Braineater.

-A..  mi... no... gustar... ni... Bonta-kun... ni... muñeco... marica.... Pero me decanto por el teletubbie "supuestamente" llegado de la muerte, le votaré... a... el

Z estaba sentado en una de las lápidas cerca de donde habían encontrado a Celeste. Escuchaba con atención lo que decían todos sus compañeros, intentando descubrir un error, buscando un patinazo, alguna pista que le dijera quienes eran los vivos. Lo que estaba claro era que no se iba a quedar quieto viendo como iban matando a los zombies, porque entonces le llegaría el turno a él, tarde o temprano.

Es verdad lo de los muñecos... es más fácil esconderse dentro de uno de ellos. Por otra parte, Aquí hay gente que solo ha aparecido cuando se les ha acusado, y luego hay algunos que no tienen el más mínimo sentido de camaradería entre zombies.-..

Y en estas complicadas elucubraciones estaba el trozo de cerebro que le quedaba a Z mientras a su alrededor nadie se ponía de acuerdo.

Dejó de bailar al ver que todos fueron al mismo sitio, allí encontró a la enfermera desmenbrada. Aprovecho un poco la confusion y te adueño de una de las magnificas piernas de la zombie, con su pala la pico en varios pedazos y luego la golpeo hasta crear una masa de sangre coagulada y carne putrefacta, la tomo con la pala y se fue silvando rumbo a su cultivo.

-"No es de buena calidad, pero servirá mientras consigo un buen vivo"- Tatarareaba el Asereje con alegria. Luego de regar el impovisado abono donde antes habia esparcido las semillas, regresó para encontrar a JW hablando.

Sin poder evitarlo volvio a golperlo con la pala, salpicando a varios de restos de Celeste que estabán pegados a la pala.

Las drogas de Celeste eran buenas, o sus extremidades muy malas, claro que eso no era posible porque mas de las tercera parte de ellas eran inglesas, sea como sea, tardo mucho en levantarse tanto que apenas lamió el pie desnudo de alguno de los vivos de esa noche. Y cuando quiso hablar de nuevo con la Zombermera, esta había sido despedazada y esparcida por su tumba, de tener un estomago intacto ahora este estaría en el suelo junto con lo lamido la noche anterior. Algo estaba pasando y ese vampiro con aires de actorucho amerricano lo habia confirmado.
-Genial... Cuando estaba vivo acabe muerto por culpa de los zombies que invadían el supermercado y se nos llevaba cada noche. ¿Y ahora que soy un zombie vienen los vivos a matarme de nuevo? ¡Pero que le he echo al de arriba para que me trate tan mal! ¡Si soy ingles maldita sea!

Yuzeppe se paseo indeciso mientras miraba a sus "compañeros" hasta que vio al zombiejo de cara verde y recordó sus palabras:

Cita:

-AJA! Puede que si me uno ha esos que quieren despertar a otro ser... ¡SI! Seguro que mi suerte cambia si cambio al tío de arriba, seguro que me ayuda. ¡JA! ¡Jostidaite!-Clamo al cielo, miro a un lado y a otro y al cerciorarse de que no estaba su hijo; ninguna de sus dos versiones, hizo un corte de mangas a una nube sospechosa.-Ahora te vas a enterar, ¡Nadie jode a un ingles!

-¡Zeñor! Compañero pútrido en que puedo ayudar...-Le pregunto a Vicent.-A! y creo que tengo un posible sospechoso de vivo... se ha fijado en ese gigante que solo pronuncia hambre por aquí, hambre por allá... como si tuviera cinco estómagos. ¡BIEN! ¿Y si los humanos esos están escondidos todos dentro de uno de nosotros? Ese zombigante bien podría ser CINCO humanos...

SAlto sobre bota kun y lo muerdo sarandeandolo de lado a la do - GRRRRRRR - Huele a disfraz! - WAAAAAAAA

 Al escuchar que le nombran Ya-aagh se acerca a donde esta Vicente D.B. y el zombie ese que huele a fango de rio, escucha las tonterias del ingles y gruñe enseñando sus dientes amarillentos y negros, luego se arranca los harapos que lleva encima quedando vestido únicamente con una especie de taparrabos que cubre lo justo para que la partida siga siendo para todos los públicos (tripas y desmembramiento si, desnudos no), luego se da un fuerte golpe en el pecho que resuena como si fuera un tonel, coge a Yuseppe de la chaqueta y lo levanta hasta que quedan cara a cara

gesticula como intentando recordar como se dice una palabra que a olvidado, luego desiste, abre su enorme mano sobre la cabeza de Yuseppe y la cierra de golpe en un puño -hambre-

dicho esto lo arroja a varios metros de distancia y se va

Yuzeppe voló y seguiría volando de no ser por recordar de que estaba muerto y estamparse contra un árbol era un forma mas que valida para dejar de volar. Podía ser muchas cosas y coserse otras tantas, pero no podía volar y menos tenia alas de algún tipo, aunque mentiría si no a querido volar como hoy, aunque mejor hubiera sido saber a donde querer ir.

Al ver un árbol cercano se quito su brazo alemán y ordeno que se agarrara al árbol, pero como participante de las juventudes nazis le señalo con el dedo corazón y siguió planeando. Por suerte para el pero no para su espalda o pecho, se empalo contra un árbol roído, podrido y quemado, como echo a su medida, en donde quedo atravesado con su brazo sujetando la otro que intentaba sin resultados escapar de su nuevo dueño.
-Perfecto, sencillamente perfecto. Ahora tengo mas claro que ese disfraz es increíblemente logrado, hasta olía a zombie. Pero en ZEbai he visto disfraces mejores, claro que unicamente en el ZEbai de mi tierra natal, La Gran Inglaterra.-Visto que el alemán quería escapar y el no podía salir de hay por sus propios medios se resigno a pedir ayuda.
-¿Algún putrido que no le importe sacarme de este arma preparada para matar vampiros, de mas de 12 metros? ¿Hola? Yuzeppe al habla, alguien le echa una mano a su vendedor de desperdicios favorito?

Lisa se levantó de la tumba en la que meditaba y se encaró con el zombie bajito y verde de orejas puntiagudas que la había acusado. ¿Y tú qué problema tienes conmigo? No creas que por ser bajito te vas a librar, seguro que hay fans del tal Michael Jackson que son enanos. 

Entonces vio pasar volando al zombie inglés y cómo se ensartaba en un árbol cercano. Uff, eso tiene que haber dolido...pero está muy alto para mí. A ver quién se sube a sacarlo...

 Manuel Eusebio no decía nada, y no hacía nada, más que construir su nueva dentadura. 

Cuando acabó, le iba a dar uno de sus ojos (total, con uno sobra) a Yuzeppe pero cuando se fijó en los demás, él estaba en el árbol.

- ¿Pero cómo... ? Va, da igual - dice mientras se acerca a ayudarle. Al fin y al cabo, es bueno llevarse bien con los comerciantes.