Partida Rol por web

El Enemigo Interior 1: Identidad Confundida.

Capítulo 2. Altdorf.

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12/01/2021, 19:30
Chester Clancy, el que no folla

Chester ser quedó en silencio y dejo que fuera Altder el que tomara la iniciativa. No dejaba de sentirse observado y a veces hasta tenía la sensación de que alguien le ponía un cuchillo en la nuca. La verdad era que aunque su compañero había demostrado ser de confianza, se sentía más seguro en presencia de Ragnar.

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12/01/2021, 20:24
Alder, el casto

-Así es, buen hombre. Cuatro pasajes para Boggenhaffen-respondió devolviéndole la sonrisa.

-Venimos a cerrar el trato y a concretar horarios. Por nuestra parte cuando el capitán guste podemos zarpar. Solo resta avisar al resto de la compañía y si quiere saber mi opinión, ¡Ya vamos tarde!-declinó la oferta de subir a bordo, señalando con el pulgar por encima de su hombro

-Ahora que ya hemos asegurado que sigue aquí, si le parece voy a buscar al resto y nos ponemos a tu disposición, ¿Verdad, Ches?

 

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12/01/2021, 20:52
Joseph Quartjin

Quartjin frunció el ceño y se mantuvo unos instantes en silencio. Agarró su pipa por la cazoleta y dio varias caladas rápidas. Expulsó el humo por nariz y boca mientras miraba fijamente a los dos jóvenes que habían regresado pidiendo el trabajo que horas atrás, el bruto kislevita había rechazado de muy malas formas.

¡Claro! - Sonrió finalmente. - ¡Necesitaba realmente cuatro buenos marineros! ¡Ja, ja, ja! - Rió de forma efusiva. - O cuatro malos marineros. - Asintió varias veces. - Vayan a por sus compañeros. Partiré  a eso de las ocho, por la mañana claro.  Diez chelines por día hasta Bogenhafen y hoy podéis dormir aquí. ¿Bien?

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12/01/2021, 23:10
Alys de Louvriers

Alys se deshizo bajo el ardoroso contacto de Ragnar. Era tan bruto y tan intenso que ese dolor que sentía por estar siendo aplastada incluso le gustaba. Sonrió, avergonzada, y rató de enlazar las piernas alrededor de la cintura del bárbaro, pero era demasiado ancho para ella. Seguro que él ni siquiera la notaba a ella, en cambio Alys lo sentía todo: su calor, su peso y su impaciencia. Lo cogió por el pelo cuando él le mordió el cuello y la clavícula, dejándole la piel marcada de intenso rojo, y se frotó contra su cuerpo.

Intentaba recordar en qué momento había decidido que quería estar así con Ragnar. Desnuda y envuelta en su calor, jadeando por besos y por intensas caricias. Desde luego no fue cuando él entró en su tienda y lo rompió todo, y tampoco fue cuando la arrastró lejos del conflicto. Ni los primeros días en el camino, cuando solo quería llorar y él la mantenía con vida dándole de comer y protegiéndola de las inclemencias del tiempo. Ella sola no habría podido llegar hasta la capital, de modo que le debía mucho.

Y ahora llegaba el momento de separarse. No estaba preparada para otra marcha. No en ese momento.

Alys acarició los hombros y la espalda desnuda del bárbaro, lo cogió por el pelo para levantarle la cabeza y lo besó hasta quedarse sin aliento, se frotó contra su fuerte pecho y apretó los muslos en torno a sus caderas, presionando contra sus pantalones y agitándose nerviosa contra la aspereza de la tela. Le mordió los labios, le arañó los músculos tensos y con los pies intentó bajarle los pantalones.

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13/01/2021, 23:42
Ragnar

Ragnar se desabrochó la lazada de su pantalón y ayudó a Alys a bajarle los pantalones. Su miembro saltó de los calzones casi como un resorte, preparado, tan grande como descomunal era el bárbaro. Levantó una pierna de Alys en el aire, depositando la pantorrilla en su hombro. La penetró sin preámbulos, y sin más delicadezas que hacerlo despacio. Sintió su estrechez, y humedad, y gruñó deseando dejar libre la bestia que llevaba dentro y empezar a empujar. El bárbaro se detuvo un momento y escudriñó el rostro de Alys para comprobar que no le estaba haciendo daño.

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15/01/2021, 18:33
Alys de Louvriers

Alys gritó cuando Ragnar, con la delicadeza que lo caracterizaba, la penetró. Le clavó las uñas en los hombros, aunque por supuesto, él no iba a sentir nada con esa piel tan gruesa que tenía. Como se detuvo antes de empalarla completamente, el dolor por la repentina invasión no fue tanto y su pausa la ayudó a recuperar aliento y prepararse para lo que estaba por venir. Que se quedase a las puertas tampoco ayudaba, lo agarró de los hombros y entonces se dio cuenta de que lo tenía encima, de frente, y no detrás, como habían sido las únicas veces que ella había estado con un hombre.

Enseguida se olvidó de ese detalle cuando la naturaleza hizo su trabajo y la humedad resbalaba entre los dos, facilitando la labor que iban a realizar. Alys se arqueó para frotarse contra su torso caliente, aunque con el tamaño que tenía, no era nada complicado. Le dio una palmadita en el hombro.

-Despacio... -resopló moviendo las piernas para abrirse más-. Sujétame fuerte...

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18/01/2021, 09:51
Ragnar

Y así lo hizo Ragnar. Se movió despacio al principio, tratando de no partir a Alys por la mitad en cada embate. Cuando notó que la presión aflojaba, y que la humedad lo permitía, incrementó el ritmo y la potencia de sus empujes. El ritmo hacía que los pechos de Alys se bambolearan. Siguiendo su movimiento, Ragnar siguió penetrándola cada más aprisa y fuerte, y empezó a gruñir.

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19/01/2021, 11:35
Narrador

Finalmente Alder y Chester iniciaron el caminó de regreso a la taberna donde todavía se encontraban Ragnar y Alys. Alder no sabía si el bárbaro habría podido convencer a Alys de seguir hacia Bögenhafen, aunque algo le decía que si, como que también le habría convencido para mucho más ahora que estaban a solas. 

Cuando estaban a medio camino entre el muelle y la taberna, tanto Alder como Chester comenzaron a notar algo. Estaban siendo seguidos por dos tipos. Fue Chester quien tuvo mejor vista y pudo reconocerlos. Se trata de los dos hombres con los que se encontraron en la plaza y que trataron de hablar con ellos emitiendo extraños gestos y muecas y que tras no verse correspondidos se dieron media vuelta y desaparecieron en el interior de un edificio. Sin duda alguna parecía que trataban de pasar desapercibidos, aunque no con mucho éxito.

- Tiradas (2)

Notas de juego

 

            

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19/01/2021, 12:51
Alder, el casto

En cuanto fue consciente de que les estaban siguiendo, dio un vistazo general de sus alrededores en busca de otros comportamientos sospechosos, pues no quería ser tomado por sorpresa.

-Ches, mantente detrás de mi y cúbreme, ¿quieres?-susurró sin cambiar ni un ápice la expresión de su rostro y a penas moviendo los labios, para luego avanzar en dirección a aquellos dos individuos, teniendo preparada, eso si, la daga del interior de su manga, por si fuera necesario el blandirla.

-Buenas tardes, amigos ¿En que puedo ayudarles?-dijo con una sonrisa en el rostro

- Tiradas (1)
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19/01/2021, 22:45
Alys de Louvriers

Al principio fue complicado y durante un momento pensó que no sería capaz. Pero algo hacía su cuerpo y algo había en el cuerpo de Ragnar que conseguía que todo fuese más y más intenso. Alys empezó a jadear cada vez con más fuerza y sus gemidos dieron paso a gritos imposibles de contener a medida que el placer escalaba. Su amante era fuerte, indómito, un salvaje, y sentía cada embestida en lo más hondo de su cuerpo; su enorme miembro, además, golpeaba en una zona tan absolutamente precisa que los pensamientos se le enmarañaban.

-No pares, no pares, no pares -gimoteó-. Ay... Ragnar... Ay.

Lo agarró de los brazos, pero estaba resbaladizo por el sudor, de modo que le clavó las uñas en la piel dura, mientras alentaba al hombre a que siguiera azotando con fuerza en esa parte de su interior que la hacía ver las estrellas. La humedad de los dos estaba mezclada, sus gruñidos estaban acompasados con los movimientos. Alys cogió a Ragnar del pelo y comenzó a gritar con más fuerza, mientras iba al encuentro de sus caderas. Sentía que todo crecía, que todo se volvía intenso, que ya no veía nada porque estaba cegada por el placer.

-Ay, Ragnar -chilló una última vez y justo su sexo comenzó a apretarse en torno al miembro de Ragnar cuando el orgasmo la fulminó.

Y se preocupó cuando, tras los primeros cinco latidos de su interior, la sensación continuó sin que pudiera controlar nada, sin poder tomar el control de su cuerpo para recuperarse. Fue tan largo que empezó a ahogarse con su propia respiración.

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21/01/2021, 11:49
Chester Clancy, el que no folla

A Chester se le hizo un nudo en la garganta que le dificultaba el tragar. ¿Dónde estaba Ragnar cuando se le necesitaba? El mago se agarró con fuerza sus manos para que nadie notara que le temblaban y dejo que Alder se encargara de hablar con esos rufianes mientras él estudiaba posibles rutas de escape. 

Entonces recordó que ya no tenía memorizado Retirada expeditiva y sintió como un escalofrío le recorría la espalda. ¿Cómo de útil resultaría agrandar a Alder?

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21/01/2021, 15:25
Adolphus Kuftsos

Fue entonces cuando  se escuchó una detonación justo después de ver un fogonazo al fondo de la calle. Uno de los dos altorfianos que les estaban siguiendo cayó al suelo herido de muerte. Chester y Alder  se percataron de que el autor del disparo era un hombre alto y robusto, de cabello rubio y largo como el de su barba. 

En ese momento se encontraba recargando su pistola. Sin duda todavía no había acabado el trabajo. ¿Qué estaba sucediendo? Alder y Chester no lo sabían pero sin duda era peligroso. Las armas de fuego sin duda, aunque no eran del todo fiables, eran letales.

- Tiradas (4)

Notas de juego

Iniciativas:

Tipo oscuro, ini. 23. (PG: )

Altorfiano 1, ini. 11. (PG: )

Alder, ini ¿? (PG:8 CA: 16)

Chester, ini ¿? (PG:5 CA: 10)

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21/01/2021, 21:41
Alder, el casto

¿Y ahora armas de fuego...?

Alder bufó con disgusto ante el nuevo panorama y agarró a Chester de la pechera para llevárselo con el lejos de la línea de fuego.

-¡A cubierto!-le indicó mientras empezó a correr con la cabeza agachada hacia una posición que les ofreciese buena cobertura y un cierto nivel de visibilidad. 

En cuanto se notó con la espalda contra la pared ya pudo suspirar más aliviado.-No asomes mucho la cabeza, Ches, no sea que te la vuelen- aconsejó en tono cantarín mientras se deslizaba pegado a la pared hasta la esquina, desde donde poder asomar lo justo para ver lo que estaba ocurriendo

- Tiradas (1)

Notas de juego

L-11

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23/01/2021, 17:19
Chester Clancy, el que no folla

Momentos después de escucharse la detonación del arma de fuego se escuchó el grito de una mujer. Cosa extraña porque no había ninguna mujer en la calle, quizás viniera de alguna caja. El mago sin dudarlo un instante echó a correr detrás de Alder, estaba claro que tendría más posibilidades de sobrevivir si seguían juntos.

- Tiradas (1)
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23/01/2021, 18:13
Ragnar

Alys sintió dos orgasmos más, más pequeños, antes de que Ragnar se diera por satisfecho y se derramara en su interior. El bárbaro extrajo su miembro del interior de Alys y se tumbó a su lado. La miró con deseo, como si quisiera volver a montarla y empezó a besarla con ardor, como si se hubiera quedado con ganas de más.

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23/01/2021, 20:00
Adolphus Kuftsos

- ¿Pero, qué hace Kuftsos? - Preguntó el hombre que aún conservaba la vida. Alzó las manos lleno de terror y entonces...

Se escuchó una detonación. Aquel hombre cayó al suelo llevándose las manos al pecho y segundos después, su corazón dejó de latir. 

Alder y Chester corrieron para conseguir algo de cobertura ante la mortífera arma e fuego que aquel hombre estaba empleando para matar a aquellos alltorfianos que les estaban siguiendo. Pasados unos segundo y tras esconderse, escucharon como el tal Kuftsos recargaba su pistola, y ya la tenía lista para volver a disparar.

- Tiradas (2)

Notas de juego

Iniciativas:

Tipo oscuro, ini. 23. (PG: ): dispara a altorfiano 1. Lo mata.

Altorfiano 1, ini. 11. (PG: ): MUERTO

Alder, ini 9 (PG:8 CA: 16): Te toca!

Chester, ini 6 (PG:5 CA: 10): Te toca!

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24/01/2021, 23:06
Alys de Louvriers

Alys se quedó mirando al techo mientras intentaba recuperar la respiración, el pulso y la noción de la realidad. Temblaba a medio camino entre el asombro y el agotamiento, físico y mental. No había sentido nunca nada igual y sabía que algo habia pasado entre ellos dos. No se trataba de un simple desahogo físico, había habido algo más.

En el pueblo, las mujeres hablaban. Cuando iban al arroyo a lavar la ropa, hablaban, y aunque la mayoría de los hombres creían que conversaban sobre cotilleos de las demás personas del pueblo, en realidad lo que hacían era hablar de sus relaciones matrimoniales y también de las que mantenían fuera de él. Y en su tienda, muchas veces, pedían remedios para todo tipo de objetivos sexuales, como por ejemplo conseguir que sus amantes permaneciesen más tiempo activos. A Ragnar no le hacía falta ningún remedio casero para eso, parecía dispuesto a seguir, a saber hasta cuando.

Cuando la sacerdotisa se tranquilizó un poco, se fundió a la piel de Ragnar y le devolvió los besos y las caricias. Le dolían los muslos, pero ya se quejaría luego de las agujetas. Se prepararía algún remedio para no tenerlas y poder seguir su camino... no sabía cuál.

Apartó esos pensamientos y se subió encima de Ragnar, como si fuese una montura. Había oído a las mujeres hablar de ello, pero no tenía ni idea de por donde empezar. Lo miró con una sonrisa.

-¿Cómo lo hago? -le preguntó.

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24/01/2021, 23:26
Ragnar

Ragnar ya la tenía dura otra vez, como si no fuera humano. Tal vez se debía a que no lo era. El bárbaro ahuecó a la mujer, y la guio de las caderas para que se empalara profundamente en su miembro erecto. Gruñó.

Ahora imagina que estás montando a caballo. Cabalga —dijo, y le soltó una sonora e imperativa palmada en el trasero como si fuera ella la yegua.

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24/01/2021, 23:31
Alys de Louvriers

Pues no había cabalgado nunca, porque apenas había salido del convento y de la aldea, pero ¿acaso importaba? Aunque la referencia no le era de utilidad, su propio cuerpo y la posición en la que se encontraban le daban pistas sobre cómo debía hacerlo, de modo que se movió más por intuición que con pericia. Semejante invasión de Ragar en sus partes más blandas dolía, como esos músculos que se estiran de más, pero era un dolor que le gustaba. El manotazo en el trasero la hizo chillar y le dejó el culo rojo, pero avivó el deseo y empezó a moverse con ímpetu sobre él.

Pues sí que era divertido tener sexo. Y era más divertido si jugabas con una persona que te gustaba. Vaya cosas. Ahora entendía muchas de las conversaciones que había escuchado a lo largo de los años.

Con una sonrisa de oreja a oreja, Alys cabalgó sobre Ragnar y se agarró a sus brazos, clavándole las uñas a medida que el placer la recorría en grandes oleadas.

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28/01/2021, 13:52
Chester Clancy, el que no folla

Chester lo tenía claro, de ahí sólo podía salir de una manera. ¡Huyendo como alma que lleva el diablo! El mago echó a corre con el objetivo de perder cuanto antes a su perseguidor.

 

Notas de juego

Chester sale del mapa por S10.