Partida Rol por web

Ahora si que lo rojo no se me iba a ir al haber visto a Scarlet darle un beso a Shouji, eso me trajo una imagen en particular a mi mente que no se queria ir por mas que pensase en otra cosa. Trate de pasar desapercibido un momento en lo que se armaba ese pequeño revuelo y se decidian de a donde ir, yo aprovecharía para buscar con la vista un pequeño mapa de la estación que se encontraba en la pared cercana a la salida de la sala de música.

-Aqui esta la enfermería, solo hay que doblar a la derecha y seguir recto- Señale con el dedo el trayecto en el mapa, esperando que eso los distrajese lo suficiente como para no notar como me encontraba en mi modo tomate. Incluso no dude en ir hasta la puerta y adelantarme un poco.

-Vamos? creo que necesito recostarme un rato.- quizas con eso me salvase de ir al observatorio y que sucedieran mas momentos embarazosos que me pudiesen delatar lo que me estaba pasando.

Miro al hombre pervertido y sonrió levemente, escucho las palabras de la oficial y le miro de reojo.

¿Lo atrapamos o lo matamos? - Me preparo para lucha su mirada me inquieta un poco, no se que habrá sucedido pero no se ve nada bien... en mi opinión experta solo veo tres opciones posibles para explicar lo que veo. La primera es que como nerd reprimido que es vio porno del bueno y no se pudo aguantar mas. La segunda es que se fumo algo demasiado potente. Y la tercera es que es un pervertido que salio del closet - Bueno golpeemosle primero, luego le preguntamos. 

Bien, digo dando un pequeño saltito y colocandome junto a Nathan, entonces vamos.
Miro a Nathan. Por que sé aparta de mí? No le gusto? tuerzo un poco el gesto y vuelvo a mirar hacia delante.

-Creo que lo mejor será atraparlo para preguntarle unas cuantas cosas... Y si vemos que no coopera nos lo quitamos de encima, además que en una clara situación como esta nosotras solo estamos defendiéndonos de un agresor~ -Respondo con una sonrisa un tanto siniestra antes de prepararme también para el posible combate, por suerte en una situación de dos contra uno el resultado es claro y más contra alguien que parece ir drogado. -Si realmente está drogado habrá que hacer una inspección más tarde, nunca se sabe si alguien está tratando de traficar en un espacio tan pequeño como una nave... Sin dudas debe de ser algún idiota. -Mientras me preparo observo un segundo hacia mi estoque para ver que lo tengo preparado, nunca se sabe si va a hacer falta hacer uno o dos cortes para calmar a tipos como ese.

Nina y Allesa dispusieron recibir al enloquecido asaltante. Un hombre joven que distaba de cualquier habilidad para el combate por lo que su lances para agarrar a quien primero le salió al paso fueron inútiles.

Nina le dobló el brazó en una llave, algo que le dolería a cualquiera y se llevó una sorpresa cuando eso no frenó al desconocido. Siguió tirando hasta llegar hasta ella provocandose el mismo una lesión con un chasquido en ese brazo. Con el libre tocó de forma descarada el pecho de la militar desgarrando su camisa, rompiendo incluso algún motón.

Alisa no perdió el tiempo y golpeó desde atrás la rodila para que se doblara hacia delante lo que el tipo emitió un quejido y soltó a Nina.

Entre espumarajos que salian de sus gritos se agarró a su cintura como pudo siguiendo con su cansino asalto sexual, esta vez tocandole el trasero. Nina se revolvió y le rompió la muñeca, y así el tipo, medio ido quedó doblado en el suelo con ambos brazos inserbibles.

- Aghhh...agrhh...

Samuel pegó su oido a medida que se acercaba a esa puerta y cada vez tenía mas claro o se iba haciendo una idea de lo que ocurría al otro lado, en el despacho continuo.

- AHH, espere...no me toque así por favor..ah.

Se tomó la libertad de mirar por la cerradura y en la penumbra de esa estancia divisió a dos mujeres que daban la espalda. La primera era Zian, la jefa de estudios. se había quitado la falda y lucia un bonito tanga que se metía entre sus nalgas.

- Ahh

Josie, la instructora estaba casi desnuda sobre el escritorio, tumabad boca arriba mientras Zian se la comía a besos recorriendo sus pechos y jugando con sus dedos entre sus piernas.

- Calla zorra, se que te gusta....

Hans no llegó a picar en la puerta en el despacho del Dr. Se topó de bruces con una joven que salía con bastante prisa sintiendo en ese inocente accidente el tacto de sus generoso busto.

- L-lo siento, no le v llegar. Por sus credenciales y bata blanca parecía personal científico. Se la veía un poco roja y algo desaliñada de tal forma que acabó de anudar los botones de su camisa y de forma apurada, sin esperar respuesta de Hans se fue cabizbaja. El hombre llegó a pensar que la muchacha fuera incluso a llorar.

Al entrar, aun pensativo Hans se encontró el Dr. Spencer sentado en su escritorio fumandose un pitillo de forma relajada, o al menos hasta que le vi entrar, momento que arrugo el entrecejo.

- No tenía ninguna cita o reunión esta tarde. ¿Que quiere?. Soy un hombre ocupado..

Llegando a la enfermería casualmente la puerta se abrió y salió una enfermera de su interior. Llevaba documentos en sus manos, historial de pacientes y quedó mirando a los chicos-

- Ey vosotros. Decidme vuetsros nombres. Ha habido un traspapeleo y hay que repetir alguna pruebas. A ver, si estais en la lista. ¿Os va bien entrar para completar los análisis o preferis venir en otro momento?. Decidme y así si no podeis ahora os apunto y doy hora.

Sigo atendiendo. Con el oído atento por si viene alguien.

Antes de salir dejando que Andrea y Nathan se adelanten hablo con Shouji - Te dije que si me seguías te recompensaría - Digo con la lengua fuera - Además - Digo acercándome poniéndole una mano en el pecho mientras reduzco nuestro espacio de separación - si nuestra relación avanza tendrás que ser un pelín menos tímido - Guiño un ojo - ¿Ahora vamos con ellos? - Digo ofreciendo mi mano para ir cogidos de ella, quería acercar un poco más la relación aunque fuera un poco a lo niña chica

Al salir de la sala de música Shouji y yo, de la mano, llegamos a la enfermería con Andrea y Nathan, donde nos asalta una enfermera con preguntas - Yo me llamo Scarlet Rose, y no me importa repetir los análisis ahora para ayudar a acelerar el proceso, de hecho Nathan quería venir ya que no se encontraba muy bien ¿No, Nathan? Chicos, deberíamos hacernos los análisis ahora ¿no? Podemos ir un pelín más tarde al observatorio, aún no se acaba el día.

Claro que sí, Scarlet. Yo soy Andrea Sánchez digo, mirando a la enfermera. De todos modos, si alguno sigue queriendo ir al observatorio, debería acompañarle, ya que el hecho de ir fue por mi interés personal. Pero yo creo que mejor nos quitamos esto de encima y luego ya seguimos, ¿no os parece?

Lanzo una mirada a Shouji y otra a Nathan, quizá algo más larga, que provoca que baje la cabeza, avergonzada. Luego miro a la enfermera y me centro en ella, para intentar borrar mis pensamientos de mi mente. Al fin, no creo que le gustes...

¿Y de qué pruebas se tratan? ¿Sólo análisis o también alguna prueba de rendimiento físico? Yo creí que estas últimas sólo nos las hacían para comprobar si resistiríamos el vuelo espacial, así que imagino sólo serán análisis, no?

Lo sé, pero ten en cuenta que es la primera relación que tengo.-Le doy un beso en la mejilla-

Mientras a lo que ella pregunta si seguimos con los chicos: Claro, vamos -Agarrándole de la mano como unos tortolitos-

-no tiene importancia- sonrio a la ayudante tras el pequeño accidente, aunque cuando se aleja la observo pensativo

Mi primera impresión del Dr.Spencer no es muy buena, es evidente que no está haciendo nada, aparte de felicitarse por lo que le haya hecho a su ayudante "siempre han de poner a los mas incompetentes al mando"

Pero pongo mi mejor cara y me presento

-buenas tardes doctor Spencer. Soy el doctor Harket de astronomía. Me dijeron que tenía que hablar con usted sobre el uso de los telescopios y ordenadores, una mera formalidad sin duda. Aparte de mi propia investigación el Señor Parrish me pidio ayuda con un estudio de probabilidades de impacto de meteoroides lo que necesitará bastante potencia computacional, ya sabe como es todo eso-

Hablo desenfadadamente evaluando a mi nuevo jefe mientras me extiendo sobre tecnicismos, no se en que area es doctor este hombre o si ha hecho investigación alguna vez

-Soy Shouji Kishimoto, coincido con ustedes chicas, sería  mejor hacerlo ahora, así  ya estaríamos libres.-digo antes las preguntas de la enfermera y los comentarios de Scarlet y Andrea.

Me doy cuenta de que Andrea me mira un momento y luego a Nathan ,para luego bajar la cabeza, y se lo atribuyo a que tiene algo de vergüenza por que tengo agarrada la mano de Scarlet. Aunque también podría tratarse de otra cosa.

Ni bien llegamos a la enfermeria una mujer salio de esta antes de que siquiera pudiese entrar a pedir una revisión aunque realmente hubiese preferido venir solo, pero todos decidieron acompañarme, eso no me facilitaba las cosas para calmarme y dejar de estar rojo por tanto tiempo. La mujer parecía ser una enfermera y sin perder tiempo nos pidio repetir algunas pruebas. En este momento no me molestaba la idea por que así al menos lograria tranquilizarme.

Suspire con pesadez y respondi -Esta bien, la salud es lo primero a fin de cuentas- Digo rascandome la nuca y mirando ocasionalmente a los chicos, sobre todo a Andrea, parecía triste, eso no concordaba con el alegre humor que había demostrado tener hasta ahora. Scarlet me hizo recordar que me sentia mal por lo que trate de entrecerrar un poco los ojos. -Puede revisarme primero, me he sentido un poco mal-

-Tch... -Chasqueo la lengua al ver el estado de mi ropa tras aquel encuentro, por suerte el sujetador había quedado intacto y sigue tapando lo suficiente como para no tener que preocuparme en caso de cruzarnos con alguien. -¿Qué demonios le pasa a este tipo? Sin dudas tiene que haberse drogado con algo, de lo contrario es imposible que no sienta dolor después de todo esto... -Una vez más revisé mi uniforme para ver en que estado había quedado, después de todo aquello era una ofensa para un militar.

-Tenemos dos opciones, arrastrarlo hasta las celdas y mantenerlo allí hasta que se le pasen los efectos o terminar el trabajo aquí mismo. -Por supuesto, tras lo sucedido, yo prefería rematarlo ahí mismo pero también quería escuchar la opinión de Alessa antes de hacer nada al respecto. En cualquier caso, si trataba de escapar, siempre podía romperle alguna pierna.