Partida Rol por web

Continuas siguiendo lo que a tu parecer son huellas, alejándote del campamento pero con tus sentidos siempre alerta. La noche se va cerniendo sobre vosotros y tu cada vez estas más lejos, escuchando los susurros del bosque y el parloteo de algunos animales nocturnos.

Finalmente algo te sorprende, unas huellas grandes, humanas, que están estropeando el rastro del ciervo al que estás siguiendo. Pocos segundos después vislumbras una luz en la oscuridad del bosque, una luz que debe provenir de una pequeña hoguera.

Cariño, debes comprender que esta mujer es necesaria para unificar a todos los clanes montañeses. Te mira fijamente, y sabes que dice la verdad, no le ves ningún interés oculto. Sin ella no habría quién controlase a estos salvajes. Para un momento para ver tu expresión. Ya sé que crees que hay algo entre nosotros, no hace falta que lo ocultes.Intenta sincerarse. Pero yo te aseguro que no hay nada cierto. Te acaricia el pecho, lo notas excitado. Tu eres mi reina, mi amor, y a tí me debo. Caes en su encanto y te entran enormes ganas de hacer el amor con él.

Cuando Petyr  comienza a hablar paro totalmente de quitarle la ropa pero sus palabras, su cariño y lo que me parece sinceridad de verdad me atraen nuevamente hacia él.

Duda, no le creas, aléjate...piensa mi conciencia mientras se intenta resistir pero mi cuerpo no siente lo mismo y antes de que me dé cuenta me entrego a él en cuerpo y alma.

Sigo sigiloso el resplandor de la hoguera, tal vez solo sea un viajero acampando peor no estaría de más echar un vistazo por si acaso, si no es anda volveré al campamento no quiero que me coja la noche en estos bosques solo y aislado del grupo.

Preparo las armas por si acaso.

Cuando cada uno tiene las tareas distribuidas me dedico a Lord Petyr

Te acercas a hurtadillas, sigiloso como un gatosombra, cruzando la distancia que te separa de la luz de la hoguera, pasando entre gruesos árboles y pequeños montículos de piedras.

Finalmente llegas a tu destino, una pequeña planicie libre de árboles de no más de diez metros en cuyo centro ves la pequeña hoguera y sentado al lado de esta un hombre de espaldas a ti. No logras ves su rostro pero parece llevar una espada enfundada y una capa sucia y gastada que le cubre el cuerpo.

Me acerco al hombre en actitud normal, tal vez quiera charlar y contarme algo más sobre la zona supongo que será un viajero y sin el peor de los casos es un delincuente, no haré muchas preguntas al final acabo solo vengo de caza.

Buenas amigo perdona que le moleste, no habrá visto por aquí huella de animal llevo un tiempo siguiendo el rastro y creo que lo he perdido, hace frío eh.

Algo tengo que decir para romper el hielo, espero que no se ofenda por interrumpirle por la noche su cena.

Ves como Lord Hunter se dirige a vuestra carroza dispuesto a parlamentar como le ordeno Meñique, justo cuando termináis de hacer el amor.

Cuando le hablas el hombre se levanta de un salto, sobresaltado, lanzándose hacia delante tratando de llegar rápidamente al otro lado de la hoguera. Te mira a los ojos, asustado, refugiandose en su capucha. Ves que tiene una espada en el cinto, pero la empuñadura y la vaina son de mala calidad.

No he visto ningún animal, ¿eres de los clanes?¿has venido a matarme? -te pregunta el hombre con gesto cansado.

Los pasos hacen que me alerte y aún con el sofoco del placer me visto con rápidez antes de ver entrar Lord Hunter en el carruaje.

Buenas noches nuevamente Lord Hunter-digo cuando entra y tomando asiento al lado de mi marido.

Si creen que me voy a ir lo tienen claro-pienso con determinación-no habré conseguido mis propósitos en cuanto a esa salvaje pero no me voy a mover de su lado, ni un solo instante.

-Siéntate-le digo ofrecíendole asiento para que se ponga cómodo.

-Saludos mis señores.-Dice James al entrar en las lonas.

Avanza hacia la mesa donde hay vino y comida, coje un poco de pan se lo hecha a la boca y se llena una copa de vino de Rejo, y se sienta en la silla de campaña.

-Bien, he ordenado a los Sires de ocuparse de los temas de logistica y protección. De todas maneras no espero ningun tipo de ataque, pero nunca esta de más prevenir.  ¿De que queriais hablarme Lord Petyr?

No ,no soy de los clanes ,podéis estar tranquilo ,sirvo a la casa Arryn y estoy en una partida de caza , seguía en rastro de un animal y  al ver una fogata y me acerque  haber de quien era ,no soy una amenaza ,puede bajar el arma, tal vez no sea cosa mía ,pero en estos lugares tiene que tener mucho  cuidado para acampar un hombre solo ,abundan peores cosas que la gente de los clanes, bandidos, bestias salvajes, y otras cosas. Mi nombre es Loguen, la gente me conoce como Loguen Nueve dedos.

Me muestro de formar amistosa, relajada, pero a su vez atento por si acaso se pone muy nervioso y tengo que desenfundar las armas.

Le tiendo la mano

Lord Arryn toma la mano de Lurleen mientras se dirige a Lord Hunter.

-Me gustaría que cuando lleguemos a Desembarco del Rey diplomases con la familia de Lord Gendry, la Casa de la Luz. Tienes que intentar averiguar cosas de ellos. Parece algo serio para lo habitual. Son unos fanáticos, y están todos juntos. Ya se sabe que la confianza es madre del descuido. No podemos descuidarnos Lord Hunter, ni un pelo. Sonríe nuevamente.