Partida Rol por web

El hechizo de la casa Corbitt

Un propietario en apuros

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11/11/2014, 17:40
René Peterson

-Muy amable.- Agradecí con una sonrisa el caballeroso gesto del Dr. Temple ofreciéndose a portar mi bolso y se lo pasé con cuidado, sin soltarlo hasta comprobar como el hombre lo sujetaba de forma segura. Acto seguido, desperecé mi brazo aún dormido después de haber llevado aquella pesada carga mientras que masajeaba mi antebrazo con mi mano derecha y escuchaba las palabras de Agnetha.

Asentí a las palabras de la mujer, poniendo cara de estar de acuerdo con lo que ella decía mientras caminábamos. Aunque realmente no comprendía muy bien a lo que se estaba refiriendo, parecía que estaba diciendo una obviedad, pero al decir "los demás mortales" noté un nosequé en sus palabras que me distrajo.

Sin duda querida, haréis un excelente trabajo, pero cada uno de nosotros debe seguir lo que creemos que podemos, vos por ejemplo, podéis liberar la casa de tan pesada carga estoy segura, pero nosotros, los demás mortales que vamos tenemos que buscar una forma de ayudar.

Aunque estoy de acuerdo en que ahora mismo la mejor idea es ir a la mansión, para que vos podáis limpiarla

- Estoy segura de que serán de gran ayuda, cuando lleguemos a la vivienda puede que necesite de su colaboración si no es molestia- apunté sencillamente a la dama mientras pensaba el algo con lo que pudiese distraerla una vez llegásemos a la vivienda.

Después de mis palabras comprendí a lo que se estaba refiriendo la dama y empecé a sentir que me sentía un poco espesa, debía espabilarme y no dejar que el cansancio entorpeciese mis planes.

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11/11/2014, 20:36
Narrador

Puestos de acuerdo en que lo mejor sería ir directamente al lugar donde sucedían los extraños sucesos el grupo se puso en marcha hacia el lugar. Poca era la información que tenían pero, ¿acaso era necesaria para expulsar unos espíritus si eso era lo que ocurría?

El sol comenzaba a bajar entre las nubes y la niebla de Londres comenzaba a levantarse y poblar las calles mientras los cuatro se dirigían a la casa Corbitt.

Notas de juego

Fin de la escena. Continuamos en: La vieja casa Corbitt