Partida Rol por web

Sir Percy como experto en artefactos antiguos, se sacó la gabradina y se envolvió las manos en ella para coger el puñal sin tocarlo. Tras ello extendió la gabardina en el suelo para que la pudieran observar todos y miró a ver si le parecía reconocerla de alguna civilización antigua.

Al ver que el arqueólogo se prestaba a coger el puñal Harry le sostiene el arma para que no le moleste en la examinación del arma blanca. 

Visto lo visto antes será mejor que no toque estas cosas con armas de fuego en las manos.

Sin apartar la vista del arqueólogo Harry atiende a la posible "clase magistral" que, por la cara que pone Sir Percy, está apunto de dar.

Desmond se acerca a Sir Percy y también examina la daga pero con sus ojos experimentados en ocultismo.

Después se fija en la pared de madera que ha observado Sir Perry.

Mientras los demás se fijan en el puñal y la posible sangre seca. Me fijo en la pared de madera buscando puertas o cualquier cosa rara.

Mientras Sir Percy y Desmond estudiaban con cierta cautela el hallazgo del Escocés, un desagradable olor empezó a saturar el ambiente. Aquella fragancia empezaba a ser familiar, ya que no era la primera vez que esta inundaba sus sentidos.

La Daga empezó a vibrar y esta se elevó en el aire a la altura de la cabeza los investigadores. Con el filo por delante esta se encaró con el parapsicólogo.

La visión era única, de forma inexplicable un objeto inanimado estaba flotando delante de sus narices. Y aquella imagen inverosímil produjo a nuestros amigos un verdadero pulso a sus mentes.

- Mmmm. Obviamente es de factura precolombina, Inca para más señas - comentó Sir Percy antes de que la daga se elevase sobre sí misma y apuntase al Dr. Wilburn. Una gota de sudor corrió sobre su rostro, este comportamiento no era para nada el adecuado a una daga de esas características. Superando su miedo, Sir Percy aprovechó que la daga estaba sobre la gabardina y envolviéndose las manos en esta, agarró la daga fuertemente mientras pedía ayuda a Harry para que le cogiera las manos e intentaran que la daga no alcanzara su objetivo.

Paso la tirada de cordura. Busco una caja o recipiente donde guardar la daga si los chicos la retienen. En caso contrario intento detener si me ataca.

Acostumbrado a ver atrocidades, un simple cuchillo volador no le iba a asustar a Harry. Pese a todo no pudo evitar aumentar la frecuencia respiratoria ante la visión del cuchillo asesino volador. Tenia que hacer algo. Dejando caer a Agatha, Harry agarra a Sir Percy para evitar que que la daga traccione de él.

¿Este olor es nauseabundo!. Mr Percy, aguante que voy a ayudarle a bloquear el puñal

Desmond se asusta al ver elevarse la daga, pero gracias al olor nauseabundo que lo pone en alerta, y al ver que la daga le apunta directamente a él, reacciona con rapidez y trata de ponerse a cubierto en la pequeña habitación, la que parecía el depósito de carbón.

ALERTA!!! Poneos a cubierto!!!!!

Viendo como el famoso explorador británico fallaba estrepitosamente el agarre de la daga, el audaz Harry lee no se lo pensó dos veces. Con una agilidad felina, el asioamericano de origen dudoso, se lanzó de forma valerosa hacia la Daga. Con gran destreza la agarró con la dos manos. Pero con una fuerza sobrehumana, el cuchillo volador logró soltarse de las manos del Sr. Lee. Y siguió su vuelo hacia el parapsicólogo.

No se supo bien, si gracias a la exitosa maniobra de Harry o bien los Dioses se habían alineado con el Dr.Wilburn, la Daga surco volando la habitación errando su objetivo. Está se ensartó directamente contra la pared de madera creando un pequeño boquete.

La Daga, de forma inverosímil, hizo un par de intentos de soltarse. Sin éxito alguno. Era como si una misteriosa fuerza la estuviese controlando. Pero en breve lo que dominaba aquel ornamentado cuchillo desistió.

Tras tanto revuelo con la Daga, los investigadores se recompusieron, todo había quedado en un susto. Harry y Percy escucharon un sonido caracterísco cuando la Daga se empotró en la pared. Sonó a "hueco". Los investigadores al completo, observaron como el hueco creado por el filo de la Daga dejaba entrever levemente un espacio tras la pared.

Tras la maniobra de la daga, Harry se recompone y recoge a Agatha. Al oír el sonido hueco de la pared donde se ha incrustado la daga, girando la cabeza hacia sus compañeros les dice.
Habéis oído? Parece que esa pared esconde algo...
Con el arma por delante se acerca a la pared para inspeccionar lo que esconde
estará el puñal bien bloqueado...piensa Ben mirando la daga, en caso contrario lo bloqueará con un cubo y demasiado peso encima para que pudiera salir.