Partida Rol por web

El laberinto del bufón

IV - Mucho más que un secreto

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11/01/2018, 10:32
Aldar

El desconcierto inicial que provocó en mí la revelación de Avlin me hizo enmudecer unos largos instantes. Los dragones eran criaturas mágicas, algo muy alejado del mundo natural que yo controlaba y amaba. No sabía mucho de ellos, y no deseaba saberlo tampoco. Lo único que necesitaba era mantenerme lo más alejado posible de aquellas descomunales criaturas.

Sin embargo, alcé la vista a las ruinas más elevadas de la ciudad, y volví a mirar aquel socavón asomándome a la esquina del edificio tras el que nos parapetábamos. Como si el enano me hubiera leído la mente, Balakar puso palabras a mis pensamientos.

Estoy de acuerdo. Un dragón pudo haber destrozado todo ésto en su día, pero no creo que siga aquí. ¿En serio creéis que un ser así conviviría con esos bandidos? No lo creo... -Negué con la cabeza- Propongo seguir con el plan y olvidarnos de eso. Vamos a la cárcel y liberamos a los rehenes, podemos hacerles busca refugio en el templo mientras acudimos a la mansión del gobernador a terminar el trabajo. La estrategia de Balakar me parece la más correcta y sensata. Yo prefiero entrar por detrás si hay alguna opción de hacerlo, desde el frente podríamos alertar a los de la mansión. -Miré a Avlin y Zafira- Vosotros dos no deberíais apartaros de Balakar salvo que encontréis un refugio mejor que su escudo.

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11/01/2018, 12:20
Avlin Tuercegris

- Es sensato- asintió Avlin- tal vez me haya dejado llevar por la impresión. Mantengámonos atentos y actuemos con precaución en cualquier caso. Yo puedo tratar de distraer a los guardias, a través de ilusiones y sonidos que atraigan su atención hacia la parte delantera mientras tratáis de acceder por detrás. La sorpresa será nuestra mejor baza, tenemos que conseguir reducirlos sin que se enteren aquellos que se escondan en otros edificios.

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17/01/2018, 14:06
Zafira 'Ithildin

Sería interesante que pudieseis silenciar nuestro ataque. ¿Podéis hacer algo así?

No Balakar, silencio no.  Puedo atraer una bruma, ¿serviría hacer eso entre la cárcel y el edificio principal?  ¿De inicio o sólo si nos descubren?  

Pero si, de acuerdo, vayamos hacia la cárcel, por atrás, primero. 

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21/01/2018, 14:04
Villa de Argentea

Dejaron la improvisada cobertura que les aportaba la esquina del edificio semiderruido y volvieron sobre sus pasos hasta llegar a la parte trasera de la casa. Habían decidido seguir la corazonada de Balakar y buscar una forma de acceder a la cárcel a través de un punto desde el cual no pudiesen ser detectados por los habitantes de la mansión del gobernador en caso de que se diesen problemas a la hora de entrar. Tenían que ser muy precavidos pues, en un lugar como aquel, donde los únicos sonidos que se atrevían a desafiar a la imponente soledad eran el ulular del viento y el eventual estallido de alguna piedra estrellándose contra el suelo tras abandonar el precario equilibrio en que se hallaba, el ruido de un combate que se extendiese demasiado en el tiempo o una voz más alta que otra no tardarían en pasar desapercibidas.

Si existía algo más fácil dentro de una villa en ruinas que encontrar piedras sueltas con las que levantar un muro, era sin duda la sencillez con que uno podía alcanzar un punto concreto sin tener que complicarse mucho la vida. Ya fuese a través de un agujero en una pared, saltando un muro bajo o aprovechando el interior de una casa para acceder a la casa de al lado, el caso es que siempre existían diferentes formas para llegar a donde uno se proponía. Hacerlo en el más absoluto silencio, eso sí, era otro cantar. Por suerte, con tiempo de sobra como para valorar cada obstáculo por sí mismo; con la inestimable ayuda de Aldar y Zafira para elegir el mejor acceso; con el tamaño de Avlin para acceder a través de agujeros pequeños y examinar qué había al otro lado; y con los dos fuertes pares de brazos de Freya y Balakar, capaces de alzar entre ambos a un hombre con su equipo como si fuese un niño, alcanzar la parte posterior de la cárcel no fue algo de todo complicado.

En lugar en que se hallaban era el antiguo salón de una casa pudiente. Hoy, sin bellos lienzos que cubriesen sus agujereadas paredes y sin más decoración que las tejas desprendidas de su ausente tejado, no era más que un ruinoso espacio vacío en el cual pervivía el recuerdo de una antigua chimenea con el erosionado escudo de armas de la familia aún medianamente distinguible tallado en ella. Lógicamente, al tratarse de un edificio que nada tuvo que ver en su día con la cárcel, el acceso desde él hasta el interior de la misma era tan inexistente como desolado estaba aquel lugar. No obstante, al no existir tejado sobre sus cabezas, los cinco compañeros tuvieron la clara visión de un hueco de forma circular en la pared posterior de la cárcel. No recordaba en absoluto al espacio que habría dejado una ventana en caso de que sus marcos y estructura hubiesen desaparecido debido al paso del tiempo. No. Daba la sensación de que lo que en su día había abierto aquel agujero había sido el  impacto desde el exterior de un cuerpo pesado, como una roca. Se encontraba a veinte pies de altura y no existía nada que impidiese el paso a su través.

 

Notas de juego

El agujero está a 20' de altura desde el nivel del suelo.

Dado que el agujero situado justo por debajo de la línea del tejado, suponéis que la cárcel tiene dos plantas por encima del nivel de la calle.

Los huecos entre los ladrillos no son lo suficientemente amplios como para introducir los dedos o la punta de las botas en ellos, pero existen suficientes agujeros como para usarse como puntos de apoyo. Incluso así, la ascensión es complicada (CD15).

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21/01/2018, 18:10
Villa de Argentea

Notas de juego

Una de las paredes sobre las que tuvisteis que saltar para acceder al lugar donde os encontráis estaba lo suficientemente alta como para ver por encima de las casas que se elevaban a vuestra izquierda y tener una visión clara de la mansión del gobernador. Por un momento Freya pareció captar una sutil diferencia en la oscuridad de las ventanas de la segunda planta de la mansión. Como si en algún lugar del interior existiese iluminación de velas o antorchas.

Una vez ya en el salón derruido te ha parecido escuchar claramente un ladrido. Estás segura de que provenía de la cárcel, pero te ha parecido escucharlo más a nivel de la calle que proveniente del agujero.

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23/01/2018, 19:57
Balakar

Las respuestas de Avlin y de Zafira hicieron que me pasasé la mano por la boca, pensativo.

- Bien. Ambas cosas pueden sernos útiles. Intentemos sorprenderlos por la retaguardia, ¿de acuerdo.?

Con la aprobación generalizada y silenciosa del grupo, empezamos a movernos hacia la parta trasera de lo que suponiamos que era la carcel. Me moví con lentitud, apretando los dientes cada vez que mis pesadas botas pisaban los restos de tejas, maderas y otros objetos inidentificables en nuestro camino.

Nos moviamos por lo que parecian las ruinas de una casa solariega o algo similar, arrasada completamente por una fuerza sobrehumana. El socavón de la plaza del pueblo se dibujó con toda nitidez en mi mente y la imagen de una casa estallando en llamas por la fuerza explosiva del aliento de una vieja y poderosa sierpe hizo que se me erizasen los cabellos de la nuca.

Por fin llegamos a la parte trasera del edificio que servia como carcel improvisada a los bandidos y me mordí los nudillos para acallar un reniego.

"Malditas sean las barbas de Moradin."

Estabamos en lo que parecia el salón principal de la mansión y, en lugar de una puerta que comunicase la casa con aquella estancia, solo habia una pared de piedra.
Por suerte, un retazo de luz de luna iluminó brevemente un hueco en la pared. Desde la distancia, parecia el impacto de algún tipo de arma de asedio.

- Sea lo que sea que ha pasado aquí, tuvo que ser un infierno.- Mascullé en voz muy baja. Suspiré muy despacio, antes de mirar a mis compañeros.- Vamos a entrar. Os auparé y luego me lanzaís una cuerda, ¿de acuerdo?

El plan era simple. Me apoyaría contra la pared, dejando el hacha y el escudo a mano y, entrelazando las manos, les facilitaria un peldaño adicional con el que podrían trepar hasta el agujero.

- No parece haber movimiento en el piso de arriba. ¿Vamos alla?

- Tiradas (1)

Notas de juego

Pues nada, ese es el plan. Balakar deja el hacha y el escudo al lado y aupa a quien vaya a subir. Si descarto el escudo y cuento con el penalizador de la armadura, tendria que hacer una prueba CD10 con +3 para otorgar un +2 de circunstancia a quien vaya subiendo, ¿no?

Hale. Primer +2.

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24/01/2018, 22:29
Freya

En seguida hubo acuerdo en dirigirnos hacia la cárcel, y en sumo silencio nos dispusimos todos a ello, favorecidos por el hecho de aquel lugar supusiera poco más que unas ruinas. Al saltar por una de las paredes que nos dieron acceso a aquella casa de gente aparentemente adinerada, la altura alcanzada me permitió captar algo. Fruncí el ceño, mas no dije nada de momento, queriendo esperar el momento adecuado, pues cualquier accidental desprendimiento o voz más alta de lo normal podría suponer una alerta.

Una vez dentro de aquel salón, nos dimos cuenta de que si bien no había un acceso directo a la cárcel, lo que sí había era un agujero en una pared posterior; al que podríamos trepar para entrar por él, pues parecía lo suficientemente amplio para que incluso yo cupiera.

Miré a Balakar ante su observación de lo allí sucedido, pareciéndome del todo innecesaria dada la premura, para a continuación escuchar cómo pretendía aupar al resto para subir él en último lugar. Mi rostro en seguida mostró mi desacuerdo, pues no quería que me ayudaran a trepar, habiendo comenzado ya a abrir la boca para protestar cuando Aldar me miró de tal forma que me dejó claro que no era el momento.

- Tendrás que compensarme esto. – exigí al explorador, cuando me pareció escuchar algo. – Un perro. Hay un perro en la cárcel, lo he oído. – les informé. – Pero diría que… No al otro lado del agujero, más a nivel del suelo, ¿en alguna especie de patio? – conjeturé, antes de compartir algo más. – Al acercarnos he visto algo de luz en la mansión del gobernador, en la segunda planta… Tengamos cuidado. – les advertí, antes de dirigirme hacia la pared del agujero.

Sin decir nada más, apoyé uno de mis pies en las manos del enano y me encaramé a aquella pared, comenzando a trepar por ella. En un principio me resultó algo complicado, pero pronto hallé la forma de hacerlo más fácilmente, terminando por llegar arriba sin mayor dificultad. Una vez en el agujero, cogí la cuerda que colgaba de mi cintura y até un extremo a un saliente que encontré, descolgando el resto para que los demás pudieran trepar con mayor facilidad.

- Tiradas (2)

Notas de juego

No estaba segura de si bastaba con una tirada o había que hacer una por cada tramo de subida, pero por si acaso ahí está :p

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25/01/2018, 00:14
Aldar

Recorrimos aquel sendero intrincado entre las ruinas en absoluto silencio. Por la cabeza me rondana aún la propuesta de Zafira, generar una bruma entre la prisión y la casa del gobernador, aislando las fuerzas que allí se apostaban. No era una mala idea, si la cosa se desmadraba, y el ladrido de aquel can así lo sugería. Estaba lejos, en un patio o en el exterior frontal del edificio. Dudaba que aquel ladrido fuera por nosotros, pero había que tener extremo cuidado.

Finalmente, encontramos un acceso al interior del edificio, un agujero en la pared, seguramente fruto de algún pequeño derrumbe. Lo observé desde la distancia, evaluando la complicación de tal ascenso. No era la escalada lo que me preocupaba, sino la posibilidad de que una mala pisada llamase demasiado la atención. Si hacíamos ruido, alertaríamos a los que descansaban dentro.

Balakar se situó junto al muro, dejando a un lado sus cosas mientras se ofrecía a ayudar en el ascenso. El cruce de miradas entre Freya y yo fue casi inmediato, tal vez con la misma idea en mente, pese a contar con opiniones diferentes. Me bastó un gesto para indicarle que no era momento para aquello, que nos jugábamos demasiado. De modo que, con un reniego y la exigencia de compensación tan clásica en ella, terminó aceptando.

Fue tan sólo una leve sonrisa la que afloró a mis labios, agobiado por demasiadas preocupaciones. Retrocedí en aquel espacio de que disponíamos, y extraje un proyectil del carcaj, ajustándolo a la cuerda del arco. Posé mis ojos con firmeza en aquel agujero, y aguardé pacientemente a que la bárbara llegase para descolgar aquella cuerda. Una vez llegó arriba, casi contuve la respiración hasta que comprobé que Freya parecía estar bien y con el lugar asegurado. Entonces guardé la flecha en su lugar y me colgué el arco, acercándome a Balakar.

Mi turno... -Afirmé, sujetando aquella cuerda y apoyándome en el enano para impulsarme. Sin embargo, antes de comenzar, me fijé en aquel escudo apoyado en el muro- Balakar... ¿Cómo lo vas a tener para ascender tú al final? Si lo ves mal, átate la cuerda y te subiremos entre Freya y yo, ¿de acuerdo? -Propuse, antes de tomar impulso y comenzar a subir por aquella cuerda, hasta alcanzar el borde de aquel agujero, donde me sujeté con ambas manos, impulsandome con un pie para encaramarme al interior, guiñándole un ojo a Freya antes de asomarme por el agujero para apremiar con un gesto a los demás- Vigilaré. -Le dije a Freya, dejándola al cargo de aquello mientras controlaba nuestra retaguardia.

Notas de juego

Con mi +2, el +2 de la ayuda, y el +2 de la cuerda, creo que no es necesario que tire.

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25/01/2018, 07:17
Balakar

Fruncí el ceño, ante la reluctancia de Freya a apoyarse en mi para alcanzar con más facilidad el hueco de la pared que iba a ser nuestro punto de entrada.

Por suerte, parte de aquella negativa obedecía a la preocupación por la presencia de un perro al otro lado del muro, quizás en un patio interior o en un salón.

Por fin se apoyó en mis manos y, con un empujón, la aupé sobre mi para que, gracias a su estatura y agilidad, alcanzase el hueco con rapidez y sigilo.

Resollé entre dientes, adoptando de nuevo la posición adecuada para impulsar al siguiente. Fue Aldar quien se acercó a mí, dispuesto a trepar en pos de la pelirroja. Mientras se acomodaba el arco y afianzaba el resto de su equipo para evitar ruidos delatores o inconvenientes caídas.

- Es la idea,Aldar.- Susurré.- No deberíais tener problemas para izarme a pulso... pero con que sostengáis la soga con firmeza, sobrará.- Esbocé una mueca divertida, antes de instarle a subir por la cuerda que Freya había dejado colgando contra la pared.- Tu turno, hombre de los bosques...

- Tiradas (1)

Notas de juego

Pifiote...

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25/01/2018, 12:31
Zafira 'Ithildin

Balakar, ustedes los enanos son muy buenos para reconocer piedra y argamasa, ¿cierto?  Con tu visión oscura, podrías decirnos que parte del muro se ve suelta y donde es firme poner la bota.  -con esto la elfa buscaba tener buen consejo para la escalada.  Se decía que los enanos conocían la piedra casi tan bien como la palma de sus propias manos, si no es que más.

Se preparó para subir ella también. Paró las orejas para distinguir cuántos perros y donde estaban. Tendría que estar lista para negociar con los cánidos para que no los agredieran.  Iba a estar difícil, pero al menos intentarlo.  Ya había pedido a sus compañeros que al menos uno de los golpes que se le diera a todo animal enfrentado debía ser no-letal, so pena de perder sus poderes ella para ayudar en el futuro a quien matase sin contemplación a los seres de conciencia natural.   Esperaba que cumplieran, o hicieran su mejor esfuerzo para ello.

- Tiradas (1)

Notas de juego

* ¿tiro de dungeoneering por Balakar y compartir esa info nos podría dar otro +2?

¿Estamos tomando 10 en la prueba?  Si, si, con +2 cuerda, +2 ayuda a trepar, +algo consejo-piedra, ya subiría Zafira sin necesitar tirar.   Avisame master.

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25/01/2018, 15:02
Aldar

Finalmente, el ascenso resultó más accidentado de lo previsto, al menos en un principio. Mi pie apoyado en las manos unidas de Balakar trató de tomar impulso, pero en el último instante me vi suspendido en el aire con todo el riesgo de precipitarme de nuevo hacia el suelo. Las manos del enano se soltaron, sin sujetarme en mi impulso, y fue únicamente la acción de mis manos aferradas a aquella cuerda lo que impidió una caída que podría haber generado ruido de más. Logré afianzar los pies a la pared, y proseguí el ascenso con cuidado, hasta alcanzar el alfeizar de aquel agujero.

- Tiradas (4)
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25/01/2018, 16:38
Avlin Tuercegris

Avlin se deslizó junto a sus compañeros a través de los ruinosos restos de Argentea. Lo que quiera que había sucedido allí había sido violento y enormemente destructivo aunque quizá no tanto como hubiera debido ser. Dado el estado de muchos de los edificios, todavía en pie y de muchos de los muretes, más parecía que el dragón, de existir, hubiera sido pequeño o que no se hubiera ensañado especialmente con la población.

Encontraron un punto por el que acceder hasta la cárcel. Avlin podía haber intentado distraer a los habitantes de la vieja cárcel creando alguna ilusión en la parte delantera del edificio pero finalmente decidieron arriesgarse y reservar sus energías mágicas para momentos que pudieran ser más cruciales.

Balakar se preparó para ayudarles en la ascensión al boquete que se había desprendido de una de las paredes. Seguramente sus compañeros tenían la idea de que Avlin era uno más de tanto hechiceros enclenques pero el pequeño gnomo había crecido bajo tierra y la ascensión por aquella pared llena de boquetes producidos por el poderoso impacto de lo que creía que había sido el dragón y el posterior deterioro hacía que la escalada fuera un juego de niños.

Con sorprendente agilidad, el hombrecillo se colocó en la parte superior mientras sonreía a sus compañeros.

 

- Tiradas (1)

Notas de juego

+2 por la ayuda y +2 por la cuerda pero vamos, que Avlin es un figura en esto de la escalada. No sube dando piruetas de puro milagro.

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25/01/2018, 23:31
Ático de la Cárcel

Sin mayor contratiempo a la hora de ascender que un eventual resbalón de las manos de Balakar al tratar de aupar al explorador, los compañeros alcanzaron la parte superior de la manera más rápida y silenciosa posible. Se valieron de la cuerda asegurada por Freya a uno de los bloques destrozados por el impacto, que aún presentaba garantías de poder resistir el peso de los que aguardaban abajo. La cooperación silenciosa de los brazos de los aventureros valió para izar a Balakar como si de un saco de piedras se tratase mientras Aldar se mantenía en guardia con el arco listo para ser disparado. Quisieron los Dioses que tanto la soga que utilizaron para trepar como el bloque de piedra al cual estaba atada aguantasen el peso de compacto cuerpo del enano y de toda su impedimenta, que no era poca, sin romperse.

Una vez el último miembro del grupo se unió a los demás estos recogieron la cuerda y aguardaron unos segundos en silencio, casi conteniendo la respiración, en busca de cualquier indicio que significase que habían sido descubiertos. Nada sucedió, la noche seguía en calma y los únicos seres vivos que vieron alterado su sueño por la irrupción de los aventureros fueron una familia de golondrinas que habían construido en aquella habitación el nido en el que criar a su nidada y que, al sentir la presencia de los recién llegados, abandonaron a toda velocidad su cálido refugio volando por encima de las cabezas de los allí presentes.

De un momento a otro, el pequeño altillo había visto reducido su espacio habitable considerablemente. Se trataba de un espacio rectangular, relativamente estrecho debido a la forma del tejado y repleto de telarañas. Aldar, que era el que primero había podido examinar a conciencia lo que le rodeaba mientras Freya se encargaba de ayudar al resto en su escalada, había hecho recuento del poco mobiliario que se almacenaba allí: dos banquetas medio carcomidas, montones de tablas y maderos que seguramente habían sido ensamblados numerosas veces para levantar un pequeño pero efectivo cadalso, cascotes producto del gran impacto contra la pared y, como origen de estos, una enorme roca que a buen seguro pesaba más de doscientas libras. Este último elemento era el que sin duda llamaba más la atención por lo insólito de su presencia. Gracias a todas las telarañas que habían crecido a su alrededor y a la gruesa y blanquecina capa de excrementos de pájaro que cubría la parte superior de su superficie era fácil deducir que aquella roca llevaba allí muchos años. También era evidente que el habitáculo donde se hallaban no había sido visitado en mucho tiempo, tanto que de haber existido alguna huella ésta hacía ya mucho que había desaparecido bajo la gruesa capa de polvo.

Si la luz de la luna ya era escasa en el exterior, allí dentro era prácticamente inexistente. Aldar, Freya y Zafira habían sido testigos del declive de ésta a medida que el altillo comenzaba a llenarse de gente. Sólo cuando los cuerpos de los aventureros más voluminosos dejaron espacio frente al hueco en la pared estos pudieron volver a tener una visión medianamente clara de la ubicación de cada pieza de mobiliario y, sobre todo, de las vigas que tenían sobre ellos, las cuales podían llegar a ser enemigos muy traicioneros contra los más altos.

El suelo, como toda la estructura de la edificación, estaba formado por sólidos bloques de piedra. Gracias a ello, los compañeros podían moverse por la habitación sin tener que temer los crujidos de la madera de otras casas que habían dejado atrás. Sólo cuando la bota de uno de ellos se apoyó sobre un espacio que quedaba oculto por el polvo acumulado fueron conscientes de la presencia de una trampilla que comunicaba el altillo con el espacio inmediatamente inferior. Lógicamente, ésta tenía que estar en algún sitio, pues el cadalso portátil y las banquetas tenían que haber llegado a través de alguna abertura.

 

- Tiradas (1)

Notas de juego

En algún punto del edificio tiene que haber una hoguera o una chimenea porque os llega el olor a leña quemada.

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25/01/2018, 23:46
Ático de la Cárcel

Notas de juego

Cuando se para a escuchar detenidamente, Zafira cree distinguir los ladridos lejanos de al menos dos perros distintos. Por el tono de los mismos la druida sabe inmediatamente que están jugando, por lo que no hay que temer que sea debido a su presencia en la cárcel.

Si tuviese que apostar, la elfa diría que están en la planta baja, muy cerca de la puerta que da a la calle, pues los ladridos son audibles de forma más clara a través del agujero que a través de la trampilla cerrada.

También puede hacerse a la idea de que son perros grandes.

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26/01/2018, 11:12
Aldar

A medida que nuestros compañeros iban ascendiendo hasta aquel ático, les fui dando indicaciones de guardar silencio, haciéndoles gestos mientras me llevaba un dedo a los labios. Fui especialmente insistente en el caso de Avlin, cuya incontinencia verbal nos era de sobra conocida, y me lo planteé en el caso de la extraña elfa, cuya forma de ser me resultaba en ocasiones indescifrable.

Una vez todo reunidos allí, pude observar con mayor detenimiento el lugar, donde destacaba especialmente la ausencia de una puerta. Era sencillo relacionar el agujero en el muro con aquella roca que descansaba en el extremo contrario de la sala. Parecía ser una especie de pieza de artillería, que debía haber sido arrojada, como mínimo, mediante una voluminosa catapulta. La idea que se había aposentado entre nosotros, de que el estado ruinoso de la villa se debía a los actos perpetrados por un dragón, podía no estar tan bien encaminada. Podría haberse tratado de una batalla mucho más mundana, de defensores y asaltantes, ejércitos en disputa. Claro que, bien mirado, era también posible que la artillería tratase de golpear a un dragón que asaltase la ciudad, y nos encontrásemos ante los devastadores efectos de un disparo errado.

En cualquier caso, aquello no afectaba en absoluto a nuestra tarea. Era historia pasada, de escasa utilidad, más allá de saciar la curiosidad. Lo importante quedó claro al detectar aquella trampilla de madera en el suelo, así como el ligero aroma a leña quemada que detecté, algo que dejé claro al elevar mi rostro husmeando el aire, para que mis compañeros hicieran lo propio. En cualquier caso, le hice un gesto a Freya, tocándome la oreja y señalando la trampilla, antes de apoyar mi cabeza sobre la madera, echando en el suelo, en un intento de captar algún sonido de lo que hubiera abajo, antes de intentar abrir aquel acceso al piso inferior.

- Tiradas (1)
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26/01/2018, 12:20
Zafira 'Ithildin

La elfa les hizo gestos con las manos indicando que había oído dos perros en la planta baja, en dirección a la puerta que da a la calle.  Quizá Avlin o el enano habían oídos esos ladridos también de forma clara a través del agujero, mejor que a través de la trampilla cerrada, y por lo tanto habían llegado a la misma conclusión.

Hizo el gesto para indicar que los animales estaban en calma, que no habían sido detectados -todavía.

¿Podría ella deslizarse hasta el sitio y calmarlos mientras los demás rescataban a los prisioneros?  ¿Estarían los perros con los guardias-ladrones?  Invocó su orison de guía, para mejor convencer a los animales cuando llegara el momento.

Notas de juego

* ¿Me ubicas master?  ¿Podría hacer ese movimiento de alguna manera inconspicua? 

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26/01/2018, 15:51
Balakar

A pesar del resbalón a la hora de ayudar al explorador a subir, nada parecía haber alterado la paz reinante. Barboté y maldije entre dientes los málditos cascotes con los que habia patinado y me afiancé mejor para ayudar a mis dos compañeros en tierra.

Por suerte, atandolos con la cuerda y aupandolos sobre mis hombros, Zafira y Avlin treparon sin problemas. Me habia tomado un breve momento, mientras limpiaba el lugar donde me apoyaría, para indicarle a la druida los puntos más fáciles para escalar aquella pared, aunque tampoco creía que fuese a hacerle demasiada falta.

Por fin me llegó el turno y medio ascendí, medio mi izaron a pulso, mientras mascullaba entre dientes.

La buhardilla, si aquella era la función de aquella estancia, estaba sumida en tinieblas, sobre todo ahora que los cinco nos agolpabamos en el estrecho espacio. Afortunadamente, el suelo era de piedra, así que no teniamos que preocuparnos porque nuestro peso hiciese ceder el piso.

Tras un breve momento para acomodarme el equipo y dejar que mis ojos se aclimatasen a la oscuridad del lugar, pude hacerme una idea de las dimensiones de la habitación. Claro que la pesada piedra -un proyectil de algún tipo de arma de asedio.- que se enseñoreaba  de la estancia era dificil de obviar.

"Por las barbas de Moradin ¿Que narices ha pasado en este lugar?"

Aldar se habia acercado a lo que parecía el perfil de una trampilla de acceso de unos cinco pies y hacia gestos para indicarnos -más o menos- que pretendía pegar la oreja para oir algo del piso de abajo. Zafira, por su parte, trataba de tranquilizarnos con respecto a los ruidos que parecian indicar que habia perros guardianes bajo nosotros... en alguna parte de la planta baja. Y, mientras tanto, el tenue olor de la madera quemada insinuaba que muy cerca de alli habia una sala común o una cocina... Con su dotación de cocineros, tajos, cuchillos y trinchantes.

Cuidadosamente, me desprendí de la mochila. No iba a necesitarla en mitad de una pelea y no tenia sentido bajar con ella. Los abrojos y otras sorpresas estaba asegurados en la bolsa de mi cinturón, asi que, afianzando el escudo en el brazo y el hacha en mi puño, me apresté para el combate.

Hice un gesto con la barbilla, preguntando que estaba pasando bajo nuestros pies.

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27/01/2018, 11:49
Ático de la Cárcel

Notas de juego

A pesar de pasarse varios minutos con la oreja pegada a la trampilla lo único que el explorador es capaz de escuchar son las respiraciones de sus compañeros y, muy espaciados en el tiempo, algún que otro ladrido en la calle.

Lo que sí es capaz de apreciar Aldar es que la madera está dura como una piedra y muy hinchada, tanto que casi se ha deformado allí donde hace contacto con los bloques de piedra.

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27/01/2018, 11:53
Ático de la Cárcel

Notas de juego

@Zafira: Vuestra posición en estos momentos, en la segunda planta de la cárcel, hace que la única forma que puedas acercarte hasta ellos es bajando de nuevo por donde habéis venido y volviendo hacia la plaza principal. Los perros que escucháis imagináis que o bien están en la planta baja de la cárcel, lo cual significaría que hay ventanas o puertas abiertas por las que viaja el ladrido, o bien en la misma explanada.

Habría otra forma, mucho más arriesgada, que sería subiendo al tejado y caminando por éste hasta asomarte a la calle por la parte delantera.

Por cierto, ¿qué es Orison de guía?. Si usas hechizos, por favor, indícalo en las notas que así me es más fácil localizar cuándo usaste un hechizo en concreto o cuántos has usado por día.

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27/01/2018, 14:05
Aldar

Tenía buenas y malas noticias, aunque casi hubiera preferido que el resultado de mi escrutinio hubiera sido justo el contrario. Hice gestos a los demás para que, a pesar de que lo estrecho del lugar ya nos obligaba a permanecer cerca unos de otros, se reuniesen hasta que nuestras cabezas casi se unieran en un círculo en que poder hablar extraordinariamente bajo.

No oigo nada ahí abajo, pero tenemos otro problema. -Señalé la trampilla un momento- La madera de la trampilla está dura e hinchada, es posible que cueste mucho abrirla y que hagamos ruido en el proceso...