Partida Rol por web

Entiendo, entonces tal vez pueda llamar al dueño de la tienda, seguro que tiene algo especial con lo que tratar, y no creo que le guste desaprovechar esta oportunidad y que se la lleven sus rivales. El humano sonrió afablemente, puede que la chica fuera bonita, pero eso no la hacía una inepta, y seguramente no tardaría en llamar al supuesto mercader para negociar el posible negocio.

una vez haber hablado con el cantinero le dejo una piesa de plata en la mesa simbolizando gratitud por la informacion luego volteo y les digo a mis compañeros

espero que les vaya bien voy a buscar infomacion

miestras pienso

uffff por lo visto estos siempre van a ser haci de relajados deberian de tomar las cosas mas enserio pero bueno no soy nadien para jusgarlos

y salgo de la tarberna y me dirijo hacia la tienda mencionada (de conocer donde queda...sino comienso a preguntar por el pueblo para llegar a ella siempre recordando el nombre del que me an dado)

Yeribier sale de la taberna. Hace un par de preguntas a los que pasaban por alli y no le cuesta trabajo encontrar la tienda de Telas Kollias a unos pocos pasos del puerto. Una vez alli te encuentras con que Valerius esta dialogando con un hombre que coincide con la descripcion de Kollias.

me hacerco hacia mi compañero valerius y llevando mi mano derecha hasta mi boca hago un gesto para llamar la atencion mienstras digo

ejemmm...buenas caballeros e inclino un poco la cabeza a hacia la señorita con la que esta hablando y digo buenas disculpen alguien save donde se encuentra el señor kollias.

y los miro a todo y veo que interrumpido la conversacion y digo

a mil disculpas si os he interrumpido alguna platica que tuiesen previmamente, si lo ise les pido mis mas sinceras disculpas

mienstras quedo a la espectativa esperando una respuesta.

Se abre la puerta de la tienda y aparece Yeribier en el umbral. Ve a Valerius hablando con la mujer que le esta atendiendo y a una pareja de ancianos mirando unas telas para decorar su casa.

 Entro en la tarbena junto con mis compañeros...

-No es una mala ocasion para tocar algo podria sacarme unas monedas...

Voi a por los intrumentos, posiblemente pueda conseguir algo de dinero o la satisfaccion de una aplauso, aunque ahora que lo pienso prefiero que me cuenten una buena historia asi compongo algo... 

.....Al volver escucha la conversacion mantenida sobre la competicion del vino y la historia del pobre hombre, "calcinado " despues de beber nada menos que 15 litros de vino... toda una proeza...

-Oh, una historia fascinate, me la podria contar usted bien me gustaria componer algo sobre ese hombre -Apela a todas sus encantos para que le cuenten la historia- ¿Seria usted tan amable?.

Valerius estaba esperando la respuesta de la dependienta, todo iba bien, cuando de repente llegó Yeribier. ¿Cómo a podido llegar en tan poco tiempo desde la taberna hasta aquí? Tan solo llevo cinco minutos y he venido montado en Brisa.

Pero más que la curiosidad le afloraba la rabia, le molestaba hacer bien un trabajo y que alguien de su propio grupo lo destrozara. Aún se puede encauzar el curso de la conversación, espero que no lo siga estropeando, ¿qué manera de investigar es esa?

Cita:

Como si le molestara la presencia de Yeribier, lo miró seriamente y con voz clara y firme le respondió. Pues sí señor, nos ha interrumpido, así que le agradecería que esperara su turno para hablar con la señorita.

Volvió a enfocar su mirada en la dependienta, otra vez con una sonrisa bastante practicada en sus días de academia, y relajó el tono de voz. Bueno, entonces ¿puede llamar al dueño de esta tienda? Soy extranjero y tengo que buscar un lugar donde alojarme esta noche, así que tengo algo de prisa.

La mujer entra por una puerta tapada con una cortina y al rato sale acompañada por un hombre. El hombre, con la piel mas oscura que nadie haya visto jamás, es calvo como una sandia. Viste unas comodas prendas de paño. Sale al mostrador, la mujer le indica  con un gesto a Valerius y Kollias se acerca directamente.

- ¿Que tal? Me llamo Kollias, aunque si estas aqui supongo que habrás oido hablar de mi y de mis telas. Zenobia me ha dicho que quieres telas para comerciar con ellas. He de suponer que eres de fuera de Ciudad Capital. ¿De donde eres, mi buen amigo?

- Bien caballero- mirando a Yeribier - ¿que puedo hacer por usted?

De un lugar lejano, con las tierras bañadas por el sol, con mares de arena a los que llamamos desiertos, con tribus nómadas que montan camellos, donde la vida es dura pero bella, aunque tal vez algunas de estas telas pueda hacerla más bella aún. Valerius caminó hacia el comerciante y le tendió la mano derecha, invitándolo a estrecharla.

Tal vez podamos hablar en un lugar más tranquilo, veo que tiene usted un despacho, o por lo menos le sirve como tal.

al escuchar a la mujer hablarme digo

vera me gusta ir al grano directamente puesto que simpre soy muy correcto en mis cosas.

y haciendo una leve pausa mienstras respiro profundo digo

he podido darme cuenta a las afueras de la taberna que se necesitan mercenarios para una mision ofresida por un tal señor kollias, miestras ignoro el momento en que valerius se adelanto y fue a hablar con kollias pensando

mejor movernos en dos angulos distintos.

que me informaron en la taberna que podia ubircarlo por estos lados ya que me gustaria saver de que se trata dichosa mision.

- Si no le importa caballero, espere a que acabe de hablar con este señor y ahora mismo estare con usted y le comento.

Luego se gira a Valerius

- No conozco ningun lugar asi, pero seguro que tiene que ser muy hermoso. Ciertamente tengo un despacho, pero si no le importa antes hablare con este otro caballero. Le ruego tenga la amabilidad de esperar. Es un trabajo muy delicado ese que solicité.

Wisakh a penas esperó a que trajeran algo de comida, decidió empezar ensegudia y en un momento se bebió los cinco litros como si fuera agua, se le hincho el pecho de orgullo.

 - Y que Remi, como lo ves? está mas que chupado, no crees?

El mago le acompaña, pero mas mesurado... El si espera que halla comida antes de beber, tomandose su tiempo y pausas para descansar... Asi mismo, camina entre las mesas, hablando con los concurrentes, tratando de obtener rumores y cosas de la zona... Al tiempo, tambien ha dado cuenta de sus 5 litros, con mucha paz...Mira su bolsillo y hace un gesto mohino, esto no le gusta tanto... Ademas que la charla que esperaba no parece fructifera....

Bien compañero, que hacemos? Seguimos o nos damos por satisfechos? +pregunta al grandullon con gesto tranquilo+