Partida Rol por web

La mira, y se detiene, pues Yui se ha puesto delante, aun sigue con las manos en la nuca... y ve que se ha ruborizado.

Ya veremos. - se vuelve a poner a caminar, rodeando a Yui - Además, ¿qué más te da? Tú estarás con él.

Ahora es Yui la que se detiene, sorprendida.

¿Con... él? ¿De qué hablas, Setsuna? Se ha puesto seria de golpe. Si entro al club es por la música. Es algo que me tomo muy en serio. Vuelve a caminar, quizá algo ofendida, aunque intenta disimularlo.

Arquea una ceja. Setsuna no se callaba nunca. Era un defecto... o quizás una virtud.

¡Vaya! Pues si que te pone la música, ¿no? Porque por los coloretes que te han subido por las mejillas - dijo dándole un suave golpecito en la misma a la rubia - nadie lo diría.

Se coloca las manos en los bolsillos de la cazadora y se echa a andar de nuevo a paso rápido.

Bah.

Yui frunce el ceño ahora, plantándose delante de Setsuna e interrumpiendole el paso.

¿Qué tiene eso que ver con mis motivos para entrar al club? Ahora sí está seria y ofendida. Busca la mirada de Setsuna para que no la aparte de la suya.

Escúchame bien, Setsuna. No sé qué te habrás imaginado ni porqué te habrá molestado. Pero ese hombre es un profesor. Admiro muchísimo su forma de tocar y su melodía... nada más. Entraría al club aunque fuera un monstruo y no tuviera esos impresionantes ojos azules si de todas formas tocara como lo hace. ¿De acuerdo?

Frunce el ceño, y se aprieta el puño con fuerza. Clava sus grandes y expresivas pupilas azules en las de ella...

Claro.

Dice simplemente, rodeándola una vez más y siguiendo su camino.

Yui asiente y sigue a Setsuna, en silencio y con todo su cuerpo rígido. Caminando recta... Toda la comodidad que sentía con su compañera de cuarto, acababa de esfumarse por completo.

Finalmente, tanto la una como la otra, llegan a sus respectivas clases...

Los ánimos no son dignos de una emotiva despedida, así que, cada una se dirige a su aula con un vago gesto de manos como único saludo...

Nada más salir de la clase, la joven Ágatha escucha cómo seis campanadas se suceden, resonando en toda la Academia: "dong, dong, dong, dong, dong, dong..."

Según los horarios que constaban en la normativa del centro, faltaban unas tres horas aún para que sirvieran la cena en el comedor, así pues, disponía de ese tiempo libre para lo que quisiera...

Hacía apenas unos momentos, había visto a una de sus compañeras de habitación, Setsuna, salir del aula, pero nada más salir ella misma, comprueba que no la ve allí... Al parecer, es rápida...

El pasillo, casi vacío, se extiende cuán largo es, comunicando con otros pasillos, otras puertas, y escaleras...

Realmente la Academia es enorme... Y al ser el primer día, es muy fácil perderse allí...

Me asomo curiosa por este pasillo despues de haber visto la carrera de Setsuna por haber llegado a alguna parte...
Ahora que lo pienso, no se a donde va este pasillo digo para mis adentros...
Me detengo un momento y luego me digo a mi misma...
Bueno, es mi primer dia, lo mejor sera conocer ahora que puedo...
De esta manera empiezo a avanzar a traves del pasillo, asomandome por las ventanas de los cuartos que las tienen, tan solo para descubrir que son aulas: algunas vacias, otras con diversos elementos... Sin embargo, a medida que avanzo el pasillo se vuelve aun mas oscuro, y las aulas son mas distantes entre si..

La joven se encamina por el pasillo, observando todo cuanto por allí hay.
Las aulas parecen estar ya vacías y oscuras, puesto que ya las clases han terminado hace unos minutos...

Mas...
Algo llama la atención de la joven...

Una luz al final del pasillo...
Parece provenir de un aula diferente a las demás... No sabe cuánto se ha alejado de su aula, pero lleva ya un rato caminando...

Igual podría acercarse e intentar ver qué hay...
O no...

Mirando aun extrañada aquella luz a lo lejos, dudo momentaneamente acerca de mi avance:
Deberia quedarme?... o regresar...?
Pienso por un momento, yempiezo a calcular el tiempo...

No creo que haya pasado mas de media hora...
... pero podria encontrarme alguna cosa desagradable de nuevo!

Tiemblo por un segundo... y saco mi lapiz corrector...

Bueno, no sabre que hay si no paso a ver...

Palpo mi bolsillo, constatando la presencia de mi pequeña linterna...

Finalmente tomo el lapiz y escribo un pequeño mensaje en la pared :

He seguido la luz. En caso de no ser cierto, la curiosidad me ha llevado.

De esta manera, empiezo a avanzar...