Partida Rol por web

El precio de la esperanza - +18

PROLOGO

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26/01/2016, 20:31
Director

Tuvo que aguardar su turno durante casi una hora. La sala de espera a la que le habían hecho pasar era un lugar blanco, limpio y ante todo frio. La temperatura era aceptable, se trataba de otro tipo de frio. Un frio que no calaba los huesos pero si el alma.

Dos sillones mucho mas cómodos que los de cualquier hospital y una mesa llena de revistas constituían todo el mobiliario. Unos altavoces integrados en el pecho llenaban la estancia con la suave melodía de la primavera de Vivaldi.

Habían sido dos largas semanas de pruebas, test y entrevistas. Muchas más de las que hubieses esperado, pero basándote en tu nula experiencia sobre ensayos clínicos, puede que fuese lo normal. Ahora tendrías la última entrevista, la firma de los acuerdos y consentimientos. El último paso del tedioso procedimiento, pero quizá el primer paso del resto de tu vida.

Un ruido al otro lado de la puerta te hizo tensarte de forma involuntaria. El pomo se movió y el rostro del enfermero se asomo por la rendija.  Se trataba de un hombre joven, vestido con un uniformo de tono purpura.

La doctora le está esperando.

El hombre se quedo en la puerta, indicándote con un ademan que lo siguieses.

 

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27/01/2016, 14:28
Joy Addams
Sólo para el director

Joy estaba en la sala de espera con sus padres, su hermana mayor, Caroline, estaba en el colegio y no podía acompañarlos y el matrimonio Addams casi lo prefería así. 

La pequeña estaba arrodillada frente a la mesa donde estaban colocadas de forma ordenada las revistas de corazón y entreteminiento para los pacientes, las había echado a un lado para poder colocar mejor el cuaderno en blanco que su padre había traído para que Joy se entretuviese pintando, y eso hacía. Ceras de varios colores rodeaban la hoja en blanco a la que Joy le daba vida. Estaba dibujando a BubbyBonny, un amigo imaginario que la niña había inventado hacía un par de meses; era un conejo de color morado y motas azules, que llevaba pantalones con tirantes y zapatos de payaso. Cuando terminó su obra de arte, fue a enseñársela a sus padres.

Mira, mami-llamó su atención poniendo el dibujo sobre el regazo de la mujer, a la que apenas le dio tiempo a esbozar una sonrisa antes de que un hombre los llamase. 

Tenían que ir a ver a la doctora, así que Joy recogió con rapidez sus colores y libretas y se encaminó a la consulta junto con sus padres.

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27/01/2016, 23:05
Richard Mae
Sólo para el director

Ricky comenzaba ya a hartarse, nunca había sido muy paciente, más si no había otra cosa que hacer que mirar nada en absoluto.

Al principio se entretuvo mirando algunas de las revistas que a primera vista podrían entretenerle, pero no fue mucho tiempo. "Al menos podrían haber decorado esto un poco..." Según le habían informado, este era el último paso.

A punto ya de levantarse y llamar a la puerta o preguntar que pasaba, un ruido sonó desde el otro lado y seguidamente la puerta se abrió. 

"Por fin..."

Un hombre vestido de purpura, seguramente algún enfermero le invitó a pasar, por fin había llegado el momento, y unos pequeños nervios de última hora empezaron a recorrer su cuerpo mientras se levantaba.

-Si, voy.

Y paso por aquella puerta cerrando tras de si.

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28/01/2016, 09:53
Dra. Oboke

Recorrieron el pasillo tras el enfermero hasta una puerta de color blanco, el mismo que el de las paredes. Todo en aquel lugar era muy blanco. El enfermero llamo a la puerta.

- Los señores Addams. - informo el hombre.

- Adelante - respondió una voz femenina.

En el interior, una mesa grande ocupaba parte de la habitación, y al otro lado una mujer vestida de doctora, se levanto y dio la vuelta a la mesa hasta donde estaba la niña. Se agacho y con una amplia sonrisa le ofreció la mano.

- Tú debes ser la princesa Joy, - dijo con tono amable - he oído hablar mucho de ti. Yo soy la doctora Oboke, pero puedes llamarme Clara.

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28/01/2016, 09:54
Caroline

Caroline estaba pasando las hojas de una revista, aunque en realidad no leía, simplemente, la ojeaba. Sentada en el sofá, con una pierna cruzada sobre la otra, la joven movía rítmicamente el pie, nerviosa, haciendo temblar la revista que apoyaba en su regazo.

Tantas pruebas, tantas "segundas opiniones"... estaba cansada de todo aquello. Sabía que su tumor era inoperable, un grado IV... imposible de superar. Pero ella no se limitaría a quedarse empotrada en una cama a esperar a la muerte. No, ella lucharía hasta su último aliento.

Dio un respingo cuando el enfermero abrió la puerta. Tragó saliva, nerviosa, cuando le indicó que pasara a ver a la doctora. Caroline dejó la mesilla sobre la mesa y se incorporó. Un suspiro largo salió de sus labios, antes de entrar en la consulta.

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28/01/2016, 10:05
Dra. Oboke

Richard siguió al enfermero a través de un pasillo adornado con algunos cuadros modernistas, el tipo de pinturas que hoy en día decoran muchas oficinas y despachos. El enfermero se detuvo frente a una puerta.

- El Sr. Mae. - informo el hombre tras llamar a la puerta.

Una voz femenina y dulce respondió.

- Hazle pasar.

Se trataba de una estancia bastante amplia. En un lado había una enorme mesa lacada en color gris. Sentada tras el escritorio, la doctora, una mujer de color, se levanto con una sonrisa y tendió la mano a Richard.

- Gracias por venir, - dijo con tono amable - y por su paciencia. Como imaginara estamos bastante saturados con la gran cantidad de solicitudes que nos han presentado. Soy la doctora Oboke. Siéntese donde prefiera.

Frente a la mesa había dos sillas de cuero negro y metal, y junto a la pared un sofá de aspecto cómodo. Mientras Richard decidía donde sentarse, la mujer lo hizo en su sillón tras el escritorio. Cogió de la mesa una carpeta y comenzó a examinarla.

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28/01/2016, 10:26
Dra. Oboke

El hombre la guio por un pasillo no demasiado largo hasta una puerta. Una placa sobre la puerta rezaba Dra. Oboke.

El hombre llamo a la puerta.

- La señora Jones.

Sin esperar respuesta, abrió la puerta y dio un paso atrás invitando a la joven a que entrase en el despacho. Mientras avanzaba hacia el interior, pudo sentir los ojos del enfermero recorriéndola de arriba abajo con la mirada.

La puerta se cerro y Caroline se encontró en un despacho de buen tamaño, frente a una mujer de color con atuendo de doctora. Se encontraba sentada al otro lado de un gran escritorio de madera, con un apagado color gris. Numerosos expedientes formaban varios montones ordenados. La mujer hizo un ademan a Caroline para que se sentase en una de las dos sillas que había frente al escritorio, y cogio uno de las carpetas en cuya portada se leia el nombre Caroline Jones.

- Bienvenida Señorita Jones. - dijo con voz suave - Le agradezco la paciencia que ha demostrado. Esta entrevista no durara demasiado tiempo, es una mera formalidad. Solo queremos asegurarnos que comprende todas las condiciones y todo lo que implica participar en este ensayo. 

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29/01/2016, 15:07
Joy Addams

La niña entró en la consulta y sonrió tímidamente a la doctora. Correspondió a su saludo con la manita, estrechándola con la firmeza que era capaz una niña de apenas seis años. 

Aún no soy princesa-la corrige después de soltar una risita-. Es un placer, doctora Clara.-respondió con una sonrisa dulce y amable. 

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29/01/2016, 18:34
Dra. Oboke

La medico regalo una amplia sonrisa a la niña. Luego se sentó en un mullido sofá que había contra una de las paredes, e indico a Joy que se sentase a su lado. Los Addams ocuparon las dos sillas que quedaban libres.

Bueno Joy, imagino que sabes porque estás aquí ¿verdad? - la mujer dio tiempo a la niña para que respondiese antes de continuar - lo que necesito saber es que entiendes lo que va a pasar. Supongo que tus papas ya te lo han explicado, pero yo necesito estar segura de que tu lo comprendes.

La mujer habla despacio, mirando a la niña directamente, como si pudiese ver en su mirada la comprensión o su ausencia.

- Si te elegimos para este tratamiento tendrás que estar lejos de tus padres durante mucho tiempo. Tenemos unas reglas muy estrictas y pasaras bastantes días sin hablar con ellos. Luego, si todo va bien, podrás llamarles por teléfono. ¿Crees que podrás hacerlo?

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30/01/2016, 02:49
Richard Mae
Sólo para el director

El caminar por aquel pasillo hacía parecer todo aquello de película. A cada paso que daba, Richard estaba más cerca de algún lugar, el cual cambiaría su vida, hasta que se detuvieron.

-¿Es aquí?

Por dentro notaba como toda aquella emoción que había comenzado a sentir se desvanecía al no haber dado tantos pasos como esperaba.

Al entrar, se acercó a aquella mujer que tendía su mano para estrechársela.

-Gracias a vosotros.

Haciendo caso a aquella señora, tras un pequeño vistazo a aquella sofisticada estancia, Richard decidió optar por el sofá, después de tanto tiempo en aquella sala de espera, prefería sentarse en algo bastante más cómodo, así que se echó en este alargando sus brazos por encima del respaldo y apoyando su pie derecho sobre su rodilla izquierda.

-¿Y bien? ¿Cuál es el boletín informativo de hoy? - Preguntó en tono irónico pero inofensivo.

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30/01/2016, 10:24
Dra. Oboke

La mujer levanto la vista de la carpeta para observar como Richard se sentaba. Se levanto, rodeo la mesa e hizo girar una de las sillas hasta ponerla frente al entrevistado. Sonrió ante el comentario de Richard, pero no respondió al mismo.

- Bien - dijo mientras se sentaba de nuevo - Señor Mae, tiene usted una hermana pequeña además de sus padres, ambos vivos ¿verdad? - espero la respuesta del interpelado antes de continuar - ¿Se ha despedido?

La inesperada pregunta cayó sobre el joven como un mazazo.

- Este tratamiento tiene una duración de dos meses. Antes de convertirse en paciente del mismo debe tener claro que es posible que no vuelva a ver a sus seres queridos. Los protocolos de este ensayo son muy estrictos. - hizo una pausa para dejar que el joven asimilase la información - Una vez iniciado el tratamiento no hay vuelta atrás. Eso tiene que quedar meridianamente claro para los participantes. Además existe un riesgo real de que su enfermedad, o incluso los efectos del tratamiento, puedan resultar en el deceso del paciente. - Una nueva pausa, esta vez más larga.

- Queremos estar seguros de que usted no va a volverse atrás en mitad del tratamiento. Tenemos que saber que entiende los riesgos, y que ha dejado todo preparado para el caso de que ocurra lo peor.

El rostro amable de la doctora contrastaba con la firmeza de su tono.

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30/01/2016, 11:13
Caroline

Caroline llenó sus pulmones de aire, antes de soltar un largo suspiro. 

-Buenos días- saludó a la doctora, antes de sentarse en la silla que ésta le ofrecía. Con las manos sobre su regazo, escuchó a la doctora con atención mientras hacía girar, nerviosa, la alianza de plata que le había regalado Steve, y que llevaba en el dedo anular izquierdo -. Entiendo- fue lo único que dijo, invitando a la doctora a empezar con la entrevisa con la mayor brevedad posible. Aquel ensayo, parecía ser su última oportunidad...

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01/02/2016, 16:44
Dra. Oboke

La Doctora se detuvo durante unos instantes con la mirada fija en el contenido del expediente, quizá leyendo algo. Los segundos parecían pasar con inusitada lentitud. Finalmente, la mujer inicio la entrevista.

 - Su padre se llama Andrew Jones, ¿verdad? no nos consta que tenga más familia -se detuvo un instante, levantando la vista hacia Caroline - No pretendemos entrometernos en su vida, pero este tratamiento tiene una duración de dos meses. Antes de convertirse en paciente del mismo debe tener claro que es posible que no vuelva a ver a sus seres queridos.  - hizo una pausa para dejar que la joven asimilase la información -  Los protocolos del ensayo son muy estrictos por lo que una vez iniciado el tratamiento no habrá posibilidad de detenerlo. Además existe un riesgo real de que su enfermedad, o incluso los desconocidos efectos secundarios del tratamiento, puedan resultar en complicaciones graves. - Una nueva pausa, esta vez más larga - Lo que necesito saber es que ha dejado todos sus asuntos en orden. Que se ha despedido de sus familiares… su padre. Que no va a pedir que se interrumpa el tratamiento.

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01/02/2016, 16:49
Caroline

La joven se acomodó en la silla al escuchar a la doctora. Sus ojos azules se humedecieron, no sólo por pensar en su padre, sino en su novio, del que prácticamente había huido para evitarle un sufrimiento mayor. Apretó los labios, luchando por contener las lágrimas, mientras observaba el despacho de la consulta, pero sin fijarse en nada concretamente, pues intentaba poner sus pensamientos en orden.

Finalmente, suspiró.

-No, no tengo más familiares cercanos y, en lo que respecta a mi padre, a su entender estoy buscando otras opiniones médicas en lo que refiere a mi enfermedad- sentía un nudo aprisionándole el pecho -. Si he de firmar algún documento para hacer constar que nadie, a parte de mi persona, puede interferir en el tratamiento, lo haré.

Ha pesar de la tristeza reflejada en sus ojos zafíreos, Caroline hablaba con determinación. Bajó la mirada y giró una vez más su alianza, antes de volver a mirar a la doctora.

-Mire, no ha sido fácil, pero he dejado todos los cabos atados. Mi padre querría estar conmigo hasta mi último aliento, pero sabe que soy una mujer adulta capaz de tomar mis propias decisiones- hizo una breve pausa -. Este ensayo es mi última esperanza y, si tengo que afrontarlo sola... lo haré.

No iba a suplicar, no iba a maldecir ni tampoco a llorar. Ya había hecho eso demasiadas veces desde que le diagnosticaron el cáncer. Ahora tocaba luchar.

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01/02/2016, 17:01
Richard Mae
Sólo para el director

Al principio se extrañó, pero le gustó que la doctora olvidara, o al menos aparentara olvidar, su posición de profesional que muchos utilizan para acercarse un poco más al paciente. Detalles.

-Si, Shery.- respondió con una sonrisa al pensar en ella.- Pues... -La verdad, nunca se imaginaría que le iban a preguntar algo así. - Pues la verdad... si y no. Ella sabía que iba a hacer estas pruebas, pero no me despedí, le dejé una nota antes de irme. La que si no sabe nada es mi madre, ella cree que me he ido a trabajar al extranjero.

Todo lo que la doctora iba diciendo, a pesar que en parte lo sabía, el que se lo recordasen solo hacía que le diese vueltas a la cabeza y se lo pensase dos veces más antes de aceptar. 

"Debe ser la forma de echar fuera a los mentalmente más débiles."

-No se preocupe.-Contestó con firmeza y un rostro algo serio.- No voy a abandonar esto. No hay otra cosa que pueda hacer, lo necesito.

Y su mirada lo decía todo, estaba decidido a luchar por conseguirlo.

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01/02/2016, 21:57
Maia Sasaki
Sólo para el director

Toda una hora era mucho tiempo para estar ahí metida tan sólo esperando.

Maia era paciente, pero desde que se enteró de que tenía cáncer... volvió a fumar aquellos cigarrillos que tanto odiaba al principio, cuando fumaba de adolescente... y no sólo fumaba. Se había tomado un par antes de entrar y a escondidas, desde el momento en el que salió de casa dejando aquella nota mal escrita decidió que volvería a fumar... total... iba a morir.

Inhalar y exhalar aquel humo le hacía sentirse relajada y no pensar en el hecho evidente de que estaba enferma. Cuando no fumaba le temblaba el pulso y se mordía las uñas de puro nervio. Ya no era sólo el hecho de afrontar la idea de morir, si no de asimilar aquel momento que estaba viviendo, asimilar que le iban a comer la cabeza de ideas locas y que tendría que acudir a sesiones... y asimilar que estaba enferma y llevarlo a cabo. Y que seguro que la obligarian a dejar de fumar. Todo aquello era un círculo vicioso que la tenía inquieta.

En cuanto apareció aquel hombre se giró de golpe y en seguida se recoloca la ropa y el pelo, en un intento de parecer calmada y tranquila... y aunque lograba parecerlo por sus gestos y su forma de caminar, relajada, le temblaba el pulso. Sigue a aquel hombre y no puede evitar subir una mano a su boca en un impulso de morderse la uña del dedo pulgar.

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03/02/2016, 12:33
Joy Addams

La niña se sentó en uno de los sofás de un saltito. Los pies no tocaban el suelo, así que los balanceaba lentamente como si patalease en el agua. Miraba a la mujer con sus grandes azules mientras asentían.

Sí, estoy malita y aquí me van a curar-responde. Cuando sabe que va a estar mucho tiempo sin ver a sus padres, los mira antes de volver su atención a la doctora. Tuerce un poco la boca, no muy convencida-. ¿No podré verlos nada de nada?-suspira un poco-. Creo que sí, aunque los voy a echar de menos... ¿podré mandarles mis dibujos?

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03/02/2016, 16:24
Dra. Oboke

Hay veces en que el silencio es más elocuente que ninguna otra palabra. Ese fue el caso en la consulta. La doctora cerro la carpeta con suavidad, incluso con delicadeza. La dejo encima de la mesa y se volvió de nuevo hacia la joven.

- Lo siento. - dijo lentamente - Se que todo esto es muy duro.

Se quedo de nuevo en silencio para dar tiempo a que Caroline se recuperase. Cuando volvió a hablar lo hizo un tono más cercano.

- Señorita Jones. Mi labor en esta entrevista es asegurarme de que no surgirán problemas durante el ensayo. En ese sentido estoy obligada a sugerirle que prepare un mensaje para sus familiares. Si decide hacerlo puede utilizar carta, video o cualquier otro soporte. Ese mensaje se consignara en una caja de seguridad que solo podrá ser abierta en caso de que se produzca el deceso, y su contenido será entregado a quien usted indique. - La mujer levanto una mano abierta hacia Caroline, pidiéndole que le permitiese continuar. - Es decisión suya, y solo queremos ofrecerle nuestra ayuda en esta cuestión. El otro asunto son los consentimientos y acuerdos de confidencialidad. No obstante, si lo desea podemos tomarnos un descanso.

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03/02/2016, 16:24
Dra. Oboke

La mujer asintió como si comprendiese porque Richard no había querido explicar la verdad sobre su situación.

- Entiendo. Sin embargo, en caso de que suceda lo peor puede que no tenga ocasión de despedirse en persona. Por esta razón la empresa ha contratado una serie de cajas de seguridad a nombre de cada uno de los pacientes del experimento. En ella puede usted depositar cualquier material audiovisual, o cartas dirigidas a sus familiares. En caso de que se produzca el fallecimiento, la caja se abrirá, y se dispondrá de su contenido de acuerdo a las instrucciones de cada paciente.

La mujer hizo una pausa, aunque era evidente que no había terminado.

- Mire, yo soy madre. No puedo imaginar lo que significaría para mí que mi hija muriese de pronto sin despedirse, sin una explicación, sin la posibilidad de volver a oír su voz. - se detuvo un instante. sus ojos brillaban - Creo que debería aprovechar esta oportunidad.

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03/02/2016, 16:25
Dra. Oboke

El hombre la guio por un pasillo no demasiado largo hasta una puerta. Una placa sobre la puerta rezaba Dra. Oboke. El enfermero llamo e indico que acompañaba a Maia.

La señorita Sasaki.

Un instante más tarde una respuesta afirmativa del interior indico al enfermero que la hiciese pasar.

Maia se encontró en un despacho amplio y bien iluminado. La doctora Oboke, si es que era ella, era una mujer de color con facciones amigables. Se encontraba sentada tras un gran escritorio de madera color gris, y rodeada por numerosos amontonados. La mujer examino a la mujer durante un instante que a Maia le pareció eterno. Luego bajo la vista hacia un expediente abierto que tenia frente a sí y comenzó a hablar.

- Siéntese señorita Sasaki. - la voz era a la vez dulce y firme, como la de alguien acostumbrado a ser obedecido. Una vez la joven eligió donde sentarse comenzó. - Sus padres… ¿están al corriente de su enfermedad?