Partida Rol por web

El reinado de los Strigoi: Capítulo I

Capítulo 4.1: Noticias frescas

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22/07/2018, 19:34
Director

10 de enero de 2055, 08:10 a.m.                                                                               Prípiat, Ucrania

Vuestra afiliación a La Resistance os había llevado a Prípiat. Ahora una ciudad fantasma y antes relativamente moderna. Fundada el 4 de febrero de 1970 expresamente para dar hogar a los trabajadores de la Central Nuclear de Chernóbil y a sus familias. Debido a su estratégica posición geográfica en un clima relativamente templado y un suelo muy fértil, cerca de una estación de tren, una autopista, y por supuesto el río Prípiat, la ciudad comenzó a desarrollarse, convirtiéndose en una de las zonas más agradables para vivir de la antigua URSS. La población en sólo 16 años creció hasta más de 40.000 personas.

Una ciudad grande, en expansión, próspera... Hasta que ocurrió el desastre. Todos los libros de historia hablaban de la explosión de la central de Chernóbil en 1986, de la posterior evacuación de toda la zona y de cómo un lugar con tanto futuro había quedado abandonado y fantasmal. Hace casi dos décadas desde aquella catástrofe y desde entonces nadie se ha atrevido a repoblar aquella zona, lo que la hacía perfecta como un buen escondite. Los niveles de radiación no desaparecerían de allí hasta dentro de 24.000 años, la tierra ya no era fértil y el río seguía contaminado. Pero qué era peor, ¿morir libre de un cáncer o subyugado como una bolsa de hemodonación viviente?

Y bajo esta ciudad fantasma, accediendo al alcantarillado varios kilómetros fuera de la ciudad, se podía llegar a uno de los búnkeres de la resistencia. Había que estar muy loco para estar metido en un sitio así, pero más loco aún para meterse a La Resistance. Solo aquellos con convicciones fuertes, gran determinación y ciertos pensamientos suicidas en su cabeza podrían meterse a hacer frente a los Strigoi. Algunos dirían que no eran deseos suicidas, sino un fuerte sentido del deber, el honor y de hacer lo correcto. Todos sabemos que el cementerio está lleno de héroes, eso lo explica todo.

Un pesado y grande portón se esconde tras uno de los intrincados túneles del alcantarillado de Prípiat. Al abrir la puerta el interior es más que decente, nada que ver con la humedad exterior para entrar. De no ser por la radiación el lugar estaría infestado de ratas o cualquier otra alimaña amante de la oscuridad, esto incluía a las sanguijuelas de las cuales se quería librar la resistencia.

Tras caminar por los pasillos revestidos de metal, os plantasteis frente a una puerta. Al otro lado había una sala de juntas y os pidieron sentaros. Un mapa de Europa dominaba la pared del fondo, presidiendo la mesa. Sobre el mismo muchas anotaciones de pequeños pueblos perdidos al completo, lugares infructuosos descartados, posibles lugares por explorar... Allí era donde realmente se cocían todos los planes a gran escala de La Resistance. Había otro lugar donde La Resistance se reunía, en un subterráneo en Courrières, por alguna razón era otro lugar donde los strigoi preferían no acercarse.

Llevabais tiempo viviendo ahí, aunque no habíais conocido en persona al grupo que se había marchado a Lesbos. Ni siquiera al tipo que había ido a Turquía con el mismo propósito. En la cena de navidad visteis a los primeros, sentados en la mesa con todos. Al segundo ni lo habíais olido, pero el resto hablaba. También se oían muchos rumores al respecto, puesto que no volvió de Turquía.

No erais los únicos en ser llamados, muchos de los habitantes de Prypiat se encontraban ahí con vosotros.

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22/07/2018, 19:38
Olivia "Liv" Moore

Allí os esperaba, Liv que os pidió sentaros a la mesa con ella. Con un gesto con las manos. La doctora en genética molecular parecía emocionada por algo. E inquieta.

-Pasad, pasad- dijo sin disimular la inquietud y la prisa en sus palabras. ­–Tenemos noticias de los chicos de Lesbos, al parecer están de vuelta y la misión es exitosa. Aún no sabemos mucho sobre los detalles, pero estoy segura que encontraron un vampiro.

Un vampiro, eso que Setrakian llevaba años especulando sobre su existencia pero que nunca había aparecido. Los supuestos maestros de esas alimañas que poblaban la tierra hoy en día. Un mito que muchos pensaban que no era sino el delirio de un viejo loco. Muchos de los seguidores de La Resistance no creían en ello, muchos solo se habían unido para no dejarse doblegar. Mucho ni sabían que su famoso líder creía en esas locuras.

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22/07/2018, 19:53
Shadow

- Joder, me suda hasta el culo - Hacia tanto calor en aquel bunker que pensaba que iba a derretirme a través del ojete en cualquier momento.
Después de casi una semana lamiendo la pantalla del ordenador, hubiera pagado por una buena ducha para rebajar el olor a muerto que llevábamos encima. Si algo tenía claro es que ahora mismo era capaz de beberme mi propio pis si Livvy me lo ordenaba con tal de salir a respirar un poco de aire fresco aunque me saliera un cuarto ojo radiactivo. Puede que incluso me hubiera prostituido por unas vacaciones, por sentir un poco de calor solar en mi piel, por comer algo que no fueran gachas rancias o sopa seca o por tener algo de tiempo libre para leer un buen cómic.

Olí la pechera de mi camiseta y arrugué la nariz.

Puta vida postapocalíptica, necesito lavar mis calcetines.

Me apresuré por los pasillos junto a Svass y ore a Dios, a Jesucristo, a Mahoma, a los aliens o a quien coño se preocupara por nosotros desde su sillón divino allí en los Cielos porque nos hubiera hecho madrugar para darnos buenas noticias y no para decirnos  que el grupo lésbico había muerto. 

-¿Cómo? - flipé en colores echando cuentas: gafotas sabelotodo, pelirrojo aneuronal anabolizado, negro interesante, matasanos estirado y pitutis con mal carácter. Ah, también estaba mudita. En realidad no les conocía en persona pero los rumores volaban.- ¿Han salido vivos de allí? -porque eso era lo último que me esperaba. Miré a Liv, miré a Svass, me miré las manos, miré la puerta de salida, miré a Svass de nuevo y después volvi a mirar a la rubia sin hacer mucho caso a los que se encontraban a nuestro alrededor.
"Encontrar" no era lo mismo que "ver".
¿Estás diciendo que han secuestrado a un chupasangres?

Notas de juego

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22/07/2018, 21:40
Svass

Esa mañana Svass pudo apurar un buen afeitado, y se podría decir que había sido capaz de dormir algo más de tres horas seguidas; todo un récord para él. El ucraniano era una persona difícil de tratar, no es que fuera persona sociable, es que realmente se le podía catalogar como un autentico ermitaño, un jodido misántropo que solo salía de su pequeño cuartucho para hacer ejercicio y las horas de comer. 

Por todo ello no le agradó que lo convocaran a una reunión, por ello detestó la idea que tener que compartir el oxigeno con más gente, por mucho que lo rescataran y le salvaran la vida. De hecho, ese fue el único motivo por el que se mostró colaborador aunque no tuvo ninguna gana de decir ni media palabra conforme se acercaban a la sala.

En ese momento recordó una de las numerosas charlas motivacionáles que les dieron tiempo atrás, tratando de evocar un sentimiento de lucha más allá del egoísmo, aludiendo a la capacidad de auto sacrificio. Svass suspiró amargado, pesaroso pero no dijo nada, solo pensaba, solo trataba de recordarse, como cada día que pasaba, porque estaba ahí.
La primera respuesta era bastante evidente - me salvaron la vida cuando pudieron dejarme en el río - la segunda, era la que más abstraído le dejaba, y, la que más odiaba - porque eres un superviviente - estaba harto de todo, sobre todo de sobrevivir a todo lo que le caía encima... su mente consciente deseaba la paz, en cambio, su subconsciente lo salvaba una y otra vez.

Miró al suelo alzando el labio superior en una mueca de asco y entró en la sala de juntas. Se tomó unos segundos para observar a los que allí estaban, como se iban sentando. Fue el último en tomar asiento,y lo hizo lo más apartado del resto que pudo (si es que fuera posible) y se quedó quieto escuchando. Su cuerpo se mantenía recto como una vara, pero cualquiera con un poco de capacidad de observación no le escaparía el detalle de que ese enorme hombre estaba hastiado hasta unos niveles peligrosos. 

La peliblanca, emocionada como un crío con un juguete nuevo habló sin demorarse mucho; lo que dijo dejó frío a Svass, cuya única reacción fue un largo suspiro, un suspiro glacial, cansado... pesado. Se acarició el mentón con la mano derecha y sin variar la posición de su rostro observó a extraño tipo que había oído decir que se llamaba shadow o algo por el estilo.

Vampiros, chupasangres los llamó este último.

El mundo ya no es lo que debía ser, la debacle en la que se había convertido había dado pie a un sin fin de fábulas y leyendas convertidas en realidad y ya al ucraniano le costaba saber que era real y que no, a veces, se despertaba sudoroso creyendo vivir una pesadilla... que inocente podía llegar a ser a veces.

Gruñó algo en su lengua materna y finalmente, se sintió con ganas de alzar la voz - ¿qué necesitas de nosotros? - preguntó con voz grave, de bajo, casi cadavérico. Realmente le importaba poco las nuevas, solo quería saber para que le requerían, que esperaban de él y en segundo lugar, de los demás que habían convocado.

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29/07/2018, 22:36
Olivia "Liv" Moore

Lavar la ropa y las tareas diarias que podrían ser normales y repetitivas, eran algo complicadas en un búnker. Había tareas y los que no podían hacer labores propias de seguridad o inteligencia, se dedicaban a eso. Todo el mundo arrimaba el hombro ahí abajo, era necesario estar organizados y Setrakian parecía tener un don para eso, aunque a veces fuera demasiado directo.

-Eso parece- dijo la doctora emocionada. –Espero que lo traigan, así veréis todos que lo que os dije de Turquía es cierto.

La doctora había estado parloteando sobre cómo habían despertado un vampiro en las catacumbas de Turquía y lo habían atado a un humano. Todo muy bonito en la teoría, pero ninguno tenía pruebas de nada, más allá de las palabras de Liv. La genetista no era mala persona, pero a veces parecía demasiado fantasiosa. Ver para creer decían.

Cuando el ucraniano gruñó, Liv fijó su mirada en él.

-Yo no necesito nada, Setrakian es quien dará instrucciones. Yo solo os hice llamar, él habla- explicó a él y al resto.

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29/07/2018, 22:37
Adam

No todos parecían conformes con las explicaciones de Liv, de hecho Adam parecía el menos conforme. El tipo era mecánico, arreglaba y hacía chapuzas aquí y allá. Había trabajado en el ejército arreglando coches y máquinas por igual, un americano poco patriótico al que le hubiera gustado retirarse con un tallercito en su ciudad natal.

-Yo creo que todo esto es un cuento. No creo que hayan encontrado una mierda. Lo que pienso es que deberíamos comenzar reclutando gente en las ciudades del norte, donde van menos strigoi- comenzó a decir y se creció ligeramente, acabando por dirigirse al resto de sus compañeros. -¿No pensáis lo mismo? Esta espera aquí encerrados es una tontería, pensando que una leyenda rancia de la Europa del este nos va a salvar de algo. Supersticiones y supercherías de la plebe temerosa del medievo no nos va a llevar a ninguna parte- añadió molesto, esperando alguna reacción de sus compañeros que le diera la razón.

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31/07/2018, 19:27
Svass

Svass se mantuvo impertérrito sin variar ni un ápice su expresión facial; unicamente parpadeó en varias ocasiones por pura necesidad fisiológica, un ojo humedecido es un ojo sano. Escuchó primero a la entusiasta mujer peliblanca y luego al fornido y "echado para delante" de cabello castaño y frondosa barba. 

En el mundo había muchos tipos de personas, y Adam parecía encajar con las personas del tipo martillo, para las que todo parecía un clavo que golpear hasta que se doblara o se hundiera... nunca contemplaban la posibilidad de que el martillo puede romperse. Svass tragó saliva y suspiró hastiado; no llevaba ni cinco minutos en esa pequeña reunión y ya sentía una tremenda necesidad de salir de ahí sin hacer ruido.

Apretó la mandíbula unas cuantas veces y parpadeó con languidez - de acuerdo - fue la respuesta asertiva que le dedicó a Liv, en cambio a Adam, giró la cabeza para poder mirarle de frente - me pregunto si hace un año, si alguien te dijera que existían unos seres que devoran gente y propagan una enfermedad, que poseen una fuerza superior a la de un hombre y demás, soltarías la misma respuesta de ahora. Esta guerra no se puede ganar con lo que tenemos hoy en día - Si el ucraniano era sincero consigo mismo el tampoco creía a pies juntillas en los vampiros, pero a todas luces parecía una posibilidad muy creíble.

Svass no quiso aventurar si Adam se había enfrentado a un Strigoi, pero él al menos si lo había hecho y una cosa le quedó clara esa fría noche en la que perdió a toda su familia, el ser humano no tenía ninguna oportunidad contra los Strigoi... y así había sido. No hizo alusión alguna a lo de reclutar un ejercito, esa idea le pareció tan infantil y fuera de si a estas alturas que responder sobre aquello sería, cuanto menos, una tremenda perdida de tiempo. 

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03/08/2018, 10:01
Shadow

¿Pero qué cojones?

Tenía que estar de coña. ¿Un vampiro aqui dentro? Joder.

Parpadeé un par de veces y me atraganté con mi propia saliva después de escuchar la explicación que nos dio Liv al respecto.

Cof, cof, cof.

Era cierto que mi corta experiencia vital no había sido precisamente un Paraíso Terrenal; pero a diferencia de los dramones sangrientos dignos de una película de casquería de serie B que sabía que habían sufrido muchos de los que me acompañaban en esta cárcel del subsuelo debido a las matanzas propiciadas por esas criaturillas, la causa de la mayor parte de mis traumas se debía, irónicamente, a aquellos que se hacían pasar por lo mismo que era yo: humanos.

Esos bichos parecían una amenaza, pero las armas en manos de gilipollas valientes lo eran aún más.

Y esto me parecía una gigantesca gilipollez.

No obstante. escuché con atención al rubiales cachas con acento del este que se dedicaba a hacer de manitas aquí y allá y después me tragué la réplica del siempre-silencioso-Svass con unas palomitas imaginarias.

Siempre tan misterioso, siempre tan serio, siempre tan Asperger.

Pero esta vez hiló más de tres palabras seguidas y me sorprendió. Mucho.

La verdad es que el tipo me caía bien, y en más de una ocasion había estado tentado a echarle un par de manos al póker para apostarme el palo que parecía llevar perpetuamente metido por el culo.

Puede que debajo de todo ese trauma personal convertido en muro de cemento anti-sentimientos que le hacía parecer un tipo duro se escondiera la mismísima niña de la pradera. O la Virgen María.

Sin duda deseaba averiguarlo algún día.

El caso es que cuando reinó el silencio me alisé la camiseta, intentando hacerme el interesante mientras volvía a mirar de nuevo a la sexy cerebrito de pelo blanco, esperando que en algún momento dijera que todo esto no era más que un entrenamiento para instruirnos en el milenario arte ruso de detectar mentiras.

Pero no, por más que rezaba en arameo, los segundos pasaron y pasaron y no reculó, así que la bombilla de pánico instalada en mi cerebro empezó a parpadear.

-Ajá meter a una potencial máquina de destrucción masiva en las instalaciones es una idea brillante - musité mientras sacaba y manoseaba los dados que llevaba en el bolsillo con nerviosismo.

No es que fuera tan escéptico como lo era Adam, eran muchos los que habían sufrido por aquellos bichos, pero mi ceja alzada demostraba las reservas que tenía con respecto a que todo esto fuera una buena idea.

Al menos una idea que nos permitiera sobrevivir.

-Entonces, si es cierto que esas cosas existen y que, hipotéticamente, hemos cazado a uno, ¿el plan es utilizarlo de conejillo de indias para crear la receta perfecta de la bomba nuclear anti-strigoi? -porque eso era lo única razón factible que se me ocurría para tanta locura colectiva: experimentos y más experimentos de los que yo no tenía ni puta idea.

-No es que no crea que podamos vencer a esas máquinas de matar con nuestras propias manos- Alguno de los presentes tenía los huevos de acero - pero coincido con Svass: si esas cosas existen realmente, nosotros no tenemos ninguna experiencia. Ahora mismo somos un ejército de neandertales con tirachinas luchando contra el mismísimo ejercito nazi. Y perdón por si hay por aquí algún alemán en la sala.- me excusé, aclarándome la garganta mientras tanto para parecer un poco más serio de lo que era habitual en mi. Tampoco era plan de crear conflictos sobre rencillas milenarias, ya teníamos suficiente con la mierda en la que estábamos chapoteando todos.- A lo que me estoy refiriendo es que no estoy muy convencido de que tengamos las medidas de seguridad adecuadas para meter al depredador en la madriguera de la presa.- Y en eso si que tenía puta idea, más que nada porque yo solía dedicarme precisamente a controlar los sistemas de seguridad, y aunque estábamos bien organizados y contábamos con recursos bastante potentes, enjaular a bestias casi desconocidas para el hombre no era algo en lo que pudiéramos tener “segundas oportunidades” o “vidas de reserva”.

Más bien nuestro juego se podía acabar con game over. Un gran y luminoso game over para la humanidad.

-En serio, a mi todo esto me parece una locura maquillada de delirio de grandeza.- Yo estaba entregado a la causa, pero tampoco era tan idiota como para creer en finales felices tan sencillos.

Notas de juego

Uhhhhn, no sé porque sale tan absolutamente horroroso mi post xD a ver si cuando tenga ordenador puedo editarlo...

(Si lo edita la dire antes, fenomenal, sobre todo el formato que no se miu bien que ha pasado)

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05/08/2018, 22:08
Olivia "Liv" Moore

Liv no sabía bien qué decir ante las declaraciones vertidas, parecía no estar de acuerdo del todo con lo dicho, pero su carácter apacible la hacía no inmiscuirse en una discusión. A su forma de ver no entendían la visión del todo, pero ella los había visto. O más bien la había visto en las catacumbas de Turquía y no podía decir que no fuera real. Ahora debía estar por el norte de Europa, con el cazador, aprendiendo cosas de este nuevo mundo. Ella había visto cosas que el resto no, también las conocía.

-No creo que haya que temer nada, no las arreglaremos con lo que traigan- comunicó a Shadow, pues entendía su preocupación. –Setrakian ya ha lidiado con este asunto en otro momento y salió bien. Puede volver a hacerlo, estoy segura que no tenemos nada que temer.

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05/08/2018, 22:08
Abraham "El Anciano" Setrakian

Adam resopló, incrédulo y seguramente con sus pensamientos radicales aun rondando su cabeza. Seguramente su solución definitiva sería robar unas cabezas nucleares y lanzarlas en las ciudades principales donde pensaran que podría estar el máster. Era lo mejor y lo más lógico para él.

Nadie más dijo nada, al contrario, se cuadraron porque por la puerta entraba Setrakian. Algunos incluso se levantaron. Miró a todos los presentes y asintió complacido.

-Me alegra que estéis aquí- caminaba con su bastón renqueante pero con paso decidido a encabezar la mesa. Cuando consiguió sentarse e hicieron lo mismo aquellos que se habían levantado de su silla. –Creo que tenemos una situación que comentar aquí, en referencia a la última retransmisión de Dutch. Queremos pensar que traen a un vampiro con ellos, al menos eso sugiere que su misión fuera exitosa. Debemos hablar sobre dónde meterlo y cómo contenerlo… ¿Ideas?

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06/08/2018, 07:55
Shadow

Lo que dijo Liv no me convencía en absoluto, pero evité decir algo al respecto porque no esperaba que entrase en razón. Ella era demasiado flower power como para querer comenzar una discusión, y el ambiente ya estaba empezando a caldearse después de que el sexsymbol que se las daba de mecánico hubiera intentado echar por tierra sus explicaciones, así que me limité a suspirar mientras me rascaba la barba de varios días.

La próxima vez le diré a Jeremy que afile su navaja con mi perilla...

Le eché una última mirada a la rubia y empecé a juguetear con mis dados de seis sobre la mesa. Tiré un par: doble uno. 
-Por la Virgen, vais a hacer que nos maten a todos... - suspiré en medio de un escalofrío por el presagio de nuestra futura pifia.
Y pensaba insistir en que se les estaba yendo la olla, pero en ese momento todos empezaron a cuadrarse como una panda de militares sin cerebro para saludar al viejo Setrakian, que entraba por la puerta como un auténtico semidios casi al ritmo de una melodía celestial tocada con arpa. 
Setrakian: todos creían que era una especie de profeta; yo, simplemente, pensaba que era un abuelo con ganas de marcha en un mundo que ya no podía ofrecerle la diversión que sus articulaciones artríticas necesitaban.

Bromas aparte, en realidad él era el hombre al que más respetaba de aquel garito subterráneo. No por nada le debía mi vida después de haber dado conmigo cuando no era más que un adolescente famélico que se dedicaba a robar por ahi para poder comer. Truhán me llamaba. Era adorable.
Había pasado casi un tercio de mi vida bajo su ala así que casi podía considerarlo... ¿"familia"? Había confianza, puede que hasta un poco de amor por ambas partes y mucho pero que mucho respeto a pesar de que a veces me pareciera que la demencia senil empezaba a acosarlo. Como ahora, ajá. Y yo no tenía reparos en decírselo.
Pero el caso es que, aunque estuviera como una regadera, me había tratado bastante mejor que muchos de mis primos segundos: al menos él no me había pegado. Ni violado.
Y aunque estaba curado de espanto, pensar en su pequeño gusanito arrugado durante esa fracción de segundo me pareció un poco repugnante, así que volví a hilar pensamientos productivos cuando se sentó y empezó a pedirnos opinión sobre el asunto en cuestión.

Bien, este es el momento en el que todos empiezan a sacarse el rabo y a ponerlo encima de la mesa para demostrar quien la tiene más grande.

Yo hice lo propio, lo que haría un señor decoroso, y le saludé con un asentimiento de cabeza que demostraba que había madurado. Ojalá se lo creyera, porque era cierto. Medio cierto.
Después me limité a escuchar las batallitas e ideas del resto pensando en las musarañas, en si Livvy tenía el pelo teñido o en si hoy tocaría carne de rata o de perro para comer.
¿Alguna vez nos habríamos comido a un humano en salsa? Interesante.
Para cuando algunos de los presentes terminaron, levanté la mano como una adorable colegiala y disparé.

-¿Habéis pensado en retenerlo en la cámara acorazada del ala este? - pregunté mientras mis pensamientos, se centraban de una vez por todas en lo importante, en las variables que podrían hacernos sobrevivir si esa cosa entraba aqui dentro.

Evaluar riesgo, maniobrabilidad de sistemas de seguridad informáticos, considerar posibilidades de evacuación, operativos de reserva... blablabla. 

- Los omegas verticales de las puertas están reforzados con una aleación que puede resistir practicamente el ataque de una bomba H. Ni siquiera se desintegrarían completamente al ser el epicentro de explosión de una bomba de fisión de tipo A - continué analizando a mil por hora las posibilidades que teníamos, casi pensando en voz alta en todas las cámaras de contención, puertas blindadas y asilos metalizados de los que disponía el complejo, comparando sus ventajas y sus desventajas. - Y el sistema de vigilancia tiene suficientes controles remotos como para cerrar la cámara a más de 200 metros de distancia en distintos puntos del bunker. Es un ataúd de acero con control digital y analógico, impenetrable. - entonces me encogí de hombros.- Si yo quisiera mantener algo alejado de nosotros pero también lo suficientemente vigilado y accesible como para poder estudiarlo, lo metería entre esas cuatro paredes. - hice una pausa, replanteando lo que sabía sobre los vampiros. 

Error 404 por falta de información.

- Ahora bien, no tengo ni puta idea de como conseguir que entre ahí dentro sin que muramos en el intento. Imagino que todo depende de las cualidades físicas que tenga esa cosa, y de lo inteligente que sea. ¿Lo han drogado? - Para empezar, ¿esa cosa podía ser drogada? En fin.
-No es que quiera ser pesimista, pero es posible que por mucho metal que haya entre él y nosotros, tengamos que salir pitando de aqui o nos acabe follando a todos si se lo propone. Con perdón. - Gesticulé aquel perdón con las manos y entonces suspiré. Ya había pensado demasiado.

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06/08/2018, 16:37
Svass

La situación se volvía cada más surrealista a cada minuto que pasaba. Svass comenzó a sentirse totalmente fuera de onda. Ciertamente creía en sus palabras, en los vampiros y todo eso; sería mentir si creyera que no le costaba hacer un esfuerzo en creer en todo aquello, pero, ¿qué más podía perder?

Por una vez se mantuvo en silencio y sentado como estaba sin variar la posición ni un ápice; solo le faltaba el uniforme de gala rojo y el busby. Sin duda alguna le sorprendió la aparición del enigmático Setrakian, aunque Svass solo le dedicó un asentimiento de cabeza en señal de respeto y saludo, eso sí, un asentimiento muy marcial y digno. 

¿Ideas? Aquella pregunta dejó descolocado a Svass, ¿qué ideas podría aportar sin saber nada de esos seres, ni de sus capacidades? faltaba muchísima información en esa ecuación y aunque "Shadow" se explayó como si fuera una enciclopedia, aunque terminó su intervención con una clara demostración que era un barrio bajero con muchos conocimientos. Svass seguía manteniendo sus dudas, tantas que hicieron que ladeara la cabeza y se acariciara su sien izquierda. Cogió aire con calma - falta mucha información - comentó como de pasada mirando fijamente a Setrakian - sin saber las motivaciones y capacidades de los vampiros cuesta aportar idea alguna más allá de un "no le dejen entrar" 

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16/09/2018, 13:42
Abraham "El Anciano" Setrakian

Viendo las reticencias de todos, Setrakian tuvo que hablar y explicarse. Había cosas que no le gustaba contar, pues de saberse serían un gran problema quizás. Uno que no le traería seguidores a su causa, pero en el búnker estaban los más comprometidos, en quien más podía confiar.

-Veréis, no quería tener que contar esto… Pero hace unas semanas, cuando la doctora Moore y yo partimos de viaje, fue para encontrarnos con una de estas bestias. Uno de los nuestros había dado con unas escrituras que indicaban dónde encontrar un verdadero vampiro enterrado hace siglos…- miró a los presentes, centrando su cara por último en Liv y esta le asintió de vuelta. Reforzaba su redacción para que continuara. –La verdad es que eran escritos muy antiguos, donde se hablaba de una diosa dormida… Ya sabéis como era la gente de aquella época con leyendas y eso. No perdíamos nada por ir y comprobar y bueno…

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16/09/2018, 13:42
Olivia "Liv" Moore

-¡Encontramos un vampiro! Bueno, un vampiro hembra… Una vampiresa- trató de explicar Liv, tras el gritito de emoción de su descubrimiento. –Perdone, Setrakian, puede seguir.

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16/09/2018, 13:43
Abraham "El Anciano" Setrakian

-Sí, sí, como bien dice la doctora, encontramos una. Este que traen no sería el primero. Quizás esto os parezca una locura también, pero llevo años estudiando libros de magia. Magia de verdad, es complicado y muchas veces son caminos que no llevan a nada, pero encontré un hechizo que permite atar la voluntad de un vampiro a un humano- soltó la bomba y luego siguió. –Y eso es lo que hicimos con Eudoxia, la atamos al humano que la encontró. El único problema es que partieron al norte, a las ciudades libres de strigoi, para instruirla. Llevaba enterrada siglos y tiene ciertos problemas para amoldarse a nuestros tiempos… Pero el hechizo funcionó, que es lo importante. Cuando tengamos noticias del señor Van Herden os daré más detalles de cómo ha avanzado la cosa, está probando también las limitaciones del mismo.

Oh, sí, Van Herden. Carlein Van Herden. Ese chiflado redneck que se creía el último descendiente de una línea de sangre antigua de cazadores de vampiros. Ese idiota que iba armado hasta los dientes y cada vez que visitaba el búnker miraba todo como si alguien fuera a saltarle de una sombra para acabar con su vida. Nunca había parecido conforme a ser invitado a aquel lugar de visita o para charlar, eso que Setrakian parecía apreciarle bastante. Y según contaba el jefe, ese tipo había sido atado a una vampiresa de varios siglos de edad y estaba obligado a “mostrarle nuestro mundo”. Menudo ejemplo a seguir.

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18/09/2018, 18:07
Svass

Svass empezaba a aburrirse a unos niveles insospechados. El hartazgo amenazó con asomar a la más mínima chorrada, pero el ukraniano se esforzó, por el momento, en contenerse; aunque se notaba que su paciencia estaba bajo mínimos. Respiró hondo, y jugueteó con una moneda que sacó del bolsillo, un claro ejercicio de control de la ¿ira?

No se sintió con ganas de hablar, no quiso entrar en la conversación entre el gran Setrakian y su becaria dispuesta a chuparsela a cualquiera que dijera que le trajera los calzones de Vlad el empalador. Casi se rió ante aquel pensamiento. Casi.

Buceó por su mente lo suficiente como para encontrar, nuevamente, las ganas de hacer la pregunta que hizo en cuanto se sentó en aquella sala. Tragó salvia, se humedeció el labio inferior con una tímida lamida y suspiró con la boca entreabierta.

- Bien... quizás es que me he perdido entre tanto entusiasmo, pero... ¿qué podemos hacer nosotros? - Svass parecía ajeno a todo aquello de la "magia de verdad", como ya dijo anteriormente, llegados al punto en el que se encuentra la humanidad en esos momentos, si le dicen que por las noches vienen unos gnomos a reparar su calzado, se lo creería sin pestañear.

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23/09/2018, 15:15
Shadow

Escuché todo lo que decía el abuelo Setrakian y la buenorra de Livvy, paniqueando cuando hicieron hincapie en que una especie de monstruo había poseído a un asesino en serie. ¿No podrían haberle regalado el cuerpo de la abuelita Doris -estupenda cocinera, por cierto- para que por lo menos no tuviera las capacidades físicas de cargarse a cien hombres armados hasta los dientes? No sé, así como duda.

-Vaaaaaaaaaaaaaaaale... -No me lo podía creer - Dos almas lunáticas y sedientas de sangre dentro del mismo cuerpo... -Pues qué bien, oiga. Un paraíso terrenal. - Interesante, ahora estamos un poco más cerca de la autodestrucción. - O de la salvación si es que creíamos en los finales de ser perdices y comer felices. - Bueno, confío en vosotros al cien por cien, hoy y siempre, - Más o menos -aunque no negaré que esto me parece un plan suicida - Después ladeé la cabeza para poder captar las palabras de Svass, que por fin dejaba de parecer un muñeco de cera y empezaba a demostrar que en vez de hielo tenía horchata corriendo por esas venas de... ¿sueco? 

Me rasqué la perilla de tres días, pensativo. Ya comenzaba a pinchar.

-Uhmm... - Estuve a punto de bostezar de lo aburrido que era ese señor, repitiendo una y otra vez la misma pregunta como si fuera un reproductor con bugs, pero intentaba por todos los medios ser un caballero interesante y atractivo delante de la rubia. Ya que no tenía tableta que enseñar, la deslumbraría con mi maravillosa inteligencia. O algo así.

- No soy muy dado a creer en esas historias sobre la magia, los conjuros, las varitas, las escobas voladoras y los unicornios. Pero... bueno, quien sabe, los dinosaurios parecen un cuento de hadas y realmente sí existieron, así que teniendo en cuenta que estamos viviendo en una especie de apocalipsis zombie donde hay muertos vivientes chupándonos el alma, no me parece muy descabellada la idea de que alguien pudiera recitar un par de versos asonantes y echar a volar con el poder de la mente... - La siguiente noticia sería la de que Jesucristo caminaba entre nosotros, seguro. -Eh, espera, ¿puedes enlazar almas humanas o algo así? ¿Podrías enlazarme a Liv? - Shadow, stop. - Da igual, era solo un ejemplo. - rojo como un tomate y sudando como un pollo ante la obvia demostración de mi impulsividad regada con TDAH, intenté seguir por otros derroteros menos vergonzosos que declararme delante de veinte tíos más macizos que yo. - ¿Necesitáis que prepare los sistemas de seguridad para que estén a punto?

 

                                                         

Notas de juego

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24/09/2018, 10:20
Olivia "Liv" Moore

Liv negó cuando dijo dos almas en el mismo cuerpo.

­-No, nada que ver- negó para corregirle. –Encontramos una vampiresa y la reanimamos con la sangre de Van Herden. Son independientes pero la voluntad de ella está ligada a la de él, es como que no puede atacar a otros humanos ni beber la sangre de ellos, solo la de él. Tiene como un parásito muy gordo que le sigue a todas partes- añadió en tono jocoso, con una amplia sonrisa que corrigió al ver que Setrakian no parecía reírse mucho al respecto. –Perdón, jefe- se disculpó de nuevo e hizo un gesto para que continuara.

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24/09/2018, 10:21
Abraham "El Anciano" Setrakian

Setrakian entendía la emoción de la genetista, pero pensaba que debía controlarse. Quizás estaban dando demasiada información sin explicar al resto, mucho que digerir de golpe.

-La magia es algo delicado que necesita tiempo y dedicación. No sé si querría ligar almas humanas a no ser que tuviera una razón de peso para ello. Si hice lo que hice fue para que una conciencia humana limitara a un ser voraz y sediento de sangre que íbamos a soltar en una humanidad diezmada- se excusó Setrakian. –Lo que hice fue más como ponerle una correa a un perro rabioso, no sabemos cómo reaccionará. No sabemos cómo piensan los vampiros… Es por eso que tendremos que mejorar la seguridad y realizar un protocolo de contención en caso de que todo se nos vaya de las manos. No podemos empeorar la situación que ya tenemos- hizo un gesto abarcando a su alrededor pero queriendo referirse al mundo entero. –Os pasaré algo de información que tengo sobre los vampiros para combatirlos, aunque me temo que no está cien por cien contrastada. Lo que es seguro que unas lámparas ultravioletas o de luz azul potentes nos vendrían bien.

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28/09/2018, 08:24
Svass

Por favor, no se haga de rogar - fue la única respuesta que obtuvieron por parte de Svass, y solo hacía referencia a lo de recibir información en lo relativo a combatir vampiros, aunque no quiso admitirlo, le resultó confuso. Se imagino que sería el plan b, ya que creía haber entendido que el A era ser amigos de los vampiros y conseguir dominar a esas bestias que dominan la superficie de la tierra. 

A diferencia de otros, Svass nunca ha visto ni leído nada en lo referente a la ficción vampírica, y el ukraniano se siente tan perdido que casi hiperventila cuando por fin, plantean la posibilidad de tener información extra sobre algo que no comprende del todo, aunque solo sea para matarlo. Muy humano todo.