Partida Rol por web

El dragón, agónicamente, sale volando para escapar de ellos. El viento se le mete en los ojos, cosa que hace que se irrite sobremanera. Por ello saca su ballesta de la espalda y apunta hacia el gran monstruo. La cargó rápidamente y disparó. La flecha dio en el blanco, pero rebotó contra una de las grandes y duras escamas de su cuerpo y cayó hacia abajo, sin provocarle la más mínima molestia al animal. 

Lo mío y las armas de distancia no es normal... 

Siguiendo al resto, dejo caer el hacha para echar mano al arco y lanzar una flecha hacia el dragón que acaba perdiéndose en el cielo.

- Será un problema en el futuro..

Comento como si no me importara la amenza del dragón, aunque en realidad sabía que cuando ésta se cumpliera debíamos estar enormemente preparados. Y lo estaríamos, seguro, pero por le momento todo empezaba por sanarnos las heridas recibidas, no fuera a ser que el dragón tuviera ayuda cerca.

- Sana.

Empiezo a curarme las consecuencias del combate.

Siguendo el ejemplo de Brannagh, el clérigo empieza a imlorar a Kord para sanar sus graves heridas. 

La elfa volvió a cargar su ballesta, le puso el seguro y la colgó a la espalda. Saco el bastón y se dispuso a ir delante en la marcha, haciendo lo que mejor sabia buscar trampas.

Lo mejor sería dejar el patio limpio, y lo único que nos queda por revisar es la torre redonda. Sin esperar una respuesta se encamino hacia la torre y empezó a mirar la puerta en busca de algún resorte. Luego la abrió poco a poco fijándose en cualquier movimiento en el interior de la sala, si veía algo peligroso la volvería a cerrar.

Shafir estaba algo molesto por cómo se habían desencadenado las cosas.

Como siempre, hemos sobrevivido a nuestros combates porque individualmente somos más poderosos que nuestros enemigos. Es decir, hemos tenido suerte. Un día encontraremos la horma de nuestro zapato y moriremos con cara de estúpidos. Espero que no sea en este antro del demonio. Nera abrió los ojos como temiendo que el mal genio del mago fuera contra ella, pero pronto se tranquilizó cuando el mago empezó a andar. 

Aelin hablaba de explorar la torre. Era un buen lugar para empezar. Así que, mientras esperaba, Shafir pasó su mano por el suave lomo de la gatita, con lo que Nera se acercó a su amo ronroneante. 

Necesitas ayuda para explorar, querida?

En esta sala, el hedor a muerte es tremendo. A través de los agujeros del techo parcialmente destruido, se cuelan algunos rayos de luz. En el centro de la habitación hay un cuerpo de varón, parece parcialemente devorado. El hombre lleva ropas ocre que ahora estan hecho trizas y manchadas de sangre. Cerca del cuerpo hay una maza pesada. En la esquina noroeste hay un cuerpo de mujer con espada, arco y armadura de cuero negra.

[

La elfa no pudo evitar dar un paso hacia atrás, aunque llevaba bastante tiempo de aventuras el ver los cuerpos muertos en descomposición aun le producía una fuerte impresión. Creo que tenemos la comida del dragón, hay dos cuerpos, parecen aventureros. Seguro que venían a por el tesoro del dragón.

Con sumo cuidado empezó a avanzar hacia el primer cuerpo, mirando cualquier posible objeto que no cuadrase con la situación y siempre alerta. Cuando llego al cuerpo y se hubo cerciorado de que no había peligro empezó a registrarlo.

Shafir soltó a Nera para poder ocuparse de lo más inmediato. Empezó a buscar información en sus bastos conocimientos de materias diversas mientras inspeccionaba el lugar, los cuerpos, la arquitectura, recordaba cosas que había oído o leído, y, lo mejor de todo, su brillante inteligencia relacionaba unas cosas con otras, formulando hipótesis y analizando la situación.

No me esperaba encontrar un pequeño dragón aquí, pero, sin duda, eso significa algo. O bien el lugar está deshabitado de otras criaturas, o alguien lo ha atraído como disuasorio para gente como nosotros. Miró los cuerpos de los aventureros vencidos por el dragón. Y me temo que ha sido efectivo.  

Nera estaba feliz de ser acariciada por su adorado amo, pero éste la dejó caer al suelo, confiado de que siempre caía de pie, en cuanto su mente empezó a ocuparse de otra cosa. Giró en el aire, estiró las patas y equilibró la acrobacia con su cola. Su gesto indicaba que había sido demasiado brusco para ella. Pero su amo no dio señales de darse cuenta. 

Maooo...! Sonó infantil y aguda su voz sin respuesta alguna.

Orgullosa, decidió darse una vuelta por la sala olfateando, curioseando, trepando a los sitios. 

El mago podía tener razón, de eso no había duda, pero que si éste en verdad era el cubil del infame culto significaba que los habíamos subestimado, pues gozaban del poder suficiente como para atraer a un dragón a sus filas o al menos captar la atención de su estómago.

Sin recoger mi varita, me acerqué al animal agonizando y sin pedirle permiso al elfo desaté su poder sobre su cuerpo.

Samuel se acercó a su vez al lobo y comenzó a implorar al todopoderoso Kord para que curase al animal agonizante. 

Gran Kord, te imploro que salves a este valiente animal, que ha luchado contra una malvada criatura a mi lado con la decisión de uno de tus seguidores...

Buscando en el cuerpo del cadaver de la mujer, encuentras una armadura de cuero tachonado de gran calidad teñida de negro y una espada larga +1, un arco corto +1, 12 flechas, 13 po, y 3 gemas. Tiene un colgante de hierro que es un triangulo negro con una "Y" invertida de color amarilla inscrita en su interior

No puedes detectar ningun tipo de magia arcana en esta sala. Y sobre la historia de este sitio no sabes mas que la vieja historia de este sitio y el culto que se rendia aqui.

La elfa comenzó a buscar en los cuerpos de los dos hombres, anda que curioso, te Samuel, a ver si sabes que es. Dice mientras le tiende al clérigo un colgante de hierro que es un triángulo negro con una "Y" invertida de color amarilla inscrita en su interior, parece un símbolo religioso.

A ver que más tenemos por aquí. Comenta mientras sigue buscando afanosamente y empieza a enumerar lo que encuetra, un cuero tachonado en excelentes condiciones, una espada larga bastante interesante, un arco corto también interesante y una, dos, tres… 12 flechas. Y finalmente unas cuantas monedas de oro.

¿Cómo nos repartimos esto?

La elfa se guarda para sí las 3 gemas, piensa venderlas mas adelante.