Partida Rol por web

Escuché todoo lo que me dijo Samuel, que evidentemente no me complacía en absoluto.

Cuando terminó de hablar le levante una mano en su dirección porque me parecía incorrecto no decirle nadaa vesta

   Está buenísimo, mira Vesta con qué delicia se lo está comiendo Nera le digo felizmente a la camarera mientras rasco la cabeza de la pequeña.

Después de esta cordialidad me vuelvo hacia Samuel

   Pues lo único que puedo decirte es que me parecec muy mal lo que haces, porque vas poniendote de superior cuando todos somos iguales obligando a la gente a pensar que tú eres superior por tu erligión. Estás quitando la libertad de la gente, evitando sus propias elecciones por imponer la tuya y por encontrar algún motivo que te complazca. Yo nunca le he quitado la libertad a nadie, igual que aquel bardo de allí o Shafir tampoco han hecho, y se han ganado la vida dignamente... no matando "infieles" como tu llamas, o matar por tu religión le digo tranquilamente mientras me llevo un pedazo de carne a la boca... Por cierto, ¿a qué venia todo esto? no quiero provocar conflictos, no me gustan...prefiero las aventuras... por cierto Shafir ¿te he contado ya la historia de cómo conseguí este arco?...

Bueno veás nací hace unos pocos años.. no se quizá unos...75 años... spy bastante jóven para considerarme un elfo... bajo la cabeza un poco ruborizándome... en mi tierra ni siquiera me consideran una adulta... el caso es que mi padre me dejó este arco, yo me había fabricado otro,...si mira..ummm creo que tengo un dibujo por aquí... recojo la mochila del suelo y vuelco todos mis achiperres delante... busco y busco pero no encuentro justo el papel que estaba buscando... Parece ser que no lo encuentro...ummm bueno ya te lo enseñaré más tarde...

Ah si qué te estaba diciendo yo... ah ya me acuerdo, te decía que esta comida está buenísima, mira Nera esta disfrutando como una enana...de todas formas le daré de comer lo que me dejes mientras te pongo la mejor sonrisa que dispongo

La gatita, seguía faenada en comer lo que le daba Aelin. Era la única que le contestó a la pobre hija del posadero, pero Nera estaba atenta y con sus orejillas en punta y en dirección a las personas que hablamos. Así que tragó despacio su último bocado y miró con sus ojillos tiernos y hechizadores a la susodicha joven.

Miauuuu!

Shafir y varias persona no pudieron más que reir ante la confirmación por parte de la gatita de que era una comida excelente. Otra cosa es que a los dueños del local les hiciera gracia que dieran su comida a los gatos.

- Gracias, me alegro de que os guste la comida - dice esta mientras que alza la mano para acariciar a Nera - Y por lo que veo a ti tambien verdad bonita? - dice pasando la mano por el lomo de animal de un lado hacia otro.

Shafir no pudo evitar reír por la ternura que al fin y al cabo le inspiraba su adorada gatita.

Mi dulce Nera, cuanta razón tienes! Ahí donde la ven es una gata muy inteligente y posee su propia personalidad. Por eso a veces me saca de quicio, jejeje, pero es como mi hijita y la adoro. En efecto, Vesta, mi plato también está excelente. Y el vino es sublime. Muchas gracias a ti y a la cocina.

Una vez la camarera les dejó tranquilos, el mago continuó la interesante conversación sobre la intolerancia de Samuel. Le encantaba meterse con el clérigo porque era tan serio que si no, no se le sacaba prenda en ninguna discusión, sólo lo mismo de siempre sobre su dios y su doctrina, que ya les tenía una tanto artos.

Pues sí, Samuel, no te lo tomes a mal, te lo decimos con cariño. Mírate, vas con esa armadura y tus armas a todas partes, das miedo, más que respeto, pero luego pretendes que te escuchen las gentes con devoción. Si hasta te he visto trasmitir tu fe sin levantar la visera de tu yelmo! Relájate, amigo mío, conversa, pasea, disfruta un poco, hombre! Y te lo dice alguien que se ha pasado casi toda la vida encerrado en una biblioteca! Jejeje. Ays, cuando salí al mundo, me di cuenta de lo que me había perdido! Ahora estamos juntos los cuatro (incluyo a mi preciosa Nera, por supuesto), comiendo y bebiendo, luego nos reuniremos con los demás o saldremos de compras o planearemos una nueva aventura,... qué más se puede pedir? Tenemos salud, algo de oro en la bolsa y buenos amigos,... sólo nos hace falta... bueno, a cada uno le falta algo, ya me entendéis. Pero no me quejo, ahora mismo soy feliz. Y tu deberías serlo, Samuel. Dale importancia a lo que la tiene, si no, la vida resulta agotadora. Yo daría uno de mis conjuros más poderosos por la amistad íntima de una mujer hermosa e inteligente, pero dulce y sensual como una bailarina... Ese es el paraiso que deseo Samuel, el de ningún dios me puede llenar tanto como ese!

Aelin, Aelin, si yo fuera elfo o tu una dulce humana... AYS! (suspirando teatralmente, lo que indicaba que era una broma) nuestro amor deberá esperar a otra vida, encantadora amiga. O eso o deberé encontrar un hechizo de longevidad. Mantendremos esa esperanza, Aeliiin! Decía alargando la mano hacia ella como hacen los cómicos en los escenarios. Jajaja. no me hagas caso, se me debe haber subido este excelente caldo y me pongo gracioso. Qué me estabas contando sobre un arco, querida? Ah, dale de comer lo que gustes, veros a las dos es un placer para mi. Nera, Nera, qué bien te cuida Aelin.

En efecto, el mago disfrutaba de la hermosa escena entre la inocente elfa y su pequeña. Eran como dos niños jugando a papás y mamás. Le enternecía pensar en los años felices que pasó con su maestro, pero que no pudo jugar con otros niños ni recibir las atenciones de una madre. Shafir no lo reconocería, pero sus compañeros eran algo más que amigos para él, eran como una familia, hermanos o algo parecido. Ya que Shafir sabía de muchas cosas, pero el concepto de familia no lo tenía muy claro.

Nera ya había comido suficiente por ahora y empezó a relamerse y acicalarse, pero no podía hacerlo en cualquier sitio, al sentir, por el vínculo que tenían, el lado humano y vulnerable de su querido amo, se acercó a él y se acurrucó en sus piernas.

Dió un bostezo silencioso estirando sus músculos y se convirtió de repente en una bolita negra, peluda y vibrante al respirar.

ZZZRZZZZRRRZZZZZRRRZZZZ...

Ais...

Me temo que esta conversación ya la hemos tenido demasiadas veces, pero ahí vamos de nuevo.

Samuel soltó el enorme peso muerto de la maza encima de la mesa, para tenerla más a mano, y empezó a discutir con sus compañeros.

Vosotros os preocupais por la vida terrenal, por el ahora, por el aqui. No lo podeis entender porque no os ha tocado la mano de un dios. Si lo hubiera hecho pensariais de otro modo. Yo en cambio, si lo he sido. Samuel dió un largo trago a la bebida y empezó su diatriba.

Mirad hermanos, este mundo está lleno de dioses, dioses tangibles y existentes, que otorgan su poder a sus enviados mortales para hacer su voluntad. Cada uno de ellos con su credo y dogmas, cada uno con sus planes para sus fieles y cada uno con sus manos terrenales y sus avatares.

Decis que porto metal como atuendo incluso desde los pulpitos, y digo que es cierto. ¿Y porque no? Kord nos enseña el valor de la fuerza, pero tambien de la bondad. Ama a los atletas, a los que se esfuerzan dia a dia para lograr sus metas a traves del trabajo fisico, y tambien a aquellos que confian en la suerte y en el bien. Todos esos y mas son bendecidos por su mano. Yo, como representante de Kord en la tierra debo difundir su palabra y su fé. Ahora bien. Tambien debo proteger a sus hijos, a aquellos que por si mismo no pueden defenderse, de ahí mi ropa de metal. ¿No profesas con Kord, Shafir? Es normal, Kord no suele prestarle atención a los estudiosos, no es su ambito. Para ello esta Wee Jas, Azuth, Mystra, Boccob y muchos otros. 

¿Que Aelin no comulga con Kord? Es normal, para eso tiene a Maskhara, Cyric o cualquiera otro que vele por aquellos que prefieren trabajar en las sombras.

Pero preocupaos vosotros por vuestra mision en la tierra, que ya me preocupo yo por vuestras almas. Demasiados falsos y demasiados ateos viven en el palacio de cristal, y no querria ver ahí a dos amigos mios.

Tras estas palabras, Samuel volvió a tomar un trago y a comer lentamente, aunque en el ultimo momento se le ocurrio algo mas.

Y recordad, que aunque Kord no os guste, menos os gustaría Grumsh, Talos, Erythnul o Hextor, y otro de los trabajos de mi iglesia, asi como el de tantas otras, es oponernos a ellos y sus enviados. Con que facilidad olvida la gente que todos de un modo u otro cumplimos los designios de los dioses, y que sin el brazo armado de algunas iglesias, otras, conquistarian el mundo.

Y se que me vais a saltar con el trillado argumento de que sin dioses, eso no pasaria y no haria falta la iglesia, y quizas tengais razon, pero sin dioses, tampoco habria magia divina para sanar heridas, ayudar en los campos o bendecir a las madres durante los partos. Y eso, amigo Shafir, es algo que tu magia no hace. Y, sin dios de la magia, no habria magia.

Tras esto lanzó un guiño al mago y siguio comiendo.

Escuchaba a Samuel entre bocado y bocado sin evitar sonreír, pues esta vez había picado de nuevo como si fuese la primera vez. Cada vez que nos lo contaba, lo hacía mejor, más claro, mejor argumentado, más como un gran hombre. Resultaba emocionante y todo.

Sí, amigo mío, tenéis toda la razón, no tenemos ni idea de la importancia de los dioses en nuestra vida cotidiana. Somos como las hormigas, que trabajamos en pro de un destino común que nos ha marcado la divina reina-madre. Los dioses son como montañas de las cuales no podemos alcanzar a ver ni la suela de sus enormes sandalias. Por eso mismo no nos preocupamos y nos gusta gozar de los pequeños placeres que nos otorgan los dones divinos. Nuestras almas, el Palacio de Cristal, son conceptos que se alejan a nuestra comprensión. Sólo los anchos hombros de personas como tú, querido Samuel, pueden soportar esa carga. No tengo derecho a criticar la creación y los designios divinos, sólo lamento que los mortales seamos tan necios como para no apreciar su magnífica obra en su inmensidad. Nada más podemos apreciar pequeñas cosas como el vino, las risas de un niño o el calor de una mujer. Si por eso, por hacer lo más que podemos para dar sentido a nuestras pequeñas vidas y compartir la corta vida que se nos ha dado, hemos de perder nuestra alma, es que no hemos sido creados para perdurar, querido amigo. Sólo para admirar la creación en lo que debe ser un abrir y cerrar de ojos de una divinidad cualquiera.

Con todo, esto, Samuel, si puedes descansar unos instantes de tu magnífico y responsable destino, estaremos honrados de que nos invites a una ronda de cervezas antes de irnos de compras Aelin y yo. Jejeje. Le contestó el mago entre gestos teatrales y acabando con otro guiño para su compañero.

Entre actuaciones, comida, bebida y charlas, os daís cuenta de que el tiempo ha pasado bastante rapido, momento en el cual veis entrar por las puertas de la posada a vuestro compañero Magnus.

Mierda!

El mago le habia concedido una pequeña victoria a cambio de un ronda de cervezas, eso era trampa, pero el aceptaba la derrota con dignidad.

Esta bien, yo pago, pero un detalle a tus objeciones. Los dioses no te piden todo su tiempo, solo que de vez en cuando le entones una plegaria y les agradezcas sus esfuerzos. Recuerdalo la proxima vez que visites un templo.

CAMARERA, UNA DE CERVEZA POR AQUI!!

Vesta mira hacia el clerigo - Marchando 3 cervezas - dice esta, la cual la echa con gran habilidad en las pintas y seguidamente os la sirve - Aqui estan -.

Al entrar en la posada ves claramente que lo que te habia dicho Elmo era la pura verdad, en nada se parecia esta a la ultima posada en la que habias estado. La gente mucho mas civilizada, el lugar bastante limpio, y una mujer con semblante serio esta cerca de la puerta, otra mujer por el contrario atiende a los clientes con mucha simpatia, en la barra apoyado en ella parece haber un hombre con pintas de bardo y en una mesa situada a tu izquierda se encuentran tus compañero.

Cuanto trabajo cuesta que le inviten a uno a una cerveza!

Pensó Shafir, satisfecho por haberle sacado por fin alguna moneda de la bolsa a Samuel. Y es que estos clérigos y devotos eran todos un tanto rácanos, pero ninguno adolecía de magníficas armaduras, armas de la mejor calidad y emblemas sagrados ornamentados y de materiales nobles. Eso siempre le había llamado la atención.

Acepto tu cerveza con devoción, amigo mío. Bocob no necesita muchas plegarias, tan sólo que amplíe mis conocimientos constantemente y continúe estudiando la magia. Así que a sus ojos soy un buen seguidor.

Oh, mirad, otro amigo se nos une a la tertulia. Maese Magnus venís a tiempo de compartir unas cervezas que elevan el espíritu y salvan nuestras almas perdidas. Acomodaos.

Shafir estaba contento y se demostraba en su amplia sonrisa.

Al admirar el bamboleante escote de Vesta al servir las bebidas se le ocurrió un brindis.

Por los generosos dones con que nos regala la divinidad! Tomad, amigo magnus, bebed de mi pinta hasta que os traigan una. Le dijo a su compañero, que se incorporaba a la mesa.

La suciedad y la incomodidad habian quedado atras, para dar lugar a este lugar, mas civilizado, o eso parecia. Sin embargo mi vision de la nueva localizacion se vio truncada por el olor de ese apestoso brebaje que triunfaba entre los humanos y sobre todo, enanos, esa cerveza, de amargo sabor y que rugia en la cabeza pasadas unas horas, nada que ver con el faelnirv, el licor elfico por excelencia, su suave aroma te inundaba desde el primer momento en que lo servian. No obstante, el protocolo social de desas circunstancias sugeria que aceptara y me uniera a la celebracion fuera cual fuese la bebida que existiera entre mis falanges.

-Gracias amigo. Mantuve la jarra en alto dando un intento trago, haciendo gala de que auque nunca hubiera tenido habitos bebedores, era capaz de competir con los grandes.

-¿Decidme que habeis resuelto en mi ausencia? O habeis bebido todo el dia ? Dije sonriendo mientras anotaba otro tanto, observando a Shafir por si le molestaba que "aniquilara" su jarra.

Sientate elfo, no te vas a hacer mas alto por estar de pie.

El clerigo arrastra un banco de una mesa cercana y lo empuja hasta el elfo y lo deja ahi, para que se siente. De mientras, por gestos, llama de nuevo a la tabernera, supone que el nuevo tendra algo de hambre.

Pues si, Magnus, hemos tenido un intenso debate teológico, en el cual hemos decidido que los dioses elfos son inexistentes, y que deberias de avisar a tus congeneres para evitar que mas de sus almas se sigan perdiendo. Kord y yo nos pedimos a los guerreros y aventureros, y Boccob y Shafir a los magos, y hemos decidido que ya tenemos habitaciones y un baño nos espera.

La mirada traviesa del clérigo contrasta con las petreas facciones del mismo, ¿en que se fijaria el elfo?

Como si de una olla a presion se tratara, la sangre en el interior de Magnus comenzo a hervir, los puños se cerraban sobre si mismos, y los dientes mordian algo inexistente, mientras escuchaba las vanalidades de un crucifijo con patas. Sin embargo, esperaba que todos los esputos que salian de lo que llamaba boca, no fuera mas que una broma... aunque con Samuel.. quien sabe...

Calme el temple, y sonrei a las afrentas, que, de ser otro, ya le habria ensartado en la mesa. - ¿ No esperaras comparar a un dios que solo cuida de su gran espada, cosa que da que pensar ya que no puede con una espada normal, sino solo de las grandes... con los grandes dioses creadores de este mundo como Corellon y Elhonna verdad Samael ? Jajajaja. Una carcajada revienta en las narices de los que osaban mencionar en vano el nombre de los dioses elficos, y una mirada de complicidad buscaba encontrarse con Aelin, ya que no entendia como podia aguantar semejante vejacion.

Sin duda alguna la reunion me habia resultado altamente incomoda, y no esperaba encontrarme alli demasiado tiempo.

- Sin duda ya he bebido suficiente por hoy, tomare una habitacion y cenare, que ya va siendo hora... olisquee el cuello del peto de cuero y añadi. y lo del baño tampoco es mala idea...

Abandone el lugar dispuesto a tomar lugar en la habitacion lo antes posible ... agota discutir de politica ...

El muy truhán de Magnus se acabó mi cerveza. Debía estar seco.

Porque eres tú, amigo mío, si no, te convertiría en ratón para que jugase contigo mi Nera. En tu honor, ratón de campo. No te ofendería haciéndote pasar por uno de ciudad. Jejeje.

Samuel, verdaderamente más suelto, le quiso gastar una broma al elfo, pero de qué puede hacer chanza un clérigo como Samuel, que si se ríe se le corta la piel de la cara y debe ponerse manteca? Acaso contarán chistes en los templos? Shafir, se puso las manos en la cara para ocultar su expresión de resignación.

Este Samuel, no aprenderá!

Sintió el impulso de decirle algo a su amigo Magnus, pero sabía que su orgullo era equivalente a su nombre y que era mejor esperar. Cuando se marchó, le dijo a Samuel en voz baja.

Grandullón, no me hagas más caso sobre relajarte y disfrutar un poco del momento. No estás hecho para esto. Lo tuyo es sufrir y dar la murga, está claro. Jejeje. Cómo se te ocurre hacer una broma sobre sus divinidades raciales a nadie más que Magnus, el elfo más serio que he conocido? No había otra forma de meterte con él. Podías haberle dicho que no se permitían paletos en la posada o alguna cosa así, pero... en fin, para qué seguir. Jejeje. Si lo peor es que encima tengo yo parte de culpa por animarte.

Señorita Aelin, nos vamos a comprar? Le dijo, levantándose de la mesa y ofreciéndole el brazo.

De nuevo Samuel volvía con su charla sobre los dioses y todas esas vanalidades que me aburrían de manera inmensa...

   Esta bien Samuel, tu ganas, lo que tu digas, los dioses y todo lo que tu digas... ahammm iba diciendo mientras le escuchaba asintiendo con la cabeza y repitiendo cada una de sus palabras.

Cuando acabó su conversación Shafir empezó la suya, y bueno, la verdad es que era mucho más interesante que la de Samuel... Consiguiendo como recompensa de su asimilación a las teorías de Samuel unas cervecitas para nosotros...

   Te lo agradezco enormemente Samuel, pero no quiero mezclar el buen sabor del vino con la cerveza... asi que os la dejaré aquí encima...

Después de esto, Magnus llegó a la taberna, sentándose con nosotros y bebiéndose sin ningún tipo de escrúpulo la cerveza de Shafir...

   Bien, bien Aquí tienes otra Magnus, toda tuya y sin ser tocada por mi le dije sonriendo, y antes de pasarsela comienza de nuevo las charlas...

   Oh por dios santo, parad de una vez, ya sabemos todos que los dioses de cada uno son importantes y fin... nunca aprendereis, sois unos aburridos... digo sacandoles la lengua en plan broma.

   Vale Shafir, vámonos ya... digo mientras me levanto de la silla.

   ¡Cielos! creo que el vino estaba demasiado bueno como para dejar un poco y empiezo a ver cosas que antes no lograba...agradeciendo el brazo de Shafir.

   Uau... ahora en serio... ¿Sabes dónde están las tiendas?o...prefieres que pregunte yo le digo poniendo uno de mis dedos en mi boca como si fuera una niña mientras vamos andando hacia la puerta...

Sonriente, el mago, contestó a su compañera Alelin:

Pregunta tú, hija mía, que te harán más caso.

Así que no perdieron el tiempo y marcharon con la sutil despedida que hace un gesto con sus únicas manos libres y un guiño.

Nera se estiró, se desperezó y trepó hasta el hombro de Shafir de un salto. Allí arriba jugueteó con la oreja de su amo, entreteniéndose haciendo que su lóbulo oscilara como un péndulo. El mago sentía cosquillas.

Venga Nera, para, jejeje. Que no es el momento, jijiji. Para!

Me acerque al que posiblemente seria el encargado de la posada y le di instrucciones, no me apetecia estar en compañia de tan retrograda mente por lo que queria comer algo directamente en la habitacion y pasar el resto del dia alli, todavia ensartaba a alguien alli mismo.

- Tomare un buen plato de carne de caza, como guste, sorprendame, y queria disponer de una habitacion para esta noche.

Samuel se levantó de su silla, recogió su maza y se estiró. Caballeros, me voy a dar un baño, pulir la armadura, aceitar las juntas, el cuero y a dormir, si quereis algo, mejor que espere hasta mañana.

Tras estas palabras el clérigo se fué de la sala, a descansar como solo los fieles podian hacerlo. Por la mañana ya rezaría.