Néstor. Esta tarde comento. Lo he pasando muy regular estos días y se me ha pasado. Sorry.
Ves a un solo individuo con armadura adentrándose en el bosque. Observas que sus intenciones no son otras que hacer sus necesidades.
Escuhas además otros ruidos, voces, que provienen del sendero que está a las afueras del bosque.
Olvidate del anterior mensaje, tenemos que aligerar un poco esto.
Me acerco con ligereza a él, tratando de nos descubierto. ¿Qué hará aquí?, ¿se habrá alejado del grupo para cagar?, ¿qué tipo de persona es? Si en cualquier instante deja de lado sus armas, me abalanzo contra él y se las arrebato. Espero una buena oportunidad para actuar, necesito obtener cierta información y la tengo que conseguir aunque tenga que pagar un precio.
Siento haber tardado. Parece ser que hoy ya estoy medio bueno. Los otros días me metía a cumplir mis obligaciones y poco más.¡Ya casi me coges en frikipuntos!
Te acercas mas a el hombre, ves que es un humano con armadura ligera y una espada. El hombre deja su arma junto al tronco de un arbol y se dispone a hacer sus necesidades. Puedes ver que en su cinto guarda una pequeña daga.
No te preocupes Mariote, mejorate que es lo primero.
Lo de aligerar es que voy a pegar un salto en tu historia, no has visto ningun grupo adentrandose en el bosque. Ahora has visto a un guerrero entrar y voces que provienen de fuera del bosque.
Me muevo con la velocidad del tigre, acompasando mi respiración para tratar de no alertar al soldado. Mi objetivo es su espada, trato de cogerla antes que él siquiera subirse levemente los pantalones. Un hombre sin una espada es presa fácil. Necesito interrogarlo.
Tira iniciativa, yo haré lo mismo pero con un penalizador.
Motivo: Iniciativa
Tirada: 1d20
Resultado: 13
Motivo: Iniciativa
Tirada: 1d20
Resultado: 17(-4)=13
La tirada de mi soldado es 13.
La tuya es 13 más el bonificador, total 15.
Te acercas con rapidez al soldado y le apartas la espada de su lado. El guerrero sigue con los pantalones bajados, mirándote con temor a los ojos mientras trata de rebuscar rápidamente en su cinto, buscando su cuchillo.
¿Quién eres y que es lo que quieres? -te pregunta tratando de sobreponerse a tu súbita aparición.
-¿Qué hacéis y qué habéis venido a buscar en el bosque?-Digo mientras le hago mostrar que ha perdido su espada-Por lo visto no sois ni uno, ni dos, y quiero saber si traéis malas intenciones.
Sólo estamos de paso, somos comerciantes, no somos ninguna amenaza. Ven conmigo, te presentaré a mis compañeros y compartiremos contigo algo de comer. No somos enemigos -te contesta el hombre mientras trata de subirse los pantalones y alejarse un par de pasos de ti.
-Tienes más pinta de soldado que de comerciante, ¿no crees?-digo mientras me acaricio la barbilla. Vuelvo a mostrarle su espada y le señalo la armadura que lleva-Esa bonita armadura y esta espada me dicen lo contrario. Espero que no me estés mintiendo.
Los comerciantes deben ser también buenos soldados si quieren sobrevivir ¿no crees? -te pregunta irónico mientras continua dando pasos hacia atrás -hay demasiados asaltantes por esta escena, supongo que ya lo sabes ¿no es así? y seguramente no estes solo ¿verdad?
Antes de que te de tiempo a contestarle el hombre se lleva las manos a los labios y lanza un poderoso silbido.
Me abalanzo contra él tratando de ser lo más rápido posible. Por suerte está alejado de los soldados y si veo que no me da tiempo a acabar con él con presteza huiré aprovechando mi gran agilidad. Ese silbido posiblemente ha indicado su propia muerte, me ha puesto nervioso.
Ataco hijo.
Justo cuando estoy echándome encima de él cambio de opinión repentinamente. ¿Qué me está pasando?, ¿por qué actúo tan violentamente? He tenido un fuerte impulso, un deseo de matar a este hombre. ¿Por qué? ¿Sólo porque portaba armas?, ¿por ser un soldado? La vida que antes llevé estaba imponiéndose de nuevo. El actuar por instinto, sin razonar si lo que hago está bien, es correcto. Viro con destreza esquivándolo e intentando huir hacia la zona dónde no se encuentra el resto del soldados. Su espada la llevo conmigo, no pienso devolvérsela aún. Tengo que huir ahora que he sido descubierto, pero evitaré cualquier conflicto siempre que sea necesario. ¿Quiénes serán estos tipos?
El soldado huye mientras recuperas la compostura y das la vuelta, volviendo al interior del bosque.
Antes de que puedas adentrarte demasiado escuchas un grito de dolor, un aullido de algún ser que lucha por su vida.
Intento acercarme hasta el sonido, siempre sin llamar la atención. No quiero interferir en algo que no me incumbe, pero no sé cómo reaccionaré si me encuentro con algo molesto. Tengo que ser cauto.
Ya he vuelto del Mulhacen!!
Te acercas con sigilo y ves un gran grupo de seres en la carretera de fuera del bosque, cerca de una caravana.
Algunos de ellos visten de soldado, entre ellos al que sorprendiste en el bosque.
Otros tienen cadenas en pies y manos.
En esos momentos un gigantesco jedit de color blanco está ahogando a un soldado mientras que otros dos se acercan a él con sus espadas en la mano.
Otro soldado está en el suelo, decapitado. Tras él un humano atado con cadenas sostiene un hacha ensangrentada.
La escena es un caos, algunos esclavos gritan asustados, otros parecen despertar y querer atacar a los soldados mientras que estos se dirigen a por los rebeldes para matarlos.
Padre, ¿como te ha ido?
Maldita sea, no sé que pasará ahí, pero no me gusta un pelo. ¿Qué estará pasando? Observo con más calma la situación. No puedo arriesgarme a hacer nada sin conocer las causas y los motivos por los que esa gente está apresada. Además de ser un suicidio hacerlo solo. Me llama poderosamente la atención el jedit blanco. Por qué estará ahí. Mi cabeza está llena de dudas y desánimo. Siempre alerta para que nadie se aproxime a mis espaldas.