Partida Rol por web

- Oreg? Creo que quedo en la posada lo llevaron ahi a descansar luego de que nos trajo al pueblo. Su carreta fue atacada por un grupo de criaturas, por suerte estábamos cerca y pudimos socorrerle. Mas detalles yo no tengo puesto que llegue a ultima hora en la ayuda y posterior a la batalla me preocupe de los heridos. Si quiere mas información podría preguntar al Alcalde - digo sonrriendo - o podria preguntar a Sir Gael quien estaba mucho antes en la batalla. 

Thormen los mira confundido.

De que diantres están hablando?? Yo nunca dije que tenía mulas,  les dije que tenía caballos!

Luego mira alternativamente a Aramin y luego al caballero. 

Cuando?? Cuando ocurrió esto??

A pesar de su enojo,  los mira con cara realmente preocupada. 

-"Veo que tienes amistad con Oreg, estate traquilo, no corre peligro. Está un poco magullado y descansando en la posada. El ataque se produjo ayer, en el camino que va a Akkaran. Nosotros ahora vamos a ir a intentar acabar con esas amenazas, pero si no llegamos a tiempo... quizá otro Oreg no pueda contarlo... comprendes, ¿no?"

Intento poner una voz de pena, para ver si nos presta sus caballos como agradecimiento.

De que diantres están hablando?? Yo nunca dije que tenía mulas,  les dije que tenía caballos!

Bueno bueno, nos podemos llevar sus dos mulas si no las quiere.  -dijo Panacea muy convencida, y un poco molesta porque el enano no quería a ese par de animalitos tan buenos. 

Y si, lo de Oregg.  Pero bueno, lo más razonable para el negocio es dejar en garantía.  -les explicó a sus compañeros que quiensabe que tanto sabían de negociar con enanos.- 

¿Hay otra persona en el pueblo que nos venda o rente sus caballos o mulas?  -Las suyas nos las llevaríamos, no se preocupe.  ¿Alguna que tuviera alguno de esos animalitos enfermos?  Le podemos dar buen precio.

El enano mira a la gnoma con aire confuso y enojado. 

Se dirige a Gael y Arsmin. 

Esta bien,  dejen 100 piezas de oro por la garantía de mis 2 caballos,  y me tienen que asegurar que los cuidara,  pero ya decidid que quiero ir a ver al viejo Oreg.

Es mi última palabra,  lo toman o lo dejan.

Su mirada se vuelve al escuchar a la druida y su rostro se endurece. 

No se de que parte venga usted señorita,  pero a mi no me gusta que me tomen el pelo. Otra palabra más y tendrá que ir al siguiente pueblo que aún encuentre con pertrechos,  para buscar lo que quiere. 

Cien monedas por los dos caballos era un precio bastante más adecuado, que les permitiría viajar con mayor comodidad, el caballero no veía mal el trato, asintió al resto de compañeros aunque no dijo nada, era mejor expresar la conformidad para saber si el resto compartía esa impresión.

Se fijó en el enano y en la espada de calidad normal.

- El precio de una espada larga es de 15 monedas de oro, por esa cantidad me la llevaría.

Tras revisarla no parecía haber nada que justificara el incremento de precio, debía ser que el enano quería cumplir con el tópico de enano ávaro.

El enano miró ceñudo al humano. 

Si no me pagan lo justo,  ya con rebajas,  no hay trato entonces. Que tengan un buen día. 

Luego los mira y les dice

Ahora por favor dejen mi establecimiento, debo cerrar e ir a ver a mi camarada. 

Sin soltar su martillo de forja les hace señas para que se retiren. 

-"Espere amigo enano, no tenga tanta prisa por favor. Su compadre Oreg no se moverá de donde está. Haga el favor y acepte las 100 mo por sus dos magníficos caballos, le prometo que los cuidaremos bien, le doy mi palabra. Mithas le puede confirmar que tratamos estupendamente a sus animales ayer. Luego, si quiere, regatee con mi compañero por la espada; pero los caballos los necesitamos."

Miro fijamente al enano y le tiendo la mano para cerrar el trato.

- perdon si mis colegas lo importunaron señor - digo mientras me pongo en frente del grupo - su trabajo se ve que es de primerisima calidad, al parecer fuimos muy mal informados por nuestro contratante antes de dirigirnos a su establecimiento. Tomaremos los caballos por las 100mo, pero me gustaría que pudiésemos dejar la espada que quiere mi colega en parte por las 15 y por nuestro lado cuando volvamos usted mi señor sera el primero en ver lo que encontremos a un precio justo que equipare su gran voluntad y la confianza que deposita en nosotros. 

- Que opina? - digo extendiendole la mano - ademas podemos dejar bien en claro a nuestro regreso que gracias a su ayuda y muy sabios consejos conseguimos lograr nuestro cometido. 

Sonrrio muy amablemente al Enano

- Ahora que se dirige a donde su amigo, si requiere alguna ayuda con artes de sanacion y curacion que el requiera con gusto lo ayudare sin ningun compromiso

Panacea, viendo la extraña costumbre de los humanos, extendió también su mano  

 El viejo enano,  al ver tanta situaciones extrañas para el,  finalmente cede a la petición de Aramin diciendo:

Ya  váyanse de acá...

Recibe todos los pertrechos que habían dejado encima,  le pasa la espada larga a Gael, toma sus 113 monedas de oro,  va y busca los 2 jamelgos  unos caballos bien robustos,  y luego cierra el local,  dejándolos en la calle con sus pertrechos. 

Acto seguido,  sale rápido camino a la posada. 

Miro como se aleja el enano y luego le digo al grupo cuando el enano este un poco alejado para no escuchar  

- Si es que alguna vez llegan a cantar historias de nosotros, espero que omitan la parte de donde casi somos aplastados por el Enano herrero luego de llevar al limite su paciencia. Espero que las mulas que nos rento puedan con la carga. 

Rio un poco.

- Panacea tu con Lasar tomen los caballos y llévenlos a preparar a la posada y aseguren que queden bien atendidos, Gael y yo iremos a buscar algo de información y si es posible alguien que este bien familiarizado con la zona junto con un mapa del sector. Ustedes ademas procuren ver provisiones para unos 4 o 5 dias, estimo medio o un día de camino de ida y lo mismo de vuelta, y los 2 adicionales serán en caso que necesitemos descansar de alguna herida. Nos reunimos a la hora de comer en la posada para discutir el plan de accion a ver si partimos mañana mismo al alba.

Se cerró un trato, no era ninguna ganga 25 monedas por el arriendo de dos caballos pero al menos ganarían en comodidad e incluso velocidad de ser necesario. Ese enano era un estafador o así se lo pareció al noble, que se cuidó de no decir nada más. Dejó pasar el tiempo, que se cerrara el trato, de manera que pudo obtener un arma de reserva.

- Perfecto, ya estamos casi listos para partir. Si conseguimos unas provisiones, dieciséis según tus cálculos, podremos empezar la marcha. Pienso que cuanto antes partamos mejor.

No veía la necesidad de esperar al día de mañana, con los caballos podrían aprovechar bien el día, llegando al destino con facilidad. Gael se fijó en el resto, pendiente por saber cómo discurría el pensamiento de los demás. Ciertamente la pequeña gnoma podría tener alguna sorpresa mágica referente a la comida, solo que el guerrero no podía imaginarlo.

En su mente, se hacía más clara la posibilidad de realizar con éxito esa misión y eso era lo importante.

Me quedé un poco extrañado de que el enano me ignorara en favor de mi compañero. Prácticamente repitió mi plática y yo me quedé con la mano en el aire esperando un apretón que nunca llegó. La pequeña druida siguió nuestra acción y también extendió su mano, era un tanto cómica la situación. Al final se aceptó el trato y conseguimos los dos caballos a préstamo, más otra espada para Gael.

El herrero se marchó a ver a Oreg y nosotros nos quedamos solos, esperando dar el siguiente paso. Aramin fue el más raudo en preparar un plan, en el cuál me daba órdenes de qué tenía que hacer y cuál sería mi cometido. Parece que se había erigido en nuestro portavoz y, cosa graciosa, me mandaba con la pequeña y alegre gnoma a cuidar de los caballos y comprar las raciones para el camino.

-Cosa rara es, que habíéndome conocido ayer, me trate como si fuera un mozo de cuadra y un criado... ¿será la costumbre por estos lares de tratar a los desconocidos así?

No dije nada y fuí junto a la gnoma para recoger a los caballos y llevarlos a la posada, al parecer iba a ser mi compañera de viaje a lomos del caballo.

Jjeje, don Aramir, me gusta su actitud proactiva.  Sinnnembarggo ... alargó las sílabas- así como me habló usted ahorita sólo lo pueden hacer mi mamá.  Y mi abuela.  Y mi bisabuela.  Y la druida jefa de la comunidad, que, de paso, es mi abuela.   Por eso es que dice ella que me puede dar dobles órdenes, jeje.  

Eso no quita que no sea una buena idea. -dijo alegre, y se fue trotando con los caballos, platicando con ellos entre relinchos y bufidos.  Averiguaría, con sus habilidades de investigación innatas a la curiosidad y carisma de las gnomas, todo lo que pudiera sobre el viaje próximo a hacer.   Andaba de suerte.

Acordándose de que tenía sus propias raciones imaginó que con el resto las tendría también. El caballero no tenía claro que hubiera que dilatar el viaje pero el grupo estaba yendo hacia esa dinámica.

- Hemos de conversar más, estamos teniendo discrepancias y ni hemos iniciado el viaje.

Gael se abstuvo de investigar, no era su punto fuerte así que prefirió quedar a la espera y ver si sus compañeros conseguían algo.

Después de varias horas,  Gael y Aramin han recorrido gran parte de la desierta ciudad.  Entre las pocas personas que respondieron sus preguntas,  solo lograron obtener que,  desde la plaza central,  sale un camino hacia el norte y las montañas, largamente desechado. 

Mientras, Lasar y Panacea, se dan cuenta que los animales se encuentran en bastante excelente estado,  bien alimentados e incluso,  al hablar con Frido, en la posada,  les cuenta fantásticas historias sobre bosques encantados, cavernas profundas con monstruos terribles y malvados y montañas congeladas llenas de criaturas mitológicas. 

Y por 1 moneda de oro,  les vende raciones y carne seca para 4 personas por una semana. 

Finalmente se juntan en la plaza casi al atardecer. 

-"Bien amigos, ya tenemos los caballos, las raciones, la espada de repuesto y las raciones. También hemos conseguido información vacua. ¿Quieren partir ahora y pasar la noche a la intemperie o pasamos la noche en la posada y salimos con las primeras luces del alba?"

Miro a los demás y espero su respuesta. Yo, personalmente, preferiría salir por la mañana. Si puedo evitar dormir una noche a la intemperie, lo haré. Espero no tener otro deja vu con mis compañeros, ya sería raro...