Partida Rol por web

OOOHHHHHHH

Mierda, otro norteño menos...

Se preparó y bajó hacia el establo, era ya su turno....

Me dispuse en las gradas a observar con atención el combate. El vencedor de ser Erbin y ser Peter sería mi futuro rival. Ambos parecían buenos jinetes así que esperé la primera carga con suma expectación.

Mis ojos no dejaron de recorrer a los asistentes, en busca de aquella sibilina mujerzuela. Aunque sin pruebas poco podía hacer.

El inicio del siguiente duelo en la arena de las justas vino precedido como era habitual de la voz potente y grave del heraldo.

-¡Ser Erbin de la casa Servulian contra Ser Peter de la casa Flint!.- La gente había visto un gran espectáculo en el anterior duelo y la presión se repartía ahora entre los dos contendientes. Sin duda esperarían lo mismo de ambos.

Peter fue hasta el rincón donde estaba Erbin a lomos de su corcel y se levantó la visera protectora del yelmo.

-¡Eh Erbin!- Le llamó a gritos. - Parece ser que después de nosotros solo va a quedar un norteño en el torneo. Espero ser yo quien te patee el culo pero eso no significa que no quiera desearte buena suerte. ¡Que gane el mejor, amigo!

Ser Erbin le caía bien, no tenía porque haber malos rollos entre ellos pese a enfrentarse. Fue a su rincón de la arena y cuando se dieron la señal bajó su visera y clavó espuelas para que el caballo comenzara a andar. Conforme iba cogiendo velocidad veía entre las rendijas de la protección como Erbin se acercaba hacía él y bajo la lanza apuntando a su escudo. ¡tenía que derribar a su rival!

Lo mismo digo Peter!, sonrió y bajó también su visera.

Era evidente que estaba nervioso, las palmas le sudaban...

Azuzó a su caballo y se lanzó a por su oponente

Los dos norteños salieron al ataque, podrían ser amigos fuera de la justa, pero allí no había amigos. Solo el honor de ser quien quedara sobre el caballo al final del cruce.

Ninguno de los dos vaciló, ningún caballo aminoró la marcha, mantuvieron las lanzas a la altura adecuada y llegó el choque. Ser Peter había golpeado bien pero Erbin golpeo aún mejor y el choque hizo que Ser Peter se levantara de la silla de su caballo y cayera de culo en la arena. Era como si el caballo se hubiera marchado sin él...

Erbin Servulian era el ganador y él último de los cuatro finalistas que tendrían que verse la cara antes de la gran final. El espectáculo estaba servido.

A Peter le dolía el culo como no le había dolido nada en años.

-Maldita sea, Servulian, me has reventado el culo con tu lanza. -El norteño se echó a reír por el doble sentido de sus palabras y tendió una mano al caballero vencedor antes de ir a buscar su caballo que refunfuñaba en una esquina del rectángulo. -Ya te daré a ti motivos para refunfuñar, mala bestia...- Le dijo al caballo. - Has ganado justamente, espero que al menos me invites a una cerveza para compensarme el dolor. Ahora mi apoyo está contigo, demuéstrales a esos sureños de que estamos hecho los del Norte.

Gracias Peter, aunque ha ido de un pelo, le dice al darle la mano.

Buff, pasada ronda sin heridas y a la primera...

Pasa delante del rey y la mano, haciendo la reverencia que pertoca

Mis señores

Y vuelve a los establos donde recibe la enhorabuena de su escudero

La gente estaba ilusionada con el buen espectáculo que se estaba dando en la arena. Y entonces el heraldo salió para anunciar el primer combate de las semifinales. Muchos esperaban ver este combate, lo ansiaban, para algunos era una final adelantada, pero dado el nivel de los otros contrincantes aún no estaba todo dicho. No sería bueno subestimar a Erbin que había terminado con su rival de un solo golpe, y Ser Dalmau tenía muchas ganas por ganar un combate igualado.

-¡Ser Jasper de la casa Thundersword contra Kaleon de los dothrakis! -Anunció el heraldo y mucha gente se puso de pie para ver a los dos rivales, en la espada había ganado Jasper, ¿pero sería igual en la justa?. Ser Walder le había dado mucha guerra a Ser Jasper y el dothraki había ganado con facilidad a su oponente. Se auguraba un combate largo y apasionado entre ambos jinetes.

Y ahora contra Kaleon... ¿seria realmente cierta su fama de buenos jinetes o el resultado del anterior encuentro habia sido... cosa de la suerte? 

- Vamos a ver si sobre el caballo realmente mejoras... - sonríe y emprende la carrera

El dothraki se posiciona metódicamente junto al tronco que separa las trayectorias de los dos jinetes y espolea a su caballo para que inicie la carrera. No consigue posicionar la lanza como le hubiera gustado y el ataque no parece que vaya a tener éxito.

Los dos jinetes cruzaron la liza pero tan solo fue un envite de tanteo al parecer por el resultado de la misma. Tanto Jasper como Kaleon lograron esquivar la lanza del rival con suma facilidad. Había respeto entre ellos, se notaba. Kaleon había desarmado a su anterior oponente con bastante facilidad y Ser Jasper había sido duro con Ser Walder desde el principio, pero aquel comienzo entre ellos no tenía nada que ver. Sabían que ambos eran peligrosos, y que un error por precipitación o por riesgos innecesarios podía costar caro, pero tras el primer asalto de tanteo ahora debían ir a por más si querían obtener la victoria.

El ver ese tanteo también por su parte, el que no se hubiera dejado provocar... hacía no bajar la guardia. 

El dothraki cabalga al encuentro de su rival pero el ataque tampoco es certero y vuelve a fallar el blanco.

La paciencia de Jasper empezaba a acabarse, avanzando esta vez con algo más de fiereza. 

El siguiente envite fue exactamente idéntico al anterior. Tanto Jasper como Kaleon fueron a comprobar al rival de nuevo. El tanteo continuaba al menos durante ese asalto.

Todo el público guardaba silencio a la expectativa de ver que ocurría. Muchos de ellos inclinados hacía delante en sus asientos, con los ojos clavados en los dos jinetes.

El nuevo ataque de Kaleon parece ir mejor dirigido que los anteriores.

Ambos contendientes habían dado por finalizado el tanteo inicial y pasaron a atacar más consistentemente a su rival.

Ser Jasper se lanzó con todo dispuesto a asestar un golpe con su lanza a Kaleon duro y consistente, un golpe de esos que no son de amigo. Aprovechando el empuje de la carrera del caballo cargó con la lanza sobre Kaleon y estuvo seguro de que conseguiría acertar en su rival. Y así pareció por un segundo en que la lanza iba directa al cuerpo del dothraki, pero este hizo una finta en el último momento y consiguió esquivar la lanza, demostrando la prodigiosa habilidad de los dothraki sobre un caballo, después lanzó un peligroso ataque con su lanza que a punto estuvo de golpear a Ser Jasper, pero el caballero estuvo ágil de reflejos y también logró esquivarlo.

Tras un gruñido al ver a su contrincante esquivar el golpe hizo que cambiaran su lanza, como si aquello pudiera traerle más suerte o... quién sabe. 

El salvaje carga por enésima vez contra Jasper, que el caballero vuelve a esquivar, a pesar de que en esta ocasión Kaleon había cargado de manera muy certera.

Pero esta vez, el dothraki hace dar media vuelta a su caballo y se dirige al trote hacia la posición de su contrincante, con la lanza bajada y sin hacer ningún ademán que sugiera que pretende atacarle.