Partida Rol por web

Veo que me sigue Sir Beleas, y me pongo a su par para que avancemos juntos:

-Por San Miguel y San Jorge, acabemos con estos desalmados, es el único descanso que conseguirán.

Suelto otro espadazo desde arriba hacia abajo buscando abrirme camino como si de una selva se tratase. Intento abrir brecha para que los otros caballeros nos sigan.

con el impetu de la caraga, Brynden casi no tuvo tiempo de pensar en lo que estaba pasando a su alrededor,simplemente busco con su hoja,la cabeza del primer picto, y con un fuerte movimiento,rebanó la cabeza,que cayo como fruta madura...más bien como fruta podrida,el olor nauseabundo subia ahora hacia sus fosas nasales,mientras todo pasaba muy deprisa a su alrededor.

Intentó mantener a su caballo tranquilo,pero las filas de seres demoniacos causaban,mucho miedo en el pobre Vermellon,asi que al intentar dar un tajo de reves, sobre otro de los pictos, las nauseas y el movimiento del caballo,le impidieron hacer blanco...

Los pictos ya eran suficientemente terroríficos para añadir hordas infernales.- Ese honor y esa gloria para otro- traté de concentrarme en alcanzar al oso o su jinete...al menos parecían vivos.

Mi poca experiencia en la batalla me tenía concentrado totalmente en mantenerme en el caballo y acabar con todos los seres asquerosos que se acercan a mi montura para evitar que me derriben.

Oigo a los demás caballeros gritar pero por los nervios no me salen las palabras y me impiden mirar quienes luchan a mi lado.

Me fijo en el picto que detiene el avance de mi caballo y lanzo mi brazo armado. Mi mano aprieta fuertemente la empuñadura dorada de mi espada mientras la hoja realiza un arco de arriba a abajo acertando en el objetivo.

Bandelaine se ajusta el yelmo y tras reprimir un arcada al ver a los zombis carga contra ellos con todas sus fuerzas esperando eliminar a la mayor cantidad de ellos posible para tener el honor de ser el primero que se enfrente contra su líder.

! Por dios santo ¡ , pobres pecadores , será mejor acabar cuanto antes con sus cuerpos para que sus almas vallas al purgatorio como paganos y no como demonios . 

tengo bonificación por caballerosidad. ¿ eso no me amortigua algo la caida del caballo?

Sir Art, tras levantarse dolorido tras la caida del caballo, estaba algo más que contrariado, pues era la tercera vez en pocas horas que volvia a caer de un caballo.

No obstante, tenia la espada en la mano, y pictos a montones para poder resarcir su fama, algo mál trecha. Y asi hizo espada en mano.

Veo a Gallowain acercarse por un lado para cuando fijo la mirada nuevamente sobre los pictos unos sobre otros se acercan a mi caballo, lanzo un golpe seco con tan mala suerte que siento como queda clavado en el cuerpo de uno de los malnacidos, sin sacarle sangre o permitir el corte, forcejo con el tratando de recuperar mi espada mientras escucho las palabras del caballero al que sin vacilar respondo - Te alcanzare cuando me cargue a estas lacras -

La masa de zombis ralentizaba el avance mientras intentabais abriros paso hacia el brujo Picto. Arma en mano, cortais, trinchais y golpeais con el escudo para conseguir estar un metro o dos mas cerca....

Espoleo a mi caballo para avanzar, y lo hago sesgando las cabezas de los muertos animados.

-¡Encontrad la paz por la vía mi acero. Santa Bárbara me guía!

Consigo colarme por una brecha dirección directa hacia el chamán mientras comienzo a chillarle:

-¡Conseguiste que huyera antes, pero esta vez los caballeros te lo harán pagar! ¡besarás mi hierro maldito!

En el nombre de Dios , que mi acero sea justo y de paz a vuestras almas purificando vuestros cuerpos . 

Sin duda el caballer sir Lenox era piadoso y daba muerte rápida a los cadáveres de los pictos rematando sus podridos cuerpos . 

Sir art sin montura, ve dificil avanzar al ritmo de sus compañeros jinetes, por lo qeu deja de obsesionarse con el jefe brujo, y de dedica a hacer piña con caballeros desmontados y caidos. Mientras arrea espadazos.

23 puntos de daño.

Desengranar la espada de uno, solo para atascarla en otro, pero que clase de brujería es esta... golpeo con mi escudo a todo cuanto intente acercarse mientras trato una vez mas de sacar de las zonas óseas del cuerpo de mi enemigo la espada… al menos veo como se acercan los refuerzos rezagados tras de nosotros.

Por más espadazos que doy, noto que no avanzo. Entonces recuerdo que no estoy solo. Levanto mi cabeza y observo a mi alrededor buscando más caballeros para intentar ayudarnos mutuamente mientras suelto otro espadazo. Al no concentrarme en el ataque fallo rotundamente.

Pese a mi interés y mi esfuerzo me hallaba abrumado entre las hordas demoníacas asiendo mi espada con fuerza y blandiéndola de lado a lado sin órden tratando primero de alejarlos de mí y mi caballo sin encontrar un verdadero hueco dónde asestar un mandoble. La desesperacón partió de mi garganta como una invocción de ayuda. ¡¡¡San Jorgeeee!!!

con fuerza en su puño, sir Brynden, manejo su espada, dando mandobles a su alrededor, intentando avanzar entre las hordas de pictos, hacia el chamán que los controlaba...

en uno momento de respiro, se percató de que ser Gerigen y ser Waylan, se retrasaban ,mientras las hordas se abalanzaban sobre ellos,asi que espoleó su montura hacia ellos, ensartando a cuanto picto pudo,hasta conseguir acercarse a ellos.

-Por San Jorge y Por arturo¡¡¡-gritaba como un poseso,pues ya era preso de la furia de la batalla.

La batalla continúa y la sangre comienza a mezclarse en demasía con los restos pútridos de los pictos no muertos. Cada segundo cuenta y parece que haya demasiados como para vencerlos. Los caballeros están rodeados y les golpean sin cuartel  por cualquier lado mientras intentan avanzar.

Sir Gallowein golpea, corta y embiste con el caballo viendo una opurtinidad, una brecha en la defensa por donde se cuela enfrentándose al Brujo-shamán Picto. 

El furioso oso se lanza en corta carrera hacia Gallowein, guiado por el Brujo-Shamán.