Partida Rol por web

El Torso

Bernard Stoker

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12/04/2011, 17:00
Director
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12/04/2011, 17:01
Director

Hasta hace poco las cosas no te iban muy bien, has tenido que vender lo ultimo que te quedaba: el orgullo. Despues de un par de copas te resulto bastante facil.
Llamaste a unos antiguos compañeros, y resulto que uno de ellos estaba trabajando como forense para la oficina del sheriff. Quedaste con el, estabas algo nervioso, pero todo fue mejor de lo que esperabas y, despues de recordar entre copas los viejos tiempos, acabasteis hablando del asesino del torso y  de los problemas que les estaba causando.

Le escupiste mas que le preguntaste tu oferta de trabajo y, casi sin pensarselo, te ofrecio un sitio de ayudante.

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12/04/2011, 17:40
Bernard Stoker

Sin duda no eran buenos tiempos para Bernard, desde que lo despidieron de su antigua consulta médica, las cosas fueron cada vez peor. Se encontraba en un punto de caída libre, en la que caía en un abismo sin fondo. Estuvo meses viviendo de lo que tenía ahorrado, luego empezó a vender algunas cosas que ya no necesitaba y poco a poco se fue quedando sin nada, en la ruina, pues en esos malos tiempos que corrían en Chicago, no había fortuna para un holgazán alcohólico.

Tras pasar varios meses en un estado de embriaguez casi permanente, Bernard lanzó su última carta, pues su situación era desesperada. Tragándose su orgullo, empezó a contactar con antiguos compañeros de profesión y estudios, en busca de una oportunidad para redimirse y encauzar de nuevo si vida. Su primer paso era dejar el alcohol, pero no se veía capaz de hacerlo hasta que su vida fuera normal de nuevo, lo que iba a ser un circulo vicioso en el que salir iba a ser una ardua tarea.

Un sitio de ayudante.. trabajando con el sheriff.. investigando el famoso asesino que había causado tanto revuelo. Bernard se preguntaba si podría aguantar todo eso, pero sin duda había aceptado sin pensárselo dos veces.

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12/04/2011, 17:16
Director

Esa misma noche dormías tranquilo después de saber que mañana era tu primer día como ayudante. Pero no hacía ni un par de horas que te habías acostado cuando alguien llamó a tu puerta.

PAM PAM PAM!!!!

Adormilado abriste la puerta y te encontraste a dos hombres que parecian armarios andantes. No les habías visto nunca pero tenían la pinta de gorilas de una de las muchas bandas de la ciudad. Entre ellos había un bulto que, mirándolo bien, no era tal. Era un tipo sangrando, con herida de bala. A él sí le tenías visto: Tomasso Buscetta. Un tipo bien posicionado y con el que habia que tener mucho cuidado

Necesitamos sus servicios, doctor - te espetaron sin ninguna ceremonia los gorilas. Ya estabas acostumbrado a ello, pero te fastidia que precisamente cuando más quemado estabas y en vísperas de un empleo decente tuvieran que venir a recordarte de donde venías...

Genial...

Con un ademán de cabeza les haces pasar y les señalas la mesa del comedor mientras vas en busca del maletín.

Una hora más tarde, y unos pavos más rico, guardabas tu instrumental médico mientras echabas un vistazo a Buscetta, que ahora respiraba tranquilo y vendado. Te diriges a ellos:

Es un tipo con suerte. La herida era fea y un centímetro más a la derecha ahora estaría saludando a San Pedro. Ya os lo podéis llevar. Que se cambie las vendas el tiempo habitual y que no se moje.

Los tipos cogieron con cuidado a Buscetta y salieron sin darte ni las gracias. Desde la ventana de tu apartamento observaste cómo lo metían en el asiento trasero del coche y se alejaron entre las sombras de la ciudad.

Limpiaste la mesa y pensaste en serviste un buen trago mientras observabas el reloj: las tres de la madrugada. Y mañana tienes que estar a las ocho en el hospital.

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12/04/2011, 20:25
Bernard Stoker

Era un día lluvioso. Las gotas empañaban el cristal de la ventana, por la cual Bernard observaba la marcha de los Buscetta. Había pensado en dejar esto de las consultas clandestinas, pero desde hacía meses que eran su único sustento, pues lo próximo sería vender la casa y quedarse en la calle. Y sobretodo ahora que trabajar con el sheriff iba a suponer un doble juego para él. Era un quebradero de cabeza, pero por el momento era su realidad y tenía que aceptarla.

Cuando reúna más dinero, me iré a vivir a otro lado, es la única manera de abandonar seguro este negocio, pensó Bernard mientras se servía un vaso de Brandy. Era de las últimas botellas que le quedaban, pues con todo lo de la Ley Seca, cada vez eras mas complicado encontrarlas, y mas caras. Últimamente había cogido la mala costumbre de tomarse una copa antes de acostarse, pues le ayudaba a relajarse, lo que esta noche ya era la tercera que se tomaba.

El silencio volvió a inundar su casa, y con ello el tic-tac del gran reloj de pared que tenía, recordándole que mañana era su primer día e iba a necesitar descanso. Apuró el último trago del vaso de aquel brebaje y se encaminó hacía su habitación, esperando no volver a tener interrupciones en lo que quedaba de noche.

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18/04/2011, 16:02
Director

 

El resto de la noche transcurrió sin contratiempos.
Te levantaste temprano y, a pesar de tomar un desayuno frugal y una ducha rápida, saliste con el tiempo justo. Estabas tan nervioso ante la expectativa de volver a tener un trabajo decente que te tiraste un sinfín de tiempo eligiendo que te ibas a poner y que ibas a decir. Cogiste el autobús a tiempo y llegaste a tu destino. Eran las ocho en punto cuando entrabas en el Instituto Anatómico forense. En la recepción te indicaron donde se encontraba el despacho de Pearce.
Siguiendo las indicaciones llegaste hasta un ascensor y unas escaleras, lo pensaste un segundo  antes de decidirte a bajar y fue entonces cuando te llegaron los retazos de una conversación:

... desaparecidos de la zona . a ver si alguna corresponde

La escalera acababa en un pequeño pasillo el cual doblaba a la izquierda, justo al doblar pudiste contemplar la escena

 

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18/04/2011, 16:21
Director

 

Al doblar ves que te encuentras en un laboratorio forense y que a unos metros de ti está Pearce hablando con un par de hombres a los que reconoces en seguida como hombres de Ness. Parecen estar contemplando un cuerpo que está en una de las camillas.

Algo aparte ves a otro hombre vestido con bata blanca, delgado y parece algo débil de constitución, seguramente debido a que tiene una incipiente calvicie y una mirada seria.

 

 

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18/04/2011, 16:22
Director

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18/04/2011, 16:26
Policia 2

- Así que no tienes nada. - Su tono era casi insultante