Partida Rol por web

  Jooooder!!! Menuda nochecita nos ha dado ese tipo. He visto turcas monumentales, pero la de este  tipo se lleva la palma de rara. No paraba de decir chorradas sobre medicos de vagabundos, algo de no se que tatuaje y un griego loco que se pasea por Cleveland armado con cuchillos. jajajaa- Esto supera al tipo que decía que le habían abducido los extraterrestes y que le obligaron a beber alcochol.  La semana que viene nos toca a napoleón jajajaja

Bernard curioseaba por la comisaría mientras escuchaba la conversación del policía y aquel hombre borracho. Apenas prestaba atención a lo que decían, pero cuando oyó lo que supuestamente balbuceaba aquel pobre hombre, le llamó mucho la atención.

Si primera intención fue acercarse a aquel tipo y preguntarle más sobre el tema, pero recordó que no estaba en su terreno y que no podía llevarse a aquel tipo sin más.

Su mirada entonces paseó al detective, a ver si había escuchado lo mismo y podía hacer algo al respecto.

Un tatuaje extraño, alguien paseándose con cuchillos... no podía ser casualidad.

Walter se acercó al Señor Lowdump rápidamente.

¿Cree usted que sería posible que nos dejaran hablar con este supuesto borracho? Sospecho que no solamente tiene algo que ver con el caso, sino que esta supuesta borrachera podría ser en realidad un estado de enajenación mental transitoria causada por algo que haya podido contemplar y le haya dejado en estado de shock. No sería la primera vez que me enfrento a un caso en el que contemplar según qué horrores hace que la psique de una persona se refugie en algo parecido a un delirium tremens... que podría haber confundido a estos dos agentes.

Bien, gracias Bill! - dijo Robert al guarda de recepción.

Él también había oído la conversación de sus compañeros aunque lo había disimulado bien. Asintió a las palabras de Walter: Los conozco de hace unos años aunque no tengo mucho contacto con ellos, no coincidimos en los turnos. Aunque por intentarlo no pasa nada- dijo sonriendo.

Se acercó a sus colegas y todos los que le acompañaban pudieron ver cómo compartían un cigarrillo y charlaban en voz baja. Robert señaló a sus compañeros de aventuras y dijo algo que no lograron oír. Al cabo de unos minutos en que se intercambiaban risas, bromas sobre extraterrestres y cigarrillos, Robert se despidió de los policías y volvió con el grupo.

Bueno chicos, me ha costado algunos chesterfield pero les he dicho que sois del hospital y que ese borracho sería un buen tema de estudio para un artículo científico. Cosa que en cierto modo es verdad. Y nos dejan darle coba la media hora que estarán tomando un café fuera.

Y Bill nos da acceso a los archivos aunque sólo por unos minutos. Habremos de darnos prisa si no queremos que nos vean los hombres de Ness y empiecen a hacer preguntas. Por aquí. Señaló una puerta que daba acceso a un pasillo y se dirigió con paso decicido. 

Una mueca socarrona aparece en mi semblante ante este magnifico golpe de suerte.Mientras sigo de cerca a Robert,miro al borracho con los ojos rebosantes de alegria,como si fuera un boleto ganador de la loteria.

Camino por los pasillos con la cabeza baja y algo despistado.Derrepente mi rostro se torna serio,quizas este hombre sea un filon y nos proporcione información importante o quizas todo sean patrañas de un borracho.Esperanzado por descubrir alguna pista importante sigo a mis compañeros por el pasillo,pensando ya en las preguntas que voy a formular.

En los archivos encontráis la información que andabais buscando: la dirección de Edward Andrassy y la de Flo Polillo. Los antecedentes de Andrassy lo sitúan como una ladrón de poca monta y un chapero. Flo era prostituta y alguna vez había sido detenida pero nada importante.

En cuanto salís del archivo cruzáis por unos pasillos y vais en dirección a las celdas destinadas a los borrachos, las prostitutas y demás calaña detenida esa misma noche.

El borracho que tanto ha llamado vuestra atención está en una de las celdas, solo. Responde al nombre de Willie El Manco, puesto que le falta un brazo. Está muy delgado, solloza intermitentemente y susurra algo.

El doctor me ha enseñado ya papeles que voy a morir en el pasado, el remolino me chupará y me escupirá, y me va a volver a chupar. El doctor me cortará mi brazo y me matará en 1929, y el que escapa sólo corre hasta que es chupado otra vez. como el griego loco.

Está acuclillado en un rincón y cuando no repite esta letanía solloza quedamente, mesándose el pelo con la mano que le queda.

Bernard carraspeó para intentar llamar la atención de aquel hombre borracho y desamparado.

- Hola amigo.. - empezó diciendo. No sabía muy bien como abordar a aquel hombre - ¿Me podrías explicar que has hecho hoy? ¿Te acuerdas?

Sabía que en su estado, tenía que tirar por las preguntas sencillas y poco concretas y de ahí ir avanzando. Se acordaba de aquel seminario de psicología del paciente que tuvo que atender.

Walter observa al Doctor Bernard tratando de relacionarse con aquel hombre de comportamiento óbviamente lunático. Aquellos casos tan extremos no eran exactamente su especialidad, pero bueno... como él mismo solía decir, "visto un maníaco trastornado paranoide agudo, vistos todos".

Dispuesto a echarle una mano al Doctor Bernard, Walter se acerca a las puertas de la celda donde está encerrado Willie.

Claro, claro... Su nombre es Willie, verdad? Señor Willie, ¿le apetece un cigarrillo? - le pregunta Walter mientras se saca su paquete del bolsillo, ofreciéndole a aquel pobre desgraciado al menos algo de nicotina.

Tras escuchar las disparatadas palabras de Willie,recorro el pasillo de un lado a otro con las manos en los bolsillos y los hombros encorvados en señal de abatimiento.

Por momentos empiezo a considerar que estar interrogando a un loco en la celda de una comisaria es una total perdida de tiempo,y mas aun teniendo otras pistas mas fiables.Finalmente,decido actuar con diligencia anotando en mi libreta todo lo que diga Willie,tratando ser de alguna utilidad en esta situacion.

Willie mira a los recién llegados con cara de extrañeza, deja de sollozar y mesarse el pelo y se acerca cautelosamente a la puerta arrastrándose por el suelo de la celda.

Un cigarrillo? sii... -coge con la mano buena el cigarrillo que le ofrece Walter y se lo acerca a los labios, esperando a que se encienda solo o alguien le de fuego. Luego mira a Bernard - Si, si. Willie es mi nombre, me llamo Willie, aunque todos me llaman Wilie el manco - señala su brazo amputado un poco más arriba del codo- aunque antes que me lo cortaran era sólo Willie... ¿Qué he hecho hoy? Hoy, hoy, estuve bebiendo, si eso es, bebí. En un bar, o en otro. Pero bebí, bebí y ebí hasta que me echaron del otro bar el que os he dicho no, el otro, digo el tercero o el quinto. Tenía que avisar a la gente, así que fui por la calle avisándoles y un poli me llevo aquí. Pero yo le avisé.

¿Avisarle? Muy bien hecho, Willie, está bien que avises a la gente. ¿Por qué no nos avisas ahora a nosotros también? ¿Qué es este aviso tan importante que tienes que darnos?

Walter sigue sonriendo, tratando de que Willie siga más o menos "centrado"... o al menos tan centrado como pueda estar alguien como él.

Y quién narices será este griego loco del que hablaba antes? ¿Quizás el asesino es griego? Quién sabe... a veces cuesta sacar algo claro de las palabras de tipos tan trastornados.

Sí, sí, les avisé, les avisé. Que no vayan por las calles, son peligrosas. El remolino te puede coger y entonces el doctor te hace daño y luego te vuelve a mandar aquí. Se lo dije a Flo y a las otras, no os acerquéis a los tatuajes, no os acerquéis al doctor o acabaréis como el griego, pero no me hicieron caso...

Remolino, doctor, griego... - pensó Bernard. Sin duda ese tipo estaba muy mal, no sabía si serían capaces de extraer información de esa mente tan dañada. Sabía que en esos caso insistir sobre lo mismo no iba a ayudar demasiado, así que suspiró y se apartó un poco de aquel tipo.

- Así no vamos a llegar a ningún lado.. al menos hasta que se le pase lo que haya tomado.

Walter, con una sonrisa, se acerca más hacia la reja tras la que está encerrado el pobre Willie.

Esto no parece que sea causa del alcohol adulterado... hay cosas que suenan demasiado coherentes como para que todo sea fruto de alucinaciones etílicas.

Willie, amigo, dime... ¿Cómo acabó el griego? ¿Sabes dónde podemos encontrar al griego este del que hablas? Somos tus amigos, estamos aquí para ayudarte, no te preocupes; aquí el torbellino no podrá cogerte.

Primero Walter creyó que el griego del que hablaba Willie era un cómplice del hombre de los tatuajes, pero parece que se trata de una víctima "chupada por el remolino", sea lo que sea esto. La verdad es que descifrar los balbuceos de aquel pobre desgraciado no iba a ser una tarea fácil ni para su mente entrenada.

Jajaja! El doctor me dijo que ya volvería por el remolino, estaba junto al río, los tatuajes de nadie, el doctor me dijo que vive bajo el tren, que construye perros con los vagabundos aunque yo no sabia que era el doctor antes de que me matara y les envié a la sirena.

Walter comenzaba a intuir que discernir completamente la realidad de la fantasía a partir de las palabras de aquel pobre hombre sería mucho más complicado de lo que creía. Probablemente necesitarían semanas de terapia como mínimo, y eso suponiendo que aquel hombre pudiera ser recuperado para la sociedad, lo que ya era mucho suponer.

Pero Walter tampoco pensaba rendirse, aunque cada nueva frase de Willie planteara más preguntas que respuestas. Tratando de seguir desmadejando el hilo de sus pensamientos, Walter siguió tirando...

¿Les enviaste la sirena? ¿Quién es la sirena, Willie? ¿Vas a contárnoslo?

Bernard se cruzó de brazos algo impaciente.

- A este hombre no hay que llevarlo a una comisaria, sino a un psiquiátrico, está claro que no sabe lo que dice - comentó algo consternado. Él como médico sabía que había algunos fármacos que trataban la psicosis que ese hombre parecía tener, tranquilizando al paciente y haciéndole volver poco a poco a un estado mas normal. Claro que siempre había casos irremediables.

- No creo que podamos sacar muchas mas ideas de aquí, quizá es momento seguir buscando pistas en otro lugar.

Jajaja!!! No conocen la sirena!!! Es normal, vosotros sois respetables no como yo, yo sólo bebo. Está en la calle donde estan los tatuajes, donde siempre, no se ha movido. jajaja!

Con paciencia todo se logra... y la verdad es que aquel hombre se estaba "soltando" con más rapidez de lo que él mismo esperaba. Solo faltaba darle un poco más de cuerda para que terminara contándoles todo lo que sabía sobre aquel misterioso caso.

Explícanos, pues, tú que sabes más que nosotros... ¿Qué es eso de la sirena?

Con una sonrisa, Walter espera a que el vagabundo termine de desahogarse.