Partida Rol por web

Es extraño, cuando coges la caja no sientes nada raro, pero cuando saltas por un segundo notas como si pesase una tonelada, como si te atase a algo y no pudieses usar tu poder a gusto. Por primera vez en tu vida sientes un intenso mareo tan fuerte que te obliga a detener el teletransporte.

Caes sobre tus rodillas mientras recuperas el aliento, miras la caja con el rabillo del ojo mientras contienes las nauseas. Ya no hay ni rastro de la neblina, parece una caja normal y corriente.

Un ruido a tu espalda te devuelve a la realidad: estas frente a la enorme puerta acorazada. Los ruidos han regresado, cad vez son más debiles y casi te parece ver como la puerta empieza a oscurecerse.

-Sin señal. -Digo mirando mi móvil y volteo a mirar a Ersy. -¿Algo de suer...? -No completo la pregunta al percatarme de que Jaden no está, moviendo mi cabeza buscando en todas las direcciones. -¿Dónde está Jaden? -Empiezo a sentir pánico y mi respiración se va acelerando. -Debemos escondernos, en cualquier momento pueden aparecer los de hace un momento y nos superan en número. -Maldición, ¿a donde...? -Siento que el miedo se va apoderando de mi, nunca había pasado por esto.

Es muy difícil pedirle a alguien que guarde la calma cuando tu no la sientes en absoluto. Es como pisar arenas movedizas, porque el más leve movimiento en falso hace que te hundas. Me sentía así, más o menos, sumergida con medio cuerpo en dicho charco de arenas traicioneras, viendo a mis amigos desaparecer a mi alrededor. Corrí junto a Nat y la tomé de la mano, aunque fuese algo incómodo al tener la venda de por medio. Pensé en algo bonito, algo tranquilo. Una cena en familia, con mis padres y todos mis tíos. Rememorar aquello me dio fuerzas para sonreír, para ofrecerle a Nat algo a lo que sostenerse… pero sobre todo, a lo que sostenerme yo. Droidcat me imitó, acelerando hasta chocar contra mi pierna, abrazándose a ella.

 - Tranquila, Nat. Lo más seguro es que Jaden se haya distraído, o del cansancio de cargar con nosotras antes con su poder, haya ido más lento. Aparecerá en cualquier momento, igual que la tía Agnes, que seguro que ya viene de camino -miré en torno a nosotras. La maraña de cables que caía del techo era como una cortina tapando la boca de uno de los pasillos. La montaña de cascotes tampoco nos serviría, era demasiado baja. Me orienté cómo pude, recapitulando nuestros pasos. Podíamos explorar otro de los pasillos, por donde fue tía Agnes. Seguro que hay alguna sala cerca del punto de reunión -Vamos por aquí. Entraremos en la primera sala abierta que veamos, y nos asomaremos de vez en cuando para comprobar si nuestros amigos han vuelto.

Todo me parecía mala idea, pero no podía decírselo a Nat. Porque en cuanto lo expresara en voz alta, ya no me quedarían apoyos. Con una señal, mandé a Droidcat comprobar el perímetro primero, asomándose unos pocos metros por los pasillos que no habíamos pisado hasta entonces, pero sin desaparecer de mi vista. Lo que me faltaba era perderle a él, como si no tuviéramos bastante ya con los que no estaban…

Aprovecharemos para buscar cobertura -dije mientras levantaba el teléfono con la otra mano y lo movía delante de mí, arañando la más mínima señal.

La mano de Ersy me toma por sorpresa, no estoy muy acostumbrada al contacto físico. Ni siquiera con mi madre he sido tan efusiva, tal vez cuando era pequeña y aún en ese entonces era muy poco, ella siempre debía tenerme a su lado, por su trabajo, pero eso es decir mucho. Mi niñez la viví en los colegios en los que mi madre trabajaba y por mis habilidades siempre fui algo retraída por miedo a que se mostraran sin intención.

Me faltó muy poco para retirar mi mano por efecto reflejo, pero algo me hizo detenerme. -¿Una venda? -Recordé el momento en que se hizo esa herida, fue hace muy poco tiempo. -Debe sentirse como yo. -Pienso y lo confirmo mientras la escucho. -Natjinka, no seas tonta, esto se acaba hasta que cante la gorda. -Voy recobrando la compostura al tiempo que sigo a Ersy.

-Lo siento, no quería preocuparte. -Momentos antes, antes que viniéramos con la Sra. Mile, me había sentido algo traicionada por ella. Cuando estábamos en las instalaciones deportivas Ersebeth comentó algo que insinuaba, o eso fue lo que creí, lo que le había confiado muy poco tiempo antes en el camino del bosque. Le dicho sobre el momento en que había dejado inconsciente a Arlan, un momento que había lamentado mucho y... ya no importa. La actitud actual de Ersy hace que me enfoque y vea que estaba equivocado por sentirme traicionada por ella. Fue un error pensar algo así.

Cuando encontramos un sitio apropiado la miro, me muevo para quedar frente a ella, coloco mi mano libre sobre su hombro y la miro a los ojos. -Vamos a estar bien, no nos vamos a rendir... -Se dibuja una sonrisa en mi rostro. -Gracias.

-Bueno- digo en voz alta encogiendome de hombros. No habia sido tan dificil. Tomo la caja y me transporto al punto de inicio. De improviso siento como si me jalaran hacia abajo, como si alguien hubiera tirado un ancla y yo estuviera amarrado a ella.En el momento en el que active mi habilidad, la caja que tenia en mis manos de repente pesaba una tonelada haciendome trastabillar. No pudiendo continuar, me detengo, otra vez a medio camino al lado de la gran puerta acorazada.

Apenas apareci, siento como si mi cabeza diera vueltas. Caigo de rodillas y me llevo una mano a la boca tratando de no botar todo el contenido de mi estomago. -Bien...... eso no me lo esperaba- digo en voz baja conteniendo los mareos. -Aaaah- exhalo tratando de recuperar el aliento mientras me siento un rato y me pongo a examinar la caja.Fuera lo que fuera lo que contuviera no me gustaba, no me habia permitido transportarme y eso me incomodaba. Sentia como si estuviera atrapado o restringido de alguna forma. Chasqueo la lengua, mejor me apresuraba y se la daba a la Sra Mile, alejandome de ella. Ya sintiendome mejor, me pongo de pie y con cuidado de no encontrarme con los tipos de antes, camino con rapidez hacia donde se encontraban Nat y Ersy

Cuando te pones en pie e inicias el camino hacía la sala donde aparecisteis el ruido a tu espalda aumenta de golpe. Te giras rapidamente y ves como la puerta acorazada esta temblando con fuerza, ves como a una velocidad sorprendente el oxido empieza a comerse la enorme puerta de metal. En apenas unos instantes la mitad de la puerta esta oxidada como si llevase siglos sin usarse.

A juzgar por la velocidad de la corrosión calculas que no debe faltar mucho hasta que la puerta deje de ser un obstaculo para lo que sea que quiere entrar.

Estoy por dar el primer paso cuando escucho el crujido. Me detengo con un pie en el aire y giro la cabeza. El origen era la puerta acorazada, está temblando violentamente y puedo ver como se va oxidando con rapidez. Me volteo del todo, el óxido avanza con una velocidad sorprendente y me hace recordar al vídeo que Ersy nos mostró. Por la velocidad de la corrosión parece que no va a tardar mucho en deshacerse. Doy un paso hacia atrás, luego otro. Veo hacia atras y luego hacia la puerta, me lo pienso mejor y retrocedo hasta afuera de la entrada. Me pica la curiosidad por ver que está pasando así que graciosamente asomo la cabeza por la entreda y espero ver que es lo que está pasando

Ves como la puerta se oxida por completo y cae al suelo con un ruido metálico. Ves que por el hueco cruzan los dos sujetos de antes esta vez en silencio, como si no quisiesen alertar de su presencia, aunque la enorme puerta se haya encargado de ello. Por detras de ellos ves a un chico, no debe tener más de 20 años, vestido completamente de negro y con una máscara que te quita el aliento, tiene el pelo cano y anda con pasos lentos pero sin alejarse nunca de los otros dos. 

Su rostro es impasible y observas como lleva las dos manos enguantadas. Pasan a tu lado sin apenas detenerse, no te han visto. Los sigues con la mirada hasta confirmar que van en dirección a las chicas.

Mientras buscais a Jaden y esperais a la Sra. Mile un estridente ruido metálico recorre el pasillo. Algo muy pesado ha caido, no escuchais nada más despues de eso.

Un nuevo y fuerte ruido hace que me abrace a Ersy. -¿Y ahora qué sucede? -Pregunto de forma retórica, pues no sabíamos en realidad qué estaba sucediendo. Podría ser a causa de nuestros enemigos por estar buscándonos o que el laboratorio se estuviera derrumbando... también a causa de nuestros enemigos. Después de un rato me separo de ella, le hago una señal de silencio y me asomo con cuidado para ver y escuchar mejor.

No entendí porqué se disculpaba. Me había dado cuenta de que Nat había estado tensa desde que encontramos a la chiquilla, pero lo entendía. No estábamos viviendo una situación que cualquier adolescente típico tendría que vivir. Así que al oírla recuperar algo el ánimo, sonreí y asentí. ¡Claro que todo saldría bien! Si estábamos juntas. Enseguida se uniría Jaden con nosotras, vendría la tía Agnes, y les daríamos un palmo de narices a los malos cuando nos vieran escapar con el remedio para la niña…

Un estruendo espantoso provocó que me diera un vuelco el corazón y que Nat se abrazase a mi, a lo que correspondí tan sobresaltada como ella. Mi vista voló rápidamente al techo, esperando verlo caer en cualquier momento.

 - ¿Recuerdas el punto donde hemos aparecido? Había muchos cables colgando del techo. Seguro que ha sido alguna placa de metal que ha terminado de ceder, no te preocupes… -me temblaba la voz.

Nat se asomó al pasillo buscando el origen del ruido, y yo la seguí, más por no quedarme atrás que porque realmente tuviera curiosidad. Estaba llegando al punto en el que no quería saber nada más de aquel sitio, y tampoco quería corroborar mi teoría por si acaso era errónea y, al asomar la cara, me diera de bruces con alguno de los dos tipos que nos había atacado antes.

-.....Oh....Mrd.....- Los tipos de antes.....y uno mas. Este me parece mas interesante, lleva las manos enfundadas en guantes, cosa que me llamo la atencion ademas de su aspecto, totalmente negro y de pelo cano. Obviamente el responsable de la oxidacion de la puerta y por lo tanto el del laboratorio entero. Ya habia visto tipos similares de habilidades, al contacto, y al parece sin control, de ahi los guantes. A mi padre le hubiera encantado que le investigaran en la compañia. Un poder interesante y con bastante aplicaciones....

Inhaló y exhalo varias veces, esto iba a ser duro de ****. Pero bueno no tenía de otra, si los hombres seguían por ese camino iba a encontrar a las chicas y se i a a convertir en un gran problema. Hago trizas corazón me transporto con la caja al lugar donde estaban Ersy y Nat, pero está vez me obligo a seguir hasta el final

Os manteneis en silencio intentando escuchar el mínimo ruido, escuchais pasos pero aun estan lejos, deberían tardar un poco en llegar. Mientras pensais en qué hacer veis como Jaden aparece de nuevo en la sala, lleva una extraña caja en sus brazos y parece que os está buscando.

No consigue veros mientras os manteneis en vuestro escondite.

Esta vez el viaje es más llevadero, la caja parece pesar como debería y no te resulta dificil volver a la sala inicial, lo único que sientes es un ligero mareo pero no tarda en desaparecer. La caja sigue en tu poder y parece completamente inofensiva.

En cuanto te fijas en la sala ves que no hay duda, es la sala donde llegasteis. Esta tan destrozada como antes, no sabrias decir si hay algo distinto. No hay rastro de las chicas, miras rapidamente a tu alrededor pero no las ves por ningún lado. Escuchas un ruido por el pasillo a tu espalda, aun es lejano, no sabes si son pasos o solo es viento.

Escucho pasos que se acercan a lo lejos, luego veo que alguien entra en la sala donde nos encontramos y me agasapo instintivamente. Al identificar que es Jaden me tranquilizo un poco, pero nosalgo todavía y volteo a ver a Ersy. -¿Y esa caja?- Le digo a modo de susurro -¿Será lo que nos mandó a buscar la Sra. Mile? espero que así sea.- Le hago un gesto a Ersebeth para que se quede quieta. -Alguien más se está aproximando, no quiero que hagamos ruido, voy a ir hacia él. No se si me entienda con señas que quiero que se teleporte hasta aquí. -Me incorporo y activo mi poder en la parte inferior de mis pies para crear un efecto de repulsión con el piso y no hacer ruido mientras camino. Me aproximo a Jaden.

Le hago una seña a Jaden para que no se mueva y camino hacia él. Si él se fija lo suficiente, notará que no emito ruido al caminar y al parecer levito un poco. -Alguien más se aproxima y no quería hacer ruido, por favor telepórtate al sitio del que vine y allí hablaremos.- Digo en cuanto llego a su lado y después me devuelvo.

Caigo de rodillas sin aliento. Apenas termino de transportarme dejo caja a un lado en el piso -Aaah..aah- respiro con dificultad. Miro a mi alrededor rápidamente, parece que está vez si lo logré, sin embargo no veo a las chicas. Alarmado pienso que llegue tarde. Pienso en si debería volver a transportarme cuando alguien se aproxima por detras. Sobresaltado giro la cabeza con rápidez. Es Nat, no se de donde salio pero me alivia verla. Veo detrás de ella por donde ha venido y veo a Ersy escondida.

Escucho lo quee dice Nat, sin embargo antes de que se vaya le tiro de la manga aun sin aliento. Sacudo la cabeza de un lado a otro. ..No...Tenemos... que salir de aquí...ya. Coje esto digo entregándole la caja. La tomo del hombro y nos transporto a donde está Ersy y asimismo hago lo mismo con ella al llegar inentendo, transportarnos lejos de ahi