Partida Rol por web

El capitán Van Ulrich salió del puente y Hoban se quedó de nuevo solo en la sala. Recogió la silla del suelo y volvió a sentarse, con la cabeza algo dolorida por el golpe.

Salvo por el lejano murmullo que subía por el pasillo desde la sala común, se hizo de nuevo el silencio. El joven se quedó un instante mirando su plato casi vacío, como atontado, cuando de repente una señal de aviso lo sacó de su ensimismamiento:

Se trataba de un pitido agudo periódico, acompañado de una una señal luminosa en una de las pantallas que rezaba "Alarma de proximidad: PELIGRO DE COLISIÓN". Hoban miró al frente, a través del panel transparente de la cabina, y vio un millar de pequeños objetos (no parecían muy grandes a esa distancia) directamente en la trayectoria del Cuervo. Se dirigían directamente a un campo de asteroides.

Hoban se quedó un segundo mirando el firmamento. Después reaccionó como un rayo.

- Mieeerdaaaa... - dijo mientras se daba la vuelta - ¡Capitán! ¡Capitán! - Corrió hacia la sala común con tanta velocidad que pareció por un instante que se iba a caer por las escaleras. ¡Capitán, peligro de colisión! ¡Rápido,  Van Ulrich!.

Apenas habia acabado de recostarse sobre la silla tras la comida cuando de nuevo el joven pistolero lo hace sobresaltarse, haciendole casi caer de la silla. Maldito seas Hoban!!!. Murmura para si.

- Colision?? Maldicion Hoban, en que lio nos has metido ahora?? - pregunta mientras comienza a correr hacia la cabina de mandos. - Vas a hacer que me siente mal la comida!!!

Menea la cabeza..

*esto apesta a jugar a heroes, sinceramente...

... mas se encoje de hombros. Tampoco es como para ponerse a apelar por algo asi.

-Tu mandas...

Cuando el pequeño Hoban entra avisando de una colision, vuelve a comer tranquilamente, mientras comenta..

- Cuando el piloto no pueda resolver los problemas, come tranquilo y ve en paz al otro lado. Si los puede resolver.. de que te preocupas?

Hoban se envalentona ante las palabras del capitán.

- Yo no he tocado nada, maldita sea. Ha sido tu rumbo el que nos ha metido en un campo de asteroides. - y corre detrás del capitán para estar con él en el puente.

Había algo que a Wyatt le preocupaba. Quizá la forma de actuar de aquellos hijos de puta haciéndose pasar por reavers. Incluso la radiación emitida por aquella lata a fín de camuflarse como una nave reaver no era normal. Kinney pensaba que se tomaron demasiadas molestias para asaltar a un puñado de mujeres y niños a aquellos infelices mineros de Warlock, un enclave del borde dejado de la mano de dios. Las cuentas no le salían en la relación inversión-benefício.
Tampoco encajaban, en el criterio del veterano, aquellos asaltos. Por mucho que Wyatt se exprimía el cerebro no era capaz de entender que beneficio sacarían los asaltantes de todo aquel asunto. Y eso era algo que le llevaba desorientado.
Hummm... No me gusta nada...
Entoces la repentina voz de alrma de Hoban le sacó de sus tribulaciones. Acto seguido se dirijió con paso apresurado hacia el puente donde estaba el capitán y Hoban.
Al entrar le dirijió una mirada desdeñosa al joven justo antes de doblar su cuerpo y sentarse en la silla del copiloto. Entonces concentró su atención en lo que tenía enfrente la nave y en los instrumentos.
-No ha sido tu rumbo!- Comenta justo antes de mirar al joven Hoban. -Y más te vale que te reprimas, ya empiezo a estar harto de tus insoléncias! - Increpa con el marcado enfado que lo aracterizaba. -De manera que si no quieres caer por la borda será mejor que trates al capitán con respeto!- Realmente se mostraba irritado.
-Ha sido su rumbo...- Dice ahora con un tono mas calmado y indicando con un leve gesto de cabeza ante la inmensidad de la negrura que tenían delante de los instrumentos. - Será mejor que andemos con precaución, no pueden estar muy lejos.-

Van Ulrich y Wyatt llegaron al puente rápidamente, seguidos de cerca por Hoban. Tomaron posiciones al los mandos del Cuervo y, a través del panel transparente de la cabina, vieron claramente lo que se les venía encima:

Un densa nube formada por miles de asteroides de diversos tamaños se extendía delante de ellos, ocupando una vasta extensión del espacio. Wyatt revisó el rumbo del Cuervo en los sistemas de navegación, comprobando que efectivamente no se habían salido del rastro. Si las lecturas que indicaban los sensores eran correctos, la nave que perseguían se había metido de lleno en aquel peligroso paraje.

La mayoría de asteroides grandes estaban en un estado bastante estable, describiendo lentos movimientos y dejando espacios libres entre ellos que podían permitir a una pequeña nave de carga como el Cuervo pasar entre medias. El problema estaba en el polvo y los pequeños proyectiles, diminutas rocas de escasos centímetros de diámetro que podían perforar el casco de la nave si impactaban a suficiente velocidad, y que eran muy difíciles de detectar por los sensores de navegación.

En cualquier caso lo primero era frenar la nave, ya que gracias a la puesta a punto de Minek se desplazaba a su máxima velocidad, a la que sería imposible maniobrar incluso para simplemente desviar el rumbo fuera de la trayectoria que la llevaba directamente campo de asteroides.

Arhyssa observa todo lo acaecido últimamente en silencio. Al parecer algo ha fallado en el rumbo...

No tiene casi hambre, así que decide retirar su plato ya... Reprime un suspiro y se acerca a Minek:

-Parece que lo de las votaciones que habías propuesto, ha quedado en nada...-Sonríe leve, mirando a la chica con cariño:-¿Estás bien? Todo parece que se nos va demasiado rápido de las manos, no?

Vuelve a ofrecerle una cálida sonrisa, a la par que arregla cosas de la mesa, por ser de utilidad en algo...
Se siente de manos atadas, y esa sensación no es para nada agradable...

- La madre que los pario cuarenta y nueve veces!!! - exclama Van ulrich al ver la nube de asteroides que se alza ante ellos. - Wyatt viejo amigo, creo que nos va a tocar currar. - Su voz intenta parecer firme y tranquila, pero el capitan por dentro es un hervidero de nervios.

Se hace con el mando de la nave y la hace frenar un poco para no chocar de lleno con los asteroides. - Wyatt, Minek, alguna lectura de donde se encuentra la otra nave?? Es posible que se nos descubrieran y se hayan internado aqui para intentar despistarnos.

Con la nave ya mas ralentizada, comienza a internarse en la nube, con toda su atencion puesta en los mandos.

Wyatt repasa malhumorado los sensores del cuervo.
-Maldita sea...- Escupe enojado. -Este amasijo de piedras nos dejará la nave hecha un colador...- En el fondo Wyatt abrigaba una idea que empezaba a tomar forma. Entonces se giró hacia Dirk.
-Déjame salir con la pequeña, Dirk.- Empieza el veterano. -Me adentraré en el cinturón de asteroides y escanearé el rastro que han dejado.- Ahora Kinney relajaba su expresión. -No pueden estar muy lejos. Tengo una corazonada.- Tras el comentário torció el gesto para dar paso a una sonrisa. Y es que la corazonada de Kinney se veía mas motivada por la lógica que por el sentimiento. Minek había hecho un buén trabajo.

Hoban dió un paso adelante:

- No quiero dudar de tí, Wyatt, pero es peligroso. ¿Estas seguro que es lo que quieres hacer?, desde aquí se podría encontrar el rastro.

-Y tú vendrás conmigo.- Dice a Hoban. -No hay nada que puedas hacer en el Cuervo.- Comenta mirando de reojo a Dirk. -Y en la SkySurfer hay un puesto de artillero que ocupar.-
En el fondo Wyatt sabía que el estar ocupado haría que Hoban se centrase en un objetivo. Tal y como había ocurrido en las minas de Warlock.
-Hay que tener en cuenta que este caparazón no podría adentrarse en esta nube de asteroides sin ser acribillado...- Comenta ahora a Dirk.

Hoban hinchó el pecho:

- ¡Encantado!

Tenía confianza ciega en las habilidades de pilotaje de Wyatt, y el hecho de que éste depositara su confianza en él, a pesar de todo lo últimamente acontecido, le hacía sentirse lleno de emoción y de orgullo.

-Al menos de momento... pero quizá consigamos más pistas sobre qué hacer. Si están huyendo porque nos han visto se demostraría que no son reavers- guiña un ojo cómplicemente a Arhyssa, apenas queda nadie más en el comedor a parte de ellas y Mike, pero la joven mecánica enseguida se levanta con la energía que la caracteriza.

-¡Deja eso para más tarde!- le espeta a su amiga apartándole las manos de los platos y utensilios -Démonos prisa, vas a ayudarme con el motor, ¡corre!- tira de la suave y sedosa ropa de su compañera pero no se detiene a esperarla, corre conr apidez y agilidad por los pasillos que conoce completamente de memoria de la nave. Son los que ha recorrido más veces a la carrera así que no le cuesta demasiado volver hasta la sala de máquinas.

-Vamos a darte maniobrilidad, peque- se pone en cuclillas y tras arremangarse alcanza el mismo cable que había desviado antes para colocarlo en su lugar original. Nunca temía recibir algún calambrazo a pesar de que no sería la primera vez, pero si se preocupara por eso no podría hacer nada con el viejo Cuervo.

-Baja la palanca de potencia de los propulsores, ahí a tu lado- señala acusadoramente una palanca anclada en una de las paredes cuando Arhyssa atraviesa la puerta.

La joven acompañante se queda algo sorprendida al escuchar la petición de Minek, pero acepta enseguida, no tiene ganas de ver cómo el tiempo corre y ella no hace nada.

Sigue ágil y felinamente a la joven por donde ella pasa; por supuesto, a Minek no hay quien la gane en esto, así que aún habiéndose esforzado, llegó a destino unos segundos más tarde.

Cuando pasa por la puerta, Minek ya le está encargando tareas. Sonríe y hace lo indicado.

-Ya está... ¿Algo más?-pregunta suavemente, a la par que se sitúa a su lado, observando con curiosidad todo lo que acaece a su alrededor.

Mike es el unico ahora en el comedor. Termina su plato con tranquilidad y lo deja aparte, sonrriendo ante el ajetreo en torno. Saca una baraja del bolsillo y con movimientos rapidos de experto la mezcla... cierra los ojos y se relaja.

Empieza a repartir sobre la mesa 8 pequeños montoncitos y a jugar un solitario.

*El que teme sufrir ya sufre el temor...+piensa para si y juega+

- De acuerdo Wyatt, saca a la pequeña a relucir - comenta el capitan mientra comienza a aminorar la marcha para no chocar con ningun asteroide. - Os esperaremos por aqui ocultos en algun asteroide de estos grandes. No os hagais los héroes, solo mision de reconocimiento, entendido??.

Seca con la manga de la camisa el sudor de su frente - Reportad cualquier problema o descubrimiento. - mira a Hoban y a Wyatt que aun están en el puente de mandos - Rapido!!

-A sus órdenes.- Contesta Wyatt en tono marcial justo antes de encaminarse hacia las lanzaderas. -Vamos Hoban, no hay tiempo que perder.- Dice ya desapareciendo por el pasillo.

Con gesto de confianza y un leve asentimiento con la cabeza hacia Van Ulrich, Hoban se gira para desaparecer detrás de Wyatt. No dice nada al pasar junto a Mike en el comedor, pero le saluda con la mano.