Partida Rol por web

La sensación sentida era extraña, pero si había algo claro es que la cueva estaba despejada y no había ningún problema en avanzar. Quizá el enemigo estuviera fuera, acechandoos.

La entrada era peligrosa, cuatro kobods estaban montando guardia. Junto a ellos había un lobo que seguramente estuviera allí para dar la alarma al resto de miembros del lugar. Aunque por otro lado quizá eso sería el señuelo perfecto para permitir que el otro grupo se introdujera sin problemas. Aunque no sabíais tampoco donde estaban ellos.

La sensación era exacta, pero no estabais resultando observados por lo que había en la cueva. Parecía que alguien os estaba siguiendo, alguien llevaba un rato acechandoos y cuando giraste tu cara te pareció reconocer el escudo de Héxtor, algún miembro del grupo de vuestros enemigos os había encontrado.

Maximus seguía caminando al lado de su príncipe, acompasando sus pasos. Sentía que las miradas no estaban en el interior de la cueva, que eran del exterior. Estaba seguro que el interior era seguro

Debemos avanzar rápido. Tengo la extraña sensación de que alguien nos atacará antes de llegar a la cueva, y no saldrán de ella

Quietos todos ahi adelante hay 4 kobolds y un lobo. - informo a sus compañeros. Si el lobo da la alarma con sus aullidos esto se convertira en un hervidero de kobolds. Propongo acercarnos sigilosamente hasta una discancia razonable y caerles encima sin que se lo esperen, pero debemos acabar primero con el lobo.

Puedo servir de cebo. Tengo un conjuro que hará que brille como un faro. Cuando me acerque a ellos, esa luz se convertirá en dos proyectiles, y atacaré al lobo con ellos.

Si te ven y avisan a los demas acabar con el lobo no servira de nada. Creo que Revan y yo debemos acercarnos en silencio, mientras vosotros esperais cerca. Con un ataque relampago acabaremos con el lobo y entonces salis de vuestro escondrijo y acabamos con ellos. - dijo Jester tras un rato pensando.

Tras un momento de comprobación del camino enfrente, Revan asintió.- No hay otras trampas visibles por lo que acercarnos no debería ser un problema. - Tras escuchar la presencia de enemigos tan cerca y que no los hubiera visto, se sintió enfadado con sigo mismo. Su señor podría estar en peligro. - Si nadie puede tener una idea mejor yo seguiría con el plan de Jester.

Con sumo silencio pero suficiente para que todos me oyeran, les digo:

No estamos siendo observados por lo que hay en la cueva. Parece que alguien nos está siguiendo, por lo que veo lleva un rato acechándonos, pero no pensaba que fuera peligroso...Me ha parecido reconocer el escudo de Héxtor, algún miembro del grupo de nuestros enemigos nos ha encontrado...Hemos de estar alerta y ser precavidos...

Me parece buena idea Jester, puedo usar otro conjuro si lo estimáis conveniente.

Si, considero que  un poco mas de daño no nos vendra mal. Adelante caballeros. - dijo mientras desenfundaba su arco y avanzaba cautelosamente hacia el enemigo. Se coloco a unos 30 pies de distancia del lobo y preparo una flecha. Cerro los ojos, tomo aire y disparo.

Asiento con la cabeza al plan de Jester y acto seguido cargo mi ballesta esperando que algo desafortunado ocurra. Siempre pasa algo en este tipo de situaciones, así que es mejor prevenir. Avanzo con cuidado mientras hago un gesto a Bob para que me siga.

Maximus avanzó junto a Heironeus con la espada en la mano, preparado para cualquier ataque que pudiera ser desprevenido

Siguiendo a Jester saqué mi ballesta y apunté al lobo. Teníamos que eliminarlo cuanto antes y un ataque rápido parecía lo más sensato.

Me coloqué estratégicamente para tener un ángulo de disparo hacia el lobo lo más directo posible. Concentrándome más y más, para ser muy preciso en mi ataque... 

Al escuchar los sonidos del combate, hago un gesto a Bob para que se lance al ataque y avanzo tras él en busca de nuestros enemigos.

Vuestro líder y Maximus no alcanzaron a los enemigos pues estaban a una distancia considerable, así que Jester, Nut y Revan decidieron lanzar ataques a distancia que hirieron de gravedad al lobo. Desgraciadamente la criatura no cayó y podría dar la alarma en cualquier momento.

El resto e kóbolds se puso en pie y llevó sus armas a sus manos pues querían descubrir el orígen de tremendos ataques.

Señor, ya se ha dado la alarma. Debemos atacar y acabar con ellos cuanto antes dijo Maximos con el espadón en mano, saliendo de su escondite y atacando a sus enemigos

Desesperado al ver que el lobo no había caído, decidió rematarlo de nuevo al comprobar que aún no habían descubierto donde se encontraban escondidos. Vió como algunos comenzaban a cargar con armas de cuerpo a cuerpo. Disparó un virote, soltó la ballesta sin comprobar si conseguía matarlo y desenvainó sus dos armas.

Con mi mano volví a lanzar un proyectil mágico hacia el lobo...