Partida Rol por web

La cosa se está poniendo fea, el paladín es más poderoso de lo que aparentaba y necesitamos neutralizarlo lo antes posible. Así que, para darle un poco más de aire a Togeris, comienzo a hacer unos movimientos con mis manos y después señalo al paladín.

- Metronidazol - digo para finalizar el conjuro.

Alrededor de este comienza a crearse una esfera mágica de oscuridad, tratando de impedir un nuevo ataque hacia mis compañeros, no se cuanto va a durar su efecto, pero al menos podrán recuperar algo de aire o reducir a sus aliados, los que no parecen tan peligrosos como el paladín por si solo. 

Después me muevo nuevamente, sin un punto fijo de referencia, solo para no quedar estancada y ser objeto fácil de algún ataque mágico o quedar a disposición por un eventual ataque de alguno de nuestros enemigos. 

LAzgar aprovecha el descanso que le proporciona la oscuridad para curarse, ya que ha quedado muy herida.

Otra vez me envuelve otro manto de llamas, y como la voltereta que hice me sirvió para apagar las llamas, quizas ahora también pueda servirme, pero antes que nada necesito apartarme de la zona de batalla, mi cuerpo no resistirá mucho más y lo único que conseguira es debilitar al grupo.

Miro donde podría tener resguardo de la batalla y a la vez una buena zona para disparar, hasta que la única zona que veo es en la que no desearía estar por un posible arinconamiento por parte de los enemigos. Aun así no tengo otras opciones y no me queda otra que salir corriendo hasta donde acaba el pasillo y empieza la sala.

Cuando estoy apunto de llegar al sitio donde refugiarme pego un salto y vuelvo a dar otra voltereta aerea (en la cual cojo ya una flecha y el arco para no perder tiempo) para aprobechar la velodidad de la carrera más la velocidad que produzco al realizar la voltereta.

Esta vez decido a puntar a Mhoga - ¿Porque ninguno de los compañeros parece haber pensado que quizás sería mejor matar antes a un curandero que un luchador? Pero si no queda más remedio... - pienso para mí y acto seguido me dirijo a los compañeros - Será mejor todos a por un mismo enemigo y así concentrar el daño que podemos hacer -.

Dicho esto suelto la flecha pero esta no acabo de ver si le ha acertado o ha pasado rozando. Solo se una cosa. Necesito recuperarme.

Pese a los intentos por apagar el fuego de Kieran, las llamas vuelven a aparecer, quemándole con su magia. El mercenario maldice, pero decide cambiar de maniobra. No está demasiado herido y puede aguantar un poco más.

Kieran aprovechará su movilidad para atacar y atacar. Primero lanza un espadazo a Mhoga, hace una finta y vuelve a atacarle desde una posición más cercana a Caronte, desde donde lanza una onda de curación.

Los dos impactos encuentran a Mhoga que pronto se va a arrepentir.

Uno de los ataques golpea la mesa debido a la oscuridad pero e otro da en su objetivo, haciendo sangra en cantidad a Mhoga.

Veo la sangre de Mogha fluir, me siento bien, me siento fuerte. Pero encuentro sentido en las palabras del elfo. Si cae uno, los otros dos seran mas faciles de matar. No puedo olvidarlo. Aun asi, mi hacha corta lejos, puedo ir a por todos los que esten dentro de mi circulo de la muerte.

Torgeis golpea a Mhoga y Lazgar, pero falla contra el paladin debido a la nube de oscuridad.

Caronte se desplaza para seguir teniendo a todos sus adversarios al alcance de sus escudo, pero esta vez decide atacar a Mhoga, viéndolo el mas debilitado de la sala con la intención de reducir el número de adversarios cuanto antes. 

así usando su otro brazo dispara una de sus poderosas descargas eléctricas contra él. 

Caronte lanza su ataque electrico contra el bárbar, acertandole de lleno, peude oir sus quejidos en medio de la oscuridad.

Andragoras a ciegas intenta golpear a Caronte, pero sin exito, pero logra reavivar las llamas de este, haciendo que ardan con más intensidad.

Mhoga intenta aprovechar y atacar a la vez que Andragoras, pero Caronte los retiene a ambos con eficacia.

Selena activa su linterna magica, emitiendo una luz solo visible para ella y sus aliados que engaña la oscuridad. Con la otra mano, lanza una curación a Weylin, apagando sus llamas en el proceso.

Lazgar usa la magia de su baston parar curar a Mhoga.

Veo como la chamán orco cura al Mhoga, y en mi cabeza sigue habiendo una alarma diciendo que primero debería de caer la chaman. Ganas no me faltan para volver a lanzar mi ataque contra la chamán en vez de contra Mhoga, pero soy consciente que somos un equipo, y eso implica tomar decisiones juntos y en este tipo de situaciones lanzar un ataque masivo a un mismo enemigo.

- Si la chamán vuelve a curar a Mhoga deberemos cambiar nuestro objetivo de forma radical y así poder pillarla desprevenida. - pienso para mí. - Más vale que nos esforcemos más que ellos si no queremos sufrir más daños. -

Dicho esto y se gira para mirar a Selena y le agradece la curación que ha recibido.

Apunto de nuevo a Mhoga pero el dolor y la falta de concentración vuelven a pasarme factura.

Kieran maldice cuando la chaman sana a Mhoga de forma espectacular, pero no le queda más remedio que seguir atacando con tesón. Repite el mismo ataque que en la vez anterior, esperando hacer caer al guerrero.

Pero los ataques fracasan estrepitosamente. De la boca del mercenario vuelven a surgir maldiciones como pocas veces han oído sus compañeros. No queda más remedio que esperar a tener más suerte en su siguiente intento.