La busqueda no era todo lo rápida y útil que lo que los investigadores habían esperado. Mientras el agente Parker repasaba las notas y los acontecimientos los otros tres integrantes del grupo buscaban sin mucho resultado. Tras varias horas de exaustiva búsqueda por fin el profesor Steve, habituado a las bibliotecas, consiguió encontrar algo relaccionado con su cometido.
Había logrado encontrar un libro que, según el diario de Merriwather, mencionó Marion Allen. Este contiene un dibujo y una breve descripción de la pequeña caja que está ahora en manos de los investigadores. La información es bastante escasa y se sabe poco acerca de la caja aunque algunos eruditos dicen que perteneció al casi desconocido Noprhu-Ka, un presunto usurpador del trono egipcio que vivió en tiempos de la XIV dinastía.
Se supone que el sarcófago se lo entregaron a Noprhu-Ka los propios dioses y, según se dice, contenía ciertos espíritus a los que podía invocar para que se pusieran a su servicio.. El libro menciona también que, en el momento en que se escribió, el sarcófago contenía un ambar sin pulir con un insecto atrapado en su interior.
Durante años, la caja dorada perteneció a una familia británica de sangre noble, pero fue robada de su mansión en 1876 y,desde entonces, nadie la ha vuelto a ver. El mismo capitulo del libro incluye una traducción de los jeroglíficos que están grabados en el exterior de la caja, exactamente igual a la traducción que aparecía en el diario. También hay una breve referencia a los extraños glifos que se muestran en la tapa en la parte interior pero estos no se descifran ni se explican.
Chicos no he encontrado la referencia para saber que hora es, pero como vosotros si lo sabeis por que no sois tan despistados como yo ponedle que habeis tardado unas 3 horas en encontrar esa información.
Alexander se pasó los dedos por el puente de la nariz en gesto de claro cansancio. Llevaban en la biblioteca mucho tiempo, aunque menos del que hubiera esperado para encontrar algo útil.
Nos da algo más, pero no nos ayuda mucho en lo referente a la entidad. Un escalofrío recorrió su espalda al escuchar de su propia boca la palabra entidad. Tendremos que seguir buscando.
Tal vez lo siguiente que deberíamos buscar es información acerca del primer propietario, Noprhu-Ka.
¿Qué les parece?
- Está bien. - digo ligeramente cansado. Busquemos información sobre ese tal Noprhu-Ka.
Motivo: Buscar Libros
Tirada: 1d100
Dificultad: 75-
Resultado: 84 (Fracaso)
Siento el post tan breve pero hoy estoy ligeramente espeso. ;)
Mientras el profesor empezaba a buscar de nuevo entre las estanterías, Alexander se fijó en la señora Leefolt. Se había quedado dormida. El cura se acercó a ella.
Ssshhhh, señora Leefolt. Despierte. Es mejor que se vaya a descansar. Su paso por el hospital le ha tenido que pasar factura y está agotada.
La joven se despertó ligeramente confusa
¿Desde cuando tiene libros el hospital? Eh...Y que hace Ale...oh...
No estaba dormida- susurró la joven ligeramente ruborizada- estaba...bueno si -reconoció ante la mirada del cura-pero...ahora estoy mejor...ehh ¿han encontrado algo?
Sybill estaba cansada si, pero no pensaba admitirlo. Al menos no ante sus compañeros masculinos y menos despues de la discusión. La joven era muy cabezota y estaba dispuesta a quedarse allí hasta encontrar lo que buscaban
Poca era la información que había sobre este faraón y toda ella era una referencia a lo que ya habíais encontrado. Pronto os disteis por vencidos al ver que la biblioteca ya estaba prácticamente vacía y hacia un rato que el sol se había escondido. La bibliotecaria se despidió de vosotros cuando salisteis.
El tiempo era frío en la calle y corría el viento por las calles de Arkham. Las farolas iluminaban la calle y la universidad y eran pocas las personas que paseaban por la calle. Solo so quedaba cenar y pensar en que hacer al día siguiente. Aquella criatura estaba en aquel lugar, Rupert había muerto y no sabíais que podía significar aquello.
Un escalofrío que, por primera vez en semanas, no tenía que ver con el miedo, recorrió la espalda de la escritora al salir de la biblioteca. El contraste de temperaturas pareció despertarla con la misma eficiencia que un jarro de agua. Sybill miró a su alrededor: las calles estaban casi vacias y aún tenían que buscar un sitio donde dormir y decidir cual era el siguiente paso.
-¿Qué hacemos ahora?
Poco podemos hacer ya a estas horas. Será mejor que nos vayamos a cenar y descansar. Durante la cena podemos decidir qué hacemos mañana.
Si es que podemos hacer algo, no sabemos ni de cuánto tiempo disponemos.
- Vayamos a descansar. - digo. Mañana intentaré concentar una entrevista con el Director, el Dr. Armitage.
-Esta bien-dijo el policía, que hasta entonces no había estado muy hablador. Era un hombre de acción y lo de estar leyendo libros no era su idea de, bueno, enfrentarse a criaturas del mas allá-Pero será mejor que no alarguemos nuestro viaje demasiado.
PENEjotizado!
Bien, mi marido siempre dice que las cosas se ven mejor después de dormir- asintió Sybill tratando de sonreir.
Tan cierta es esa frase como que tengo marido...pero bueno
¿Alguno ha buscado un hotel antes de venir?
¿Alguien conoce Arkham lo suficiente para saber de algún hostal para hospedarnos?
Alexander hablaba de forma desapasionada. Esto cada vez ponía su fe a prueba de forma más severa y desde el incidente en aquel sótano, su fe tenía muchas fisuras.
Steve, usted dijo antes que había conseguido hospedaje en un hostal junto a la carrertera ¿no?-pregunto Sybill al anciano-Podiamos acercarnos a ver si tienen más habitaciones libres y pasar allí la noche.-sugirió-y mañana...bueno mañana podíamos dividirnos y mientras el Steve y otro de nosotros habla con el Dr. Armitage los otros dos podriamos investigar algo sobre el pueblo y los detalles del viaje.
- Por supuesto. - respondo a Sybill. Estoy convencido de que habrá alojamiento para todos.
El policía estiró los brazos y despues miró a sus compañeros.
-La idea de Sy... de la señora Leefolt me parece una buena idea. Así mañana podremos salir directamente y no andar reuniendonos.
PENEjotizado
Sybill miró extrañada a Michael
¿Otra vez llamandome por mi apellido?
Pues deberiamos ir ya...cuanto antes lleguemos antes podremos descansar-dijo la chica tapando con la mano un bostezo. Aunque no había hecho demasiado esfuerzo físico estaba totalmente agotada. De hecho esperaba que nadie mas, aparte del padre Brandt, la hubiese visto dormida con la cabeza en el libro. Era bastante vergonzoso...especialmente si tenían que volver a la biblioteca- Estoy agotada...
Michael asintió.
- Bien, pues vamos allá -dijo-. Al menos en ese hostal estaremos seguros de que no hay nada... inusual.
Había dicho aquello como un comentario casual, pero lo cierto era que últimamente, y desde el incidente de la casa Corbitt, le costaba dormir algunas noches. ¿Quién podía saber lo que andaba suelto por el mundo, ahora que habían tenido todas aquellas experiencias?
DesPNJtizado. =P
El grupo fue al hostal y, para alegría del dueño, pidieron varias habitaciones. Tras aquel agotador día todos cayeron pesadamente en sus camas y se sumieron en un sueño profundo. Profundo que no tranquilo, pues la amenaza de aquel ser, si es que era verdad, que ahora estaba libre en el mundo no paraba de rondar por sus cabezas.
A la mañana siguiente se reunieron todos en la cafetería del hostal y tras un buen desayuno con café y croissants se decidierón a salir para seguir con su investigación. Solo les faltaba por decidir una cosa... ¿a donde?
Mientras desayunaban, una ojerosa Sybill se frotaba los ojos descuidadamente y bostezo haciendo caer sobre ella miradas reprobadoras de un par de mujeres de mediana edad que estaban sentadas en un mesa cercana. La escritora no había dormido demasiado bien, pero eso dejaba de ser una novedad en su vida y por als expresiones cansadas de sus compañeros no era la única que sufría esos molestos insomios.
Demasiadas emociones en poco tiempo
Bien...¿Cuál es el plan? -preguntó alisandose el vestido para retirar unas migas de él-¿Quedará usted con el Doctor Armitage, Steve?
- Srta. Leefolt, a veces me pregunto para que le ha dado Dios esas preciosas orejas que tiene aparte de para llevar los pendientes, claro. - digo meneando la cabeza. Creo que ya dejé claro antes mis intenciones y sería de gran utilidad que viniera usted conmigo para seguir aparentando ser mi secretaria. Podríamos conseguir más informacion de la secretaria o incluso del del Dr. Armitage.