Partida Rol por web

Kirk se mantiene cerca de Torn... al paso por la zona de deliciosos olores, se escucha un rugido gutural...-Maldición, estoy hambriento... no recuerdo cuando me alimenté por última vez-

Al la cara hambrienta de la gente, Si quereís podemos para a comer un rato ante de ir a la explanada, yo iré yendo para allá, no quiereo que nada salga mal.

Olaf, tose.... sigue tosiendo.... siiiigue tosiendo... y sigue tosiendo.

Para entonces ya se ha puesto bastante azul, tiene las dos manos aferrando su garganta, agarrotadas en un rictus desesperado. Ha caído de rodillas ya está formando un escándalo que riete tú de los Vikingos cuando se divierten.

-¡¡¡Cof, cof cooooof cof cof cooooooof arf hhhhhhh, ccooooff hhhhhh cof cof cof hhhhhh.....!!!

El suculento e inmenso bocata yace en el suelo tristemente.

Al ver al cada vez más azulado Olaf, Kirk le aprisiona el pecho con los brazos y presiona con fuerza, para que expulse lo que le impide respirar... -Por Thor Olaf, si tenías prisa por entrar en el Valhalla haberlo intentado con un oponente más digno... no con una miga de pan!! ... deja que te ayude amigo-

Mientras Olaf se ahoga comiendo, Sveim permanece de pie en la explanada, obsevando a la gente que se empieza a congregar, no conoce a casi nadie, y se extraña de como pueden preparase con tanta alegríaa después de lo acaecido la noche anterior.

Brunhild se acerca a Olaf para ver si está bien... espera a que Kirk intente lo que quiera, y si no puede interviene

Olaf... ¡respira amigo... !

Respira, respira, al final la sangre no llega al río. Limpiandose la barba de migas y babas, recuperando la color y jadeando un tantico, mira el malogrado bocata, pensativo.

-Bueno, todavía sse puede aprovechar este lado.

Limpia el extremo manchado por el barro y sigue a lo suyo...

-Gracias, emmm, Kirk puedes ssoltarme, por favor, gracias...

-Graaak, migas, migas para el pajarito, malas noticiass!!

-¡El Valhala te confunda, Cuervo! ¿Callarás de una vez?

Agradeciendo de nuevo con el gesto, Olaf se muestra dispuesto a acompañar a quien quiera a la explanada, pues parece que sigue bien servido de alimento.

jajajaja A pesar de la tensión, no puedo evitar soltar la carcajada al ver al shamán casí vencido por un bocata Después de ir al otro lado y luchar contra quién sabe qué y volver, estás a pùnto de caer víctima de tu voracidad, jajaja. vuelvo a sonreir negando con la cabeza mientras miro a la gente congregarse en la explanada.

Parece que la gentre está impaciente porque empiece la fiesta. digo al ver el gentío que hay en la explanada a pesar del tiempo que todavía falta.

-Jajajajajajajajaja.

Olaf ríe contento por las bromas de la jefa.

-Craaak

-¡Que te calles!

Ottar contempla divertido la titánica lucha de Olaf contra la hogaza de pan.

Sveim tal vez deberías componer una oda a los panes asesinos, esta visto que son peligrosos y no tienen piedad...

Las tripas de Ottar rugen como un oso obligado a salir de su madriguera.

Ahora que lo recuerdo... no he comido nada desde el incendio y apenas he dormitado un rato...

Creo que es buena idea esa de desayunar algo, me comería hasta un tejón cagando.

Sveim vuelve la vista hacia Ottar, interrumpiendo su contemplación de la gente del pueblo,  si, puede que lo haga, es un tema bastante original, uhmmm...  los panes sin piedad... el joven vuelve a girarse mientras su mente se pierde pensando en rimas de panes y piedades.

Entretanto, y viendo que la vida del chamán no corre inmediato peligro, Brunhild pasea la vista por la amplia explanada de la Thing...
Allí se deciden los asuntos importantes de la ciudad, por el simple pero efectivo método de reunirse y buscar voceros que apoyen las opiniones de uno u otro, ante un grupo de sabios que se saben de memoria los puntos y las comas de la Ley, además de acordarse de hasta el último detalle de cada pleito y feudo de sangre que ha habido desde tiempos inmemoriales.
La Piedra de la Ley tiene grabados motivos circulares repetitivos, además de poderosas runas que atan los poderes de los mundos y los ponen de testigos ante lo que allí sucede...

Por lo que veo, las cosas están bastante avanzadas por aquí... Ottar, no creo que tengas muchas dificultades en apañar algo de cualquiera de estos fuegos, para ir aguantando, y por no dejar sólo a nuestro pobrecito cuervo... jajaja...

Mientras habla, los ojos de la Godi se mueven sin descanso, fijandose en cada detalle por si hay algo fuera de lugar entre tanto preparativo.

Al veros llegar, los dos houscarl que montan guardia junto a la Piedra Sagrada os saludan con semblante serio. Intercambian unas palabras en voz baja, y por fin Olafersson se adelanta hacia vosotros mientras Jobär permanece en su posición.

Kolbein nos encargó, por orden de Guntar, montar aquí una guardia, hija del Jarl. Él ha ido a disponerlo todo, no tardarán en llegar vuestros esclavos con lo necesario para el banquete - dice respetuosamente, dirigiéndose a Tornbjorg - Como veis, la gente ya está instalando los fuegos, aunque este año...

Mira alrededor antes de continuar, con un susurro:

Están inquietos, y se murmura, Señora. Se dice que quizá Odín nos haya abandonado, y culpan a Pies Fríos. Además, Rumhird está preparando su drakkar para partir, ¿a dónde, con el invierno ya encima?. No saben qué pensar, y están asustados...

De repente, guarda silencio. Fudrem el Cojo, marido de la señora Gudrum, ha terminado de realizar los preparativos para la gran hoguera que deberá iluminar la noche. Se encuentra en lo alto de la Explanada, tras la Piedra, y se ha pasado la mañana amontonando trabajosamente los atos de leña que, a juzgar por las huellas que podéis ver en la nieve, ha traído arrastrando. Al pasar a vuestro lado de camino al lugar que ya ocupa su mujer, comenta sin mucho entusiasmo, casi como para si mismo:

Ha sido una mañana dura, pero ya he terminado. El fuego alumbrará lejos, y calentará con fuerza, y todo eso... - dice con tono poco entusiasmado mientras continúa caminando con su peculiar cadencia - Ahora me bañaré en hidromiel por dentro y por fuera, y esa bruja no podrá decirme nada...

A lo lejos, la señora Olga y la mujer de Oktel, cargadas con sendas ollas tapadas con mimbre, caminan hacia la explanada charlando en voz baja.

Volveré a mi puesto, si no ordenáis nada más - se despide Olafersson - No nos vendría mal un relevo cuando empiece la fiesta... - añade, echando una significativa mirada a Baraka, Lörky y Kirk, seguida de una alegre carcajada.

 Olaf, ante las bromas y los chascarrillos, ya mediado el tremendo bocadillo, se arranca a cantar. Está claro que viendo a Svein componer reconcentradamente ha recordado sus pasados tiempos de jolgorio. Con sorpresa, podeis ver que canta bien. Cualquier entendido no le otorgaría más virtudes que la de una voz potente, pero el caso es que algún Alfar está hoy con él aquí:

Sserá un pan o sera un flan,

ohh será un buen plan de ataqueee...

como siempre hace esste clan.

Ohh el clan, ohh el flan...

Rrrompo mi lanza por tii.

Rrrio en la fiessta del claan... jajajajajajaaaaa

Ohh el clan y el paaan!!!

Es del todo evidente que se acaba de inventar la letra... y la melodía.

-Craaaak, Craaaaaak, el claan el claaan. -Suena Cuervo, ominoso, tras la alegre pero extraña canción.

-Cállate, cuervo!!

-¡Malas noticiass!

-Bah!!

Lanza a Svein el pequeñajo una mirada significativa. Luego parece que busca con la mirada. -¿Dónde está la cerveza? Tengo que pasar el desayuno!