Partida Rol por web

Después de muchas horas sin poder pronunciar palabra Burdock se encuentra tirado en la cama del nuevo refugio recién instalado.

Menos mal que me he quedado reposando está noche, no se si hubiera sobrevivido otra noche como la anterior en ese bosque. Como estarán estos, espero que no se arriesguen y no hagan ninguna estupidez, ya hemos llamado mucho la atención. Aahh - incorporandose y mirando hacia el sillón del fondo de la habitación - ​​Como te encuentras Lancer?, qué opinas tú de todo lo ocurrido estos días, de todo lo que nos hemos encontrado? Crees que después de todo seremos capaces de conseguir el grial?

Se acerca lentamente hacia el botiquín situado sobre la mesa de la habitación. Espero que nuestros compañeros traigan repuestos para el botiquín, a este ritmo nos van a hacer falta.

Lancer se materializa para conversar contigo, mientras ayuda con el inventario para acomodar el hotel lo mejor posible para unos magos.

Por mi no debes preocuparte master, mis heridas sanan muy rápido cuando no estoy en el plano físico.
Pero me preocupa como se está desarrollando la guerra. Tengo la impresión de que los enemigos que nos hemos enfrentado hasta ahora no son los más fuertes.
Verás, el castillo es una buena fortaleza para establecer una base. Lo normal, pero hace falta fuerza para mantenerla. El servant que esté allí será fuerte.
Por otro lado, está el templo. Hay que estar muy confiado en poder mantener ese sitio. El servant que lo esté controlando se habrá fortalecido con su poder además.
Y por último... Esta la familia Matou. El ganador de la guerra anterior. ¿Que habrá deseado con el Grial? Si ya ganó una guerra, nos saca ventaja en fuerza y experiencia. No debemos cometer errores con él.
Tras la explicación de Lancer, te tomas un tiempo en meditar esto. Vuestro hotel en comparación, es bastante discreto, pero ni de lejos es el refugio ideal para un master, menos para cuatro.
Mientras cabilas, miras por la ventana y reconoces a Alanaan, caminando apesadumbrado en dirección a la iglesia. Parece que cojea y le cuesta respirar.

Tras la reflexión de los comentarios de Lancer - Cuando vuelvan estos les comentare estos datos que acaba de proporcionarme Lancer, que por lo dicho queda claro que este no es el mejor lugar de refujio para un master, pero por ahora es lo que hay, no somos lo suficientemente fuertes para esta guerra por el momento. Más vale que no hagan ninguna locura por ahi fuera esta noche.

Viendo a Alanaan pasar por delante del nuevo refujio, Burdock no lo pierde detalle. La última vez escapaste por poco, que estas tramando tan mal herido? Pretendes llegar a la iglesia en busca de refugio? - Mira Lancer, por ahí va nuestro viejo conocido Alanaan, lo recuerdas? Te ves con fuerzas de que lo interceptamos y le hagamos un pequeño interrogatorio? No creo que tenga fuerzas ni de intentar agredirnos. Que me dices, bajamos?

Burdock mientras espera la respuesta de Lancer se va directo hacia la puerta del refugio.

Mmm, que curioso. No noto la presencia de su servant, y no es del tipo que puede ocultar facilmente su presencia.
Este master no tenía ningún honor. Interrogemoslo y veamos que nos cuenta, pero no bajes la guardia. Aún no sabemos nada de su servtant

Y con esto, Lancer te sigue para interceptar a Alanaan

Conseguís alcanzar a Alanaan, que estaba tomando el camino hacia la iglesia.
Cuando os ve, una expresión de temor se refleja en su rostro, nada de la expresión de confianza que tenía la última vez que le visteis. Después, cambia a una expresión de resignación.
Ah, sois vosotros. ¿Que queréis? Habéis venido a acabar conmigo antes de que consiga buscar refugio en la iglesia? Supongo que aún me guardareis rencor por lo de la mansión

Curiosamente, te fijas que donde Alanaan tenía antes los sellos de comando, ya no tiene ninguno.

Poniendose frente a el - Buenas Alanaan, te hemos visto pasar a toda prisa y no hemos podido evitar acercarnos. ¿Qué te ha pasado? - Señalando el brazo de Alanaan - Veo que ya no tienes ningún sello, quien te persigue para ir con tanta prisa a la iglesia? No tienes por que tenernos miedo, no vamos ha hacerte daño. 

Viendo como esta y que no tiene ningún sello en el brazo no creo que sea ninguna amenaza para nosotros ahora mismo. Pero si esta huyendo de alguien tendremos que andarnos con ojo. Mirando a Lancer - ¿Percibes si hay algún servant por la zona? 

Sigo sin ver a nadie - susurra Lancer.
Jajaja, ¿a pesar de haber sido vuestro enemigo te preocupas por mí? - ríe Alanaan, con una risa nerviosa - Va, claro que te lo puedo contar, si vamos a morir todos igual jejeje.
He perdido a mi servant, eso es lo que ha pasado. En la mansión... Esa cosa - A medida que habla, el tono de Alanaan se empieza a parecer más al de un demente.
Necesito la protección de la iglesia, ya no soy un master, deben sacarme del país.
Esa cosa, cubierta con un manto de sombras y tiras rojas como la sangre que seguro ha hecho derramar. ¿No la viste? Estaba en la mansión, buscando algo con lo que alimentarse. Y lo encontró, ya lo creo que sí.
En cuanto me tocó, noté como me abandonaban las fuerzas y mi mente se nublaba, pero soy bueno en magia de protección ¿sabes? Conseguí saltar por la ventana e invocar a mi servant. Pero esa cosa me siguió. - Alanaan está cubierto de sudor, y parece febril a medida que te das cuenta, que sus palabras parecen las de un loco.
Saber se enfrentó a esa cosa, pero cuando esa cosa lo tocó, se quedó quieto y... Y lo engulló. No se lo que le hizo, pero cuando lo dejó, mi servant estaba cubierto de una armadura negra, y tenía una mirada de... Maldad. Mi servant era noble, pero el instinto asesino que despedía en ese momento...
Mi propio servant alzó su espada contra mí, le ordené que parara con un sello, pero no funcionó. Usé todos los que me quedaban pero no sirvió para nada.
Conseguí huir utilizando mis técnicas, y tras ocultarme, he decidido que me acoja la iglesia, ya que protege a los que se retiran de la guerra.
A veces me parece ver a esa cosa en todas partes. ¡Está hasta en mis pesadillas! No debes dejar que nos atrape. ¡Mátame si es preciso, pero no dejes que me coja!

Tras recordar lo ocurrido en la habitación de la mansión. Ahora lo recuerdo todo, con tanto revuelo no me había parado a pensar en esa pequeña laguna en esa habitación. Llevándose la mano a la barbilla - Con que el también lo ha visto, nuestros peores temores se confirman. 

Tras unos momentos de reflexión Burdock se dirige a Alanaan - Como acabas de escuchar ahora no tienes nada que tener, Lancer no detecta ninguna presencia de ningún otro servant. Levantando los brazos con gesto de pedir calma a Alanaan - Lo primero es mantener la calma, de esta forma se harán mejor las cosas. Por qué hayas perdido a tu servant no tienes por qué abandonar la guerra, nos vendría bien tu ayuda ya que conoces cosas que nosotros desconocemos y podríamos unirnos para derrotarlos.

Tras unos segundos en silencio - No sabemos de lo que es capaz ese monstruo, pero por lo que veo se merienda a los servants y los usa en su propio beneficio. Tal vez sea cierto lo que pone en esos libros y el grial haya tomado una forma "humana" y esta sedienta de poder. Lo que está claro es que tendré que andarme con ojo para que no le pase lo mismo a Lancer. Tal vez, en vez de ir a la iglesia te gustaría acompañarnos a nuestro refugio donde podrás descansar y así calmarnos y nos podrás contar todo con más detalles. Al fin y al cabo la unión hace la fuerza no? No puedo dejar que tanta información de la guerra se me escape tan fácilmente, tendré que intentar convencerle de que se quede con nosotros para conbatir esa cosa que desconocemos, quién mejor para informarnos sobre ello que la persona que más ha aguantado vivo delante de él? 

Alanaan niega con la cabeza repetidas veces, tanto que hasta pierde un momento el equilibrio.
No tengo ninguna intención de seguir participando en esta guerra. Creí que estaba preparado pero no era así.
Se que me persigue - Alanaan mira detrás suyo como si temiese que algo estuviera allí... Pero no hay nada - Además, no se siquiera como estáis vivos. Un assasin os lleva siguiendo desde hace a saber cuando. No se a que estará jugando su master, pero ten por seguro que os tiene vigilados.
Yo voy a refugiarme en la iglesia, pero ni siquiera sé si allí podré hacer algo.
Si quieres mi consejo, únete conmigo en la iglesia, abandona esta guerra y huye lo más lejos que puedas - Alanaan vuelve a mirar por encima del hombro unos segundos antes de continuar - Huye antes de que de contigo.
Alanaan se gira y empieza a volver a caminar hacia la iglesia.

Tras la breve charla con Alanaan Burdock mira a Lancer - Esto no puede quedar así, a estas alturas ya habrá despistado a sus seguidores, te parece si lo seguimos a escondidas hasta la iglesia y vemos si alguien lo sigue? 

Si es cierto que ese manto lo está siguiendo será mejor que sepamos de lo que es capaz, me da rabia tener que usar a Alanaan como conejillo de indias pero creo que va a ser lo mejor para verlo. Al fin y al cabo, el ha tomado la decisión de ir a la iglesia.

Seguís a Alanaan de camino a la iglesia. Al principio no parece darse cuenta, pero cuando estáis cerca de llegar, un pequeño ruido producido al pisar un paquete de fritos de hacendado del suelo te delata.

¡N-No! ¡Deja de seguirme! - Con miedo de su propia sombra, Alanaan echa a correr sin mirar atrás.

Viendo cómo Alanaan empieza a correr.  No sé si es buena idea dejarle marchar, como le cuente todo al cura tal vez cancele la guerra y no podré conseguir limpiar el nombre de mi familia. ​​​​​​

Levantando el brazo mientras dice - Se Lancer que esto no es muy honorable, pero no podemos dejar que llegue a la iglesia, no sabemos cómo reaccionará el cura después de todo lo que se nos ha contado. Debemos pararlo! Corriendo detrás de él no lo alcanzaremos nunca. 

​​​

El dardo que lanzas sobre Alanaan le golpea de lleno en una pierna, lo que le hace perder el equilibrio y caer al suelo.
¿Honorable? - Pregunta sorprendido Lancer - No te equivoques Burdock, una alimaña que huye del combate y abandona a sus compañeros como él no tiene honor, y a esas alimañas hay que castigarlas
Lancer se adelanta y clava su lanza en un brazo de Alanaan, que grita de dolor mientras queda inmobilizado.

Deberías quedarte quieto, alimaña
Burdock alcanza a Alanaan pero antes de poder abrir la boca, la escena se ve interrumpida.

Un hombre con una máscara en forma de calavera os observa desde un tejado y deja escapar una risotada. Burdock apenas tiene tiempo en reparar en sus rasgos antes de que el hombre haga una inclinación de cabeza, y desaparezca entre los tejados de la ciudad.

Pero aunque la presencia del hombre sorprende a los presentes (menos a Alanaan, muy ocupado gritando), una tercera persona se ve que sale de la iglesia.
Aunque está lejos, parece que se trata de Sakura. Por la distancia no se aprecia muy bien, pero su ropa tiene bastantes jirones, y parece cubierta de sangre.
Sakura da un par de pasos y se desploma a la entrada de la iglesia.

Quién es ese tipo, por qué se ha reído de esa forma? Seguro que es el Assassin del que me ha hablado Alanaan hace un rato. 

Mientras habla consigo mismo Burdock se acerca a Lancer y Alanaan que está tirado en el suelo medio desangrado. Alanaan te di la oportunidad de quedarte con nosotros, podrías habernos ayudado en nuestras causas, pero has decidido huir y no pudo dejar que des ese mensaje al cura. Si tienes algo que decir es el momento. 

Mira hacia detrás - Lancer, no estamos solos, me ha parecido ver al famoso Assassin que tanto nos ha estado siguiendo. Me parece que ha escapado, pero con un Assassin nunca se sabe, seguro que se ha escondido por ahí. No se se  habrá querido decirme apareciendo delante mío y haciendo esa reverencia. Espero que se haya ido.

Acabemos cuanto antes con esto. Acabo de ver a Sakura saliendo de la iglesia ensangrentada. Veamos que pasa. Burdock hace un gesto a Lancer de que acabe con Alanaan. 

Entre los gritos de dolor, apenas se puede distinguir, pero Alanaan comienza a reirse.
Jajaja, sí. ¡Sálvame servant! Sálvame del futuro que os espera.
Viendo que no está en sus cabales, y que es lo mejor que puede hacer por el, Lancer atraviesa el corazón de Alanaan, que muere al instante con una mueca de loco en la cara.

Correis hacia la iglesia, y llegáis hasta Sakura, que está semi consciente en el suelo, pero no parece ser plenamente consciente de lo que dice.
L-la niña, no la mates, no mates a la niña, no la mates...
Sakura no presenta muy buen aspecto, cubierta de sangre como está, pero por los agujeros entre su ropa, no parece tener heridas graves, algunos arañazos y cicatrices.

Lancer habla
Parece que se refiere a la niña que vimos en la niña que vimos en la iglesia. ¿Está siendo atacada? O llegamos demiado tarde?
Hay que tomar la decisión si quedarnos aquí y asegurar a Sakura, por si aparece alguien, o si entramos a salvar a la niña. Pero deberíamos ir juntos, no me fio que podamos ser atacados por ese assasin o por lo que sea que haya atacado a Sakura.