Partida Rol por web

Caminaba deprisa buscando con la mirada atenta al tipo, en medio de su andar siente que unos brazos lo envuelven por la espalda, lo inesperado del encuentro o mejor dicho, por un pequeño dolor en su vientre (Por haber recibido el golpe de Sara y luego el del tipo en el mismo lugar), hace que pierda un el equilibrio provocando que termine cayendo de rodillas al suelo. Ya en el piso y un poco resentido, reconoce la voz preocupada y algo temerosa de su compañera, ella había evitado que siguiera avanzando.

-¡No voy a morir!... ¿Déjame?... ¡No dejare que ese idiota te haya asustado de esa manera!- en ese momento tenía su mente en el pasado mezclado con el presente, Sara había tomado el papel de otra chica. Todo este cambio de actitud había sido motivado por las palabras inocentes de la chica.

-¡Ese tipo pudo haberte dañado!, ¡no se ira así!... asi que déjame!! veré que no lo haga otra vez.- Parece seguir insistiendo aun con la oposición de la chica, como puede se pone de pie y avanza unos pocos pasos, esperando que ella lo soltase.

Cuando el chico se pone de pie Sara sigue enganchada, por lo que se queda colgando de su espalda como si fuera un mono, aunque lamentablemente no pesaba demasiado como para molestarle siquiera. 

-¡Pero no me ha hecho daño!- se agarra fuerte para no caerse -¡pero te lo puede hacer a ti! Paaaaraaaa, ¡stop! c'mon...- sin saber qué hacer utiliza la baza que le queda -por Shizuka....por mí... no hagas tonterías...- se suelta y se deja caer con delicadeza al suelo la altura que le quedaba, quedando de pie en el sitio, esperando que el chico se diese la vuelta y decidiera no hacer ninguna tontería. 

Fausto se asustó cuando vio a lo policías. Había tenido problemas con la autoridad en escándalos aún más grandes, pero ahora que estaba de incógnito con una falsa identidad, huyendo de su pasado, lo último que quería Angelo Fenty era que lo descubrieran.

-Eh... - Murmuró sin pronunciar ninguna palabra concreta. ¿Un interrogatorio? - Shit... - Frunció su ceño.

Intentó no mostrarse nervioso. Aunque si los policías lo notaban, utilizaría la excusa de estar preocupado por Shizuka. Era algo bastante cínico, sí. Estaba preocupado por ella, pero aquella situación era aún mayor.

-No pasa nada, estarás bien - Le dijo en inglés a Kaori, mientras asentía para darle firmeza a sus palabras. Siguió al policía para su interrogatorio.

Las ultimas palabras hace que Amato detengas sus pasos quedándose en el lugar pensando, antes de girarse relajo su mirada y trato de calmarse mientras relajaba su cuerpo, cuando se sintió seguro se volteo, aunque aún mantenía una expresión seria pero amigable, se acerca a ella hasta quedar a un paso, y con un suave movimiento toma su mano levantándolo hasta la altura del pecho. Se veía muy seguro de lo que estaba haciendo, hasta se podía pensar que era otro chico.

-Pero te ha echo daño aquí. - Con tu mano aun tomada la mueve donde tienes tu corazón.- Y eso no se lo voy ha perdonar... Que quede claro!.- Espera pacientemente una respuesta.- Si alguien te daña o me vuelvo a encontrar con el... no me contendré... ¿De acuerdo?... y ten algo presente... No soy igual que el... Jamas hubiera dejado que te hiciera daño.- No sabia si esas palabras serian de consuelo, pero quería dejar en claro que no iba a permitir que nada te sucediera, por otro lado parece que había desistido de su idea.

Mira su mano, cogida por la del chico, señalando la zona donde estaría el corazón. Por un momento no sabe muy bien lo que hacer. ¿Pegarle una patada? No no... no seas bestia, que suficiente se quería alejar ya... ¿darle un rodillazo? ¡que no! ¡Déjate las bestialidades para otro momento! 

La chica sacude la cabeza con energía para quitarse las ideas que rondaban por su mente, lo que parecía más una respuesta negativa hacia lo que el chico le había dicho. 

Se queda mirándolo torciendo el gesto con curiosidad, intentando captar todo el sentido a las palabras que decía, aunque habían algunas cosas que no terminaba de comprender. 

Respira pacientemente, todavía con su mano cogida por la de Ryuma -deja las cosas así... ser mejor para todos... vamos- sin esperar siquiera una respuesta por su parte comienza a tirar suavemente de él, agarrando su mano, y mordiéndose el labio con fuerza para no dar rienda suelta a su parte violenta que le decía de pegarle. 

Escucha las palabras de Sara aún con algo de dudas, se voltea hacia donde se perdieron los tipos, pero al sentir un suave jalón comienza a caminar sin poner ninguna resistencia, como si fuera un perrito amaestrado pendiente a cualquier movimiento de su amo, aun con la vista  hacia atrás avanza siguiendo el jalón de su mano.

-Esta bien... Vamos.- responde a destiempo después de haber comenzado a caminar, ya al girar el pasillo desiste y vuelve su mirada hacia el frente para ver a la chica que lo llevaba, pasan algunos segundos sin ninguna reacción, de pronto, como si el efecto de una pastilla pasase recobra la cordura, y finalmente se da cuenta de todo lo que había dicho y sobre todo...

-"¡¡Voy de la mano con Sara!!"....

-"Que?.. porque he tomado su mano?,  ¿que te sucede? ¿que estas loco o que?, ¿porque dijiste todas esas barbaridades... ¿como si te importara?!".- mira hacia la chica con una risa forzada, muy nervioso y con gotas de sudor cayendo por su rostro. Vuelve a poner especial atención a su mano.

"¿Como me retractare de todo lo que dije?... ¿que estará pensando?... no hagas nada, que piense que eres su amigo... ¡si si eso!... PERO SUÉLTAME!! ... ME LLENARAS DE VIRUS.. SUÉLTAME! ... DE BACTERIAS... HONGOS... MICROBIOS... PESTES... ENFERMEDADES... RABIA.. SUÉLTAME! SUÉLTAME! ".- Amato ahora se encontraba tenso, totalmente rígido, con su otra mano apretaba el brazo que estaba siendo jalado por Sara, como si tuviera temor que este le fuera arrancado. "¡¡Cuanto falta para llegaaaaar!!"

Sara sigue arrastrando al chico de la mano hacia la salida donde se suponia que iba a estar la ambulancia con Sizuka y los demas.
Pero entonces mientras salíais del edificio veis como se encuentra el manager de Sizuka hablando bastante nervioso con Daisuke y Satoru.
Estos también parecen estar bastante molestos y con cara de pocos amigos.
El manager y los dos chicos os ven de vellón a los dos.
-!Eh vosotros¡ ¿a donde creéis que vais? venid aquí ahora mismo que tengo que hablar con vosotros...
Sara y Ryuma el cual parecía bastante nervioso deciden no hacerle ni caso y salir hacia fuera corriendo, buscando la ambulancia donde estaba su amiga.
-¡Vosotros venid aqui ahora mismo! Mira un momento a Daisuke y a Satoru -Y vosotros no os movais de aqui, vengo ya a seguir con las preguntas. Justo despues de esto sale corriendo a por Sara y Ryuma hacia la ambulancia.
Los chicos ni se lo cuestionan, deciden salir disparados hacia la ambulancia para ver de una maldita vez que demonios esta pasando.
Por otra parte los dos agentes que estaban interrogando a Fausto y Kaori salen alarmados por los chillidos del manager.
-¿Que es lo que ocurre aquí? pregunta el policía mas anciano.
El manager ni se gira a responder, sigue corriendo a la persecución de los dos jóvenes hacia el exterior del edificio, lo que les alerta y salen disparados para ver que ocurre, por si acaso es una emergencia y necesitan de sus servicios.
Fausto y Kaori aprovechan para salir por patas de alli.

Entonces recuerdas su cara.
Aquel hombre, trabajo para tu padre hace algunos años durante mucho tiempo, ayudándole en asuntos bastante turbios y consiguiéndole muchos contactos interesantes, por así decirlo era un poco quien se manchaba las manos por tu padre.
Esto claro lo sabia tras espiar por tu cuenta una noche en que el hombre armaba un gran escándalo en el estudio de tu padre amenazándole por echarle tras tantos años y escupiendo múltiples insultos.
Una de las amenazas que mas se te grabo esa noche fue un "no podrás proteger a tu hijita las 24h tenlo claro"
Ese hombre estaba allí a posta, esperando el momento para conseguir secuestrarte o matarte quien sabia lo que estaba pasando por su mente en aquel momento.
Tras ver tu cara el doctor puso una sonrisa mucho mas terrorifica.

Cuando salen del recinto la chiquilla mira a su alrededor, intentando encontrar alguna señal del lugar donde se encontraba su amiga. Solo quería acercarse, estar a su lado, apoyarle en todo lo que pudiese... Pero lo que encuentra es a sus compañeros algo dispersos. 

Con los primeros con los que se encuentran es con Satoru y Daisuke, este último que suele mostrar siempre una sonrisa agradable parecía algo alterado. A Sara no le da tiempo a acercarse a hablar con ellos ya que el tipo que los tenía "retenidos" se gira hacia Amato y ella, dispuesto a pararles. 

Al ver que los quieren parar, Sara no tarda en salir por patas, como un conejillo asustado, aunque con mirada decidida, sorteando obstáculos, corriendo en eses, mostrando bastante agilidad y rapidez, como si se tratara de algún ratoncillo o ardilla. 

Aunque, durante la carrera, confiada en sí misma, se gira para mirar al hombre que les había gritado que se detuviesen y le saca la lengua de forma burlona, para después proseguir con la carrera, en dirección hacia la ambulancia. 

Para investigar  a los malos, se debe tener contactos, se deben tener conexiones en los bajos fondos, perdonar a algunos peces pequeños para poder dar caza a los peces más grandes, y su padre había aprendido muy joven esta regla, que la justicia se podía ejercer, pero en los términos que el sistema lo permita y no había lugar a los escrúpulos. El prefería meter presos a un grupo de narcos, que a un asesino. Y Shizuka también lo aprendió al escuchar  aquello mismo de boca de su padre. NO habían principios, sino, la cruel realidad.

Y ahora, Shizuka reconocía la cara de aquel hombre, uno de los aliados de su padre, y su cara y sonrisa la pusieron en alerta. Abrió mejor sus ojos e intentó levantarse..

- quiero bajar... me siento ahogada... quiero bajar - exclamó luchando por bajarse de la camilla, con el cuerpo aún dormido.

El estado de Amato no era muy bueno, a la distancia no era apreciable pero si alguien se acercaba podrían ver que su rostro tenia señales de un fuerte golpe, y en  su boca aun tenia resto de sangre que ni él se había percatado.

Al salir de los pasillos al fin vi a mis compañeros o por lo menos a dos de ellos, Satoru y Daisuke estaban hablando con el encargado, sus caras tampoco era la mejor y se veía que estaban molestos, el estado de los demás debía ser parecido, Fausto y Kaori seguramente siguen en el interior del vip, tal vez siendo interrogados
pero… ¿y Shizuka?... ¿Dónde estaba?, ¿cómo se encuentra?... 
Quería verla... Pero no había  a ningún médico cerca…    ¡¡LA AMBULANCIA!!...

El hombre que estaba con sus compañeros al notar que se dirigían hacia el exterior intenta detenerlos,  el chico quería ver como se encontraba su amiga, detenerse significaría que no los dejaría seguir avanzando, no dudo en pasar por él y correr fuera del local donde se escuchaba la ambulancia. Sara también hace lo mismo como si estuviera premeditado de alguna forma, la situación no era muy buena si no quería llamar mucho la atención, corre rápido sorteando las mesas y a las personas que se cruzaban  por el camino sin ningún problema. Por el rabillo del ojo alcanza a notar que el manager sale en su persecución y que de la sala vip aparecen

-"A... AGENTES!!".- De pronto todo había dado un giro en su contra y se vio en un gran dilema, quería ver a Shizuka y saber cómo se encontraba, acompañarla en el difícil momento, pero no podía dejar que los agentes obtuvieran sus datos o revisaran su pasaporte, si su padre había denunciado su desaparición acabaría nuevamente con él  y seria su fin. Sigue corriendo sin saber qué decisión tomaría cruzando el umbral de la puerta hacia el exterior.

"¡MALDICIÓN! ¿QUE HAGO?".-

Mientras estamos hablando aparecen Sara y Ryuma quienes comienzan a salir del local y para peor cuando el manager los llama echan a correr iniciando una persecución, así mimos del VIP salen unos oficiales y Fausto y Kaori aprovechan también para escapar, solo atino a desplomarme en el suelo, sentado con las rodillas flexionadas tomándome la cabeza apoyando los codos sobre las rodillas ¿por que corren?, no hicimos nada... solo empeoran las cosas, deténganse a pensar también temo por Shizuka pero por mas que valla a la ambulancia solo seria un estorbo, piensen USEN LA CABEZA! piensa cerrando los ojos para calmar un poco su mareo.

- "Oye satoru... ¿Qué piensas de todo esto? ¿Salen todos por patas y nos comemos el marrón? Creo que las cosas van a empeorarse... quizás no debí haber venido..." - Dije cuando vi el espectáculo de todos huyendo como ratas, mientras los dos estábamos perplejos. Mis puños estaban cerrados con fuerza y empezaba a tener sudores fríos... y no tenía a nadie... Ahora mismo solo podía pensar en mi padre...

Levanto la mirada hacia Daisuke al oír sus palabras no hemos hecho nada malo, esto ha sido un accidente o al menos eso espero dice esto ultimo mirando hacia afuera si nos vamos, como hicieron ellos, solo levantaremos sospechas, quedarnos aquí manteniendo nuestra postura es nuestra mejor defensa comienza a ponerse de pie esta claro que sospechan que esto fue planeado no entiendo por que corren... observo al reacción de Daisuke, me pongo junto a el y apoyando mi mano en su hombro creo que nuestra mejor opción es quedarnos, responder sus preguntas y salir de aquí sin mayores problemas. Y vuelvo a repetir, no hicimos nada malo aunque concuerdo con el, no debí haber venido. a pesar de parecer tranquilo se podía ver en su expresión que estaba algo nervioso, o ¿quizá enfadado?, si eso era, enfado, molesto por lo que esta sucediendo y sobretodo por que podría estar en casa, tranquilo en ves de eso, una tarde que prometía ser divertida terminaba de esta forma. 

Los primeros en escuchar algo de barullo son Sara y Ryuma, ven como la ambulancia comienza a tambalearse un poco de derecha aizquierda, como si alguien estuviese forzejenado dentro, y despues unas voces que son claramente de Shizuka.

Cita:

Daisuke y Satoru no ollen apenas algo de barullo, solo unos ggritos algo incomprensibles qu vienen desde fuera de una joven.

Los chicos salieron corriendo del interior del local, Sara es la primera en salir seguido de Ryuma, la luz de la tarde da directamente sobre los ojos, pero eso no impedía que siguieran buscando donde se encontraba la ambulancia, a sus espaldas aun podían escuchar los gritos del mánager junto a una manada de agentes que venían corriendo muy molestos detrás de ellos para detenerlos. En su mente estaba muy preocupado por Shizuka, pero por otro lado se encontraba liado por la aparición de esos hombres dentro del local. Si era identificado significaría que todos sus esfuerzos por alejarse de su padre serian en vanos.

Tenía que decidir si seguía su camino hacia la ambulancia o si se desviaba, pero de pronto los gritos de Shizuka interrumpen sus pensamientos  y todo lo que tenía en la cabeza se convierte en preocupación por su amiga.

-¡SHIZUKA!- grita al llegar fuera de la ambulancia mirando a través del cristal. Ella no se veía bien,  se veía con miedo y parecía estar forcejeando con los médicos, sabía que por lo que le había sucedido estaría mejor con ellos, pero no pudo soportar quedarse afuera viendo o escuchando sus gritos, rompiendo cualquier protocolo abre la puerta y esperando que Sara también interviniera, entra en el interior para apartar a los médicos.

-¡SOMOS SUS AMIGOS! déjennos un momento!.- habla fuerte tratando de calmar la situación, sabia que cometía una gran irresponsabilidad, pero parecía que nadie la estaba acompañando.

EL medico estaba algo molesto, pensó que el tranquilizante que te inyectaron antes haría su efecto pero por lo visto no paso el suficiente tiempo como para que le hiciese efecto del todo.
-Cállate maldita niñata, esto le enseñara a tu padre de una maldita vez, ese maldito inútil se lamentara de lo que hizo.
Takumi, trae una nueva dosis y llama a Nein, dile que salimos ya, que vaya preparando las cosas.
El hombre iba a dar dos golpes hacia la cabina donde se encontraba el conductor de la ambulancia en señal de que comenzase la huida cuando las puertas se abrieron de par en par.
Un chico joven con cara de preocupación entro sin previo aviso a la ambulancia, era Ryuma.

Sara no dudó en seguir a Ryuma hacia el interior del vehículo, no sin antes lanzar una última mirada a sus compañeros, quienes realmente parecían aburridos o cohibidos... no terminaba de entenderlo, lo que sabía con seguridad es que se habían quedado parados. 

-¡Shizuka, Shizuka!- eso era cuanto gritaba al subir a trompicones* en el lugar. Mira a su alrededor a las personas tan extrañas que habían, y un escalofrío que recorre su espalda, algo así como un sexto sentido, le avisa de que no son de fiar. 

-¿Qué está pasando aquí?- mira con cara de pocos amigos al hombre que parece sorprendido y enfadado por nuestra intromisión, y después se gira hacia Shizuka a la que le da un cálido abrazo, con bastante cuidado, como quien teme que se rompa algo -¿estás bien?, ¿te han hecho algo?

Estaba realmente asustada, ese hombre deseaba lastimarla, lo podía ver en sus ojos, en su cara,  intentaba escapar, pero su cuerpo cada vez pesaba más, y le costaba mantener abiertos los ojos,  sólo puedo escuchar al médico maldiciendo a su padre, la lastimaría por venganza... la lastimaría... La joven soltó un pequeño quejido y cayó sobre la cama, justo cuando las puertas se abrieron  y escuchó vagamente la voz de Ryuma.

La joven estaba en la cama, de costado, con el cabello revuelto, abrió los ojos y extendió su mano hacia el joven mascullando a duras penas : ayúdame... antes de que su mano cayera sobre la camilla.

Sara aparece y la abraza, Shizuka parece reaccionar y abre los ojos para ver a la joven,  sonrie de medio lado  y apoya su cabeza en el pecho de la chica - él... es malo... quiero a mi papá...- murmura apenas, muy débil y desorientada.