Partida Rol por web

Fisura

El Templo de Mythal

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28/10/2015, 16:55
Markus Whitefield

A Markus se le escapa una carcajada cuando ve a Sera correr a toda velocidad hacia aquella amenaza desconocida. -Avísame si necesitas ayuda!- Grita entre risas mientras ve a la elfa correr. Sigue caminando con tranquilidad al lado de sus compañeros y escucha las cortas palabras que intercambian entre ellos.

Decide no decir nada hasta que escucha a Jacob. -Es Sera, sabe cuidarse sola. Y teniendo en cuenta que el tono de voz de nuestros compañeros no es dramático cuando hablan de estos Fennec no deben de ser demonios interdimensionales con poderes sobrehumanos y magia, y maldiciones, y odio por la vida...- Mientras habla imita el tono de voz con el que los demás hablan de seres como Corifeus. -Eso suena más a algo parecido a un animal. Pero supongo que siempre puedes apartarte del camino como ha hecho Sera y tratar de seguirla entre toda esta vegetación.

A Markus se le escapa otra carcajada y bebe un trago de agua. -Bueno, y cuanto nos queda? Llegaremos hoy?- Dice con tranquilidad.

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28/10/2015, 17:14
Sera

Antes de que nadie pudiera darle una respuesta a Markus, la respuesta a la pregunta de Jacob se acercó a toda velocidad y por su propio pie.

De entre el follaje de los arbustos cercanos apareció un animal peludo, del tamaño de un zorro, corriendo en zigzag. Casi se estrelló contra los pies de uno de los soldados, antes de quedarse quieto y mirando atrás.

Una flecha silbó desde lejos, y abatió al animalillo, que quedó muerto en el acto.

Y sólo un segundo después vieron a la autora del disparo, Sera, quien se acercó a ellos y les mostró un par de fennecs más que había cazado. La incomparable arquera había conseguido cobrarse esas piezas en el tiempo de un suspiro.

-¡Hoy comeremos carne asada!

Los dejó en el suelo, junto al otro, y se sentó, dispuesta a despellejarlos.

-¡Que alguien vaya encendiendo una hoguera! Este sitio es tan bueno para acampar como cualquier otro, ¿vale?

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28/10/2015, 17:20
Capitán

-¡Jajaja! Bien, confieso que nunca pensé que necesitaráis escolta, pero esto lo ha confirmado. Solas, si te parece, mis hombres y yo nos retiraremos ahora que aún hay buena luz. Volveremos a Skyhold, y estaremos allí mañana para informar a la Inquisidora. -Se volvió hacia Markus- No, no llegaréis hoy, pero sí mañana. ¡Y bien comidos y descansados, por lo que veo!

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28/10/2015, 17:25
Solas

El mago seguía serio, y cruzó una mirada con Morrigan, de nuevo, en silencio. Luego miró a Sera, y la elfa negó con la cabeza, sin añadir nada. Se encogió de hombros.

-De acuerdo. Acamparemos aquí mismo, a pesar de la luz no tardará en anochecer, realmente. Si os necesitamos, Capitán, lanzaremos una flecha encendida al aire. Pero ya le dijimos a Dawn que no podíais estar haciendo de niñera todo el tiempo. Que tengáis un buen regreso.

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29/10/2015, 09:37
Ricky Jackson

Medio concentrado y medio distraído como iba, apenas se enteraba de lo que ocurría alrededor. Volavan cuchillos amistosos y de golpe la elfa imprevisible metió un flechazo a un... bueno, le dijeron un nombre extraño pero qué narices, era un zorro. Un zorro peculiar pero un zorro. ¿Lo bueno? Comerían algo salvaje de su mundo. Quizá sepa a zorro de la Tierra pero ¿cómo sabía un zorro? 

Lo único que tenía claro era que no tenía ni idea de observación ni orientación en bosques. Orientarse en una ciudad de su mundo era fácil, aquí era todo diferente. Hasta los animales lo eran, ¿cómo no iban a serlo sus gentes y ciudades? Quizá le pediría algunas clases a Sera o a alguno de los exploradores cuando volvieran a la fortaleza. 

Cuando dijeron de acampar allí mismo su rostro se iluminó. Miró a Solas ilusionado y al resto del grupo. Cuando no pudo aguantar más la ilusión dijo:

- Eh, será como ir de acampada en los bosques de nuestro mundo. Siempre he querido ir de acampada pero nunca tuve la oportunidad. Parece mentira que he tenido que venir a un mundo nuevo a través de un espejo para poder vivir esto - después de la emoción inicial prosiguió - ¿Qué hay que hacer? ¿Alguien me explica? ¿Ayudo en algo? 

Su entusiasmo era latente en cada poro de su piel y estaba ansioso por hacer lo que fuera que se hiciera cuando uno acampaba. 

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29/10/2015, 15:37
Miron Lupeithai

Miron observó la cacería de Sera en silencio y con el ceño fruncido, intentando adelantarse a lo que pretendía. Cuando una flecha derribó a un fennec, se detuvo y miró el cuerpo del animal con sorpresa aunque no se mostró demasiado agradecido hacia la elfa. Se cruzó de brazos y se quedó quieto observando los alrededores, claramente contrariado por la idea de tener que acampar. Si por él fuera, caminaría sin parar hasta llegar al Templo y entonces se dejaría arropar por sus antiguas paredes. Ni siquiera se molestó en despedirse del capitán y los demás soldados.

Luego miró hacia el cielo y suspiró. Tampoco estaría mal descansar, pero quedarse quieto no le gustaba nada. Como si ya estuviera impaciente por irse, sacudió su ropa y volvió a cruzarse de brazos. Echó un vistazo rápido al grupo, analizando sus actitudes. Luego miró a Solas y a Morrigan, quienes estaban bastante serios. Se giró y se acercó a un árbol para acariciar su corteza. Ese tacto le gustaba más que el de las frías murallas de piedra.

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01/11/2015, 17:11
Eva Vogel

El problema animalito no duró apenas nada, aunque algo me decía que seguro que ni dudaba en arrancarte un brazo de cuajo a pesar de la cara de simpático que tenía.

- Será como alguna que otra de las que conozco del gimnasio. - Vamos, de esas mujeres que siempre eran majas y sonreían y luego, cuando no te lo esperabas, zasca, puñalada trapera al canto. 

Al menos no me dio tanto asco como hubiera cabido esperar el hecho de pensar en que tendría que comerme aquello, sino que más bien, pensé que cosas peores habré comido las veces que había visitado un restaurante chino o quizás, incluso el tailandés de mi barrio.

- Pues nada, probaremos el bicho orejudo. Quizás sea un fallo en matrix y sepa a pollo.

Los guardias decidieron que era un buen momento para irse y bueno, allí nos quedaríamos acampando los demás.

- Pff! Ya verás cuando se enteren de que no tengo ni idea de estas cosas. No es que sea mucho de campo... eso sí, al menos, no me pondría histérica si veía una araña.

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02/11/2015, 14:12
Aisha Serthan

 Aisha sonreía mientras miraba a Jacob y Markus intentar deducir lo que era un Fennec. ¿Sabrían lo que son los osos? Como fuera, su pequeña broma se resolvió pronto. - Tendría que habernos comparado con los avvaritas... - Pensó, mirando a los Fennec que traía Sera, con impresionante prontitud hasta para ella. - Esos son harina de otro costal. - 

 Tras despedirse breve y cordialmente del capitán, miró a Ricky y a Miron y negó con la cabeza, sonriendo de medio lado. - Entonces será mejor que te acostumbres a esto. Podemos empezar por despejar el área sobre la que vamos a acampar de piedras, palos y demás. No querrás dormir sobre eso esta noche. - Indicó al primero lo más básico antes de empezar a montar las tiendas, y después de mirar a Eva, que se había mantenido callada todo el rato, se dirigió al segundo, ligeramente preocupada al advertir su seriedad. - Hey. ¿Todo bien? - No insistiría más si al mago no le apetecía hablar, ya que a ella no le molestaba la idea de acampar.

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02/11/2015, 17:38
Miron Lupeithai

La pregunta de Aisha hizo que bajara la guardia. La miró algo sorprendido e intentó sonreír cordialmente.

Sí. Todo bien.- afirmó escuetamente.

Miró hacia un lado y se puso a recoger piedras y todo lo que pudiera molestar tal y como había sugerido ella. Parecía concentrado en su sencilla labor, como cuando reorganizaba el pequeño estudio de la fortaleza. Estaba algo ensimismado, distraído, mientras trabajaba. Volvió a dirigir fugazmente la mirada hacia Aisha para asentir, sabiendo que no había sido demasiado convincente con su respuesta. Continuó apartando cosas, aunque a veces se quedaba mirando con curiosidad (o eso parecía) alguna piedra que encontraba.

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02/11/2015, 18:30
Markus Whitefield

Markus abrió los ojos sorprendido al ver al animalillo caer con el golpe de la flecha de Sera. Parecía que no estaba equivocado, aquellos fennecs eran unos simples animales con aspecto zorruno, en realidad eran bastante monos, hasta el punto de que le dio cierta pena verlos muertos.

-Te ayudo -Dice mientras se agacha para despejar el suelo junto a Miron. Mientras recoge hojas se mantiene silencioso, serio, pero contento. Aquella era una paz que no había vivido nunca. La paz de una naturaleza que ya no existía en el lugar del que él venía. 

-Hay algunas ramas que pueden prender bien. -Dijo, como si de una acampada con amigos se tratase.

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02/11/2015, 20:24
Aisha Serthan
- Tiradas (2)

Notas de juego

Contad la 2a tirada, que en la primera me he empanao y sólo he puesto un dado o,o

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02/11/2015, 20:29
Miron Lupeithai
- Tiradas (1)

Notas de juego

De momento me toca dormir :)

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02/11/2015, 21:45
Markus Whitefield
- Tiradas (1)

Notas de juego

Creo que a mi también ;)

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03/11/2015, 20:05
Jacob
- Tiradas (1)
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05/11/2015, 10:23
.Narrador.

Llegó la noche.

Tras haberse ido los soldados se les hizo extraña la sensación de quedarse solos, incluso a pesar de no haber sido más que un pequeño contingente de hombres el que les había acompañado.

Pero el cielo estrellado se mostraba iluminado por una enorme y clara luna, el fuego chisporroteaba alegre, reconfortando los cuerpos cansados, y el sabor de los fennecs asados, jugosos y sabrosos, les supo delicioso.

Tras deliberar unos momentos se decidieron las guardas nocturnas, por parejas, siempre con uno de los Thedanos y uno de los extranjeros. Se hizo así por seguridad, prevención y, por qué no admitirlo, para que estos últimos participaran también de la misión que sería, si había suerte, su propia salvación.

La primera de las guardias les correspondió a Aisha y Eva, que no se libraron de las bromas mordaces de Hawke y Sera, acerca de todo cuanto se les ocurrió, desde el hecho de ser dos mujeres, a odiarse cordialmente, pasando por el peligro de que sus charlas los dejaran a todos con el culo al aire.

Pero esas bromas junto a la hoguera, las mantas tendidas en el suelo, los estómagos llenos, las risas y la camaradería, auguraban una noche de tranquila armonía campestre.

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06/11/2015, 20:52
Aisha Serthan

  La elfa intentó tomarse con humor algunas de las bromas, aunque otras más bien intentara encajarlas. Se quedó algo tensa cuando los demás se fueron a dormir, ya que no se llevaba bien con Eva, aunque apenas la conociera. En realidad por el momento ni siquiera tenía especial interés. Habría preferido pasar el turno con Solas o Miron, pero habían decidido que los turnos se harían así para conocer mejor a los shemlen, y tendrían que acatarlo.

 Se relajó algo más en unos minutos después de haberse perdido en el fuego y las constelaciones, y cuando volvió a mirarla sus ojos estaban llenos de curiosidad.

 - Eva. ¿Cómo es tu mundo? - Preguntó casi sin pensar. En seguida se dio cuenta de que una pregunta así podría dar tema para toda la noche, o varias. Recordó que allí no había elfos y se preguntó si serían los únicos que no habitaban ese mundo, si era sólo de humanos o si habría... ¿Algo más? - ¿Quienes lo habitáis, además de los shemlen? - Preguntó curiosa. Shemlen, era un término al que recurría constantemente en lugar de humanos, pero esta vez en un tono menos despectivo.

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09/11/2015, 10:51
.Narrador.

A tu alrededor reinaba la calma. Uno a uno tus compañeros se habían vencido al sueño, incluso alguno (o alguna, porque Sera no era la que menos) se había abandonado a un descanso tan profundo que inundaba la noche con sus ronquidos. El fuego chisporroteaba, y se oían los pájaros nocturnos ulular en los árboles, así como algún aullido a lo lejos, los lobos parecía que nunca durmieran.

Eva no te había respondido aún, aunque en el fondo tú no pretendías más que suavizar las cosas entre vosotras. Por eso no te importó, y estabas más pendiente de lo que te rodeaba que de la shemlen.

Solas se había alejado un poco del fuego, quizá era el que estaba más apartado del grupo. Se había tendido en su manta cerca del tronco de un enorme árbol caído, su espalda contra la madera, su bastón entre las manos. No podías saber si dormía, porque la oscuridad ocultaba su rostro. Justo a la otra punta del pequeño campamento, cerca de donde Sera roncaba, Morrigan se había acurrucado en una gruesa piel de algún animal enorme, y su cabello negro se confundía con el pelo largo y suave que la cubría por completo. Tampoco era posible saber si dormía.

Mientras seguías esperando la respuesta de la extranjera, un crujido llamó tu atención. No fue nada alarmante, pero sí fuera de lugar. Lo suficiente como para que aguzaras el oído y te pusieras en guardia.

Parecía proceder de lo más profundo de la espesura, en el lado del bosque que habíais dejado atrás, no en el que aún os faltaba recorrer para llegar al Templo de Mythal. Y se escuchó arriba, no a ras de suelo. Quizá no fuera más que una lechuza grande, o alguna alimaña trepadora. O quizá no...

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09/11/2015, 11:10
.Narrador.

A tu alrededor reinaba la calma. Uno a uno tus compañeros se habían vencido al sueño, incluso alguno (o alguna, porque Sera no era la que menos) se había abandonado a un descanso tan profundo que inundaba la noche con sus ronquidos. El fuego chisporroteaba, y se oían los pájaros nocturnos ulular en los árboles, así como algún aullido a lo lejos, los lobos parecía que nunca durmieran.

Solas se había alejado un poco del fuego, quizá era el que estaba más apartado del grupo. Se había tendido en su manta cerca del tronco de un enorme árbol caído, su espalda contra la madera, su bastón entre las manos. No podías saber si dormía, porque la oscuridad ocultaba su rostro. Justo a la otra punta del pequeño campamento, cerca de donde Sera roncaba, Morrigan se había acurrucado en una gruesa piel de algún animal enorme, y su cabello negro se confundía con el pelo largo y suave que la cubría por completo. Tampoco era posible saber si dormía.

Tenías sueño, pero la excitación de la travesía te mantenía aún desvelado. Cerraste los ojos, tendido en tu manta, y te propusiste dormirte de una vez. Sin embargo, de pronto, un crujido llamó tu atención. No fue nada alarmante, pero sí fuera de lugar. Lo suficiente como para que aguzaras el oído y te pusieras en guardia.

Parecía proceder de lo más profundo de la espesura, en el lado del bosque que habíais dejado atrás, no en el que aún os faltaba recorrer para llegar al Templo de Mythal. Y se escuchó arriba, no a ras de suelo. Quizá no fuera más que una lechuza grande, o alguna alimaña trepadora. O quizá no...

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09/11/2015, 18:30
Miron Lupeithai
Sólo para el director

El sonido le pareció interesante, pues hasta ahora todo había sido ordinario y aburrido para él. Esta travesía no suponía ninguna novedad en su vida, y tener que viajar en grupo era casi más problemático que beneficioso después de haberse pasado tanto tiempo caminando solo. La compañía era agradable, pero...

Se levantó lentamente para no despertar ni alarmar a los demás. Miró hacia el lugar donde había oído el crujido, cogió su bastón, se sacudió la ropa y caminó hacia allí con precaución. Sin embargo, la curiosidad hacía que sus pies se movieran solos. Se adentró en la espesura cual chasind llamado por la belleza de Flemeth en las leyendas y se fue apoyando en la corteza de los árboles que iba dejando atrás. Con suerte, encontraría algo digno de atención bajo el manto de la noche, donde los misterios son ricos y abundantes.

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09/11/2015, 19:22
.Narrador.

Al parecer también Miron había oído algo extraño, porque se levantó lentamente, quizá para no despertar ni alarmar a los demás. Miró hacia el lugar donde ella había oído el crujido, cogió su bastón, se sacudió la ropa y caminó hacia allí con precaución.