Partida Rol por web

Fisura

El Templo de Mythal

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10/12/2015, 13:32
Solas

Fue Solas, finalmente, el que sacudiendo la cabeza pensativo, se acercó a Eyrine, y habló como representante de la Inquisidora.

-Cuando quieras tendremos esa charla privada. Y entiendo tus motivos para querer unirte a nosotros... -añadió echando un vistazo oblicuo hacia Miron.- También comprendo que para ti es difícil sumarte al ejército de la Inquisición habiendo hecho juramento de no usar tu magia sobre un ser humano, compañero. -Esta vez la mirada fue para Mickel.- Por lo que asumo que venir con nosotros es una salida. O eso crees.

Apretó los labios y afinó los ojos, era una decisión complicada.

-Sinceramente, ahora que Jacob y Rick están fuera de combate, nos vendrían bien dos magos en nuestro pequeño grupo. Pero... no vamos de paseo por ahí. Pensábais que íbamos a Skyhold, pero, como os han dicho, no es así. Nuestra misión es... difícil. Hemos de ser discretos. Incluso con aquellos que se presentan como nuestros amigos.

Si estaba siendo borde, no pareció importarle. Escudriñaba sus reacciones con atención, esperando algún signo que le indicara qué clase de personas eran esos dos desconocidos recién llegados. Con Eyrine hablaría, y quizá saliera de dudas con ella. Pero el mago graciosillo le tenía intrigado, y preocupado, eso estaba claro.

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10/12/2015, 14:28
Mickel Velum

Así que nada de información para el pobre Mickel. Oh, bueno, podía ser peor. Al menos no parecía ser una trampa para atrapar magos... a fin de cuentas, uno de los mandamases era mago y no parecía gustarle la idea de que lo metieran en una celda.

-Vaya. Eso es... solemne-Respondí algo inquieto. No es que me gustaran las aventuras a ciegas, y podía escoger volver a Skyhold donde me esperaba una cama calentita... ¿o no? Las dudas me comían por dentro y lo único que conocía, que era Eyrine se quedaría con el grupo.

Si es que... siempre has sido muy pasional, mi querida amiga...

No. No podía marcharme hacia lo desconocido dejando atrás a la chica, no después de todo lo que habían vivido en el camino y el aprecio que le tenía... en parte porque se parecía mucho en personalidad a mi antigua prometida. Curioso como podías querer a alguien sin conocerlo, o cómo podías extrañar a alguien a quien apreciabas, incluso si no la amabas.

-Bueno. Nunca fui bueno con las adivinanzas. Así que mejor dejar las preguntas para cuando podamos ser menos discretos-Odiaba esa palabra y todo lo que representaba, pues evocaba practicamente toda una vida de esconderme detrás de una máscara, de alguien que no era. O que sí era, pero no al completo. Días y noches de pesadillas de las que creía que no despertaría, pero que no podía compartir con nadie. Sí. La discreción era una soberana MIERDA. Pero entendía que en el mundo en el que vivíamos era nuestra única opción.

Y yo haciéndome ilusiones... tsk...-Pensé algo decepcionado.

-Bueno. Por mi parte podéis contar conmigo para echaros una mano. O un pie, lo que os haga falta-Eché una mirada furtiva a todos, pero sobre todo al Mirón. ¿Qué le pasaba a ese tío? Debía gastar cientos de soberanos de oro cada mañana en vaselina para meterse ese palo que tenía insertado en el culo. La simple idea me hizo sonreír, de forma descarada. Aparté la cara para intentar que no convertir lo que fue un gesto directo en una evidente burla mental.

No deberías pensar estas cosas... te acabará entrando la risa... floja...

Demasiado tarde. Empecé a reír como un tonto, mirando a la fogata. Lo que no me parecía apropiado, aunque eso no lo hacía menos involuntario. 

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10/12/2015, 16:01
Miron Lupeithai

Miron entrecerró los ojos y observó a Mickel sin acabar de entender qué diantre le pasaba por la cabeza. Hizo un ruido de desagrado y desvió la mirada para perderse entre las sombras de la espesura, que le ayudarían a pensar en otras cosas que valieran más la pena.

Notas de juego

(Disgusted noise)

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11/12/2015, 02:02
Aisha Serthan

 Aisha miraba a los hombres hablando, sorprendida. ¿Cómo se había tensado tanto la situación en un momento? Al menos para Miron, ya que Markus fumaba tranquilo mientras que Mickel se echaba a reír de repente, hecho completamente inexplicable para ella. 

 Sin embargo sí podía llegar a entender que Miron se molestara por que se tratara a su magia como a una broma, o un espectáculo, aunque no parecía que Markus lo hubiera entendido bien anteriormente, así que tal vez sería mejor intentar no tener algunas faltas en cuenta, y explicarle lo peligrosa que podía llegar a ser la magia. 

 Además Miron era, de todos ellos, el que contaba con sus simpatías, pero ella no interrumpiría el sermón sin haber vivido la magia por sí misma, y mucho menos para decir prejuiciosamente 'la magia es mala', contando con medio grupo mago, así que con las últimas palabras de Miron se acercó a Markus, curiosa. - ¿Qué es eso? - Pregunta, arrugando la nariz cuando lo huele. 

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12/12/2015, 02:02
Markus Whitefield

Markus levanta las cejas cuando escucha la respuesta de Miron. -Entiendo que sea algo peligroso, pero aún respetando el poder de la magia, puede entrañar algo de diversión.- Dice, levantando los hombros. -Pero sí te doy la razón en lo del tabaco, -Dice golpeándose en el pecho.- esto me va a acabar matando.- Dice finalmente con una sonora carcajada y algo de tos de por medio.

Se mantiene callado, escuchando lo que Solas tiene que decir al respecto, siguiendo con la mirada a aquel que mantiene la palabra en cada momento y sonríe, conteniendo una carcajada ante el comentario de Mickel y la reacción de Miron ante este.

Mira con curiosidad cuando Aisha se acerca, levantando algo las cejas mientras la escucha. -¿Esto? Aquí también tenéis, es tabaco. Sin embargo este se hace en fábricas enormes, de forma compacta. No es tan natural como el de aquí, lleva compuestos químicos que son muy adictivos. - Dice levantando los brazos, quitándole importancia ya que fumar era algo completamente normal en el mundo del que él venía.

 

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12/12/2015, 11:43
Sera

-¿Fábricas? ¿qué es eso? Mira que hablas rarito, tú, porque nada de nada. Tabaco, yo de eso tampoco ni he escuchado. Bueno lo de la química sí, que los alquimistas son muy divertidos, siempre con cosas arriba y abajo, que si tarros, que si potes, que si mezclo, que si exploto. Pero eso de meterse esta cosa en la boca, y encima ardiendo, eso no lo he visto nunca...

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12/12/2015, 13:43
.Narrador.

Empezaba a amanecer.

Las horas habían ido avanzando, apiñándose unas con otras por causa de la cantidad de cosas que habían estado sucediéndose. El asalto, la llegada de los dos magos, la del Capitán y sus hombres.

Finalmente, había que tomar una decisión. Solas seguía mirando a Mickel, concentrado. Sopesando. En aquel pequeño claro habían chocado opiniones, mundos. Y había demasiado en juego como para equivocarse.

De pronto, Cole, que había estado todo el tiempo con los dos heridos, se levantó y se acercó al elfo.

-Ella debe venir, y lo sabes. -Le dijo.- Y él... él nos necesita, más a nosotros que lo que encontrará en Skyhold. También nosotros estuvimos perdidos.

Solas le miró, fijamente. Estuvo a punto de decir algo, o de preguntarle. Pero en vez de eso sacudió la cabeza, vencido.

-Bien. Pues de acuerdo... -Susurró.

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12/12/2015, 14:02
Solas

-Capitán, nosotros seguiremos. Llevaos a nuestros heridos de regreso, e informa a la Inquisidora.

Se giró hacia Mickel.

-Vamos al Templo de Mythal. En busca de ayuda. Necesitamos encontrar algunos... antiguos artefactos élficos. Sois bienvenidos en el grupo.

Y, por primera vez en muchas horas, sonrió.

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12/12/2015, 14:50
Mickel Velum

-¡Genial! ¡Templos antiguos!-Digo con una sonrisa de oreja a oreja. Maldita curiosidad...-Mythal... me suena de algo... ¿Quizá lo he oído en alguna parte? Esto va a ser de lo más enriquecedor, e interesante-Miro a Aisha y le pregunto sin rodeos-¿Sabes algo sobre este templo, o sobre este tal "Mythal"?-Luego miro al elfo calvo-¿Es peligroso? ¡Estoy deseando examinarlo!

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12/12/2015, 17:26
Solas

El elfo calvo levantó una ceja, sin dejar de sonreír. Y asintió, aunque no se supo muy bien a qué asentía. Luego miró a Aisha, y amplió la sonrisa, también sin rodeos, esperando a su vez su respuesta.

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13/12/2015, 14:17
Eva Vogel

Antes las palabras susurradas por Hawke sólo puse sonreír mirándole, pero era una de esas sonrisas que decía que estaba deseando que se produjera todo aquello que me estaba susurrando, incluso el hombre más negado con las mujeres, hubiera entendido lo que le estaba diciendo con esa sonrisa. No había más que decir en aquel momento.

Por lo demás, cuando dejé de mirar al hombretón que tenía al lado, presté un poco de atención a lo que sucedía a nuestro alrededor. Parecían estar discutiendo si los recién llegados vendrían o no con nosotros, pero vamos, como ya llevábamos con nosotros a gente que mandaba y tomada decisiones, los demás no teníamos voz ni voto en lo que sucedía.

- ¿ Qué es eso del templo de Mythal? - Pregunté a Hawke en bajo, sin querer interrumpir la conversación de los demás.

Al menos, ya se me había pasado la mala leche con la que había llegado al claro, esa con la que hubiera podido dar patadas a alguien durante media hora antes de pensar en lo que estaba haciendo.

Mientras, al ver que parecía que íbamos a volver a ponernos en marcha, me levanté y coloqué mi espada bien para que no me molestara al caminar. Al menos, no me había costado demasiado acostumbrarme a ella. La verdad es que tenía que decir que me había amoldado bastante bien a todo aquello, quitando a eso de no tener nada electrónico en una habitación antes de dormir, como una tele o una radio... y bueno, a lo del " baño " que no me acostumbraría nunca.

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14/12/2015, 12:32
Hawke

-Mythal es una diosa del panteón élfico. Su Templo, o lo que queda de él, está en el corazón de la Espesura Arbórea, no demasiado lejos de aquí. Pero quizá Aisha sepa más que eso. Allí nos dirigimos ya desde que salimos de Skyhold. El por qué... bueno, eso es cosa de Solas y la Inquisidora...

Le susurró a Eva en respuesta a su pregunta. Pero también él, como Mickel y Solas, se quedó mirando a la elfa, esperando que Aisha les contara algo más al respecto.

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15/12/2015, 00:05
Aisha Serthan

 Aisha escucha la explicación de Markus, que la deja casi igual. Incluso por primera vez desde que conocía a Sera le parecía que era la que hablaba con más sentido. Sí que le queda claro que, si es adictivo, prefiere no probarlo, y tampoco es el olor se le antoje apetecible. 

 La pregunta de Mickel le pareció algo más interesante de lo que hablar. Tras captar la mirada de Solas, asiente a éste y se dispone a contestar. - Ella. - Corrige a Mickel. - Mythal es una de las principales diosas del panteón élfico, es la madre, la protectora, una deidad de amor y justicia. Es, junto a Elgar'nan, una de nuestras deidades más destacable. Los dalishanos invocamos su nombre cuando necesitamos protección, aunque nuestros dioses ya no se encuentran entre nosotros, así que lo más temible que queda de ella sería, en cualquier caso, representaciones suyas en forma de dragón. - Explica en voz alta. 

 - Respecto a lo que ahora quede del templo, o lo habite, no se nada, pero yo también estoy deseando explorarlo. - Termina con una ligera sonrisa, sin poder ocultar su entusiasmo. 

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17/12/2015, 23:44
Markus Whitefield

Markus se mantiene callado durante unos instantes mientras escucha a los demás arrojar algo de luz sobre aquel lugar al que se dirigían, y esta vez sí presta atención.

Levanta las cejas con cierta incredulidad al escuchar sobre dioses antiguos, pero al resumir dentro de su cabeza todos los sucesos supuestamente imposibles, o imposibles en su mundo, que han ocurrido hasta ahora, deja el escepticismo a un lado y se limita a creer en aquello que sus guías le digan.

Tira el cigarro, ya consumido, al suelo y lo pisa para apagarlo por completo. Entonces se vuelve a apoyar en el árbol, esperando sus nuevas órdenes con curiosidad e impaciencia a partes iguales.

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20/12/2015, 19:55
Eva Vogel

Si en algún momento nos habías dicho por qué nos dirigíamos a aquel lugar, yo no me había enterado, pero bueno, como siempre, había veces que cuando hablaban demasiado mi mente desconectaba y luego, ya dudaba si hacía las cosas con desconocimiento por mi culpa o por la del que no nos contaba nada.

- Tienes que aprender a escuchar más...

Hawke me dijo lo que él sabía y asentí, pero después me quedé mirando a la elfa, casi como si esperara una explicación de sus labios.

- Una diosa con forma de dragón... - Pensé para mí, aunque después me volvieron a la cabeza las palabras que acababa de decir. - ¿ Que ya no caminan entre ellos? ¿ En algún momento lo habían hecho?

Pero bueno, eso lo terminé achacando a algo así como leyendas. Quizás tuvieran una especie de Biblia o Corán y lo pusiera en él...

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13/01/2016, 18:31
.Narrador.

Aunque las dudas y preguntas no habían hecho más que empezar a asomar, lo cierto es que las dejaron a un lado para entregarse a un descanso que, tras la lucha y las novedades, necesitaban.

Aprovecharon la naciente alba para dormir algo, antes de que los soldados partiesen de regreso a Skyhold con los dos compañeros malheridos. Y se decidió que los dos recién llegados se quedarían con el grupo, después de así haberlo expresado ellos, y de una breve conversación de Solas con Eyrine.

Tras ese descanso se sucedieron aún algunas jornadas de viaje, aunque no hubo ningún incidente más, no fueron atacados ni tuvieron ningún percance grave. Durante el trayecto, sin embargo, ninguno de ellos pudo evitar sentirse observado, el peso de esa sensación era fugaz pero enorme, aunque en ningún momento nadie vio de dónde procedía. No hubo encuentros, figuras ocultándose, ojos en la oscuridad. Pero ahí estaba.

Sí que encontraron indicios de la relativamente reciente batalla librada en los alrededores del Templo, en lo más profundo de la Espesura Arbórea. Armaduras y armas, y restos calcinados. Campamentos abandonados a toda prisa, senderos fuertemente apìsonados por el grueso de las tropas, árboles y arbustos tronchados o quemados.

Pero a nadie con vida, ningún testigo, ni herido, ya fuera soldado de la Inquisición o del enemigo. Nadie.

El silencio les acompañó hora tras hora, y también la sensación de no estar solos, tanto como la ausencia de trinos de pájaros, aunque éstos empezaban a regresar, aturdidos, a la que hasta la llegada de las huestes de Coripheus había sido su casa.

Las noches fueron también tranquilas, y las guardias se realizaron más por precaución que porque hubiera motivos de alerta. Sólo hubo un pequeño incidente cuando Eyrine, tras llevar un buen rato echada, se levantó dormida y empezó a deambular sonámbula, hablando un lenguaje incomprensible, pero que a Aisha le pareció élfico antiguo. Aunque no logró entender nada. Acabó tan súbitamente como había empezado, y la maga se sorprendió tanto como ellos de verse levantada.

Por lo demás, cada uno se comportaba según su carácter, y así iban conociéndose algo mejor a medida que se acercaban al centro de la Espesura. Sera seguía yéndose a cazar, anárquicamente, a veces regresaba con alguna pieza, a veces lo hacia sin nada, embarrada y sucia, medio ida, bailoteando y riendo. Cole parecía desaparecer a menudo, aunque cuando alguien pensaba en él y lo buscaba con la mirada, lo encontraba, siempre con la vista clavada, precisamente, en aquel que lo echaba en falta, y diciendo su habitual "¿puedo ayudarte en algo...?". Hawke se mostraba amistoso con todos, atento a las necesidades de cada uno, dispuesto a echar una mano allí donde fuera necesario. Ya fuera cargando, haciendo fuego, preparando el campamento nocturno, o lo que fuera.

Los más serios y ensimismados eran, sin lugar a dudas, Morrigan y Solas. Hablaban poco, y cuando lo hacían muchas veces era entre ellos, y en voz baja. Pero nunca dejaron a nadie atrás, ni tampoco ninguna pregunta desatendida. Solas a veces se alejaba del grupo, y se dirigía a lugares elevados para otear. O para meditar, los ojos deslizándose a lo lejos, las manos a la espalda. El ceño fruncido. Sin embargo se le veía sonreír a veces, sin motivo aparente.

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14/01/2016, 12:12
.Narrador.

Tras esas jornadas de viaje, por fin llegaron a su destino: el Templo de Mythal.

Habían estado andando en fila india, adentrándose en la Espesura Arbórea, ahora tupida de follaje y troncos inmensos, apenas filtrándose los rayos del sol matinal entre las altísimas copas sobre sus cabezas. No había un sendero claro en todo el trayecto, a veces sí, losas de piedra y antorchas apagadas marcaban una dirección, pero otras veces la vegetación parecía crecer de manera que ocultara toda traza que pudiera orientar al viajero. Riachuelos pequeños pero caudalosos se cruzaban aquí y allá, dificultando aún más el paso, puesto que algunos habían horadado el lecho con una corriente poderosa, y había que dar un rodeo para vadearlos.

Ahora la presencia de vida era más patente, se escuchaban aullidos, gruñidos y graznar de aves. Pero los animales apenas se dejaban ver, y sólo de tanto en tanto se les podía descubrir entre la maleza, agazapados, desconfiados. Se escuchaba también el rugido del agua, cerca, como si aquellos riachuelos se estuvieran juntando, y vaciando desde considerable altura en algún punto no muy alejado.

Y cuando el telón arbóreo parecía más grueso e intrincado, de pronto, el panorama se abrió, y ante sus ojos asombrados apareció una imagen difícil de olvidar.

-El Templo de Mythal...

Comentó Solas, deteniéndose. Y sonrió, como hacía horas que no había sonreído. Morrigan asintió, frunció el ceño, y suspiró. La mirada que ambos cruzaron iba empapada de intención. Esa intención era un enigma, sin embargo...

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15/01/2016, 19:18
Eva Vogel

Aquel día había sido complicado. La verdad es que en él había habido muchos sobresaltos y no todos precisamente buenos, sobretodo, para mi humor, al que normalmente no le hacía falta demasiado para convertirse en explosivo. Por suerte, de vez en cuando, conseguía mantener la boca cerrada y así, evitar decir cosas que no querría decir una vez se me hubiera pasado el enfado.

En cuando me eché para dormir pensaba en todos los cadáveres que había dejado a mi paso. El problema de todo aquello era que estaba segura de que volvería hacerlo sin dudar lo más mínimo. Alguna parte de mí que desconocía sabía que era lo que había que hacer y punto, pero otra... se preguntaba si aquello no me convertiría en alguna clase de desalmada. Eso de tener una especie de " Pepito Grillo " ahí dando la lata era una auténtica mierda.

Luego estaba lo del arroyo... En fin, eso era mejor ni pensarlo porque entonces tendría que echarme el odre de agua sobre la cabeza para que se me pasaran los calores y tampoco era plan. Eso sí, maldeciría a los recién llegados aquel día en muchos idiomas si supiera hablar alguno más del que sabía.

Al final, cansada de darle vueltas a la cabeza me quedé dormida sin darme cuenta.

El camino continuó y la verdad, es que a parte de ver un bonito paisaje no pasó absolutamente nada fuera de lugar y el viaje fue tranquilo, sin contratiempo alguno.

Eso sí, todo tenía su lado bueno y su lado malo. Desde mi punto de vista, el hecho de que fuéramos como a ciegas a los sitios no me gustaba nada. A alguien quizás le hubieran explicado un poco algo de lo que tendríamos que hacer, de lo que esperaban que pasase, no sé, algo más que " vamos al templo de una diosa élfica ". De todas formas, como el elfo calvo y la de las lentillas amarillas no estuvieron demasiado habladores, no quise preguntar nada. Imaginaba que alguien nos explicaría las cosas a su debido tiempo, eso, o entonces volvería la Eva borde que tanto les gustaba.

Llevábamos ya unos días viajando cuando llegamos a uno de los lugares más hermosos que habían visto nunca mis ojos. Aquello que era el templo estaba rodeado de agua, con cascadas a un lado y con un puente de piedra oscura al otro. El templo en sí, sólo dejaba adivinar la mayoría de sus formas pues estaba cubierto de vegetación.

- Esto es precioso... - Murmuré más para mí misma que para nadie, quedándome impresionada por lo que estaba ante mis ojos.

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16/01/2016, 06:47
Mickel Velum

-Wow... estos elfos sí que sabían construir cosas en los lugares más insospechados, inaccesibles y poco prácticos-Digo con una sonrisa, maravillado por la belleza del lugar-Eso sí, se ve que construían las cosas para que duraran...-Me quedé mirando al edificio con los ojos como platos. Quería aparentar normalidad y calma, pero me temblaban los dedos de las manos, deseosos de entrar en aquel templo y toquetearlo todo para averiguar cosas del pasado-Templo de Mythal... algo me dice que ahí dentro hay muchos más secretos de lo que nos han contado estos dos-Señalo a Solas y a Morrigan-¿Alguna cosilla que queráis compartir con nosotros antes de decidirnos a poner un pie dentro?

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16/01/2016, 12:28
Miron Lupeithai

El viaje fue, afortunadamente, tranquilo y no encontraron más problemas. Era agradable poder contemplar la belleza de la Espesura Arbórea sin tener que estar en guardia permanentemente, aunque había algo extraño en el ambiente, una sensación incómoda que no sabría definir. Aún así, Miron pudo relajarse un poco y simplemente caminar y pensar. Intentaba estar cerca de Eyrine siempre que podía, aunque no dijo absolutamente nada en todo el camino. Por su expresión seria y ausente, se podía deducir que estaba ocupado con sus meditaciones.

Cuando por fin llegaron al templo, el mago se quedó congelado admirando la belleza del lugar. No tenía palabras para expresar lo que sentía en aquel momento, incluso habiendo visto ya ese templo durante la batalla contra el enemigo. El silencio convertía aquel rincón del mundo en algo mágico y Miron creía poder ver los secretos que escondían sus muros. Estaba impaciente por entrar y someterlo todo a una mirada analítica, pero tuvo que detenerse para disfrutar del momento. No parecía ser capaz de apartar la mirada.