Partida Rol por web

Luego de agradecer la cordialidad y los consejos a la gente del bar, un bar al que probablemente volvería, los compañeros se dirigieron al lugar indicado. La preocupación por las bandas del lugar estaba en la mente de ambos seguramente, pero John hacía su mejor esfuerzo por disimularlo.

Al llegar al lugar, por cuestiones económicas alquilaron una habitación pequeña, incluso si esto suponía que alguno (que iba a ser él, eso no se preguntaba) iba a tener que dormir en el piso o en una cama improvisada con sillas, si dormía algo, claro está. Una vez acomodadas las pertenencias que tenían, un pensamiento cruzó la mente de John:

*Bueno, mantenerme alejado de problemas nunca fue mi fuerte, habrá que intentarlo lo mejor posible.

Vamos, Liam, ni vos te crees eso...*

-Ann, voy a salir un momento. Asegurate de cerrar todo bien. Sé que te podés cuidar sóla, pero cualquier cosa me llamás.- Al salir de la habitación de la posada se dirigió nuevamente a hablar con la persona que estaba en la recepción, para preguntarle si le podía indicar como llegar a un parque en el que hay unas manzanas, parque NewTow (y si no era mucho molestia, si por casualidad sabía de algún trabajo o donde podía comprar un diario para buscar uno)

-Yo estoy bien, aunque me sabe fatal no haberlo podido hacer mejor. No se me da muy bien lo de hacer de héroe. Al menos no de momento. Estoy un poco despistado con todo esto, ¿sabe? No me diagnosticaron hasta hace poco y, bueno, he acabado aquí... -contestó el gigantón al ofrecimiento de la oficial, en busca de ayuda. Aunque él pesara el doble o más que ella, le faltaban muchos años de experiencia y resolución para considerarse a su altura, así que actuaba como el adolescente que todavía era.

Pues, ya que lo dice... comenzó Jaime tras la oferta de la agente.

Acabo de llegar y no tengo ningún lugar en el que hospedarme. Y, claro, tampoco trabajo. Estaría bien que me informara sobre dónde puedo conseguir ambas cosas.

La persona con la que te cruzaste te preguntó cuales eran tus habilidades y de qué eras capaz para decirte si conocía algún lugar donde encontrar algo de trabajo o algún sitio en el que pudieras encajar. Y cuando le hablaste del parque de las manzanas conocido como NewTow* te dijo que no conocía tal sitio.

La agente de policía asentía ante las preocupaciones del grande y enorme joven. Entiendo lo que te sucede, al principio cuesta un poco aceptarlo. No te preocupes, pero sé del lugar perfecto donde encajarías a la perfección y donde podrías practicar tus habilidades, si estás dispuesto puedo darte las señas de la Academia Claremont, una institución para gente como tú.

Luego miró al Sr. Nikols, la verdad que allí también os darán alojamiento y trabajo. Quizá os interese a los dos visitar el lugar.

-Sí, sí, por favor, o sea, si es tan amable... -dijo el muchachote con su estruendosa voz, atropellándose con las palabras. El chico necesitaba ayuda, pero no contra los malos o por algo físico, no, lo que necesitaba tanto como el aire que respiraba era una ayuda con la vida. Era un completo inexperto en ella. Bueno, tal vez no del todo, pero era un completo adolescente.

Jaime puso una mano sobre su compañero, en señal de advertencia.

¿Academia Claremont? ¿Institución para gente como nosotros? No es que quiera desconfiar, pero más información sobre ese tipo de academia sería de gran valor.

Sus dudas eran comprensibles. El mundo les había desterrado a ese lugar, y ahora había una academia especial para ellos.

Harán siguió el sonido del llanto de la mujer para poder hallarla. Aunque Harán no se caracterizaba por su buen trato con las personas, pensó que quizás podría ayudar, o al menos, hacerla compañía. ¿Estás bien?- preguntó cuando creyó estar lo bastante cerca.

-¿Sí? ¿Ha oído hablar de mí? -dijo sorprendido- vaya. Bueno se me da bien la mecánica y la informática -dijo con una ligera sonrisa- creo que soy capaz de arreglar casi todo.

Miró alrededor, viendo lo que había allí- ¿Que espera que pueda hacer?

-Mire, señor, mientras estudiaba trabajé medio jornada en un taller mecánico. Es la única experiencia y conocimiento que creo puede resultar útil en una ciudad como esta. No creo que haber trabajado en los campos vecinos cazando conejos y animales similares sea muy práctico. - le comentó John al sujeto que preguntó por sus habilidades.

-Luego de graduarme, de manera ocacional, también ayudaba a "mostrarles la salida" a aquellos que no conocían su límite en el bar de un amigo de la familia.  John sabía que esto último no era lo más elegante que había hecho, pero si en esta oportunidad le servía para poder aportar a traer comida, no tendría problema en hacerlo; aunque por lo que vio hasta ahora, en este lugar probablemente fuera más complicado que en aquel viejo bar en un pueblo perdido

La agente Montoya asintió ante las dudas que le presentaba Jaime.

Efectivamente, la Academia Claremon es una prestigiosa escuela privada que se encuentra en Bayview Heights. Fue fundada hace más de siglo y medio y ha mantenido siempre un cuerpo estudiantil reducido y exclusivo. El Sr. Summers es el director del instituto, en su día fue un gran héroe conocido como Cuervo, aunque ahora su identidad secreta la lleva otra persona. La academia funciona ahora como una escuela de formación.

Serena miró al hombre que se acercaba a ella, al principio se sobresaltó un poco, pensaba que en aquel bosque podía estar tranquila. Aunque, realmente era algo que no tenía porque ser lo normal. Cuando miró al hombre tenía los ojos completamente llenos de lágrimas y poseía unas cuantas hojas grandes de plantas a su alrededor, las estaba usando a modo de pañuelo.

A su alrededor, la vegetación era mayor y más frondosa, parecía que por cada lágrima derramada, las plantas crecían a su alrededor.

Sí, no te preocupes, decía falsamente mientras trataba de secar las lágrimas de sus ojos con otra hoja, mientras volvía a seguir llorando amargamente.

El científico miró sorprendido la exaltación del hombre. ¿Acaso estaba insinuando ser algún tipo de personaje famoso? Entonces negó con la cabeza, parecía que estuviese habiendo algún tipo de malentendido o confusión. Sí, claro que he oído hablar de usted, recientemente. Matizó exageradamente la última palabra para que el joven la entendiese. Mis ayudantes me acaban de informar sobre lo que ha venido a buscar aquí.

Gente que sepa de informártica y electrónica tengo por todas partes, ¿no lo ves? dijo abriendo los brazos para que contemplases el lugar que había a tu alrededor. Lo que busco es gente especial, gente que merezca la pena contratar. Ayudantes normales y corrientes tengo muchos, ya lo ve. Dijo señalando a los dos tipos que estaban junto a él, que agacharon la cabeza ante su "supuesta" mediocridad.

¿En un taller mecánico de qué tipo e índole? Si hizo algún trabajo científico es posible que pueda ir a algún tipo de laboratorio, si lo que se refiere es a un taller de coches y vehiculos. Bueno, un simple ayudante de reparación no es alguien muy importante. La verdad, que antes de buscar trabajo es mejor tener uun buen curriculum, o al menos unos buenos estudios.

La vida no está muy bien como para ir buscando trabajo sin haber estudiado... dice el hombre mientras se encogía de hombros.
 

-Bueno, yo en realidad ya tendría que ir a la universidad... como no haga de ayudante de profesor de gimnasia... -el enorme muchacho puso una mueca y se mostró poco convencido de que lo que le ofrecía la agente fuera a ser una buena idea en el fondo.

-Dígame que espera o que necesita y yo le diré si soy capaz de hacerlo o no. Hágame una prueba si quiere, y si no está convencido, pues me iré a otra parte, pero si le convenzo pues entonces nos tocará hablar sobre el contrato -mientras hablaba se cruzó de brazos y no apartaba la vista de ese hombro- ¿hay trato?

*Genial... gracias por remarcarme lo evidente* fue el pensamiento que cruzó la mente de John, pero se contuvo de comentarlo en voz alta para evitar seguir sumando amistades.

- Soy conciente de ello, pero es complicado tener un buen curriculum o unos excelentes estudios cuando uno terminó el colegio hace un año, ¿no lo cree? De todas maneras le agradezco, y si llega a saber de algo le agradeceré si me puede avisar. - le respondió de la manera más educada posible, mordiendose la lengua y conteniendo su temperamento.

Al finalizar, se acomodó su campera y se aprontó a salir.

*Debería de comprar algo de comida a la vuelta...*

Harán encontró a la muchacha y aunque su primer instinto fue el de acercarse y consolarla, se lo pensó mejor. Puede que el afecto de un extraño siendo una chica guapa la llevara a asustarse más que a tranquilizarse. Pues si ahora estás bien no quiero saber cómo estarás en un mal día- dijo tratando de relajar un poco el ambiente. Se sacó del bolsillo un cigarrillo y lo encendió. le ofreció uno a la chica. Además, cogió un paquete de clínex y se lo pasó con delicadeza- Creo que los pañuelos son mejores para la piel que las hojas Se quedó a una distancia prudencial para no resultar molesto y observó un poco la escena. Crecían plantas de sus lágrimas. Bueno, lo cierto es que en esa ciudad todo era normal. Suelen decir que contar los problemas ayuda, aunque la gente suele decir muchas gilipolleces, la verdad

No hay ninguna necesidad de que trabajeis en ella. Cuando lleguéis os puedo presentar a los miembros más importantes de la Academia, así les conocéis e incluso os podréis hacer cargo de asuntos que conciernan a la ciudad, que la policía no pueda resolver y que ellos mismos estén ocupados, resolviendo otro tipo de asuntos que conciernan al mundo.

Luego dudó por unos momentos, no tenía muy claro si el mundo quería que les ayudasen o no, no eran buenos tiempos para ningún metahumano, ni siquiera para los que querían ayudar.

Supongo que su labor es altruista, pero vosotros podréis atender los asuntos que conciernan a la ciudad... dijo encogiéndose de hombros esperando vuestra respuesta.