Partida Rol por web

Mentiroso... si yo pude liberarme... puedo liberarle a él...

Paul abre los ojos y respirando ajetreadamente retrocede un par de pasos, alejándose de Eddy. Con una expresión cautelosa responde:

-Si, estoy bien -y después añade-. Reduce a Jack y a Kearan mientras abro esa mierda de puerta.

Haciendo caso de sus palabras, pero con cuidado, consciente de lo peligroso de la situación, avanza hasta la puerta y tras observar la cerradura brevemente saca de su bolsillo una cartera y de ésta una targeta de crédito con la que trata de forzar la cerradura.

Paul apoya la mano en el pomo y abre la puerta lenta pero cuidadosamente. Se gira de medio lado sólo al oir la voz de Jack.

-No hay osiqués. Alguien ha estado jugando con nuestras mentes y punto. Somos peones en un puto juego de ajedrez.

Se asoma al pasillo, comprobando si hay moros en la costa.

Paul continua con su bollo y café aguado, comiendo rápidamente hasta terminar. Consciente de que lleva mil euros encima, pero ningún peso o lo que se sea que utilicen allí como moneda, domina la mente del camarero para que se olvide de cobrarle la cuenta como tantas otras veces ha hecho.

Paul observa a la masa gigantesca acercarse. Sin miedo ¿Acaso debería? Gira la cabeza para observar a Eddy. Seguro que él tampoco tiene miedo. Pero el de él es un caso nacido de la estupided congénita mientras que el de Paul es producto de la iluminación ¿Acaso merece la pena cuestionarse nada? Ya sabe como va a reaccionar. Siempre reacciona igual ante estas situaciones. Su filosofía de la vida se esconde mientras ese algo instintivo que bulle en su interior toma el control... es tan curioso... si al menos le dejaran tranquilo, en paz, para pensar en ello.

-Nos están atacando otra vez -no hay tiempo para estupideces. "Ya podrás pensar en tus chorradas cuando estés a salvo", parece decirle su otro yo. "Yo te mantendré con vida", le susurra al oido-. Un mutante gigante. Contacta con las mentes de la gente que nos rodea ¿Es que no notas su pánico? -Paul frunce el ceño-, llama a la policía.

"Basta de cháchara. Ataca, que los demás te sigan. Y si no podeis derrotarle, huye mientras ese gigante mata a alguno"

Es tan lógico.

Paul se concentra.

Paul sonríe enigmáticamente al skinhead, para después lanzar una mirada de "¿Qué te esperabas?" a Kearan.

-¿Qué pasa, vuestro jefe tiene miedo de que os deje fuera de combate con tanta facilidad como me libré de él? -resopla- Es igual. Escuchad, nosotros no queremos interferir en vuestros planes ¿Vale? Nos da igual lo que fuera que les estuvierais haciendo a los pasajeros de primera clase de aquel avión-se aclara la garganta un poco-. No nos vamos a ir de la lengua ni os vamos a delatar ni nada parecido, vamos, que nos da igual. Decidle de mi parte a vuestro jefe que se olvide de nosotros, que deje de malgastar recursos tratando de eliminarnos, porque no hace falta -se aclara la garganta-. Si quereis algo más seguro decidle que se reuna a hablar, hagamos un trato de no interferencia mutua y fin -sonríe-. Jamás nos volveremos a ver ¿De acuerdo? Porque vereis, nosotros no somos precisamente incompetentes e incluso en el caso de que tengais suerte, ganeis y nos acabeis eliminando, por el camino vais a perder mucho innecesariamente -menea la cabeza-. Y aquí no hay necesidad de armar una guerra cuando podríamos resolverlo hablando.

-¿me menosprecias?..ahora veras de lo que soy capaz...

Hacia el skin a toda leche :P

[sin pensárselo 2 veces y aprovechando su agilidad natural, Jack trata de saltar hacia un lado, corriendo después hacia el coche donde está Paul]

¡Vamos!