Partida Rol por web

Saghira intento llevar a cabo su accion, la pelea se estaba entreteniendo demasiado y eso no podia ser, con toda la maestria que pudo lanzo su daga al lateral indefenso del asesino, intentando impedirle esquivarla

-Nuestro bien es el bien de nuestro pueblo, es algo reciproco, si una maldicion afecta a mi hermano, mi pueblo se ve afectado...son sentimientos, cosas que quizas tu no sepas que son con la vida que llevas

Nuevamente una embestida detenida con pericia, confiriendo al combate todo el aspecto de que se va a alargar quizá durante horas si la estrategia de ambos contrincantes no cambia, pues está claro que el ataque y parada de momento no sirve para que uno de los dos tome ventaja...

Por su parte Saghira sujeta con firmeza su daga y la tira con precisión al costado del asesino cuando éste aún se encuentra deteniendo el golpe de su hermano, impidiendo pues que pueda esquivar la hoja de su arma.

Herido y cabreado el asesino opta por la ofensiva abalanzándose sobre el príncipe cruzando dos tajos distintos primero su espada que busca el vientre de su contrincante y luego su daga que busca su garganta, aunque esta parece quedarse corta, muy corta.

Saghira comienza a cabalgar hacia donde esta la pelea principal...

Esta vez es mi enemigo el que toma la iniciativa. Parece que esa daga clavada en su costado le ha hecho reaccionar. Se defiende como un animal acorralado y su precipitación hace que la daga falle su objetivo. He tenido suerte, no me lo esperaba de esa manera, pero aprovecho su desliz y atropello para intentar algo arriesgado. Salto al ver la primera estocada y así conseguir colocarme tras él. Esto me puede dar mucha ventaja si soy más rápido.

Saghira comienza a dar vueltas alrededor de la pelea, para intentar actuar en el momento mas oportuno

El movimiento del asesino parece algo extraño, quizá por no estar acostumbrado a usar dos armas a la vez, sin embargo el espadazo parece bastante preciso y directo hacia Ardashir, que consigue esquivar el golpe con un ágil salto mortal, quedándose detrás de su enemigo apenas un instante mientras su hermana no deja de dar vueltas con su camello, el cuál parece cada vez más nervioso e inquieto por el movimiento de los hombres y el que le obligan a hacer.

El príncipe salta sobre el esquivándolo lo ve volar y caer y el asesino gira aprovechando la rotación para tajar con la espada que pasa primero y luego la daga con otro intento de degüelle,mientras que en su rostro se ve la rabia que le provoca la dificultad de aquel combate.
Ni que fuerais un saltimbanqui del circo... maldice entre dientes

Tras colocarme detrás suya me interpongo entre él y mi hermana. No sé si ha sido buena idea, pero al menos he evitado su ataque. Lamentablemente pese a tener la ventaja de estar detrás suya, se da la vuelta tan rápido que no me da tiempo a equilibrarme y lanzarme al ataque antes de que él lo haga. No tengo tiempo de esquivar ya que sus dos manos se acercan a mi cuerpo con demasiada rapidez. Es difícil parar dos ataques con solo un arma. Habrá que poner algo de igualdad en el combate.

Me preparo y miro sus manos durante el ataque. A la vez, me preparo para recibir el impacto de su arma contra mi carne, pero debo hacer esto antes de que me parta en dos con sus dos armas. Cojo firmemente mi espada y ataco a la mano que sostiene la espada de mi enemigo. Con un poco de suerte podría incluso cortársela, pero habrá que tener fe en que al menos ese arma no volverá a dañarme.

Viendo como su hermano deja un flanco desprotegido Saghira solo puede hacer una cosa y es rezar porque la idea que tiene le salga bien y porque su herida la deje moverse lo suficiente, ademas el camello empieza a ponerse nervioso y no la mantendra en su sitio mucho tiempo, cabalgando hacia la mano libre del asesino y que se dispone a incrustarse en el lateral de su hermano Saghira se avalanza sobre, tirandose del camello para coger aquel brazo que intentaba hacer daño a su querido hermano, sbaia que iba a caer al suelo y que podia mas molestar que ayudar pero no podia quedarse de brazos cruzados mientras veia como su hermano recibia daño

El asesino se abalanza sobre el Príncipe con decisión y mayor precisión que antes, su contrincante intenta un movimiento algo desesperado por desarmarle que no surte efecto, recibiendo plenamente el espadazo y el dagazo, los cuáles salpican la arena que pisáis de espesa y profunda sangre.

Tras esto Saghira emprende su propia acción arriesgada, tirándose encima de Ángel de la Muerte mientras éste aún está algo despistado, rodando ambos por el suelo.
Él pierde su daga, ella se retuerce de dolor a causa de la pierna quebrada y el animal huye despavorido.

El asesino ve como la mujer se lanza sobre el demasiado tarde la daba por incapaz de andar y su acción realmente lo sorprende mas aun cuando la oye gemir de dolor.
En el suelo y sin daga se da cuenta de estar en desventaja, así que rápidamente rueda alejándose del príncipe y levantándose intentando que la chica quede en la trayectoria de su enemigo y poder evitar que el príncipe lo alcance antes de que este listo de nuevo.

Mi estocada falla y el asesino clava sus dos afiladas armas en mi cuerpo. Mi hermana entonces consigue saltar del camello y derribarle haciéndole perder la maldita daga que una vez más ha hecho un profundo corte en mi garganta. No puedo hablar o sufriré más daño del que ya padezco, así que me limito a limpiar la sangre que se desliza por mi cuello manchando la arena del desierto. Respiro entrecortadamente debido al esfuerzo y a las heridas. No sé si aguantaré mucho más este combate, y lo peor es que mi hermana también puede sufrir la misma suerte.

El asesino en vez de volver a atacar decide tomar de nuevo la verticalidad y se aleja de mí lo suficiente para que mi hermana quede entre nosotros y así evitar que pueda atacarle fácilmente. Miro a mi hermana con pena, pero no puedo hablar-Te quiero hermana-espero que se refleje en mis ojos antes de echar a correr en dirección al puente de piedra. A ambos lados nos espera el abismo, pero al menos nos alejaremos de mi hermana, que al fin y al cabo no tiene por qué salir herida. Miro al asesino desde mitad del puente con los brazos abiertos-Esto es entre tu y yo.

Mis heridas van en aumento, ya no puedo ni moverme, si al menos tuviera mi arco podria hacer algo desde aqui pero ya no puedo...

Saghira se queda donde esta mirando a su alrededor, quiza hubiera algo que pudiera usar...

El combate empieza a resultar algo confuso cuando el Asesino pierde su daga y decide alejarse de su contrincante, el cuál en lugar de acercarse se aleja todavía más hasta el puente de escaleras que conduce a la fortaleza, suspendido en el abismo a pesar de que en esa zona todo el suelo tiembla y parece que va a derruirse en cualquier momento.

Saghira empieza a arrastrase ligeramente por el suelo, aunque parece que muy poco podrá hacer ya...

El asesino mira al príncipe alejarse, en su cruce de miradas siente la petición del príncipe, trabajosamente busca su daga perdida con intención de recuperarla , mientras habla.
Que es aquello que has ansiado tanto como para arrastrar toda esa senda de muerte y estas dispuesto a arriesgarte a perderlo en ese puente tembloroso a cambio de la seguridad de tu hermana

El asesino aún no se ha dado cuenta de que no puedo responder más que con mis actos, así que evidentemente no voy a responder a su palabrería ni sus tonterías ni un minuto más solo por darle capricho. Ya me ha demostrado no tener el más mínimo escrúpulo o interés en mi vida. Su única misión es matarme-pues deja de hablar, solo estás malgastando el aliento.

Veo como el asesino busca con la mirada la daga y miro a mi hermana haciéndole un gesto con la mano señalando la pequeña hoja afilada que debería encontrarse a su lado ya que el asesino se retiró unos pasos.-Vamos hermana, defiéndete.-Me quedo allí esperando la venida del asesino, aunque quizás el puente caiga antes de que él llegue. Así que decido volver al borde del precipicio, no quisiera caer antes de que él llegara.

Saghira capta el mensaje indirecto de su hermano, desde muy pequeños habian aprendido a entenderse sin palabras y lo que le pedia su hermano era facil de entender ya que su mirada se dirigio hacia la daga y el asesino estaba intentando buscarla, asi que con todos los esfuerzos que pudo y un gran dolor que la recorria hasta la columna vertebral empezo a arrastrarse en busca de la maldita daga que buscaba el asesino...