Partida Rol por web

Sheila, ve desde su asiento como la gente va llegando y se sientan alrededor suya. Unos niños de corbata roja se sentaron justamente en el caldero de al lado. La chica pelirroja parecia muy interesada en sentarse cerca, al igual que yo, había decidido un buen sitio cerca del profesor, por si desde otros lugares la gente hablaba y no se oian bien las explicaciones como solía pasar en todos los colegios.

Le mire sonriente, ya que me había causado buena impresión. Aunque no fuese de mi casa, yo no tenia reparos de ser amigo de otras personas amigables que podía haber a mi alrededor y sobre todo inteligentes y aplicadas como parecia ser esa niña.

Rapidamente giré la cabeza a mis compañeros de Ravenclaw porque no pretendia que se sintiese observada y comence a hablar con ellos.

¿os habeis leido los primeros temas? hablar de cosas rarísimas....espero que el profesor se explique bien porque....sino...con este manual vamos a tener serios problemas para entender algo, al menos de primeras...

Justo cuando el reloj da la hora de iniciar las clases con sus características campanadas, una pequeña puertecita que hay al final de la clase se abre con un pequeño chirrido y los murmullos de los alumnos dejan de oírse. Un hombre llega de la sala que hay detrás de la clase, con esfuerzo para pasar por la puerta dada su gordura. A pesar de ello, luce una gran sonrisa tras su poblado bigote de morsa. Va vestido con una elegante túnica de profesor, de tonos verdes oscuros, y lleva un grueso libro rojo en una mano y un matraz con un líquido verdoso en la otra. Es Horace Slughorn, el profesor de Pociones de Hogwarts, y por la expresión y el brillo de sus ojos, está claro que se alegra de veros a todos allí sentados, expectantes.

El profesor camina pesadamente hasta su mesa, bamboleándose a un lado y a otro como un muñeco regordete. Deja sus utensilios en ella y os mira, abriendo los brazos.

- ¡Bienvenidos todos! -dice con una voz grave y profunda, pero alegre-. Bienvenidos a clase de Pociones y sobre todo a Hogwarts. Es un placer ver que tengo tantos alumnos nuevos para empezar a enseñarles cosas.

Mira a toda la clase, recorriéndola con un amplio movimiento de cabeza para abarcarla entera, y se frota las manos.

- Bueno -continúa-, es evidente que aún estaréis un poco aturdidos con todo esto, pero no os preocupéis. Ya veréis como muy pronto todo será tan familiar como vuestra casa. Si tenéis cualquier problema, no dudéis en recurrir a los profesores o a los prefectos. Estaremos encantados de ayudaros en todo lo que podamos.

Y ahora comencemos a entrar en materia. Como hoy es vuestra primera clase, no solo de Pociones si no en general, he preparado algo suave y divertido para que empecemos con buen pie.

Dicho eso, señala la poción verdosa en el matraz que descansa en la mesa, a su lado. Coge el recipiente de vidrio, lo destapa y lo huele, haciendo un gesto de agrado.

- En esta clase aprenderemos a elaborar todo tipo de filtros y pociones con propiedades mágicas realmente útiles. No obstante, al principio haremos cosas fáciles para que le vayais cogiendo el truco al asunto. Esta poción que tengo aquí -dice, removiendo el matraz para que el líquido verde brille a la luz del sol que entra por las ventanas-, no tiene demasiada utilidad práctica... pero es realmente deliciosa y tiene unos efectos muy curiosos. Además es muy sencilla de preparar, así que vamos a hacer de ella nuestro primer ejercicio.

Slughorn abre un cajón de su mesa y extrae de él unos pequeños saquitos, que pone sobre la mesa y cuenta rápidamente. Entonces mueve su varita y los saquitos vuelan hacia vosotros, ubicándose suavemente en las mesas que ocupáis.

- Quiero que os pongáis por parejas o tríos, como mejor os convenga y cojáis uno de esos saquitos. Contiene los ingredientes necesarios para la poción. Están ya preparados para que los echéis al caldero en cuanto hierva el agua -os señala un pequeño grifo en una esquina de la clase, que podéis utilizar para llenar los calderos-. Así que ya sabéis, ¡encended los fogones y manos a la obra!

Da una palmada y se echa las manos a la espalda, indicando que la clase ha comenzado y podéis empezar.

Al fin el profesor de pociones hace acto de presencia en la clase, con una precisión de un reloj suizo... vamos... que nada más dar la primera campanada ya estaba saliendo de su despacho. Escucha atentamente la explicación que les está dando... les va a enseñar una poción que no viene en el libro, pero que es muy fácil de realizar... según él...

Mira a sus compañeros... y sonríe.

-Parece fácil esta poción, verdad?

Se levanta de su asiento preparada para ponerse manos a la obra...

-Lo primero que ha dicho es que tenemos que llenar el caldero con agua y encender el fuego...

Si, supongo que si. Querran que tengamos una primera buena impresion de la escuela.

Dice Gary sonriendo.

Vamos. Pongamonos manos a la obra con el agua para calentarla.

Vamos alla chicos!!! ¿quien se atreve a echar los ingredientes al caldero? digo a mis compañeros mientras llenamos de agua el caldero y encendemos el fuego.

La primera impresión que se llevó del profesor Slughorn fue muy agradable y Ash ya estaba ansiosa por realizar la primera de las tareas que les había encomendado.

-Bien, habrá que encender los fogones lo primero y después echar los ingredientes. ¿Alguno de vosotros tiene especial interés en hacerlo?-pregunta sonriendo a Albert y a John.

Estaba en el Gran Comedor, pero como si no estuviera... Me había quedado dormida sobre la mesa de roble y ni me había enterado del aviso que supuestamente habían dado para acudir al aula. Miré a mi alrededor y sólo habían alumnos de otros cursos que probablemente no tenían ninguna clase en esos momentos.

Corrí rápidamente hacia las mazmorras, donde se encontraba el aula de Pociones y toqué a la puerta antes de abrirla.

- Perdone, profesor Slughorn... Me he retrasado un poco. Lo siento- dije, mientras me apresuraba a entrar y cerrar la puerta tras de mí, caminando rápidamente hacia la mesa donde se encontraba Godric. Me senté justo al lado de él-. Buff... ¡Bien empiezo el día!- le dije a mi compañero, susurrando.

El profesor Slughorn alza la vista al oír llamar a la puerta, y sonríe al ver que entra otro alumno de Slytherin.

- No te preocupes. Ponte con algún compañero y empezad a preparar la poción. Que a los que les salga bien se van a divertir mucho.

Se echa las manos a la ancha espalda y comienza a caminar despacio entre las mesas, mirando a un lado y a otro, visiblemente entretenido con el trajín.

Max mira nervioso a Sheila, que por lo menos en esta clase demuestra mucha más iniciativa que él. Casi está tentado de proponerle que lo haga ella, seguro que lo hará bien... Pero el profesor Slughorn es amigo de su madre, ya que ella era muy buena en Pociones, y quiere causar una buena impresión. Además, tiene que dejar alto el pabellón de la familia...

- Pues... no sé -dice al fin-. ¿Tú que crees, Mathilda?

Ufff, se nos ha ido el tiempo con tantas cosas, pero aqui todo es tan maravilloso..., pienso mientras corro hacia la clase, la cual la habiamos averiguado preguntando a una alumna de segundo año, ya que de no haberlo hecho nos habriamos perdido seguro, porque este castillo es enooooorme...

Entramos apresuradamente en la clase y ocupamos una de las mesas libres, ya qua la mayoria de los sitios ya estaban ocupados por los demas alumnos de primer año..., a continuacion los tres comenzamos a preparar nuestras cosas..., en realidad lo que hago es lo mismo que veo hacer a los demas, porque estoy muy perdido con todo...

Una vez listos el profesor nos dio una charla de bienvenida y nos indico lo que debiamos realizar, que era echar unos ingredientes en un caldero con agua hirviendo...., mire a mis compañeros y vi que de los 3, era Ashley la que parecia tener mas soltura de los tres por lo que le dije, prefiero que lo hagas tu, ya que parece que sabes mas que nosotros, ademas no quiero cargarme algo o liarla el primer dia de clase..., y termino la frase con una carcajada, pero no muy sonora, ya que prefiero no hacerme notar...

Miro a mis compañeros algo asustada

-Bu..bueno si quereis lo intento yo..-

Alzo la varita para encender el caldero, llenarlo de agua y despues abrir la bolsita y verter el contenido

Miro con aprension el interior del caldero observando a ver que sucede

Sonrio complacida

-Que bien! ha salido!-

Sigo moviendola y huele muy bien

Max se inclina sobre el caldero y olfatea la poción, que burbujea levemente y adquiere despacio un tinte verdoso mientras los ingredientes se disuelven en ella.

- ¡Oh! -dice sorprendido-. Es verdad, huele de maravilla. A ver si ha salido bien... Me pregunto qué es lo que hará.

Pero no se atreve a probarla hasta que el profesor Slughorn se lo indique.

Muy bien Mathilda!!!! que verde más bonito, ¿verdad?

¿para que será esto? quiero probar sus efectos, seguro que lo pasamos genial!!!

Mira a sus compañeros y se decide a actuar. Mueve la barita mientras se muerde un poco el labio, como concentrándose... no quiere que la primera pócima que hace se eche a perder y encima su grupo pringue por eso...

Va introduciendo los ingredientes en el agua hirviendo y los va removiendo.

Ash miró a sus compañeros mientras estos encendían en el fuego.

-Esta bien, lo haré yo pero va a ser la primera vez que hago algo así por lo que si sale mal...lo siento.-dijo a modo de disculpas no fuera a ser que metiera la pata en su primer día.

Pero su nerviosismo pudo con ella y antes de darse cuenta la poción se puso de un color extraño. Miró a sus compañeros con una cara que reflejaba su tristeza y arrepentiemiento.

-Oh, no! Lo siento, lo siento de veras...hablaré con el profesor ya que ha sido culpa mia y así no os pondrán mala nota...-se notaba lo triste y decepcionada que estaba porque la voz le temblaba.-yo...no quería que saliera mal...Perdón...-no podía decir nada más, había fallado a sus compañeros en su primer día.

Desde ese momento se dio cuenta de que aquel no iba a ser su día...

Efectivamente, la poción de Ashley se ha puesto azul en lugar de verde, y no burbujea con tanta fuerza como las demás. El profesor Slughorn se acerca, ve la poción y sonríe tranquilizadoramente a Ashley. Entonces se ríe con fuerza y le acaricia el pelo a la niña amistosamente.

- ¡No se preocupe, señorita Clearwater! -dice con su voz grave-. Estamos aquí para aprender, y es normal que las primeras veces no nos salgan bien las cosas. La próxima vez, intente dejar pasar unos segundos entre ingrediente e ingrediente. Verá como todo va mejor.

Entonces se vuelve al resto de la clase y se frota una vez más las manos.

- ¡Bueno, bueno! Veo que ya hay muchas pociones listas, y la mayoría tienen buen aspecto. ¿Por qué no las probáis? -sugiere, haciendo un guiño travieso y echándose las manos a la espalda-. Pero tened cuidado de no quemaros... Ustedes también pueden probar la suya, señorita Clearwater. Sólo será un poco menos divertida... pero no les hará ningún daño -añade dirigiéndose a Ashley y a sus compañeros de Hufflepuff.

En cuanto termina de hablar el profesor y deja nuestra mesa, le digo a Ashley, no te preocupes Ahsley, lo has hecho muy bien..., porque si hubiera sido yo el que la hubiera preparado, seguro que explota algo, y sonrio a la chica, para que no se sienta culpable de nada, ya que lo ha hecho fantasticamente, es mas, para asegurarle que no estaba molesto ni nada por el estilo, cojo uno de los recipientes de la mesa, y tomo una parte del liquido de la olla, para posteriormente acercarlo a mis labios, y mientras miro de reojo la cara de asombro de la chica, beber su contenido con una media sonrisa en la cara....

Los ojos se me iluminan de lo bien que me siento, pociones es la asignatura que mas interesa tengo que me salga bien

Alargo las manos hacia unos cacitos que hay en una esquina y lleno los tres ofreciendoles a mis compañeros y levantando el mio en señal de brindis

-Por nosotros!-

Bebo y me relamo

-Sabe a caramelos..-