Partida Rol por web

Y cuando todo parecía que no podía volverse más raro entra Alex en escena. Eso era Hogwarts, estaba claro. 

Me quedo callado mientras da su disertación sobre cómo huía de Serpens, nos lanza una amapola y sale del compartimento. No me atrevo a decir nada ya que parece que todo va con Henri más que conmigo, y puede que él entienda todo lo de las flores, Serpens, el compartimento que había elegido, los knuts, y bueno... todo lo que pasaba a nuestro alrededor.

Levanto la mano a la vez que él para chocar a modo de despedida y le veo desaparecer por la puerta.

Juego con la flor entre mis dedos según veo a Alex desaparecer por la puerta.

- ¿Sabes de qué iba todo eso? Puede que haya sido una especie de indirecta para que fuéramos con él. - le digo a mi compañero, al que no me había dado tiempo ni a responder. - Vamos a ver que se cuece en los otros compartimentos.

Me levanto, me guardo la amapola en el bolsillo (quien sabe qué sería aquello) y camino hasta la puerta del compartimento.

- ¡Ah! Bueno y me alegro que sigas triunfando como siempre. Ya te contaré yo, que también tuve alguna aventura este verano... Pero no te preocupes, no tienes nada que hacer con las pesadas, esas van a ir todas a por Alex. Ya le has visto, se asegura de que todos se acuerden de él desde el primer día. 

No lo digo con mal tono, sino más bien en broma, todos conocíamos a Alex, y le gustaba ser el centro de atención. Y misteriosamente tenía gancho con las chicas. Aunque nada que no se pudiera superar.

-¡Spencer! ¿Es-estás bien?-dijo al ver el golpe que se dio su compañero. Lo dijo un poco más alto de la cuenta ya que, estando la puerta abierta, todo el ruido que hacía el tren sobre las vías entraba en el vagón.  Se acercó con cuidado a Spencer y se acercó un poco a su cara para ver si era un golpe grave o no, comprobó con alivio que no había sangre ni nada por el estilo-Si te du-duele mucho, podemos volver, co-como quieras...-dijo con preocupación.

Logan sonrio ante el gesto de Alex y cuando este los dejo solo miro a Lissy, ella lo abrazo y le recordo de irse ese verano con ella, el asiente ante esa afimacion que ella hace, esperaba que sus padres lo entendieran y pudiera salir sin problemas, al abrazarlo siente algo en el estomago pero se sentia raro una mescla de emociones. Logan la abraza y luego al mirarla le ve la flor ya puesta, Alex los deja solos para saludar a las demas personas, miro a Lissy a los ojos. -Ya eres hermosa y eso te hace deslumbrar, gracias Lis es dificil aceptar que por una cosa no puedo estar como una familia y eso nos pasa a todos, me comporto como egoista, a todos nos pasa algo y yo me quejo por mi. Luego le sonrio y le planto un beso en la mejilla cuando entra Alex. -Este curso tendremos el club de duelo, podremos practicar, tendremos que estudiar pero debbemos permanecer unidos.

Mucho mejor.

- Cierto, muy cierto todo- dijo Alex asintiendo con la cabeza a las palabras de Logan-. El único problema es que los duelos no sean del todo imparciales- favorecer a Slytherin, vamos-. Pero sí, separarnos o quedarnos de brazos cruzados no es una opción.

Era la obvia idea que llevaba Alex desde el principio, pero no estaba de más reconocerle el mérito a su amigo. Si coincidían en la forma de prócer, todo sería más fácil. Lo que le preocupaba era que aún no había visto a sus dos... no sabía muy bien como llamarlas en ese momento.

Scarlet estaba cerca de mí, muy cerca. Me quedo congelado durante unos instantes, paso mi mano por detrás de sus caderas. Ella se endereza alerta, y la empujo con suavidad hacia afuera mientras mantengo la puerta abierta. Luego caigo en que mis gestos podrían haberse malinterpretado, así que me alegro de no haber sido abofeteado mientras enrojezco lentamente.

Una vez en el exterior, el ruido mengua, ya que no reverbera contra las paredes del pasillo. La brisa generada por el movimiento del expreso, es intensa, pero agradable. "Se me va a inflamar, aunque tal vez el frío ayude..." pienso respecto a mi nariz "...y tal vez evite que me ponga como un tomate".

-No te preocupes.-En un tono solo un poco más alto de lo normal, ya que no era necesario gritar.-Estoy bien.

Me quedo mirándola, repasando las lineas de su rostro

-Ha sido una experiencia agradable.

El paisaje se movía a nuestro alrededor, a medida que el tren dejaba atrás lo conocido, y seguía su indescifrable ruta hacia Hogwarts

La mirada de Madelain no había sido fría, había sido gélida. ¿Qué necesidad tenía Alex de ir a hacer bromas con ella? ¿No le había quedado claro que ella no quería ni siquiera hablarle? Por lo menos él estaba sonriendo, lo que significaba que llevaba bastante bien la situación. Madelain se puso contenta un poco por él y otro poco por ella misma, porque le preocupaba la idea de tenerlo en el colegio arrastrándose atrás suyo en busca de explicaciones o nuevas oportunidades. Afortunadamente Alana no lo había tomado tan mal.

_Lo lamento -se disculpó, incluso sabiendo que no era ella la culpable-. No sé qué pude haber visto en ese chico.

-Esta bien, no tienes porque disculparte -contestó simplemente. Dejó las flores a un lado tras haberlas mirado apenas. Evidentemente, estaba mas interesada en retomar el hilo de la charla, esperando que su pregunta fuese contestada. Le había caído curioso el mote de "serpiente". Una forma colorida (y quizá algo ofensiva) de referirse a los de su casa.

Madelain dejó también las flores a un lado y miró por la ventana, esperando que Alana volviera a tomar la inciativa de la charla.

Sin embargo alana no habló demasiado pronto. Excepto alguna interrupción de parte de otros estudiantes, cosa que no esperaba, estarían relativamente solas un buen rato. Apoyó la varita en el regazo, tranquilamente.

-He oído que "quien-tu-sabes" y similares se emplean desde hace mas de cien años por una magia relacionada al nombre, que permite saber en lugar donde se pronuncia. Me pregunto si aún seguirá rigiendo. -comentó casualmente.

Entrelazó los dedos, colocandolos frente a sus labios. Miró intensamente a la joven, en silencio, para de pronto romperlo con una preguta aturdidoramente directa.

-¿Amas al Señor Tenebroso y su reinado?

Cuando nota las manos de Spencer en sus caderas, Scarlet vuelve a su postura inicial, a su lado, inmóvil y rígida,  mientras, nota como su cara empieza a tornarse del color rojo de los estandartes de Gryffindor; pero el muchacho solo quería que ella pasase por la puerta abierta. Se siente algo violenta, pero respira hondo y pasa, aún sonrojada y nerviosa.

No quería nada, Scarlet, relájate Se dice a si misma.

-Va-va-va-vale...co-co-co-como quieras...-le contesta tartamudeando mucho más que antes. Spencer me mira fijamente, ¿por qué? ¿tengo algo en la cara? ¿le he molestado? Lo mejor será ignorar el momento de antes...

Desvía la mirada, mira al suelo.

-¿A-a-agradable por qu-qué? No-no-no sa-sabía que te re-re-resultase a-a-agradable gol-pe-pearte con u-u-una puerta...-le sonríe con nerviosismo, sin mirarle a los ojos, la vista va del suelo a la barandilla, y se agarra a ella con una mano, intentando que parezca un gesto normal y despreocupado, aunque su pulso tiemble un poco.

-Lo agradable ha sido que te preocupases por mi. Oír, por segunda vez, que al decir mi nombre no tartamudeas supera la felicidad que me ha provocado lo anterior.- Ella me da la espalda, sujeta a la barandilla.

"Es obvio que la he puesto nerviosa. Me pregunto si tendrá pareja". Viéndola con sus bucles ondeando al viento, y verla sonrojar, le daban una belleza inocente. Lamentaba no saber dibujar apropiadamente, la escena lo merecía.

Nunca me había preocupado por mis propias emociones. Era algo para lo que necesitabas tratar con mas gente de una forma positiva de la que yo lo hacía. Mi naturaleza arisca con la mayoría de la gente se debía a que les encontraba aburridos. En este caso era diferente. Mi cabeza era un torbellino de pensamientos racionales y emocionales ahora mismo. No tenía claro si la quería como una amiga, como una hermana pequeña a la que proteger que nunca he tenido (pues parecía especialmente frágil) o tal vez, como algo más.

-Cambiando de tema.- "Si vuelvo al plano académico se relajará"- ¿De qué quieres trabajar? Parece que tienes todas tus metas planeadas.

Henri se sorprendió cuando Alex irrumpió tanto como el que más. Después de la sorpresa inicial Henri se alegró de la presencia de Alex. Era un buen tipo y hacía mucho tiempo que no se veían. Normalmente a Henri le gustaba realizar saludos mas emotivos y no le habría molestado poder saludar a Alex así, pero no parecía que a este le sobrase el tiempo así que se limitó a responderle con un breve saludo y a asentir mientras hablaba. Decidió no interrumpirle tampoco para decir que no tenía ningún Knut encima, solo algunas libras. Lo que si que sorprendió a Henri fue la flor, no entendía muy bien a que venía y miro raro a Alex cuando se la entregó. Aun así el joven no parecía dispuesto a dar explicaciones así que le dejo marchar tranquilo chocando su mano y dedicándole una sonrisa.

La pregunta de Alana hizo respingar a Madelain como si se la hubiera gritado al oído. Esa chica era directa, la largó sin anestecia. Se permitió sostenerle la mirada unos segundos, la estudiaba. Para ese momento Madelain ya estaba convencida de que la chica de Slytherin jugaba con ella, pero Madelaín aún no comprendía qué esperaba ganar con eso. Midió sus palabras al responder.

_No, no lo amo. Muchos en la escuela lo saben, quizás tu también, cuando era pequeña se llevaron a mi padre, Arthur Garden, por ser hijo de muggles. Jamás volví a verlo. Supongo que si nadie se opone a este sistema debe funcionar bien, y por otro lado reconozco al Señor Tenebroso como uno de los magos más grandes de la historia, pero no me alegra que me hayan separado de mi padre. Si fueran más flexibles, si al menos me dejaran verlo, visitarlo cada tanto... Pero no, nada de eso. Como has dicho antes, es difícil para nosotros, los de sangre mestiza, pero estamos acostumbrados, es el mundo en el que nos ha tocado vivir. Pero mi padre era un gran mago, no comprendo por qué desperdiciar tanto poder. Es algo relacionado con lo que decías antes, que los magos no aprovechan su potencial. Había un gran potencial en mi padre, ¿por qué no puede aprovecharse? Los sangre sucia podrían estar junto a nosotros, los mestizos, haciendo el mismo tipo de tareas que nosotros, o peores. En fin, reconozco a ya-sabes-quién como mi señor, pero me gustarían algunas modificaciones, más flexibilidad en el sistema. Extraño a mi padre... -concluyó tristemente-.

Era cierto, había dicho dos veces su nombre sin tartamudear, eso era algo bueno, significaba que poco a poco iba superando sus problemas con la gente. Se sintió muy orgullosa por su progreso. Se relajó y notaba como su tono rojo bermellón bajaba a un leve sonrojamiento en las mejillas.

Spencer volvió a hablar sobre los estudios y el futuro...No supo qué responderle, la verdad es que nunca se lo había preguntado...¿Un puesto en el ministerio? No, no pensaba trabajar para esa gente sin escrúpulos. Tampoco se imaginaba llevando un negocio ni nada por el estilo ¿Y quidditch? deshechó la idea rápidamente. Entonces, se le ocurrió...tal vez....sí, tal vez...podría ser profesora, aunque la idea de hablar en público le atemorizaba, pero claro...cuando fuese mayor, ya lo tendría totalmente superado ¡sí! ¡sería profesora en Hogwarts! Lo veía muy claro, así, además, aportaría algo a las nuevas generaciones.

Se giró, aún algo sonrojada y con la espalda y las manos apoyadas en la barandilla, y miró a Spencer sonriente. Y respondió, segura de si misma:

-Me gustaría ser profesora, en Hogwarts.-le sonaba muy bien, ensanchó su sonrisa un poco.

-No lo sé.-Le respondió Henri a Ashton.- No tengo ni la mas remota idea de a que ha venido lo de la flor. No creo que estuviera intentando ligar con nosotros.-Dijo Henri riéndose.- Y no se me ocurren muchos mas motivos para regalarle una flor a alguien. ¿Será algún tipo de indirecta? Ni idea, pero solo aquí no me voy a quedar.-Dijo Henri levantándose a la par que su amigo.

Henri se rió con la broma de Ashton sobre Alex, era una broma inocente, de las que le gustaban a Henri.-Si, para su desgracia llama la atención de todos y todas, pero las pesadas son las que mas se notan.-Dijo guiñándole un ojo a Ashton.

-¿Y que opinarías de cambiarlo? Actualmente aún 100 años despues no se han podido apagar los focos y las opiniones de que Él debería ser removido, por asi decirlo.

Estaba hablando con total seriedad, a pesar de que había bromeado ligeramente con el asunto de la blasfemia. De a poco, iba profundizando mas en el tema de charla.

-Incluso el mayor foco de resistencia estaba en nuestra querida escuela.

Luego del leve rodeo, volvió a preguntar, de forma que no dejaba lugar a dudas. Nuevamente, otra pregunta brusca, un punto de quiebre que podía llevar la charla a un resultado u otro.

-¿Te atreverías a llevarle la contraria confiando en tu magia y en tus motivos? ¿Le cederías paso a la idea de que no es el Alfa y el Omega en el mundo mágico?

Al principio me sorprende, no tanto por la elección como la determinación con la que se expresa. Después sonrío al verla tan satisfecha de si misma

-¿Debo sentirme halagado? Lo has soltado con tanta firmeza que me has convencido. Te contrataba ya. Como cuando me has nombrado, sin tartamudeos. Siempre me había preguntado si eras tímida por ser tartamuda, o si era al revés. Veo que se trataba de la segunda opción. 

Me apoyo contra la puerta y doblo una de las rodillas, apoyando mi peso contra la hoja. Desde que había dado el estirón, tenía que buscarme la forma de bajar hasta la altura de mis compañeros de curso, sin que fuese tan ridículo como doblarme por la mitad.

-Después de presentarte a Henri, te tocará encargarte de darle clases entonces, para que vayas practicando.- Veo que abre los ojos como platos y comienza a volverse a extender el rubor. Con una media sonrisa, cargada de picardia y una ligera pero sana malevolencia, enarco una ceja.- Aunque si no quieres...