_¿Y eso qué tiene que ver con apoyar otras causas y abandonar la que hemos defendido hasta ahora?
No lo entenderias, sigues siendo el mismo niño infantil que se presentó a Hogwarts... Ojalá los que deban iluminarse lo hagan...
James estaba sorprendido ante la conducta de Dumbledore. Nunca lo había visto darse por vencido antes.
_¿Te has pasado de bando, Albus? ¿Te cansaste de luchar contra el Señor Oscuro para unirte a sus filas?
Tu hijo no puede morir, él vive mientras Voldemort viva; y es el único que puede acabar con la existencia de aquel hombre de Slytherin
_¿Qué dices? Yo lo ví, está muerto. ¿Dices que en realidad está vivo?
_¿Y cómo es que no respira? ¿Qué gana haciéndose elmuerto?
_PEEEEVEEEES ¿Qué ocurre arriba?
Dime algo James... si estamos muertos... por que Harry no está aqui?
_No lo se. Está Peeves pero no está Myrtle. ¿Dudas que ella esté muerta también?
Myrtle, al igual que Harry, aun no pasan a este plano... pero tampoco vimos a Harry como una entidad ectoplásmica... él sigue atrapado en su mente
James simplemente se quedó callado. Él sabía y sabía que Dumbledore sabía que no todos los muertos se convertían en fantasmas.
Pero ese director estaba raro, James ya no estaba interesado en esa charla.
_¡Niños!
La mejor amiga de Harry y uno de sus compañeros estaban muertos, también Kreacher. Sin embargo Dumbledor, como Snape antes, ya no estaba allí.
James abrazó a los dos niños. ¡Tan corta había sido la vida para ellos!
_Kreacher, lamento también lo tuyo. Cuéntenme, ¿qué ocurrió? Estaba el director aquí hasta hace unos segundos. Alguien que por favor me cuente qué ocurre del otro lado.
Kreacher observó el sitio en el que estaba. No veía nada. Para ser exactos estaba en la nada. El vacio abisal. Ahora miró alrededor y vió a sangre sucias y traidores a la sangre
- Cojonudo, estoy en el infierno.
Vayamos por partes ¿que es este sitio?
Como va a ser esto el infierno si estoy yo por aqui. jajajaj.
No os preocupeis esto es solo una sala de espera.
Vuestra muerte todavia no es irremediable.
Allí arriba tienen un jaleo tremendo de gente que va y viene, por ejemplo el director acaba de volver.
_¿Algún mortífago ha sido ya descubierto?
Aun no se ha descubierto a ninguno.
Estan todo dandole vueltas a lo mismo una y otra vez como gatitos asustados, sin conseguir ningun resultado
_¿A qué le dan vueltas, Peeves? Cómo me gustaría poder volver también yo. Me gustaría ver sus caras.
Pues ahora concretamente a que los que no se decidan por alguien mueran tambien gracias a esas ticitas magicas
¿Pero qué diantres...?
- ¿Es esta alguno de tus trucos Peeves? - preguntó indignada...aunque en realidad sabía bien que no podía tratarse de eso, y, si se trataba de eso, ¡que diantres! alguien...alguien la había asesinado.
Miró a los lados y no supo si sentir alivio al no ver a Harry entre ellos.
- ¡Están condenados! - Le replicó a Peeves, se reía como si se tratase de algún juego, pero si alguien no reaccionaba y comenzaba a hablar, todos los que apoyaban a Harry y no sólo apoyaban al elegido sino a un mundo de magos en el que los que no tenían una ascendencia pura tenían derecho a vivir y a practicar su don. ¡Contribuir con él!
- Intente...intente...
Dio una vuelta sobre los talones y se dejó caer para sentarse, estuviese donde estuviese, con pesadez, algo abatida. Nada tenía sentido.
Alzó el mentón, cerró los ojos y echó la cabeza para atrás. Tenía la varita en la mano...
...Toorrpe....
Se dijo, hiriente.
- ¿Por eso regresó Snape?
¿Eso significa que no es un mortífago? - Preguntó a Peeves, centrando su atención en él.