Ice se escondió detrás de un pequeño montículo mientras Abrahams lo hacía en una especie de zanja natural que había detrás de los matorrales. Ambos se ocultaron tan bien, que nadie hubiera sido capaz de verlos ni con veinte ojos. MacReady, en cambio, cayó en mitad de unas zarzas, por lo que se quedó completamente expuesto. Los tres os colocasteis a cierta distancia unos de otros, separados y a la vez, conectados, pero el sigilo era vuestra principal arma.
Eso sí, los tres visteis como los amarillos se posicionaban alrededor de vosotros, protegidos por la vegetación, cubriendo toda la zona y rodeandoos de tal manera que os resultaba completamente imposible escapar. En esos momentos comprendisteis que habían establecido una especie de tela de araña de la cual difícilmente podríais escapar.
A vuestra espalda, el sol se estaba empezando a poner, y eso os dio la idea de que quizás fuese la llegada de la noche lo que estaban esperando. La oscuridad podía ser vuestra mejor defensa... pero también la suya, puesto que serían capaces de avanzar sin ser vistos.
Pero hasta que llegase ese momento, la espera se haría interminable.
Ice, escondido de puta madre.
Abrahams, escondido bastante bien. Pero se te ha encasquillado el arma. O sacas una tirada buena de disparar, o te quedas sin ella.
MacReady, lo único que te hace falta es agitar los brazos y prenderte fuego porque estás a tiro. MacReady, lanza para ocultarte.
Si queréis hablar o moveros, lanzad sigilo en oculto, a partir de ahora. Queda un turno antes de que se vaya el sol.
Ice no movería ni un músculo hasta que cayera la noche y luego vería que opciones tenía. Estaban rodeados y moverse de su posición sería prácticamente un sucidio ahora que había logrado camuflarse. En cambio le preocupaba Rhys. Estaba prácticamente haciendo señales de humo mientras hacía sonar una orquesta. El pobre estaba perdido. Sólo su Dios podría ayudarle.
MacReady había quedado totalmente expuesto al caer en mitad de unas zarzas. Dolorido, el soldado trató de moverse hacia unos arbustos cercanos tras los que intentar ocultarse, mientras miraba hacia los amarillos, sin entender por qué no les habían disparado hasta el momento. Todo indicaba que estaban rodeándoles para que les resultase imposible escapar. Una amarga idea se le vino a la mente. ¿Y si pretendían tomarles prisioneros para sacarles información?
El soldado estaba asustado. Sabía que era preferible morir a ser capturado y torturado por los japos. Pese a que no creía que Dios pudiera ya ayudarles, procedió a persignarse con rapidez.
Motivo: Ocultarse
Tirada: 1d10
Resultado: 5(+1)=6 [5]
La noche cayó sobre vosotros, casi sin que os dierais cuenta. El silencio, roto únicamente por los sonidos de los animales crepusculares y las hojas meciéndose por el viento, dieron paso a una nueva tormenta que cayó sobre vuestras cabezas como si fuese una maldición, creando una cortina que, sumada a la oscuridad, impedía que vieseis más allá de vuestras narices.
El frío atenazaba vuestras manos y os costaba mantener los ojos abiertos con tanta agua y tanto viento, pero si aquellos jodidos amarillos pensaban atacaros, no debían tardar demasiado.
A partir de aquí, cada uno por separado. Tirad todos percepción.
Comenzó a llover y ya había oscurecido. No podía ver a sus compañeros, tampoco a sus enemigos. No obstante, sabía que esa iba a ser quizás la única oportunidad de salir de ahí y conservarla vida. Podía tomarse aquella lluvia como un castigo divino, o podía hacerlo como una bendición y aunque no era muy creyente, deseo pensar que era un regalo de Dios.
Salió de su escondite agazapado y atento a todo lo que se moviera, aunque con aquella oscuridad y con la cortina de agua que caía, era difícil ver dos en un burro. No obstante, su férrea determinación le llevó a seguir avanzando y si con suerte podía pasar tras la línea enemiga, correría con las escasas fuerzas que le quedaban en dirección al campamento aliado. Era arriesgado, pero si salía bien, al fin podría descansar.
Motivo: Percepción
Tirada: 1d10
Resultado: 6(+2)=8 [6]
Motivo: Sigilio
Tirada: 1d10
Resultado: 3(+2)=5 [3]
Motivo: Disparar
Tirada: 1d10
Resultado: 9(+3)=12 [9]
Si sale un japo, 12 a disparar!
Otra vez aquella jodida y maldita cortina de agua volvía a caer sobre ellos. La lluvia torrencial no solo complicaba el movimiento sinó que también dificultaba en sobremanera la visión y el oído. El único consuelo de Abrahams era que aquello se les aplicaba tanto a ellos como a los putos amarillos por lo que con un poco de suerte eso diese una oportunidad a MacReady de ocultarse un poco más.
El Sargento había tenido problemas con su arma, por lo que desde su escondite trató de descasquillarla. De no lograrlo simplemente la dejaría allí mismo y sacaría su pistola.
Motivo: Percepción
Tirada: 1d10
Resultado: 9(+3)=12 [9]
Motivo: Armas de fuego ( desencasquillar)
Tirada: 1d10
Resultado: 5(+2)=7 [5]
No podías ver gran cosa, lo cual podía ser desde luego igual de malo para tus enemigos. Quizás por eso, a pesar de no ver absolutamente nada más allá de unos pocos metros, decidiste salir de tu "madriguera" e iniciar el descenso de la colina. Arrastrándote por el fango, encontraste que te sentías bastante más seguro que esperando arriba, metido en aquel agujero, a que apareciese un amarillo y te degollase.
Sin embargo, no era tan fácil moverse.
La vegetación te rodeaba y el barro apenas te permitía moverte si no te levantabas un poco. Eso fue suficiente para que un amarillo, surgido de la nada, se echase sobre ti. Por lo visto, mientras tu bajabas, ellos habían iniciado el ascenso y la toma de la colina.
A pesar de todo, fuiste lo suficientemente rápido como para girarte a tiempo y dispararle, lanzándolo hacia atrás.
No obstante, eso había sido en parte un error. Al disparar, habías alertado a todos los demás de tu posición. Ahora, todo jodido amarillo que estuviese por los alrededores, sabría en donde te encontrabas.
Motivo: Ataque japo
Tirada: 1d10
Resultado: 6 [6]
Mientras esperabas a ver qué era lo que sucedía, y la lluvia ocultaba cualquier posibilidad de ver qué cojones hacían los amarillos, oíste una ráfaga de disparos. No sabías exactamente de dónde procedían, pero sí que estaba cerca, muy cerca, y que no iban dirigidos contra ti.
De alguna manera lograste fijar la vista en algo que se movía delante de ti, a unos metros, y viste dos cuerpos en el fango, uno de ellos recibiendo un disparo y cayendo al lado. Pero no eras capaz de distinguir demasiado. Eso sí, por fin conseguiste desencasquillar tu arma, así que al menos, si aparecía alguien, no te pillaría con las manos desnudas.
La lluvia caía sin compasión, pero tú tampoco tendrías mucha cuando un japo se acercase.
Mientras esperabas a ver qué era lo que sucedía, y la lluvia ocultaba cualquier posibilidad de ver qué cojones hacían los amarillos, oíste una ráfaga de disparos. No sabías exactamente de dónde procedían, pero sí que estaba cerca, muy cerca, y que no iban dirigidos contra ti.
En ese momento, oíste algo cerca de ti, como si estuviese reptando, aunque con tanta lluvia no podías distinguir nada. Eso sí, cuando un segundo más tarde saltó sobre ti un amarillo, lo tuviste claro como el agua que estaba cayendo sobre tu cabeza.
El japo tenía un cuchillo e iba a clavártelo en el mitad del pecho.
Motivo: Iniciativa amarillo de mierda
Tirada: 1d10
Resultado: 4(+2)=6 [4]
Tira iniciativa a ver si es más rápido o no.
Al no ser capaz de identificar los cuerpos caídos, el sargento Abrahams decidió seguir quieto como una estatua.
Aparentemente no habían notado aún su presencia y pese a que era consciente de que aquella cumbre iba a ser su tumba, tenía la intención de llevarse a tantos amarillos como le fuese posible con él al otro barrio.
Como no se mueve de sitio ni hace nada no se si requiero alguna tirada, querida Directora.
jajajajajaja tira percepción, a ver qué captas XD
Correr y disparar.
Ya no podía hacer otra cosa y eso fue lo que hizo. Salió corriendo como si no hubiera un mañana y no lo habría si no corría bien y a toda velocidad. Además tenía que disparar y dar en el blanco. No podía fallar. Si fallaba moría, si caía moría, si se detenía moría y posiblemente si acertaba, no caía y seguía corriendo, también moriría.
- ¡Vamos, joder! - Gritó para sus adentros, aunque no se escuchó más que un susurro. - ¡Malditos japos!
Motivo: Correr
Tirada: 1d10
Resultado: 8(+3)=11 [8]
Motivo: Disparar
Tirada: 1d10
Resultado: 7(+3)=10 [7]
MacReady apenas se había dado cuenta de la presencia del japonés prácticamente hasta que lo tuvo encima. Dejó escapar una sonora maldición, sorprendido, mientras veía cómo el japonés sostenía el cuchillo, decidido a clavárselo en el pecho. El soldado estadounidense giró sobre sí mismo para evitar que el amarillo se le echase encima.
-Traga plomo, amarillo cabrón... -masculló, mientras trataba de alcanzar al japonés con su fusil antes de que este pudiera herirlo a él.
Motivo: Iniciativa
Tirada: 1d10
Dificultad: 6+
Resultado: 7(+4)=11 (Exito) [7]
Motivo: Armas de Fuego
Tirada: 1d10
Resultado: 4(+5)=9 [4]
Oíste más disparos, esta vez provenientes de algún lugar a tu alrededor, pero eras incapaz de saber exactamente de dónde ni qué era lo que estaba sucediendo. También oíste otros disparos pero esta vez, procedentes de delante de ti, en algún lugar de la pendiente. Claro que antes de que pudieras hacer algo, un japo de mierda apareció de la nada y se abalanzó sobre ti con un cuchillo.
Te diste cuenta como la hoja del cuchillo reflejaba la poca luz que había, y también como aquel metal se dirigía directamente hacia tu corazón.
Motivo: Rapidez amarillo de mierda
Tirada: 1d10
Resultado: 4(+2)=6 [4]
Lanza iniciativa para ver si eres más rápido que él.
Estabas desatado. Mientras descendías, adoptaste la posición de quien se juega el todo por el todo. Cubierto por barro y envuelto en la lluvia, te movías con rapidez y disparabas con eficiencia, pero no eras el único.
A tu espalda, en algún lugar de la loma, también se produjeron disparos, aunque no podías saber si era de los tuyos... o de ellos. Sin embargo, no tenías tiempo que perder y seguiste descendiendo, apartando las ramas de tu cara y golpeando los dientes de cuantos amarillos iban apareciendo a tu paso.
Eras un jodido tanque sin control y pobre del que se interpusiera en tu camino.
Motivo: Más japos
Tirada: 1d10
Resultado: 2(+2)=4 [2]
Si pasas esta tirada de disparar (tendrías que pifiar para no hacerlo jajajajaja), llegas abajo.
El jodido amarillo salió despedido por los aires cuando te deshiciste de él, mientras oías más disparos delante de ti, en la pendiente, a varios metros más lejos. A medida que los disparos se alejaban, te dabas cuenta de que allí arriba, inmóvil, tendrías que rechazar un ataque tras otro si deseabas sobrevivir.
No sabías nada del sargento ni tampoco de Ice. Aquella jodida colina podía ser vuestra tumba.
Otro japo salió de la nada lanzando un pequeño grito a la vez que caía sobre ti esgrimiendo su cuchillo.
Motivo: Otro japo
Tirada: 1d10
Resultado: 10(+1)=11 [10]
Motivo: Ataque japo
Tirada: 1d10
Resultado: 5(+1)=6 [5]
Ha sacado un crítico así que lo tienes encima salvo que iguales la iniciativa. En el caso de que no lo consigas, con un 6 no te hiere, así que es tu turno de todas maneras.
Había conseguido derrotar al primer japonés con un efectivo disparo que logró que no volviera a levantarse, pero MacReady no tuvo tanta suerte contra un segundo amarillo que surgía de entre los arbustos que tenía a su alrededor en mitad de la noche. Era mucho más ágil y rápido que el primero y se aproximaba a él manejando el cuchillo con tanta rapidez que supo que las tenía todas en su contra.
-Señor, en tus manos encomiendo mi espíritu... -murmuró, lanzándose al combate.
Sabiendo que prácticamente tenía encima al japonés, utilizó su fusil no para dispararle, sino para golpearle con la culata y mantenerlo todo lo alejado que podía de él. Sin embargo, estaba agotado y exhausto, por lo que su golpe careció de toda la fuerza con la que esperaba atizarle.
Motivo: Iniciativa contra japo
Tirada: 1d10
Dificultad: 11+
Resultado: 4(+4)=8 (Fracaso) [4]
Motivo: Pelea contra japo
Tirada: 1d10
Resultado: 1 [1]
Aaaaah! Pifia! Creo que ya me dieron con guacamole.
Correr y disparar había funcionado, por ello siguió haciéndolo. Su rifle escupía plomo a mansalva y los malditos amarillos caían a su paso dejando un reguero de muerte y destrucción.
Ice se había convertido en el jodido ángel de la muerte y esos japoneses hijos de puta se acordarían de ese día hasta el resto de sus vidas. Lo que podían ser unos pocos minutos, pues John Pendollini estaba desatado.
Corrió sin mirar atrás y cuando jodido chino salía a si paso acababa moridendo el polvo. Para cuándo quiso darse cuenta, ya había descendido la colina y se encontraban solo y con campo por delante para seguir haciendo lo que mejor se le daba. Huir. Huir a toda hostia y sin mirar atrás.
- Suerte amigos... - Dijo mirando a la colina. - Espero veros en el campamento... - Y dicho aquello no se detuvo y siguió avanzando hacia su destino.
Motivo: Fuegooooo
Tirada: 1d10
Resultado: 5(+3)=8 [5]
Motivo: Iniciativa
Tirada: 1d10
Resultado: 4(+2)=6 [4]
(Cruza dedos)
El japo no había hecho un movimiento excesivamente rápido, pero sí lo suficiente como para que no te adelantarás a él. Ambos os fundisteis en una pelea en el fango, dentro del mismo agujero en el que te habías estado oculto, pero que en aquellos momentos podía transformarse en una tumba para uno de los dos, e incluso para ambos.
La lluvia no era ahora importante, porque ambos erais golpeados por la misma fuerza que os había impedido veros con claridad y en aquellos momentos, peleabais solo con vuestras manos y vuestro coraje.
Motivo: Ataque con armas
Tirada: 1d10
Resultado: 9(+1)=10 [9]
Pues tira ataque con armas. Ha tenido una buena tirada. Recuerda que puedes usar 1 punto de voluntad.
Tu rapidez de reflejos habían conseguido alertarte a tiempo de mover tu fusil para anular su ataque, pero no fue suficiente. El japo se removió y consiguió esquivar con facilidad tu culatazo, dejándole tu pecho descubierto para consiguiese clavarte su cuchillo en el lado derecho.
Un intenso dolor te atravesó de delante a atrás, haciéndote gritar mientras sentías como atravesaba tus tejidos, tu carne y tu piel, y empezabas a saborear la sangre en tu boca.
Tus manos se agarraron con fuerza a aquel amarillo que no creía en lo mismo que tú, pero él también tendría sus propias creencias, que eran parecidas a las que te impulsaban a ti, y en aquellos momentos, estaba muy claro que su voluntad había superado a la tuya.
Sentías como la vida se escapaba de tu cuerpo, y como cada segundo era como un año que podías haber vivido, una familia que podías haber tenido y un futuro que jamás podrías contemplar.
Lanzaste un escupitajo de sangre mientras luchabas con las pocas fuerzas que te quedaban por sobrevivir, pero sabías que se trataba de una batalla perdida.
Motivo: Daño cuchillo
Tirada: 1d6
Resultado: 4(+2)=6 [4]
Puedes volver a tirar, pero me da que estás muerto. Sin embargo, lo mismo consigues matar al japo también.