Partida Rol por web

Rio, y le pongo morritos de nuevo.

-¿Me estás insinuando jugar a las casitas?-

Le sigo, dejándo que guíe, ya que es su casa.

-Viendote cualquiera diría que eres modelo o algo así, no fabricante de muñecas. Es curioso eso.-

- No te imaginas la delicadeza que hay que tener para que una muñeca alcanze la perfección y te aseguro que da mucho mas dinero que ser modelo, tengo muñecas abajo por las que me van a pagar mas de 5000 dolares, aunque creo que si hiciera una muñeca tuya conseguiria sacar muchisimo mas-

Avanzamos hasta el segundo piso, donde la casa ya parece mas normal, un salon amplio pegado a las escaleras con un sofa muy grnde, estaterias llenas de miles de libros, sacados de cualquier sitio, muebles con adornos de todo tipo, desde simples jarrones hasta pequeñas figuras, una gran televisión de pantalla plana y varias puertas que estan cerradas.

- Bueno aqui es donde suele perder el tiempo la mayor parte de las veces, que te parece-

-Bueno, eso de hacer una muñeca de mi...todo es hablarlo.- le guiño.

Miro el salón.

-Es curioso. Parece agradable, y si que es más bonita por dentro. Gracias a los dioses.- sonrío.

-Veamos esa cocina, que tengo algo de hambre, cocinero.- bromeo.

- Eso es facil la segunda puerta- digo guiandola hasta la cocina- El baño es la primera puerta y el resto son habitaciones para invitados puedes cotillearlas si quieres pero apenas tienen cosas-

La cocina es una cocina moderna completamente equipada y casi mas grande que el salon, tiene 3 neveras distribuidas de forma extraña y una gran encimera donde hay todo tipo de utensilios.

- Esta es mi cocina, aunque te aviso que me has puesto la cena muy complicada asique no te aseguro hacerlo a la perfeción-

tras decirle esto empiezo a rebuscar sin ams por toda la cocina para sacar los ingredientes para el plato que me habia dicho que era su perferido

-¿Te importa que me quite los zapatos?- le pregunto regresando al salón, para dejar la chaqueta en uno de los sofás, al lado del bolso. -Y no te preocupes, seguro que lo haces bien. Lo más complicado es que tengas esa salsa.-

Cotilleo un poco los muebles entre que espero que me responda.

- Al contrario ponte comoda, creo que incluso tengo que tener pijamas y camisones de tu talla en algunos de los armarios, y seguro que tengo ropa de mulñecas que te vale- me rio al decirle esto ultimo ientras sigo peleandome por conseguir encontrar todo lo necesario para la cena, por suerte tenia todas las neveras y despensas llenas, estaba preparado para casi cualquier cosa.

- Puedo preguntar una cosa como tu decias por que una chica tanguapa se dedica a esto y no es modelo-

Me quito los zapatos regresando a la cocina, ya me cambiaré luego si encarta. Me subo a la encimera, y me cruzo de piernas, un cruce muy sexy. Deliberadamente sexy, aunque parece casual que se vean las ligas en mi pierna envuelta en una sugerente media.

-Ser modelo es sufrido, y poco rentable. Que si hay que vigilar el peso...que si tienes que estar toda estirada...¿Y para qué? Cobrar una miseria salvo que seas hiper famosa, vivir una vida estresante, y que todos los que te bean sean unos babosos. Eso ultimo, vale. Pero como hobbie. Para ser lo que soy solo tienes que estar buena, saberlo, y sacarle partido.-

- Yo mas bien diria que tienes que estar muy buena, pero ese requisito lo cumples mas que de sobra- la miro aunque solo de pasada ya que estoy centrado en la recete, se que esta sentada de forma provocativa, pero ahora mismo eso es lo que menos me importa, su belleza es perfecta y disfrutarla solo un segundo no era algo importante- Por cierto si te sientas en la encimera asi me temo que terminaras muy machada, claro que yo tambien tardare el doble en cocinar por que me distraeras con facilidad-

cocino con mucha facilidad, con agiles movimientos y moviendome a gran velocidad de un lado a otro mientros mezclo ingredientes, pongo cosas al fuego y demas.

-La cocina es enorme, no creo que vayas a usar toda la encimera...si te acercas aqui ya me quitaré.-

Cocina bien este tipo, sería un buen amo de casa. Me sonrío a mi misma.

-¿Tienes novia?- añado con picardía -¿O novio?-

- Ni tengo novia ni estoy casado, y no soy gay ni nada parecido, sencillamente normalmente las mujeres tienden a pasar de mi, y si no se asustan cuando entran a casa y ven las muñecas, te sorprenderia la cantidad de veces que han llamado a la policia acusandome de cosas muy extrañas, la ultima vez tube que regalarle a un policia una muñeca de 700 dolares para que se fuera tramquilo, ya sabes la honrradez de la policia por encima de todo- me lleva un rato pero finalmente consigo terminar el plato, rapidamente lo pongo en la encimera cerca de ella para que pueda verlo con claridad -Listo Noodles con ternera y salsa teriyaki espero que este a tu gusto, de postre hay tarta de frambuesas y fresas-

Me llevo con el tenedor unos noodles a la boca, y los voy metiendo poco a poco, hasta que el noodle desaparece finalmente entre mis labios. El coletazo final, me mancha el labio, por lo que tras tragar, paso mi lengua por donde se ha manchado, lentamente.

Sensualmente. mirándole a los ojos todo el tiempo.

¿Conseguiré que me salte encima antes de las 24 horas? sonrío.

-Está muy bueno.-

Pincho carne para seguir comiendo.

- Gracias- digo mirando atentamente como come e ignorando mi propio plato- Tengo una duda hacerlo todo de forma tan seductora y porovocadora es algo imnato o intentas seducirme, por que si quieres seducirme te dire que no te hace falta nada, yo saltaria sobre ti sin dudarlo ni un segundo, pero el trato era nada de sexo recuerdas- pincho en mi plato y me llevo un trozo de carne a la boca lentamente sin dejar de mirarla, realmente era una chica guapa, preciosa, pero no podia perder la cabeza ni dejarme llevar, sabia muy bien lo que me habian pedido y tenia que hacerlo, aunque la verdad entendia perfectamente que era dificil resistirse a ella.

-Supongo que es una combinación de ambas...innato y calculado....¿Te gusta lo que ves?- sonrío. -¿Te excita pensar lo que soy capaz de hacer con estos labios...y esta lengua?- mi tono es MUY sugerente. Tomo otro noodle.

Está claro que me desea mucho.

-Muchisimo, pero me entusiasma mas pensar que serias capaz de hacer con tu mente, eres literalmente una diosa andante, capaz de seducir a cualquiera, seguro que tras esa belleza se esconde un poder increible, pero supongo que para descubrirlo antes abria que descubrir todo tu cuerpo, o me equivoco- ella era la comnacion perfecta de chica inteligente y guapa que sabe manipular a un hombre y acorralarlo hasta que este hace todo lo que ella quiere, creo que los hombres que acostumbran a salir con ella no son mas que presas en sus manos.

-¿Con mi mente?-

Mi pie derecho sube por su pierna, hasta acabar en su entrepierna.

-¿Seguro que lo que quieres no es saber lo que puedo hacer con mi cuerpo?-

Acaricio su paquete con mi pie, realizando una presión considerable y relajándola a intervalos.

-Como quieras.- Retiro mi pie.

-¿Quieres preguntarme algo? ¿O contarme el motivo por el que estoy aquí?-

Mi tono ha cambiado, casi como diciendo "has perdido tu oportunidad"

- Tu cuerpo es algo que me haria perder la cabeza con demasiada facilidad, creo que tu serias mas como una droga a la que es imposible desengancharse- cuando ella retira su pie no puedo mas que sentir alivio y a la vez deseo de lanzarme sobre ella, pero todo tiene su momento y ese no lo es y el cambio que hace de tono de voz es precisamente lo que yo necesito.

- Podria preguntarte mil cosas pero la verdad es que esperaba que tu hicieras la pregunta magica por suerte lo has hecho, te traido aqui por que tengo muchos interers en ti, entre ellos combertirte en mi muñeca estrella, tengo un grupo de digamoslo claro multimillonarios salidos esperando una partida de muñecas eroticas, buscan el cuerpo perfecto, la mujer perfecta, la esencia de lo mejor, y sencillamente tu eres lo mejor, pero esos son negocios y tu sabes que no estas aqui para hablar de negocios, ven con migo-

Salgo de la cocina sin esperarla siquiera y me dirijo a la parte de abajo a la zona donde estan todas las muñecas, pero paso de ellas y tras apartar un pequeño armario dejo al descubierto una puerta.

-¿De verdad querrán muñecas? ¿y por qué no a la real?- sonrío. -Aunque sería un buen negocio venderles las muñecas y que despues conozcan a la real...sin duda arderían de deseo.-

En el piso de abajo, me "tropiezo" con una de las cosas que hay por medio. Me sujeto a él, nota mi cuerpo tremendamente pegado al suyo, especialmente mis pechos.

Cuando me incorporo, mis manos una en el brazo y otra en la espalda, con como una caricia que le invita.

- Si me sigues provocando asi creo que terminare por no poder enseñarte lo que queria- abro la puerta pero no sin dificultad y tentacion por darme la vuelta para lanzarme sobre ella, alli habia demasiados ojos mirando, cuando entramos en la nueva sala solo hay una habitacion con un techo que se estienden toda la casa hacia arriba, 6 pisos de altura y todo completamente vacio efecto por una alfonbra del suelo - Adelante tumbate sobre la alfonbra, y esta vez te aconsejo que no me provoques por que podrias ocasionar que me lanzara sobre ti y no te dejara escapar de entre mis brazos por un largo tiempo-

-¿Y para qué querría yo tumbarme en una alfombra?- pregunto curiosa.

Caerá cuando yo quiera que caiga. Me sonrío.

- Te dije si querias volar recuerdas- digo aproximandome a la alfombra hasta quedar justo a su lado - Tumbate y simplemente dejate llevar- ahora venia la prueba de la verdad, veriamos hasta que nivel es lo que esperaba.