Partida Rol por web

Primero lo de Anders y ahora, resulta que todo aquello ni siquiera había sido verdad, ya que no era necesario que acudiera ni a mi propio concierto...

- ¿ Todo ha sido mentira? - Dije en una de esas preguntas que en realidad no necesitan ninguna respuesta.

Ya no me sentía demasiado bien cuando había llegado a la habitación pero ahora ya estaba a punto de perder todos los papeles y seguramente alguna cosa más.

- ¿ Poderes? ¿ Lo de la música? - Ahora sí que me sentía la persona más ingenua no sólo del mundo, sino del universo. - Creo que ya has hecho suficiente por mí, muchas gracias... - No quise preguntar quiénes eran las personas que había allí abajo y si ellos también podían hacer aquellas cosas.

- Me parece despreciable que juegues así con las cosas importantes en la vida de los demás! - Para mí lo de aquel concierto había sido muy importante, al menos hasta lo de Anders, pero ahora... aquello era peor que un jarro de agua fría.

No esperé una respuesta y me di la vuelta para salir de aquella habitación y salir corriendo.

- Creo que no me explicado con claridad señorita Harper- la puerta estaba cerrada no podria salir de elli- Sus logros no han sido cosa mia si no cosa de ustedes, su habilidad musical a hecho casi todo el trabajo, pero no me atrubiero yo meritos que no son mios- parecia bastante disgustada- Lo que si es cierto es que tenia planes para usted y todo sea dicho su compañero y la gente de la fiesta, llevo mucho tiempo buscando gente con poderes y encontrar un grupo tan variado y disperso como el suyo no a sido tarea facil, pero le rogaria que me diera tiempo para explicar mis motivos, seria de agradecer que me acompañara a la fiesta despues si lo deseas podras marcharte, le aseguro que no la retendre- no era tan peligrosa como para tener que hacerlo

Tiré de la puerta dándome cuenta de que estaba cerrada y me volví asustada, y mucho, porque no sabía qué era lo que quería aquel hombre. Sí sabía que podía hacer cosas que otros no podían, pero no le había hecho mal a nadie nunca, es más, me encargaba de entretenerlos y entregarles lo único que seguiría estando ahí siempre, la música.

Me quedé pensando en aquellas palabras unos segundos y luego asentí, aunque con bastante recelo, porque no me gustaba que me mintieran y aquel día, ya habían conseguido que me sintiera tan engañada como no me había sentido nunca, aunque toda la culpa no hubiera sido de él.

- Está bien, pero luego me iré...

Ni siquiera me dio por pensar en lo que me había dicho Anders antes de irme, sobretodo, porque estaba tan molesta que cuando me había hablado no le había prestado la más mínima atención, intentando salir de allí como si no hubiera pasado nada.

- Le aseguro que no abra ningún problema en ello señorita Harper y créame que lamento muchísimo este malentendido supusimos que los invitados a la fiesta se comportarían de una manera menos llamativa, pero al parecer las cosas no siempre salen como se planean, si no le importa nos gustaría que controlase un poco al señor Dekkers su poder esta causando un gran destrozo en la sala- la puerta se abre cuando llego a ella y le ago indicaciones para que me siga.

Ya había escuchado las notas de su violín pero no sabía qué era lo que podía destrozar, porque no creía que escuchar música triste pudiera ser algo tan terrible como para llamarlo destrozo.

Suspiré pero no dije nada, porque casi prefería no tener que acercarme a él y decirle nada.

- No le habrá gustado el nombre de su club de fans... - Dije claramente molesta aunque sin añadir nada más.

Iría y le diría que parara si querían, pero eso no venía a decir que me fuera  a hacer caso alguno, al menos, no después de la respuesta que se había llevado hacía un rato.

Emily vuelve a la escena acompañada de su representante Bob Bishop en ese momento Anders deja de tocar gracias al grito que le a dadoJames.

Cuando Emily entra se encuentra una escena cuanto menos curiosa, todos estan por el suelo, la mayoria con lagrimas en los ojos, todos menos Anders presentan una cara de tristeza extrema.

- QUE DEMONIOS A PASADO- grito con fuerza cuando la musica para.

Paro de llorar pero no se que sucede, instintivamente retrocedo hacia la pared.

- ES QUE ESTAS LOCO- grito al idiota del Violin, no sabia que habia pasado pero estaba segura de que tenia alguna habilidad extraña.

-Papa- no puedo creerme que haya tenido que venir, ahora seguro que me culpaba a mi de todo siempre era igual, ese grupito de idiotas debería haberse quedado quietos, como se les ocurre hacer exhibición de sus poderes delante de todo el mundo.

 Una vez que todo ha terminado, logro sobreponerme y sosegarme, para luego preguntar a las dos chicas que me acompañan:

 - ¿Estáis bien?.

 Mientras espero su respuesta, fijo mi atención en el músico que había causado todo...

 Era imposible negar lo obvio: Tenía un poder, y si él lo tenía... ¿Lo tendría alguno de los demás?. ¿Esa era la causa por la que estábamos aquí?. Lo mejor era callar, disimular y ver lo que pasaba...

Sacudo la cabeza intentando despejarme. Anne se ha alejado y ha retrocedido hacia la pared, y yo instintivamente he intentado interponerme entre ella y el músico tarado.

La gente parece que empieza a gritarle pero a mí lo único que me preocupa es saber qué ha pasado aquí. Empiezo a pensar que hubiera sido mejor quedarme en la habitación, cuando llega un tipo extraño al que una de las chicas llama "Papá".

Me miré en el espejo del ascensor y me recodé a mí misma a la película de " El Cuervo " porque de haber estado llorando tenía más maquillaje esparcido por la cara que en los ojos, que era donde originariamente estaban aquellos manchurrones negros, y aunque no estaba de mucho humor, me intenté adecentar un poco, más por mantenerme entretenida con algo que no por otra cosa.

Para cuando llegamos a la sala y vi a todo el mundo en el suelo y a Anders dejando de tocar en ese momento, me quedé un poco sorprendida, pues no sabía que eso se pudiera hacer y tardé un poco incluso en reaccionar. Por un lado, aún tenía unas ganas horribles de patearle el culo, pero por el otro, cuando vi aquellas reacciones...

Casi me faltó tiempo para salir corriendo y ponerme delante de mi compañero de grupo, como si no me extrañaría que en algún momento alguien se acercara y quisiera pegarle.

- No lo ha hecho a posta ¿ vale? Es... al tocar ha compartido cómo se sentía con vosotros y... no ha querido que lo pasarais mal...

Le miré de reojo esperando a que dijera algo, aunque no pude mantenerle la mirada porque aún estaba molesta y dolida con él, pero tampoco podía dejar que le hicieran nada. Era como si quisiera abrazarlo y pegarle a la vez.

 Una habilidad que permite manipular las emociones de los demás... Interesante. Y por lo visto era como así se sentía en aquel momento... Si pudiera analizarlo y entenderlo, podría tratar de adquirir su poder.

Sigo en mi esquina solo que ahora estoy en el suelo con la espalda contra la pared, por un momento me he permitido perder la calma de mis emociones, aunque pronto comprendo que no eran emociones mias, pero entonces que eran? porque todos las habiamos sentido? y que era eso de que las habia compartido? la musica puede trasmitir sentimientos pero no a tal nivel.. sigo en la misma posicion mientras espero que alguien explique que acaba de pasar aqui..

_¿Intimidarme? Para nada. Es más, si quieres puedes hablarle a tu padre de mi, no me molestaría para nada ser una estrella -respondí sonriendo a Elle-.

En el momento en que me dio un beso para saludarme sentí una pequeña descarga eléctrica que me hizo retroceder.

_¡Oye, tú sí que estás cargada! ¿No sentiste nada al saludarla, Emily?

Pero Emily estaba en otro lado en ese momento. De hecho todos en esa sala se veían raros. De las tres chicas que entraron últimas, una se estaba besando con uno de los hombres; otra coqueteaba con el otro, que no parecía estar muy acostumbrado a ese tipo de situaciones; Andres parecía estar embobado con la tercera, cosa que parecía no gustarle mucho a Emily; y las otras dos chicas que parecían encontrarse solas en ese momento.

Rayos, debí saber que entre Emily y su músico pasaba algo, no se qué hago perdiendo el tiempo aquí. Y las que más me gustaban están hablando con otros.

La voz de Emily disculpándose para ir al baño me distrae de mis pensamientos. Anders se había acercado y ella, probablemente ofendida le había dado vuelta la cara.

Fue entonces cuando Anders tomó el violín, y lo que tocó nos hizo llorar a todos. Al principio valoré su capacidad para transmitir mediante la música un sentimiento, pero eso ya salía de lo normal. Casi sin darme cuenta me hallé acostado en el piso llorando desconsoladamente y sin poder parar.

Todo eso se detuvo recién cuando, ante un grito, Anders dejó de tocar. Me incorporé lentamente, limpiándome las lágrimas de mi cara. Emily había vuelto, estaba acompañada por su representante. Fue sorprendente la manera en que se lanzó sobre él para defenderlo. Tampoco es que íbamos a cortarle el cuello por lo ocurrido.

_Tranquila Emily, no es su culpa ser tan bueno para transmitir emociones con la música. Aunque debo admitir que jamás había visto nada igual. Mejor quítale ese violín de las manos y dale algo de beber.

Luego me dirijo al resto, que al parecer estaban tan afectados como yo o más.

_¿Están todos bien? ¿Alguien quiere que le sirva algo de beber?

Finalmente ví a la chica a la que hablé al llegar. Aún estaba en el suelo. Le tendí la mano.

_¿Estás bien? ¿Necesitas ayuda?

Acepto su mano y me levanto lentamente.

-Gracias.. nose que me pasa hoy, todo es muy raro..

Pienso en twitear este extraño suceso pero dudo que pueda hacerlo en 140 caracteres, mejor me tomo algo, sonrio al chico que me acaba de ayudar y cojo yo misma una lata, la cual antes de abrir pongo en mi nuca para refrescarme un poco.

_Pues ciertamente muy raro -admito-.

La ayudo a levantarse y veo que toma una lata que se lleva a la nuca en lugar de la boca.

_¿Segura de que estás bien? ¿Quieres que llame a un médico? Por cierto, soy Mariano.