Partida Rol por web

Sales corriendo con algo de velocidad con el cuerpo de tu madre y tus bartulos hacia la fuente de luz que has podido encontrar. La cueva parece vacia.

Conforme vas corriendo chocas contra columnas naturales que las derribas sin problemas dada tu fuerza y constitucion que te brinda tu piel draconiana.

Llegas a la obertura por la que puedes salir y...

Sigo corriendo en busca de la luz y...

Justo un segunda mas de carrera y hubieras caido por un precipicio que del cual calculas varios kilometros de caida vertical. Un extraño sonido llegas a escuchar en la distancia, fuera de la cueva; parecen innumerables cristales rompiendose o algo por el estilo...

Tu madre permanece en tus brazos con los ojos cerrados y sangrando aun...

Tras frenar en seco la carrera escucho los ruidos y como necesito ayuda me acerco hacia ellos, pero con cautela, para poder dejar a mi madre en sitio seguro si fuera necesario

No eres capaz de encontrar el foco del sonido debido al eco existente

Visto que no podre encontrar ese sonido trato de volver al camino para seguir adelante hacia nuestro destino

Hola - escuchas una amable voz detras de ti

Me giro con mirada suspicaz, tratando de equilibrar a mi madre sobre uno solo de los brazos para poder usar la espada con el otro si fuese necesario

Un hombre anciano vistiendo una tunica marron de esparto te mira asombrado y luego a tu madre - ¡Dios santo! Que diantres le ha ocurrido a tu madre - se acerca, cosa que te sorprende, llega a estar a escasos centimetros centrando la atencion en tu madre - ¡Sofia! - te mira - Dejala en el suelo, esta muy grave - te sugiere, pero su voz suena firme, con marcialidad...

Miro al hombre con una cierta desconfianza, pero tanto el que se acerque como el que conozca su nombre hacen que sea algo menos suspicaz,

deposito suavemente a mi madre en el suelo, apoyandola la cabeza en una de las mantas

Unos ogros nos atacaron y no se exactamente que la han hecho, pero no recupera el conocimiento

¿Ogros? ¿En estas tierras? - pregunta algo incredulo sin quitarle el ojo a Sofia.

Coloca ambas palmas extendidas sobre el cuerpo de Sofia, una en cabeza y otra en el pecho... Susurra unas suaves palabras que salen con dulzura y un destello azul intenso sale de ambas manos del extraño encapuchado. Las heridas parecen sanar, la carne es empujada por huesos que vuelven a su lugar, el sonido de la carne desgarrandose para luego volver a su estado normal hace que la escena llege a ser nauseabunda...

Al instante el destello de las manos se disipa y Sofia parece que duerme en lugar de debatirse entre la vida y la muerte.

Ya esta recuperada... Tardara en despertar - se levanta - Soy Juan de la Hermita, soy un antiguo amigo de tu madre

En primer lugar me pongo muy tenso y llevo la mano a la espada al ver la luz, pero recordando que conoce a mi madre y siendo una de las ultimas posibilidades consigo contenerme

Gracias respondo mientras le doy la mano, para lo que me desblindo un momento

Es casual que nos haya encontrado?, o nos esperaba?

Mas bien os buscaba... Me parecio extraño que no hubieseis llegado aun dada la suprema puntualidad que caracteriza a tu madre - mira las estrellas y luego te vuelve a mirar - me alegro de que esteis bien

Gracias a usted, ¿entonces debo suponer que una paradaa de nuestro viaje era para encontrarnos con vos?

No, debiais encontraros conmigo

Entonces el destino de nuestro viaje era reunirnos con vos?
Pregunto con cara algo esceptica

Exactamente - se limita a responder mirando el sendero pedregoso

Y os puedo preguntar para que?

No te responde.
Ves como Juan traza un circulo en el aire y un circulo de luz blanca y resplandeciente aparece ante ti - Entra y lo sabras - dice esperando que colabores