- No desesperes, Akira... Me consta que quieren que vuelvas... No voy a dar más detalles, que las paredes oyen, ¿me comprendes?
Aunque sea de manera sarcástica, me alegra ver que la muerte no ha eliminado el humor de Katarina. Me quedo más tranquilo y respiro profundamente antes de dirigirme a Harper.
- Señor, no se extrañe de que nadie confíe en usted. Hasta el testimonio del propio xenomorfo valdría más que el suyo.
Sin embargo, cuando Katarina habla, me dirijo directamente a Allyse.
- ¿Es posible que alguien más que tú tenga acceso a estos datos?
Desde mi asiento, sólo digo al aire.
Y luego yo soy el chulo soberbio. La hipocresía se podría masticar en el aire.
La noticia de Katarina me anima un poco. Con todo el tiempo que llevaba en este lugar ya empezaba a pensar que iba a perder mi cuerpo para siempre.
-Gracias Katarina. Lamento lo que te ha pasado... Si he de ser sincero, creo que yo no habría sido capaz de apretar el gatillo. Tienes todo mi respeto.-Al principio aquella mujer me había parecido algo ruidosa e incluso poco inteligente, siempre siguiendo las órdenes como un perrito, pero eso que ha hecho la honra.-John, cierra el pico. Viniste como un amigo cuando y me metiste la puñalada pro la espalda. Espero que tu cuerpo se pudra y tu existencia acabe cuando lleguemos a la Tierra. Puede que tú no seas el único capaz de manejar esta nave.-Le digo con una sonrisa en mi expresión.-No eres tan indispensable como crees.
Ya te lo dije, tengo toda la intención de pudrirme aquí. Desde que acepté el perdón del padre, también perdí la voluntad de sobrevivir. William y tú seréis perfectamente capaces de llevar la nave a buen puerto.
Digo, mirando al aire. Al parecer, la gente sólo quería ver trabas en las palabras. Era estúpido intentar explicar nada.
Allyse se baja de un salto de la edificación sobre la que estaba sentada para aceptar la mano de Katarina y su saludo. - Lamento profundamente que estés aquí, Katarina. - Le dice, arrugando levemente el ceño.
Después se gira para responder al señor Harper. - Oh, puede haber lo que yo desee. Es como... una realidad virtual, ¿sabe? Antes era un pub, pero los ánimos se caldearon por el exceso de alcohol. Si lo desean puedo volver a dejarlo como entonces, sólo tienen que pedirlo.
Finalmente se acerca a William para responderle a él también. - Que yo sepa no. Es bastante raro encontrar un experto en Valhalla, nadie debería tener acceso a este lugar, ni he notado ninguna presencia que no deba estar aquí. Pero con las cosas que hemos visto estos días... Ya no puedo garantizar nada al cien por cien. Sin embargo, creo que Katarina se refiere a que no quiere desvelar la identidad del tripulante que me controla.
- La verdad es que creo que son idiotas todos... pues no hay ninguna evidencia contra mi... y usted Harper es el mas idiota de todos.... miente y miente, jamás he hablado de capturar y llevar al alien a la tierra... jamás he hablado o dicho algo parecido- empuño la mano y doy un golpe a la palma de mi otra mano- jamás había encontrado un grupo de personas tan ciegas... responda lo que le pregunté!... me vió en esa mesa si o no?- le digo apuntándolo con el dedo
Aysh... - suspiro, cada vez más cansado - Sí, señor Hayes, sí le vi en la mesa. Le oí quejarse cuando el niño le acusó. Le oí pedir ayuda cuando nos atacaban los demás tripulantes a usted y a mí. Estaba sentado ahí junto a todos nosotros... Es usted realmente cansino.
Allyse, yo agradecería un poco de alcohol, la verdad. Algo de Whiskey, con hielo, a ser posible.
- De acuerdo. - Dice la joven, frotándose la nuca con aire ligeramente cansado. - Creo que a mí también me vendrá bien una copa...
Quiero volver al pub XD
- Seré cansino, pero al menos digo la verdad... hijo de la gran Puta... jamás me vio y lo que dice es solo para esconder a los 2 que quedan... me vio o escuchó?, la verdad es que miente, descaradamente; pero lo que mas me irrita es que mas encima los demás no le creen en todo lo demás, pero le creen la mentira sobre mí...- me giro y agacho mi cabeza con impotencia.
los improperios son para Harper, no para el jugador.
Escucho todo lo que dicen unos y otros, pero no le presto demasiada atención. Lo cierto es que me gustaría quedarme con muy pocos de los presentes, pero tampoco es que pueda hacer nada para dejar de oírlos. De modo que decido ir a lo mío. Ya hablaré con Akira o Katarina más adelante.
- Oye, Allyse. - digo levantando la cabeza, tras darle algunas vueltas al asunto - George me está guardando un secreto. ¿Podrías decirle que se lo cuente a quien-él-ya-sabe?
- Claro. - Responde la joven a William, sin perder palabra de la conversación entre Harper y Hayes. - Ahora se lo digo.
Un rincón donde relajarse, donde olvidar los problemas de fuera y donde las consciencias por fin pueden descansar. Un rincón cargado de intimidad y calma. El pub Valhalla está lleno de ellos. El suelo de madera oscura hace juego con las paredes, forradas de bambú. Numerosas mesas bajas están repartidas por el local, acompañadas de sofás y cojines sobre los que recostarse cómodamente.
Sobre cada mesa la luz de una pequeña vela acompaña, iluminando con calidez, las luces filtradas en tonos saturados, que tiñen de una forma onírica los avatares de las consciencias aquí recogidas. La música, tranquila y relajante, colabora a crear el ambiente apropiado al lugar.
Al fondo, una barra y tras ella una joven que recibe con una sonrisa traviesa a los visitantes del pub. Su pelo es rubio y largo y uno de sus ojos azules está tapado por un parche de cuero. Vestida enteramente de cuero negro, se apoya indolentemente sobre la barra, con un gesto tranquilo pero divertido.
Al recibir el cachetazo de Katarina reacciono y la miro mientras me toco donde golpeo.
Como es que le hice mas daño a George? pregunta con tristeza en su voz y genuino interes.
Miro a los presentes y me acerco a la barra. Will... -saludo al pasar a su lado. Colegas -digo en general.
Amy... encantada de verte de nuevo. Un zumo.
La camarera se incorpora detrás de la barra y dedica una sonrisa a Samantha cuando se acerca a ella. - Claro, Samantha. ¿De naranja? - Mientras espera la respuesta, empieza a sacar una copa y un vaso de base ancha y pone hielos en ambos. Coge una botella de detrás de la barra y vierte un líquido ámbar en el vaso, para después acercárselo a John Harper. - Whiskey con hielo.
Después mira a todos elevando una ceja con una expresión divertida. - Vaya, cada vez somos más. Bienvenidos a Valhalla ¿Alguno quiere tomar algo para amenizar la espera?
- Hola, Sam. - respondo cuando pasa por mi lado. El enfado pasado se ha diluido y ahora mi tono es neutro, como si la considerase una más.
- Yo estoy bien. - respondo a la camarera mientras me siento en uno de los sofás, donde la otra vez estuve con Akira - ¿Han hecho algo con Bailey?
- Todavía no. - Responde, mirando a William y encogiéndose de hombros. - No tengo claro a qué esperan. Esta gente habla demasiado.
De repente todo cambia a mi alrededor y mi cara muestra mi confusión. - La hostia... Ésto sí que no me lo esperaba... Encantada Amy. - También le tiendo la mano. - Yo tomaré Vodka con lima, si eres tan amable.
Miro con verdadero asco a Isabela. - No finjas que te interesa. Eras uno de ellos. No te preocupaba nadie en esa nave más que tú.
Me dirijo a Samantha con indiferencia. Mi tono es completamente calmado y no subo la voz ni un ápice en ningún momento de toda la place. - Nos has ayudado mucho, pero no eres mejor que el resto de cabrones que están aquí por asesinos, por lo que te daré gracias por la información que nos diste, pero que sepas que todos los que no éramos infiltrados deseamos profundamente que te pudras aquí.
Ya hace un rato que estoy por aquí y empiezo a ser más consciente de todo a mi alrededor. Es ese el momento en el que me percato de algo.- Oye, Will, Akira... ¿Dónde está el padre? Pensé que estaría aquí. Murió delante de nuestros ojos...