Partida Rol por web

Nada bueno... ¿Ahora hay traidores? Me mantengo fuera de mi cuarto vigilante por el momento.

Dudo que unas simples piedras o algo más sirvan. ¿Además, se han tomado el tiempo para traernos aquí para que venga un personaje de videojuego con la niña del exorcista y nos maten aquí? Esto tiene pinta de algo diferente. Pero tampoco os acerquéis demasiado,uno ya ha desaparecido.

Digo mirando al chico de la sartén.

Aquel griterío me hizo asomarme a ver que estaba pasando. -Atsushi, Hisao, Tamon, ¿qué está pasando, contra quienes pelean?- Dije, confundido, pues no veía nada.

Sinceramente no estoy seguro, pero parecen muy peligrosos...

¿Una manita?

siguió lanzado rocas. 

Hablan de reptiles, pero solo veo a la chica fantasma y al Gaster ese. Como imaginarás si planean ir a por ellos, dudo que acaben bien. Por eso les digo que tengan cuidado con lo que hacen.

Digo a Takeshi

Algo frustrada en vista de que aquellas dos figuras parecían querer moverse ni hacer o decir nada, Notwo se fue corriendo a la habitación de Tami. 

Satoshi se fue a su dormitorio, solo, a dormir. Había que aprovechar las máximas horas de descanso hasta que le tocase guardia.

Por algún motivo, Atsushi comenzó a lanzar su colección de minerales por la ventana de la habitación, los cuales golpearon a Notwo, la cual estaba deambulando por los alrededores. Mientras que, Hisao había decidido armarse con una sartén y golpear la cabeza de Matt con ella. Golpe que hizo que el joven cayera al suelo, llevándose las manos a la cabeza.

Al igual que había pasado hace unos cuantos minutos con el caso de Hadaka; ahora otro de los alumnos había desaparecido. En este caso concreto, no había sido otra que Odara Hamilton, la que no se encontraba por ningún lugar y a pocas horas de que el amanecer se revelara por el firmamento.

Tras de sí, la joven había dejado dos libros de cuentos infantiles; Rapunzzel y Pulgarcito. Por lo demás, no había rastro alguno de la joven, como si se hubiera desvanecido en el aire.

¡Odara Hamilton ha desaparecido! Oí por la ventana de mi cuarto. Rápidamente salí corriendo, viendo que algunos compis llamaban por la puerta. El pestillo no estaba echado y cuando entramos... ¡no estaba! ¡Nooo! Luego me enteré que Hadaka también había desaparecido sin más. ¡¿Qué estaba pasando?!

-Ha-hay que mantenerse en grupos, n-nunca solos! ¡Pa-para que no desaparezca nadie más! - Me pegé a Notwo y la señalé con el dedo. -¡Por favor no desaparezcas! -

Miré a Atsushi confundido. -Perdona, pero no veo de que hablas.- Dije con sinceridad. -¿Puedes ver lo invisible?- Las voces alrededor llamaron mi atención, haciendo que me dirigiera a donde estaba la habitación de Odara. Recogí ambos libros del suelo, ojeándolos. -Odara habia hablado de mantenernos en grupos. Intenten no estar solos.- Dije, mirando los rostros alrededor.

      ¡¡ P-puede que sea una trampa..!! - mientras aseguraba mas el pestillo de la puerta - p-pa...para que v-volvamos a salir y que nos atrapen - corriendo de vez en cuando la cortina para ver que ocurría en el pasillo - hasta que no amanezca es mejor no hacer estupideces... - y tomando la frazada mas cercana me quedaba pegado a la puerta por cualquier movimiento extraño que pudiera escucharse.

!!!Espera que¡¡..

que me dices. Si Hisao Fukui también los puede ver y acaba de dar un golpe fuerte a uno de ellos.... Mmmm los dejo,  solos??.

cierra la ventana por un momento, mientras ve como todos hablan.. raros 

Por parte de Atsushi, había dado en la cabeza a una de esas criaturas, un hombre serpiente, el cual se encontraba tumbada en la arena con un buen chichón en su cabeza. En cambio Hisao, se encontraba de pie, frente al cuerpo derrotado de otro de esos seres que habían venido a atacarles, una mujer con los brazos de un gorila pero de color azul.

De momento, ninguna de esas dos criaturas, parecían moverse del suelo; pese a ello, más amenazas estaban comenzando a escalar la zona de las habitaciones para tratar de entrar en las habitaciones privadas de algunos de los alumnos de la U.A.

¡Estás pegando a Notwo con tus piedras! ¡Y tú, párate acabas de darle un sartenazo a Matt! ¡No hay reptiles! ¡Quedaos quietos!

Otra que desaparece y nos dedicamos a pegarnos como idiotas.

me asomé a la ventana junto a atsushi al  escucharle lanzar la primera piedra extrañada miré al exterior sorprendida por el alboroto y la desaparición de Nuestros dos compañeros volviendome a poner las gafas y observando con más detenimiento el panorama

-¿QUE ESTÁS QUEEEE? ¡No le tires piedras! ¡Que te crujo! ¡Bueno, te cruje ella primero! ¡Y después yo los restos!- exclamé inflando los mofletes muy enfadado. -¡¡Noooo cuidado con esa sarten!- CLONK!

Corrí hacia Matt. -¡Aaaah! ¡Matt, ¿estás bien?! ¡¿Pero qué os pasa?! ¡¿Veis fantasmas?! ¡El único fantasma aquí soy yo! ¡Y-y Iwa! ¡Y-y la niña fantasma! ¡Y-y-y el Doctor Gaster, el primer súpervillano!-

¡¡Victoria dime que los ves!!... o al menos que seaaa el ataque de un STAND enemigo pose de jojo....aquí puede haber dos cucharas... 1 Que si son reales y intentan entrar a las habitaciones o 2 es una alucinación... bueno ya mate a al que se acercaba a mi!... por lo menos mi habitación esta segura..... pero si lanzo rocas podre acabar con esos pejelargatos pero también esta la posibilidad que este lastimando a mis compañeros, pero pos si las dudas... 

Lanza roca y encierra la ventana de su cuarto, viendo que pasa ....

Otra roca fue lanzada por parte de Atsushi a una de esas criaturas rocambolescas y deformes, en esta ocasión, el golpe lo recibió una criatura completamente redonda y rosa, como si de un Quirk capaz de convertirse en un oso de caramelo con sobrepeso se tratara. Por lo que, el golpe pese a ser efectivo en la boca, era difícil haberle dado.

Otra roca fue lanzada por parte de Atsushi a uno de sus compañeros, en concreto, en esta ocasión, el compañero alcanzado había sido Iwa Kazuha, la cual tenía ahora la mandíbula desencajada a causa de haber sido golpeado por una geoda del tamaño de un balón de baloncesto que Atsushi conservaba en su habitación.

"no veo nada Atsushi ._.""