Partida Rol por web

- "Follaniños. Tú eres el más veterano de los cuatro luchadores que viajáis a Malatea, por lo tanto liderarás la delegación malateana.

Ya está todo dicho. Id a prepararos y mañana por la mañana os reuniréis con el Manager Vespadio ante el Portal.

Que Kord sea con vosotros y Tiamat con vuestros rivales." -

- "Sí, Gran Maestro." - Dice con una reverencia para después retirarse.

Veleta y Soplador se marchan también para prepararse para el viaje.

- Humos sale también de la Escuela y se dirige a su casa.

- El resto del día transcurre tranquilamente.

PRIMER OCASO DE TIAMAT 4480:

POR LA MAÑANA.

- Se han marchado ya los cuatro que iban a Malatea.

- En la Escuela continúan las rutinas normales de entrenamiento.

- Mañana llegan los cuatro Detritianos.

- El resto del día transcurre tranquilamente.

PRIMERA RIQUEZA DE TIAMAT:

POR LA MAÑANA.

- Los cuatro luchadores de Detritus llegan a la Escuela del Halcón Negro.

- Allí les asignan un barracón para invitados, donde podrán dormir. Les muestran también el comedor general y las zonas de entrenamiento.

- También les presentan a todos los presentes:

1) El Gran Maestro Dosus Halcón Negro, humano.

2) El Maestro Garra de Halcón, dracónido.

3) El Maestro Ignoto, eladrin.

4) El Ayudante Mecadio, mediano.

5) El Ayudante Solón, tiefling.

6) Payasete, un luchador semielfo.

7) Guarrilla, una luchadora elfa.

8) Lavativa, un luchador mediano.

9) Enterrador, luchador humano y Campeón de Malatea.

- "Bienvenidos los cuatro. Mañana se celebrará en la Arena la Competición Libre por la Panoplia del Guerrero, que consistirá en cota de mallas, escudo pesado y espada larga.

Sería muy del agrado de todos veros competir en esa contienda." -

- "Mi alumno Lavativa también se presentará. Necesita práctica, mucha práctica." -

Con paso firme avanza unos metros...

- Me llaman Legionario, y tened por seguro de que yo me presentaré a esa prueba... estoy casi seguro que mis compañeros harán lo propio...

Es un honor conoceros, mi nombre es Muñón, aspirante a Señor de las Runas. saludó el enano haciendo gala de su dilatada experiencia en maneras sociales. Esperamos con ansia el momento de compartir nuestras "habilidades" y ver de qué son capaces los luchadores malateanos.

Mientras se hacía a un lado, Muñón aprovechó para evaluar a los asistentes, buscando signos de que alguno de ellos fuera un practicante del arte.

Te parece que el tiefling es alguna clase de clérigo, los demás son guerreros de un tipo u otro (para ti guerreros, exploradores y pícaros vienen a ser lo mismo).

- "Bien, en ese caso les anotaremos a los cuatro. Nosotros presentaremos un luchador, Lavativa. Es posible que nuestros eternos rivales, los Tigres de Malatea, presenten a varios luchadores.

En cuanto a la tercera Escuela, la Escuela Pelícano, afirman estar ocupados con algún rollo meditativo extraño. Los Pelícanos se creen que son monjes o algo por el estilo, pero en realidad son gladiadores normales y corrientes." -

- Los cuatro detritianos son conducidos a su barracón.

- Lavativa se queda a solas entrenando en el enorme patio de instrucción. No se esperaba tener que presentarse a la Competición de mañana, y mucho menos solo. Esperaba contar con Enterrador, Guarrilla y Payasete... ¿Qué les habrá hecho cambiar de opinión?

- El resto del día y la noche transcurren tranquilamente.

PRIMERA SANGRE DE TIAMAT:

DIA DE LA ARENA.

POR LA MAÑANA.

Legionario había dormido bien, aúnque estaba algo nervioso por lo que pudiera acontecer en el combate se sentía algo seguro de si mismo, tal vez ayudara el tener cerca al campeón de Detrius y al reptil grande, o tal vez no.

Se levantó con animosa actividad y buscó a alguien para que le indicara donde podía asearse y desayunar...

Una nueva Sangre, nuevo día de Arena. Y siento cómo por mi sangre corre cierta ansia, un deseo de pelea, de enfrentamiento. Casi hasta podría afirmar que estoy nervioso como si fuer ala primera vez que debo enfrentarme ante un adversario. El desconocimiento, la ignorancia en relación a la cantidad y calidad de nuestros rivales resulta en cierta medida refrescante y constituye un verdadero reto. Y por primera vez en toda la semana, había podido dormir a pierna suelta un buen número de horas. Mi cuerpo casi gritaba agradecido por ese reconfortante reposo que tan bien me había venido.

- Buenos días, humano - saludo al ver al exlegionario ya despierto -. Veo que te has despertado el primero. Nos espera una jornada interesante, con este extraño torneo de la Panoplia. Un jugoso premio. Demasiado. Tal generosidad me desconcierta en alguna medida. Temo que lo atractivo del mismo nos haga enfrentarnos entre nosotros, antes siquiera de plantearnos que hemos venido aquí, a Malatea, a pelear contra sus gladiadores - mi áspera voz tiene un tono meditabundo -. Ojalá seamos capaz de unir nuestras fuerzas para eliminar a nuestros adversarios en vez de debilitarnos con disensiones internas que supondrían nuestro fin a manos de los malateanos. Humano, quiero proponerte algo, al igual que quisiera hacerlo a los demás una vez se hayan despertado. Unamos nuestras fuerzas, hagámonos fuertes a través de una alianza que nos convierta en compañeros y no en rivales. Nuestro objetivo es defender a Detritus y la única forma de llevar la victoria a nuestra ciudad es si los cuatro funcionamos como una precisa maquinaria. ¿Qué dices a mi propuesta?

Legionario miro como se acercaba el reptil y se disponía a hablar con él, sabía que no le tenía mucha estima por lo acontecido en la arena alguna que otra vez, pero sabía que respetaba su fuerza y disposición a la lucha, de lo contrario seguramente el no estaría aquí elegido por él.

Escuchó atentamente lo que este le estaba comentando y por la cabeza le surgieron algunas situaciones, era cierto todo lo que decía, de echo el luchar entre compañeros de escuela en un reto hace ineficaz la fuerza, pero recordaba con claridad que en la misma escuela habían individuos que preferían aprovecharse de los compañeros y eso llevaba a situaciones difíciles de asimilar, y mucho mas cuando Legionario estaba en batalla, pues enfurecido como suele estar no suele mirar quien le perjudica he intenta evitarla a base de espada.

Legionario medita un momento las palabras del reptil y le mira directamente a los ojos.

 -  Creo que sabes que yo no tengo ningún problema con nadie, tan solo intento salir adelante tan bien como puedo, y mi intención nunca ha sido combatir con los que supuestamente son mis compañeros...- Hace una pequeña pausa. - Ahora vosotros tres sois mis compañeros y como tal intentaré comportarme como si de mi división de soldados fuerais, acabaré con la vida de los Malateanos antes que haceros daño a alguno de vosotros, pero ten por seguro, que seguramente al final, si logramos salir victoriosos...- Otra pausa después de pensar en tan vana circunstancia. - Que seguramente sea casi una casualidad, deberemos enfrentarnos por el premio, eso lo tienes claro, verdad Lagartija?

 - Puedes contar con ello siempre y cuando no nos pisoteemos.

- Recientemente he estado durante algunas jornadas en la XIII Legión y sé cómo funcionan los soldados de la misma. No tengo problema alguno en asimilar que si das tu palabra, la cumplirás. Por mi parte propongo una alianza, no un matrimonio - señalo riendo -. Y sí, sé que al final tal vez nos enfrentemos entre nosotros, pero para que ello se dé, solo será posible si logramos vencer a los malateanos. Ese será el verdadero premio. La Panoplia es muy jugosa y atractiva. No juzgaré a quien pelee por ella, pero no he venido aquí por eso y llegado el momento, dependiendo de quién esté en pie y si yo soy uno de ellos, decidiré qué hacer. Tal vez sea un soñador - afirmo con voz suave -, pero si llegáramos a sobrevivir al combate como gladiadores victoriosos sobre los malateanos, me gustaría gritar a su público lo que pienso. Que nuestro triunfo es fruto de la unión. Y sinceramente, preferiría que no tuvieramos que enzarzarnos en una lucha final por una armadura, un escudo y una espada. Insisto, soy un soñador y preferiría repartir el premio alzándonos como vencedores todos nosotros, a pelear por ese premio. No seré yo quien alce su gladius contra uno de vosotros, máxime habiendo sido yo quien os he propuesto para venir. Vosotros haced lo que creáis conveniente, pero mi decisión es firme. No pelearé contra vosotros. No sois mi enemigo, sino mis aliados y compañeros.

Lavativa no se quitaba de la cabeza la competicion. ¿Por que tengo que convatir yo solo? ¿Por que se han retirado Enterrador, Guarrilla y Payasete? Pensaba una y otra vez.

Los nervios recorrian todo su cuerpo, sabia que lo iba a tener dificil sin ningun aliado, pero aun asi no se retiraria y saldria a por la victoria.